Está en la página 1de 4

Universidad Nacional Experimental

“Francisco de Miranda”

Área: Ciencias de la Educación

Programa de Educación - Mención Música

Unidad Curricular: Estrategias Cognitivas

Participante: Bárbara Reyes


C.I: 28.679.588

Santa Ana de Coro; febrero 2021


Agentes socializantes

La socialización o sociabilización consta del proceso por el cual los individuos


acogen los elementos socioculturales del contexto social en el que se
encuentran mediante la interrelación con el resto de los individuos, de modo tal
que se internalizan los conceptos acerca de la realidad a
su personalidad durante el desarrollo del proceso de adaptabilidad social. Así
mismo, la socialización acompaña a una persona en todas las etapas de
desarrollo, más sin embargo, en este proceso actúan otros factores que
permiten al individuo realizar este proceso de una mejor manera. Aquí es
donde entran los Agentes socializadores, los cuales pueden ser individuos
o instituciones que tienen gran influencia en la persona y en el comportamiento
social de la misma, y son también a través de los cuales el individuo va
desarrollar su actividad social.
De la misma manera; entre los agentes socializantes según los sociólogos más
nombrados se encuentran, la familia, la escuela, la relación con iguales y los
medios de comunicación.
En cuanto a la familia, ésta se conoce también como socialización primaria es
aquella que recibe el individuo durante los primeros años de vida, en su niñez e
infancia al relacionarse con su familia, esta es fundamental tanto para el buen
desarrollo personal, psíquico, como para su desenvolvimiento social y la
incorporación de pautas sociales ya que se definirá su identidad. Su
importancia radica en que además de ser el primer contexto de interacción, es
también el que ejerce su influencia durante más tiempo y durante las etapas
evolutivas más cruciales en el desarrollo tanto cognitivo, como socioemocional
del menor. Es decir, se habla de la infancia y de las adolescencia, donde los
aprendizajes que se crean van a formar parte del repertorio conductual y
emocional que se mostrará en el resto de entornos. Por lo tanto, la familia debe
proporcionar el sostén para que el individuo desde su nacimiento, pueda
desarrollar sus capacidades cognitivas, emocionales y sociales dentro de un
entorno protegido y emocionalmente afectivo. Igualmente, la familia ayuda a
propiciar autoestima y sentido del yo (identidad), el cual, influye tanto en el nivel
de seguridad que el menor tiene en sí mismo como en los demás. La
autoestima va a depender sobre todo de la calidad de las relaciones
interpersonales y de las pautas educativas que se deriven de dichas
interacciones. Por otro lado le propicia Responsabilidad y compromiso ante las
normas y límites que se expongan en el sistema familiar, es decir, pautas
educativas que además serán las propias del contexto social en que se
encuentre la familia.
Luego, ya superada esta etapa, se inicia la socialización secundaria, o como se
conoce también; la escuela. Se puede decir, que la educación en un sentido
amplio que siempre cumple con fines socializadores a través de la transmisión
de pautas, normas, conocimientos y formas de vinculación, ya que todas las
interacciones personales y sociales resultan formativas para el niño y para que
se de mejor manera la socialización esto significa que siempre en sus actos,
palabras y afectos, los seres humanos tienen un efecto socializador sobre los
demás, aunque no haya una intención consciente de lograr tal fin. Así mismo,
en la escuela será realmente donde el niño encuentre la confianza para
aumentar los entornos en los que se desenvuelve que aumentara hasta ser
incluidos como ciudadanos que aportan a la sociedad, es por ello que el
espacio donde se lleva a cabo el aprendizaje debe estar dentro de un clima
colaborativo, participativo y motivador para así lograr los objetivos deseados.
En este sentido, se puede decir que la escuela tiene el objetivo de contribuir en
el aprendizaje de la adquisición de las habilidades necesarias para
responsabilizarse y adaptarse a los objetivos grupales, comportarse de una
manera pro-social y cooperativa con pares, desarrollarse académicamente en
áreas de interés para el desempeño eventual en un rol laboral y adquirir ciertos
valores socialmente esperados para el ejercicio de la ciudadanía.
Por otro lado, cuando el individuo llega a la adultez, el trabajo reemplaza a la
escuela como el lugar en donde las personas pasan la mayor parte de su
tiempo. En la mayoría de los trabajos, la socialización es “estrecha” en la
medida en que muchos de ellos suponen expectativas de desempeño
específicas en ciertas tareas, combinadas con recompensas y castigos por el
cumplimento o el fracaso en el logro de los objetivos, lo que supone
consecuentemente altos niveles de conformidad y obediencia, aquí es donde
entra el siguiente agente socializante como es, la comunidad o como se conoce
también, la socialización secundaria, ésta se constituye en los procesos que
introducen al individuo en nuevos roles y contextos de su sociedad, los roles de
la socialización secundaria son mayormente anónimos y suponen relaciones
más formales. Es importante destacar que, en el proceso de socialización,
influyen fuertemente las expectativas que se tengan de las personas.
Ahora bien, otro de los agentes socializadores serían los medios de
comunicación. En la actualidad, en la mayoría de las sociedades occidentales
existe una amplia variedad de medios que tienen incidencia en el proceso de
socialización; si bien, en algunos países existen restricciones legales en
relación a qué tipos de contenidos se ofrecen a los niños a través de los
medios; se tiende a considerar que tanto niños, como adolescentes y adultos,
se encuentran actualmente expuestos a una oferta mediática enorme, dándose
así el caso de lo que se conoce como socialización “amplia”. A la vez, en
culturas caracterizadas por una socialización “estrecha”, los medios pueden
encontrarse parcialmente controlados por grupos de intereses, con el objeto de
promover la conformidad. Igualmente, estos medios de comunicación se
dividen en; la televisión como agente en el proceso de socialización entre los
grupos sociales, tanto en torno a la socialización de valores, actitudes y
creencias, como en relación a otras conceptualizaciones; del mismo modo,
suelen advertir que ver televisión es una actividad social que involucra distintos
ámbitos, objetivos, contenidos diferenciales, y distintos contextos en los que se
interacciona con otros agentes, también se relaciona la televisión con la
adquisición de habilidades personales y competencias sociales.
A su vez, se encuentra el internet como agente en el proceso de socialización,
el cual hace que las nuevas generaciones de jóvenes vivan una socialización
diferente de las anteriores, relacionada a un especial uso de la técnica por
medio de la cual se enfrentan a nuevos mundos de experiencia que modifican
cómo se construyen las relaciones sociales y qué tipo de competencias
sociales se incorporan.
Para finalizar,los agentes socializadores ejercen una notable influencia en el
desarrollo de las personalidad a lo largo de los diferentes períodos evolutivos,
por lo que se hace necesario, un análisis de manera detallada que permita la
comprensión de cada una de las etapas por las que atraviesa el individuo en su
desarrollo. De modo similar, todas estas situaciones, lejos de llevar a un
rechazo de la noción de socialización, suponen desafíos que incentivan el
desarrollo de nuevos estudios, cabe destacar que los fenómenos que se
enfrentan con el estudio de la socialización constituyen un campo abierto y con
límites dinámicos que, en última instancia, se modifican con los mismos
procesos de cambio social.

También podría gustarte