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ORATORIA

• CONCEPTO DE ORATORIA.
• PRINCIPIOS DE LA ORATORIA.
• CLASIFICACION DE LA ORATORIA.
-1° SEGÚN EL TEMA Y EL ÁMBITO PROFESIONAL.
- SEGÚN LA ACTITUD DE COMUNICACIÓN DEL ORADOR.
• ANALISIS DEL PÚBLICO.
• EL DISCURSO ORATORIO.
• PERSONALIDAD DEL ORADOR.
• ANOMALIAS DE LA PERSONALIDAD.
• LOS MIEDOS QUE SE PRESENTAN.
• COMO VENCER AL MIEDO DE HABLAR EN PÚBLICO.
• LA VOZ HUMANA
CONCEPTO DE ORATORIA.
La oratoria es el arte de conmover, deleitar y persuadir, por medio de la apalabra,
inflexiones de voz y otros recursos.

Así, se entiende como el dominio de la expresión oral están muy ligados a la historia d
Roma y al desarrollo de su literatura. La oratoria pública era, en la vida política de la
República romana, un instrumento esencial para conquistar el prestigio y poder en el
Senado, en las asambleas ciudadanas, en los tribunales...que se fue perfeccionando
con la influencia griega.
Las cinco facultades que debe dominar todo buen orador son:
-inventio: búsqueda de argumentos apropiados
-dispositio: colocación de estos argumentos en las partes del discurso
-elocutio: elección de la forma elegante de expresar las ideas
-actio: modulación de la voz, ademanes y gestos del orador para resultar
persuasivo
-memoria: capacidad de retener todos los argumentos
Y las partes de las que debe constar un discurso son:
-exordium (introducción) parte inicial del discurso en la que se intenta captar la
atención del auditorio y se presenta someramente el asunto del discurso
-narratio (narración) exposición de los hechos
-argumentatio (argumentación) defensa de los argumentos a favor o refutación
de los posibles en contra
-peroratio (conclusión) recapitulación d los puntos más importantes e
invocación a los oyentes con el fin de conmoverlos.
PRINCIPIOS DE LA ORATORIA.
LA ELOCUENCIA.
El abogado debe ser elocuente tanto cuando escribe como cuando habla. El buen
escribir permite el buen hablar Se requiere de mucho ejercicio. LA ELOCUENCIA ES
EL ALMA QUE ALIENTA Y DA VIDA AL CUERPO DE LA ORATORIA. Elocuencia
deriva del verbo latino “eloquor” que significa hablar clara y distintamente, manifestar
nuestros pensamientos por medio del lenguaje. Actualmente se ha convertido en el
talento de persuadir. Sin instrucción y conocimientos adecuados del asunto a tratar.
No puede haber oratoria. La Oratoria viene ser el ropaje, la forma exterior de las
ideas.
GRAMÀTICA.
Para la oratoria, el conocimiento de la Gramática es básico. Esto le permite evitar las
incorrecciones en el empleo de ciertos verbos irregulares, en la acentuación de las
palabras, en el empleo de ciertos plurales en que cambia la acentuación de las
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palabras.. En el fluir de las ideas es donde concentrará su atención el orador ya que si
la preocupación sobre el fondo del discurso se ha de agregar la minuciosa valoración
previa de cada palabra, la actividad intelectual pierde intensidad y en la frase dicha
descubre su aire vacilante. De gran utilidad será el conocimiento de los sinónimos que
permitirá repetir o insistir en la misma idea variando con habilidad las palabras sin
cansar al auditorio.
LÒGICA.
Muy importante para el Informe Forense, por que la LOGICA es la ciencia analítica de
las operaciones del entendimiento humano y se ocupa de la FORMACIÒN REGULAR
DE LAS IDEAS, JUICIOS y RACIOCINIOS para llegar seguramente a la consecución
de la verdad.
El Derecho es una ciencia constituido por una serie de principios fundamentales de
carácter abstracto y universal, que en cada Informe se han de desenvolver hasta la
última consecuencia aplicable. El Derecho pone de manifiesto los fundamentos de la
Defensa y la Lógica le da la GUÍA para aprovecharlos y en el método y coordinación
de sus razonamientos.
La Lógica es la disciplina que enseña a formar los juicios con exactitud y precisión a
considerar cada objeto bajo todos sus puntos de vista y discernir todas sus relaciones;
a desenvolver su composición y analizarla; a caracterizar los hechos y deducir sus
efectos y consecuencias; a deducir lo verdadero de lo falso; la certeza de la
probabilidad. De modo que los conceptos y reglas lógicas son LA LUZ QUE HA DE
CONDUCIR AL ORADOR EN LA INVESTIGACIÒN Y CALIFICACIÒN DE LAS IDEAS
que han de entrar en su obra. Finalmente, que la Lógica es de arquitectura total de la
inteligencia, el método ordenador del informa, sometido a una racional armonía,
incluye también la abstracción, la generalización, la inducción, la división, la
demostración.
DIALÈCTICA.
La Dialéctica es el tipo cierto y seguro para calificar y comprobar la verdad sobre toda
clase de ideas o hechos. Ya ARISTÒTELES nos decía que la esencia de la Oratoria
es la Dialéctica. Es la PALANCA MOTRIX DEL CONVENCIMIENTO y a la vez el arma
fuerte con que el orador se ha de dirigir, al ánimo judicial para persuadirlo y el escudo
invulnerable con que puede ser frente a los tiros sofísticos.
EXPOSICIÒN.
El orador puede exponer los hechos de la materia de litis, sin descender a
menudencias inútiles, y al mismo tiempo debe de animar su exposición haciendo uso
de figuras o imágenes sencillas y valiéndose de periodos cortos. No olvidar que las
cuestiones en el foro se fundan ordinariamente en hechos que conviene exponer con
exactitud y recordando las circunstancias fundamentales, al hacer mención de las
pruebas de la otra parte debe efectuarse con verdad pues las consecuencias don
desastrosas cuando se descubre el engaño sino ya en toda la exposición forense. El
Orador ante los jueces debe hablar, repetirnos, con la verdad.
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MODO.
Es conveniente mostrar siempre algún grado de calor en defensa de la causa. El
abogado representa a su cliente y habla en nombre de éste. Por consiguiente, no debe
mostrarse frío o indiferente al defender intereses que se han confiado a su capacidad
y su talento. Pero esto debe hacerse con cierta dignidad, con cierta prudencia
económica, con discreta oportunidad y según lo reclame la naturaleza.
Las pasiones en el orador se dirigen a convencer o a mover las voluntades. Las
Primeras son más moderadas y las segundas son más vehementes. Cuando
examinamos una verdad, sentimos un vivo placer en descubrirla y en comunicarla a
los demás, nos apasionamos de ella, y pretendemos que los que nos oyen se
penetren íntimamente de la misma. Si a esto se agrega la gloria del triunfo sobre el
entendimiento de los demás nuestro interés se aumenta y se aviva nuestro deseo de
comunicar nuestro convencimiento a los que nos oyen o a quienes nos dirigen.
En consecuencia, hay sentimientos que nacen de la convicción o instrucción, y que
son de agrado si se consigue nuestro deseo y de desagrado, si se conoce y sufre la
privación de ella. En dicho sentimiento no es reprochable que el orador en el foro al
momento de su exposición, muestre cierto grado de animación y calor o emoción.
CONOCIMIENTO.
El abogado debe tener un conocimiento profundo de su profesión. Ninguna otra cosa
es de tanta importancia para èl ni merece tanto un estudio serio y fundamental. Por
sobresaliente que sea en la oratoria, si pasa por superficial en el conocimiento de las
leyes y de las jurisprudencias, habrá pocos que quieran confiarle la defensa de sus
intereses Además debe tener una visión integral y profunda del caso que se le
encomienda y para lo cual cuidara que cuando el cliente le cuente su caso , no haya
testigos de dicha conversación a los fines de que dicho cliente hable con toda libertad
y no oculte nada que pueda ser de alguna utilidad para la defensa del caso. Al
respecto habría que tener en cuenta lo que CICERON recomendaba:
1.- Objetar el relato del cliente como si fuera la parte contraria para que así pudiera
verse mejor la fuerza de los argumentos a esgrimirse.
2.- Sopesar todos los hechos conforme a su criterio, como el juez podría plantearlo y
como lo defendería el abogado contrario sólo así se forjaba un amplio y verdadero
conocimiento de la materia de litis.
CAUSAS JUSTAS.
El abogado debe tratar de aceptar lo que considera como “causas justas”, y lo cual le
valdrá una buena reputación que a su vez le permitirá un mayor grado de credibilidad
ante los jueces o tribunales que lo escuchen. Caso contrario, al aceptar casos injustos
notorios, pierde niveles de credibilidad ante los juzgadores y lo que se pueda reflejar
negativamente en la sentencia misma.
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HABLAR EN PÙBLICO.
Una de las cuestiones que atrae a los jóvenes que emprenden la carrera de abogado,
es la posibilidad de hablar en público y brillar en dicho ejercicio.
Naturalmente que ello requiere de muchas condiciones, algunas adquiridas, otras que
da la propia naturaleza. Pero para quién no tiene condiciones oratorias les podemos
decir que se puede ser abogado sin ser orador, pero no se puede ORADOR
FORENSE sin ser abogado. Es decir que la abogacía permite niveles dentro de los
cuales puede desempeñarse el estudioso de ésta carrera sin que ello afecte lo
esencial: EL SER ABOGADO.
Para adquirir la perfección en la elocuencia se requiere tener una gran dosis de Juicio
y talento, se requiere tener imaginación viva, memoria fiel, aspecto agradable, voz
clara, pronunciación correcta, acción noble, confianza plena y gran facilidad de hablar.
Las cuatro últimas cualidades pueden adquirirse con los preceptos del arte y con un
largo ejercicio, las demás, son dones de la naturaleza, que el arte puede perfeccionar,
pero no puede suplir. Pero además se requiere trato de mundo y estudio, mucho
estudio.
Antes de que emprenda la gran tarea de poder hablar en público es indispensable
enriquecer nuestro espíritu con la LECTURA DE BUENOS AUTORES y
particularmente de los originales de la CIENCIA DEL DERECHO. Saber lo que dijeron
y pensaron los grandes del pensamiento Jurídico. Asimismo, el trato con las personas
cultas y la lectura de las mejores obras de la actualidad.
Pero como decíamos anteriormente, en la carrera del foro hay puestos honrosos para
todos los talentos. Moderadamente se habla del abogado de los tribunales y del
abogado del bufete. Este último que estudia el caso y le aplica las LEYES,
DOCTRINA O JURISPRUDENCIAS más concordante.
LA IMPROVISACIÒN.
El objeto de la elocuencia forense es el CONVENCIMIENTO. Su principal mira es
mostrar lo verdadero y por lo tanto debe dirigirse al juicio y a la razón. Esta es la
ELOCUENCIA JUDICIAL. Frente a ello surge la IMPROVISACIÒN como un móvil
reflejo de la naturaleza íntima del hombre.
Aquello que es la vida del discurso como el pensamiento es su alma; viene a ser el
arma familiar de los que emplean la palabra como su instrumento de poder y de
convencimiento. La improvisación es flexible a todas las expresiones del sentimiento,
austera y a veces grave, y a veces rápida y suave, sencilla, natural, fecunda, otras
veces es tórrida, se estremece y conmueve tocando las fibras del sentimiento. La
improvisación es la más bella de las manifestaciones de la inteligencia; es el talento
que mejor sabe subyugar los ánimos.
El abogado que escribe lo que va a decir, sólo camina con andadores; el que
improvisa no lleva trabas. El abogado que improvisa tiene sobre el que escribe la
misma ventaja que un hombre en automóvil respecto de otro a pie.
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Una LUCHA FORENSE es un cambio animado de ideas. Un abogado habla y el juez
y el abogado contrario escuchan atentamente el curso de sus palabras. En vez de la
palabra, poned de abogado en la mano un discurso escrito, y se acaba su poder. El
juez conserva cierta desconfianza del que por medio de un manuscrito se inspira de
tibias emociones. Su atención necesita fijarse por medio de los sentidos. Requiere
que el orador tenga los ojos fijos en el juez o miembro del tribunal, que las miradas de
ambos se encuentren. Es negativo tener delante una máquina de lectura. Se requiere
de una PERSONA QUE HABLE Y EXPRESE POPR MEDIO DEL GESTO, DEL ACENTO Y DE LAS
MIRADAS, la vida que lo anima, una persona que diga la verdad porque en ella está la fuerza de la
expresión.
FIN.
La elocuencia se propone convencer, persuadir, conseguir en fin un objeto; pero halla
obstáculos que necesita destruir. En tal caso debe, según sea necesario, hablar con
rapidez, con fuerza para ejercer su imperio, para imprimir profundamente en las almas
los sentimientos que pretenden comunicar. Unas veces se comienza con animación y
otras con calma y tranquilidad. Pero es la forma que traduce el pensamiento y el
pensamiento que es mejor expresado cuanto mas cuidadoso es la forma. Para ello se
requiere utilizar lo que se llama las FORMULAS ORATORIAS o sea el discurso
previamente escrito en sus partes esenciales para que aprendido bien, posteriormente
la expresión oral sea fluida y convincente.
TRANSICIONES
Son los aspectos brillantes del discurso, los adornos tonos, matices y descansos de la
elocuencia. Pero es fundamental que las partes del discurso se hallen juntas, en
forma que parezca algo no forzado, natural. Así el discurso surge como un todo pleno,
creado y no construido. Pero como se pueden enseñar estos secretos de la
elocuencia sino es escuchando y tratando con los célebres. Estúdiense
continuamente dichos discursos y así se podrán apreciar como ideas de engarzan, se
desarrollan por si mismas y con libertad, adquiriendo aquella sencillez y belleza que
cautiva y que domina.
Es necesario observar atentamente la manera de desarrollarse las ideas, como
surgen las mismas del alma del que habla, como son representadas y adquieren
carácter inteligible, comprensible. Así, podremos no solo percibir un conjunto de ideas,
sino que descubriremos como procede la mente de un pensador y asistimos también,
en cierto modo, a la operación interior del espíritu, al trabajo íntimo de donde surge la
elocuencia.
IDEAS.
El desarrollo de las ideas en el intelecto del que habla se observa por el tiempo que se
emplea en seguir los periodos los cuales no se producen todos con la misma rapidez.
El periodo que expresa un sentido nuevo, se desarrolla más lentamente, que el que es
una consecuencia inmediata del anterior, también se aprecia por el movimiento
correspondiente a la acción del intelecto. El hombre piensa, duda, desecha, elige,
comprende, interroga, responde. Todos estos movimientos son operaciones de su
espíritu. Todas estas modificaciones diversas del pensamiento, modifican también la
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expresión. La convicción se expresa con una voz firme, como si el espíritu quisiera dar
peso a aquello mismo que le atormenta. La incertidumbre en el pensamiento hace la
voz débil y vacilante; los pensamientos dudosos y tímidos no osan producirse en alta
voz. La expresión de la actividad interior del espíritu por medio de la voz, se basa
esencialmente en la simpatía del cuerpo y del espíritu producen movimientos del
espíritu producen movimientos análogos en el cuerpo.
Entendemos por espíritu a la realidad pensante en general, el sujeto de la
representación con sus leyes y su actividad propia, en cuanto se opone al objeto de la
representación. Este es el sentido más general en el lenguaje filosófico actual. Las
modificaciones de esta expresión del pensamiento determinan las transiciones y dan a
conocer su causa psicológica. Por el análisis reiterado se llega a descubrir este
secreto. La primera mirada que fijamos en este discurso, sólo nos presenta un
conjunto en que todo se halla confundido, en que todos los elementos se mezclan se
combinan en un solo resultado infinitamente complejo.
Es como un vasto circulo en que no se distinguen los puntos. Sólo se descubre que
gira y el pensamiento es aparentemente vago. Pero cuando la reflexión ha dividido y
segregado las partes aparece el arte, a quién puede interrogarse, aprovechar sus
respuestas y reconocer leyes, cuya existencia se nos ocultaba al comienzo.
En consecuencia el artificio de las transiciones se les debe estudiar con provecho en
los modelos de los grandes oradores, en los discursos pronunciados y así se podrá
adquirir aquel arte por el cual cada parte del discurso procede del anterior, y se enlaza
con el que sigue.
ANÀLISIS Y SÌNTESIS.
Podemos decir que el análisis y la síntesis son las partes potenciales del espíritu
humano. Por el análisis se determina las partes esenciales de un discurso y por medio
de la síntesis reconstruimos las partes del mismo para situar en sus exactas
proporciones una exposición. ASÌ PODREMOS COMPRENDER MEJOR LO DICHO
YA QUE CAPTAREMOS LOS PENSAMIENTOS ESENCIALES, LAS IDEAS CLARAS
QUE SE HAN MANEJADO.
CLASIFICACION DE LA ORATORIA.
Para esta clasificación se tiene en cuenta la gran variedad de matices de los
discursos, la persona o personas que lo pronuncian y la ocasión en que se hace uso
de él. Ello indudablemente se complica más, cuando entra a considerarse el tipo de
público, el lugar donde se pronuncia, la forma como se pronuncia y los fines que se
persiguen. Por eso, teniendo en cuenta los elementos descritos anteriormente,
podemos establecer la siguiente clasificación:
1° SEGÚN EL TEMA Y EL ÁMBITO PROFESIONAL:
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Este tipo de oratoria involucra exposiciones especializadas, es decir, las utilizadas por
personas que tienen en común una misma profesión, arte u oficio y que en tal sentido
desarrollan una práctica oratoria que con el devenir del tiempo se constituye por
derecho de uso, en una práctica exclusiva del referido grupo humano. En ese sentido
tenemos una clasificación muy amplia que comprende los siguientes tipos:
a) Oratoria Social:
Llamada también oratoria sentimental, ceremonial o augural. Es la que tiene por
ámbito propio, las múltiples ceremonias en las que le toca participar al ser humano en
general; sean estas en el hogar, comunidad o a nivel institucional, académico o
laboral.
b) Oratoria Pedagógica:
Es el arte de transmitir conocimientos y cultura general a través de la palabra hablada.
Llamada también didáctica o académica. Su objeto específico es enseñar, informar
y/o transmitir conocimientos. Usada por los profesores, catedráticos y educadores.
c) Oratoria forense:
Es la que tiene lugar en el ejercicio de la ciencia jurídica. Se le conoce también como
Oratoria Judicial y es utilizada en exclusiva, en el ámbito de la jurisprudencia para
exponer con claridad y precisión los informes orales de jueces, fiscales y abogados.
d) Oratoria Política:
Su esencia es exponer o debatir todas las cuestiones relacionadas con el gobierno de
la actividad pública, pero partiendo de los principios e ideas políticas que ostenta el
orador. Es utilizada en épocas electorales para persuadir y convencer a los votantes.
e) Oratoria Religiosa:
Denominada "homilía" u oratoria "sacra”. Es el arte de elaborar y disertar sermones a
partir de la palabra de Dios, plasmada en la Biblia u otros libros religiosos. Trata sobre
asuntos de fe y religión. Usada por los predicadores, curas, pastores y misioneros.
SEGÚN LA ACTITUD DE COMUNICACIÓN DEL ORADOR:
Cuando el orador se encuentra en actitud de comunicación oral con sus semejantes,
puede transmitir su mensaje de dos maneras: en forma individual; cuando sólo él hace
uso de la palabra para dirigirse hacía un grupo de personas que lo escucha sin
intervenir o, en forma cooperativa; cuando un grupo de oradores de forma alternada –
según el turno establecido- se dirigen al público, buscando entre todos, a través de la
discusión, una opinión o decisión común.
En el primer caso la oratoria es individual y entre sus formas mas clásicas
encontramos:
• La Conferencia
• Discurso conmemorativo
• Discurso inaugural
• Discurso de presentación
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• Discurso de bienvenida
• Discurso de ofrecimiento
• Discurso de aceptación
• Discurso de agradecimiento
• Discurso de despedida
• Discurso de augurio
• Discurso de sobremesa
• El Brindis
• Discurso fúnebre
• Discurso radiado
• Discurso televisado
En el segundo caso se denomina deliberativa o de grupo y entre sus formas más
saltantes encontramos las siguientes:
• La Conversación
• La Entrevista
• La Asamblea
• La Mesa redonda
• El Simposio
• El Debate
• El Foro
• El Cónclave, etc.
ANALISIS DEL PÚBLICO.
Para un orador es fundamental estudiar a su auditorio calculando sus creencias,
gustos, grado de inteligencia.etc. y percibir el grado de heterogeneidad que lo
compone; no es lo mismo hablar para un público diverso y heterogéneo que para un
publico de adeptos y esta realidad la podemos comprobar en los discursos políticos:
es muy diferente que el orador se dirija a un publico diverso y que se encuentra en un
espacio público donde puede acudir cualquiera a que ese mismo orador pronuncie su
discurso en un recinto cerrado donde tan solo asisten sus adeptos pues éstos están
dispuestos a apoyarle a poco bien que lo haga.

EL DISCURSO ORATORIO.
La elaboración de un discurso oratorio implica un fuerte y profundo conocimiento de la
materia a tratar y fuerza dialéctica. Si para hablar en público hay que tener, en primer
lugar, algo que decir, cuando se trata de convencer a ese público de cuanto se dice
ello ha de apoyarse en un dominio total del tema; a partir de ahí entrarán en juego
todos los recursos de la oratoria para poder alcanzar el fin: convencer al auditorio. Por
ello el orador tendrá que dominar perfectamente la inducción y la deducción. En una
argumentación deductiva el orador parte de principios que tiene por ciertos el auditorio
y demuestra que una argumentación particular está contenida en una general. En el
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razonamiento inductivo cuando el orador utiliza hechos suministrados por la
experiencia o la observación marcha de lo particular a lo general.
El discurso oratorio debe estar tan preparado que parezca una improvisación.
Cobrará mas fuerza. Para conseguir tal efecto a veces hay que recurrir a los resortes
de la elocuencia con brotes de pasión efervescente. Y el orador ha de marcarse un
plan de discurso que estará subordinado al estado del auditorio. El público debe de
estar pendiente de cuanto escucha y no perder el grado de atención necesaria. Si el
orador observa que ese grado de atención puede decaer antes de que suceda tendrá
que alterar su plan e introducir elementos de activación. Ello se suele conseguir con
ciertas frases emotivas que puedan hacer vibrar al auditorio. Es preciso controlar el
hilo conductor que se produce entre la palabra y quienes la escuchan; ese hilo
conductor debe de controlarlo el orador y de ello dependerá el éxito de nuestros
propósitos. El discurso en sí se compone de varias partes que los retóricos definieron
como: exordio o preámbulo e introducción del discurso que sirve de preparación al
ánimo de los oyentes; proposición y división donde se realiza el enunciado de cuanto
se va a tratar y como se va a hacer; , narración de cuanto supone el contenido
principal del discurso; confirmación que es donde se prueba la verdad de la
proposición; , refutación donde se desvirtúan las razones de contrario demostrando
que son falsos; la refutación no es necesaria en todo tipo de discursos ya que no
siempre hay argumentos que rechazar. Cuando Quintiliano aborda las pruebas que
debe utilizar el orador en defensa de sus argumentos comenta que esas pruebas
deben ser sólidas, propias y peculiares y advierte, además, que no basta con que el
orador deba probar sus afirmaciones sino que deberá disipar toda duda. Lo que nos
conduce a la importancia del concepto de la refutación. El valor de la prueba y la
refutación son aspectos que deben dominar el orador; y finalmente la peroración
que actuaría a modo de resumen.
PERSONALIDAD DEL ORADOR.
La personalidad, es la combinación total del hombre: lo físico, lo espiritual, lo
mental, sus características, sus predilecciones, sus tendencias, su temperamento
y el vaciado de su espíritu, también lo integran; el vigor, la experiencia, la cultura y
su vida propiamente dicha. La personalidad, es el todo en una persona y
contribuye más que la inteligencia, al éxito en la vida.
Los especialistas nos dicen que la personalidad es algo que nos individualiza, que
nos hace únicos; jamás han existido dos personas que psíquicamente sean
iguales, puede haber personas que físicamente se parezcan, pero lo que los
diferencia siempre, es su personalidad. Un individuo que ha potenciado
plenamente su personalidad, brilla por su despliegue de iniciativa, seguridad y
simpatía. En cambio, aquel que no ha logrado desarrollar su personalidad, debido
a su falta de confianza y seguridad personal, muchas veces esta condenado a
fracasar en la vida.
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La confianza y seguridad personal que posee un orador, es un estado psicológico;
producto de su competencia, conocimientos y habilidades, ello le permite enfrentar
situaciones adversas y salir de ellas. Este estado ideal, muchas veces, esta
ausente en el común de las personas, ello ocurre a menudo porque durante la
infancia han recibido mal trato psicológico, ora en el hogar, ora en el entorno
social. Muchos padres lejos de incentivar las cualidades de sus hijos las reprimen,
se burlan de ellos o lo desalientan en el logro de sus metas. Su autoestima cae al
suelo creando serios complejos de inferioridad.
ANOMALIAS DE LA PERSONALIDAD.
Ser:
1.- Incapaz de adaptarse al ambiente social.
2.- Inestable en sus reacciones afectivas.
3.- Voluble, cambia de metas.
4.- No objetivo en sus juicios.
5.- No frena sus caprichos y apetitos
6.- Aparenta lo que no es; y
7.- Tiene poca capacidad para amar.
LOS MIEDOS QUE SE PRESENTAN.
Los miedos que se presentan en la oratoria y que hay que superar son:
• Miedo a la primera vez.
• Miedo a fracasar.
• Miedo al que dirán.
COMO VENCER AL MIEDO DE HABLAR EN PÚBLICO.
• La actitud mental positiva.
Cuando el orador tiene que salir al escenario y ubicarse frente a sus oyentes para
transmitir un discurso determinado, su cerebro juega un papel importante en su
motivación personal. Cada uno de los pensamientos o ideas que logre interiorizar
en su mente, permitirán que tenga pensamientos y acciones positivas o en su
defecto, pensamientos y acciones negativas. Estas formas de razonar suelen
“apoderarse” de su mente y manifestarse de la siguiente manera:
A.- Negativamente:
El orador miedoso y motivado negativamente, dirá: _ “Lo voy a hacer mal...” “Me
voy a equivocar...” “Se van a reír de mí...” “Para que me comprometí...” “Mejor me
regreso a casa...” “Voy a fracasar…” “¡Soy un perdedor…!” Este individuo, desde
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el momento en que se declara perdedor -antes de haber iniciado la lucha- ya
perdió, no podrá dominar el miedo, ni mucho menos podrá tener una exposición
satisfactoria. Dará pena verlo parado en el escenario; nervioso, tartamudeando,
luchando por pronunciar las palabras que se resisten a salir de sus labios. ¿Qué
por qué le ocurre esto? Simplemente porque desarmó su mente, porque no lo
blindó con ideas positivas que le dieran valor.
B.- Positivamente:
En cambio, el orador temeroso pero imbuido de ideas positivas, exclamará:
“Saldré adelante y pondré todo mi esfuerzo para hacerlo bien... si me equivoco,
que importa; la próxima oportunidad lo haré mucho mejor...” “¡Voy a triunfar!”,
“¡Soy un ganador!” Este señor saldrá adelante, expondrá su tema con pasión y
convicción, derrotará al miedo y brindará una excelente exposición. ¿Por qué?
Porque la actitud mental positiva asumida le permitirá derrotar el miedo y la
timidez, le permitirá encontrar la fuerza que le hacía falta para enfrentarse a ese
“monstruo de mil cabezas” llamado público.
LA VOZ HUMANA.
La voz tiene un significado especial en la oratoria, es la base de la expresión oral.
Una buena voz –natural o cultivada- facilita la labor del orador y le da un apoyo
sólido durante su exposición. Por lo general, se descuida o no se toma en cuenta
este aspecto de la expresión oral, disminuyendo de esta manera la habilidad de
comunicación eficaz.
Para hablar en público –como dice el Dr. Loprete-, lo ideal sería tener “una voz expedita, llena,
suave, flexible, sana, dulce, amable, clara, limpia, penetrante y que dure en los oídos”. La voz
humana –según los especialistas- debe tener las siguientes características:
TONO:
Es la altura musical de la voz. Según el tono, las voces humanas se clasifican en
agudas o graves. La escala de registros de altura permite clasificar a las voces
masculinas, por lo común, en tres categorías: tenor, barítono y bajo. Existen
también tipos de voces intermedias. Desde el punto de vista oratorio, la mejor voz
es la del barítono.
TIMBRE:
Es el matiz personal de la voz. Es un fenómeno complejo y está determinado por
el tono fundamental y los armónicos o tonos secundarios. Por el timbre se
reconoce a la persona que habla, aun cuando no se la perciba. Hay voces bien
timbradas y agradables, mas las hay también blancas, roncas y chillonas.
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CANTIDAD:
Es la duración del sonido. Según la cantidad, los sonidos pueden ser largos o
breves, con toda la gama intermedia de semilargos, semibreves, etc. La cantidad
suele depender, en general, de las características de cada idioma, de los hábitos
lingüísticos de las regiones o países, de la psicología del habitante, etc.
INTENSIDAD:
Es la mayor o menor fuerza con que se produce la voz. Hay voces fuertes y voces
débiles. En fonética, se denomina acento al conjunto de los anteriores elementos,
cuya combinación especial en cada idioma, en cada región de un mismo idioma y
aun en cada individuo, da a ese idioma o habla una característica distintiva.
TODO SOBRE LA ORATORIA

1.- ANTECEDENTES E HISTORIA DE LA ORATORIA


La oratoria nació en Sicilia y se desarrolló fundamentalmente en Grecia, donde fue considerada un
instrumento para alcanzar prestigio y poder político. Había unos profesionales llamados logógrafos
que se encargaban de redactar discursos para los tribunales.
El más famoso de estos logógrafos fue Lisias. Sin embargo, Sócrates creó una famosa escuela de
oratoria en Atenas que tenía un concepto más amplio y patriótico de la misión del orador, que
debía ser un hombre instruido y movido por altos ideales éticos a fin de garantizar el progreso del
estado. En este tipo de oratoria llegó a considerarse el mejor en su arte a Demóstenes.
De Grecia la oratoria pasó a la República Romana, donde Marco Tulio Cicerón lo perfeccionó. Sus
discursos y tratados de oratoria nos han llegado casi completos. Durante el imperio, sin embargo,
la oratoria entró en crisis habida cuenta de su poca utilidad política en un entorno dominado por
el emperador, aunque todavía se encontraron grandes expertos en ese arte como Marco Fabio
Quintiliano; los doce libros de su Institutio oratoria se consideran la cumbre en cuanto a la teoría
del género. Sin embargo, como ha demostrado Ernst Robert Curtius en su Literatura europea y
Edad Media latina, la Oratoria influyó poderosamente en el campo de la poesía y la literatura en
general pasándole parte de sus recursos expresivos y retorizándola en exceso.
2.- ¿QUÉ ES LA ORATORIA?
Por oratoria se entiende, en primer lugar, el arte de hablar con elocuencia. En segundo lugar, es
también un género literario formado por el discurso, la disertación, el sermón, el panegírico
(discurso que se pronuncia en honor o alabanza de alguien), entre otros.
En este segundo sentido, más amplio, se aplica en todos los procesos comunicativos hablados,
tales como conferencias, charlas, exposiciones o narraciones. En todos los procesos orales se
aplica la oratoria y su finalidad, por lo general, es persuadir. Esta finalidad de lograr la persuasión
del destinatario es la que diferencia la oratoria de otros procesos comunicativos orales. Del mismo
modo que la finalidad de la didáctica es enseñar y la de la poética deleitar, lo que pretende la
oratoria es persuadir. La persuasión consiste en que con las razones que uno expresa oralmente,
se induce, mueve u obliga a otro a creer o hacer una cosa. Ahora bien, no es su única finalidad. En
la oratoria, como en cualquier forma de comunicación, concurren cinco elementos básicos, a
menudo expresados como "quién dice qué a quién usando qué medio con qué efectos". El
propósito de la oratoria pública puede ir desde, simplemente, transmitir información, a motivar a
la gente para que actúe, a simplemente relatar una historia.
Los buenos oradores deberían ser capaces de cambiar las emociones de sus oyentes, no sólo
informarlos. La comunicación interpersonal y la oratoria tienen diversos componentes que
abarcan cosas como el lenguaje motivacional, desarrollo personal/liderazgo, negocios, servicio al
consumidor, comunicación ante grupos grandes y comunicación de masas. La oratoria puede ser
una poderosa herramienta que se usa para propósitos tales como la motivación, influencia,
persuasión, información, traducción o simple entretenimiento.
3.- IMPORTANCIA DE LA ORATORIA
Entre los grandes jefes que condujeron pueblos o dejaron su impronta en la historia de la
humanidad, ha habido algunos ciegos y algunos sordos; pero nunca un mudo. Saber algo no es
idéntico a saber decirlo. Esta es la importancia de la comunicación oral y por ende de la oratoria
Muchísimas personas han perdido un sin número de oportunidades en la vida, ya sea de tipo social
o económico por el simple hecho de no tener seguridad en sí mismo, al momento, de expresarse
ante determinada persona debido a que en los negocios o cualquier otra actividad de
interrelación, la forma en que hablemos, en que nos comuniquemos, será el patrón por el cual se
nos juzgará, se nos aceptará o rechazará, ya que saber hablar bien en público, es el factor más
relevante de la personalidad, crea prestigio y respeto, haciéndose atractivo con la persona que nos
rodea.
Saber hablar bien en público o en privado es el factor más importante de la personalidad, crea
prestigio y respeto, haciéndose atractivo con las personas que nos rodean. Con toda seguridad,
una persona que tenga buena dicción, que sepa conversar, que tenga trato agradable, que sea
ameno, correcto, tendrá mejores oportunidades en la vida, que otros que carezcan de ellos.
Infinidad de personas triunfan con este recurso obtenido para sus fines, eficientes servicios,
magníficos sueldos. Cualquier persona, que ya sea estudiante, obrero, empleado, funcionario, etc.
Necesita este recurso para desenvolver sus actividades eficientemente.
Hablar con orden, con claridad, con entusiasmo, con persuasión; en resumidas cuentas, con
eficacia, no es un lujo sino una necesidad. El 90% de nuestra vida de relación consiste en hablar o
escuchar; sólo el 10% en leer o escribir.
Si la imagen que usted quiere dar de sí mismo/a es la de una persona que sabe adónde va, que
tiene una actitud positiva hacia la vida, ideas dinámicas y don de gentes, el lenguaje es el principal
instrumento que deberá utilizar para transmitir esa imagen a quienes le rodean.
Desde el punto de vista desenvolverse en la sociedad con el recurso del dominio de la palabra oral,
para lo cual es necesario practicar intensamente, pues se aprende a hablar hablando, como se
aprende a escribir, escribiendo.
Otro aspecto importante de la oratoria es que también hay que saber hablar para ser escuchado.
Lo notable es que el hecho de tener que hablar ante extraños, o en una simple reunión de trabajo,
no parece ser una tarea sencilla, a la que la mayoría de las personas considere como fácil.
4.- FINALIDAD DE LA ORATORIA
Los fines específicos de la oratoria han sido materia de debate desde los tiempos antiguos.
Historiar la diversidad de oportunidades sería crear una bizantina y fatigosa enumeración, pues en
esencia coinciden casi todas ellas. La divergencia de opinión en los cambios de la perspectiva de
las distintas épocas, países u oradores.
Para Cicerón, la oratoria tiene la finalidad de:
ü Instruir.
ü Deleitar.
ü Defender.

Para Aristóteles, la oratoria tiene la finalidad de:


ü Enseñar.
ü Conmover.
ü Agradar.
Para Fenelón, la oratoria tiene la finalidad de:
ü Aprobar.
ü Conmover.
ü Persuadir.
ü Enseñar.
Para André Sigfried, la oratoria tiene la finalidad de
ü Conmover.
ü Persuadir.
ü Enseñar.
Las coincidencias son lógicas, todas tienen en cuenta las intenciones humanas y la aparente
diferenciación no es más que un desdoblamiento sutil de los conceptos.
La totalidad del ámbito lingüístico queda, abarcada, adoptando la clasificación que sigue, con
todas las implicancias que cada signo encierra:
A) Enseñar y Aprender
Es decir, transmitir conocimientos a otras personas e investigadores en deliberaciones.
B) Persuadir
O sea convencer a otras personas que nuestras opiniones son las verdaderas y de acuerdo a esto
ponerlas en acción.
C) Conmover
Esto es provocar el espíritu ajeno determinados sentimientos, pasiones y emociones.
D) Agradar
Vale decir, producir en el alma ajen, un sentimiento de placer con fines determinados.
5.- TEORÍA SOBRE LA ORATORIA
A) Teoría de los Resultados:
Será bueno el orador y será bueno el discurso, cuando ellos logre alcanzar a producir los efectos o
impactos que como un objeto previo, él como expositor se propuso.
B) Teoría de la Verdad:
Será buena aquella oratoria en la que el expositor se ciña a la verdad y que permanentemente se
exhiba en conciliación con ella
C) Teoría de la Moral:
Habrá de considerarse como bueno, aquellos discursos cuyos contenidos extraen fuerte y legitimo
mensaje moral consecuentemente ético.
D) Teoría Artística:
Serán los discursos más bellos, los que deberían considerarse como los mejores,
fundamentalmente es belleza estilística.
6.- TIPOS DE ORATORIA
La oratoria, como arte del buen decir, se puede clasificar un tanto arbitrariamente, en dos grandes
grupos. Para esta clasificación se tiene en cuenta la gran variedad de matices de los discursos, la
persona o personas que lo pronuncian y la ocasión en que se hace uso de él. Ello indudablemente
se complica más, cuando entra a considerarse el tipo de público, el lugar donde se pronuncia, la
forma como se pronuncia y los fines que se persiguen. Por eso, teniendo en cuenta los elementos
descritos anteriormente, podemos establecer la siguiente clasificación:

Según el Tema y el Ámbito Profesional:


Este tipo de oratoria involucra exposiciones especializadas, es decir, las utilizadas por personas
que tienen en común una misma profesión, arte u oficio y que en tal sentido desarrollan una
práctica oratoria que con el devenir del tiempo se constituye por derecho de uso, en una práctica
exclusiva del referido grupo humano. En ese sentido tenemos una clasificación muy amplia que
comprende los siguientes tipos:
A) Oratoria Social:
Llamada también oratoria sentimental, ceremonial o augural. Es la que tiene por ámbito propio,
las múltiples ceremonias en las que le toca participar al ser humano en general; sean estas en el
hogar, comunidad o a nivel institucional, académico o laboral.
B) Oratoria Pedagógica:
Es el arte de transmitir conocimientos y cultura general a través de la palabra hablada. Llamada
también didáctica o académica. Su objeto específico es enseñar, informar y/o transmitir
conocimientos. Usada por los profesores, catedráticos y educadores.
C) Oratoria Forense:
Es la que tiene lugar en el ejercicio de la ciencia jurídica. Se le conoce también como Oratoria
Judicial y es utilizada en exclusiva, en el ámbito de la jurisprudencia para exponer con claridad y
precisión los informes orales de jueces, fiscales y abogados.
D) Oratoria Política:
Su esencia es exponer o debatir todas las cuestiones relacionadas con el gobierno de la actividad
pública, pero partiendo de los principios e ideas políticas que ostenta el orador. Es utilizada en
épocas electorales para persuadir y convencer a los votantes.

E) Oratoria Religiosa:
Denominada "homilía" u oratoria "sacra”. Es el arte de elaborar y disertar sermones a partir de la
palabra de Dios, plasmada en la Biblia u otros libros religiosos. Trata sobre asuntos de fe y religión.
Usada por los predicadores, curas, pastores y misioneros.
F) Oratoria Militar:
Es la oratoria que tiene por objeto instruir la defensa y el amor por la patria y estimular las
virtudes heroicas en los soldados. Los discursos en este tipo de oratoria son casi siempre leídos,
pocas veces son espontáneos.
G) Oratoria Artística:
Su objeto es producir placer estético. Involucra crear belleza con la voz, de modo que regocije el
espíritu de los oyentes. Es usado por cantantes y artistas: teatrales, cineastas y televisivos.
Asimismo lo utilizan los animadores, maestros de ceremonia y locutores radiales.
H) Oratoria Empresarial:
Llamada "Management Speaking"; es usada por los hombres de negocios; empresarios, gerentes,
vendedores y relacionistas públicos. Su esencia lo constituyen las relaciones humanas y la
persuasión, para lograr el cumplimiento de los fines y objetivos empresariales.
Según la Actitud de Comunicación del Orador:
Cuando el orador se encuentra en actitud de comunicación oral con sus semejantes, puede
transmitir su mensaje de dos maneras: en forma individual; cuando sólo él hace uso de la palabra
para dirigirse hacía un grupo de personas que lo escucha sin intervenir o, en forma cooperativa;
cuando un grupo de oradores de forma alternada –según el turno establecido- se dirigen al
público, buscando entre todos, a través de la discusión, una opinión o decisión común.
En el primer caso la oratoria es individual y entre sus formas más clásicas encontramos:
ü La Conferencia.
ü Discurso conmemorativo.
ü Discurso inaugural.
ü Discurso de presentación.
ü Discurso de bienvenida.
ü Discurso de ofrecimiento.
ü Discurso de aceptación.
ü Discurso de agradecimiento.
ü Discurso de despedida.
ü Discurso de augurio.
ü Discurso de sobremesa.
ü El Brindis.
ü Discurso fúnebre.
ü Discurso radiado.
ü Discurso televisado.
En el segundo caso se denomina deliberativa o de grupo y entre sus formas más saltantes
encontramos las siguientes:
ü La Conversación.
ü La Entrevista.
ü La Asamblea.
ü La Mesa Redonda.
ü El Simposio.
ü El Debate.
ü El Foro.
ü El Cónclave, entre otros.
Una y otra forma de oratoria, según la actitud de comunicación del orador, comprende especies
propias con procedimientos particulares y acordes a las exigencias de cada una de ellas. En la
oratoria individual prima por ejemplo, la exposición mientras que en la oratoria deliberativa se
enseñorea la discusión.
7.- FORMAS DE LA ORATORIA
Según la cantidad de oradores, se clasifica en:

A) Oratoria Individual
Porque hace uso de la palabra, sin la participación de otra u otras personas, se dice que está
utilizando la oratoria individual. Ésta es quizá una de las formas elocutivas de más arraigo en el
ámbito social pues es de uso obligatorio en todas las medidas y esferas donde el hombre
desenvuelve su vida física, afectiva y laboral.
B) Oratoria Grupal
Se caracteriza por la participación de dos o más personas que conversan sobre un tema
determinado, sirve para comunicar.
8.- GÉNEROS DE LA ORATORIA
Originalmente, la oratoria se dividía en varias partes. Anaxímenes de Lámpsaco propuso una
clasificación tripartita que asumió después Aristóteles
A) Género judicial.
Se ocupa de acciones pasadas y lo califica un juez o tribunal que establecerá conclusiones
aceptando lo que el orador presenta como justo y rechazando lo que presenta como injusto.
B) Género deliberativo o político.
Se ocupa de acciones futuras y lo califica el juicio de una asamblea política que acepta lo que el
orador propone como útil o provechoso y rechaza lo que propone como dañino o perjudicial.
C) Género demostrativo.
Se ocupa de hechos pasados y se dirige a un público que no tiene capacidad para influir sobre
hechos, sino tan solo de asentir o disentir sobre la manera de presentarlos que tiene el orador,
alabándolos o vituperándolos. Está centrado en lo bello y en su contrario, lo feo. Sus polos son,
pues, el encomio y el denuesto o vituperio.

9.- ELEMENTOS DE LA ORATORIA


A) El Orador:
Es la persona que dice el discurso, la persona que habla o dice la oración. El personaje
fundamental de la oratoria.
B) El Auditorio:
Se trata de la multitud, público o concurrencia que escucha la palabra del orador. Personaje
colectivo que tiene sus propias características. No es una simple aglomeración o suma de
individuos. Es un personaje social totalmente nuevo. El hombre en multitud actúa y reacciona
totalmente de manera diferente al hombre considerado en forma individual.
C) El Discurso:
Es el nexo entre el orador y el auditorio. Es el mensaje, tema, código, etc.

10.- ¿QUÉ ES UN ORADOR Y CUÁLES SON LAS CARACTERÍTICAS QUE ÉSTE DEBE POSEER?
En términos generales un orador es la persona que ejerce la oratoria. En sentido absoluto, persona
que por su naturaleza y estudio está capacitado para la oratoria. El fin del orador es que sea
entendido en sus anchas todo lo que desea otorgar al auditorio, para tal cometido los términos
usados deben ser de interés de todos los reunidos en dicha oportunidad, debe imperar un
ambiente participativo y leal.
Además de las características que debe tener una presentación oral, el expositor también debe
considerar algunos aspectos muy importantes para desarrollar una presentación.
A continuación se desglosan las características de un buen orador.

A) Presencia
La presencia de un buen orador se ve afectada positivamente por la seguridad del mismo; ésta se
logra cuando existe una preparación integral, dominio del tema y recursos de apoyo que lo
sustenten. El orador debe vestir adecuadamente según la ocasión y el público al que se dirige,
mostrando así respeto por su audiencia y logrando un ambiente de respeto y confianza. La
movilidad es importante durante una presentación oral; el desplazarse muestra el entusiasmo del
expositor, además de variar el estímulo a la audiencia y evitar que aparezcan malos hábitos
durante la presentación. La postura que se adopte al iniciar una exposición oral es decisiva, ya que
marca desde la credibilidad hasta la atención del público.
Se recomienda entrar con paso firme y decidido, con los hombros hacia atrás y la barbilla
levemente hacia arriba, esto ayuda a mostrar seguridad y dominio del tema.
B) Conocimiento y credibilidad.
Entre más se conozca de un tema, más herramientas se tienen para brindar al público una
exposición amena e interesante.
La preparación y dominio sobre el tema apoya la seguridad, la honestidad y el entusiasmo del
orador, lo que logra mantener por más tiempo la atención de la audiencia, además de contener un
mensaje coherente, lógico y estructurado. Para lograr credibilidad ante un grupo de personas es
necesario mostrar honestidad, es mejor reconocer nuestras limitaciones ante el público que
“inventar” respuestas, no olvidemos que al ser honestos nos estamos ganando credibilidad.
C) Dinamismo.
Un buen orador debe ir a la vanguardia, utilizando tecnología que permita mostrar de manera
dinámica el contenido. Es importante apoyar la presentación en técnicas y recursos innovadores
que logren captar la atención de la audiencia, lograr un mayor procesamiento de la información y
variar el estímulo proveído al público. Se recomienda al comenzar “prender” a la audiencia
compartiendo el entusiasmo inicial y manteniéndolo durante la exposición.
D) Comunicación verbal.
Es importante cuidar el lenguaje que se utiliza en la presentación oral, éste debe estar al nivel de
la audiencia, así se logrará un mensaje claro y una mejor conexión con los asistentes. El buen
orador siempre se dirige al público de una manera considerada, respetando sus ideas y opiniones,
al mismo tiempo que muestra asertividad para defender las suyas. Cuidar la dicción mejora la
claridad de nuestras palabras. Las pausas al hablar pueden ayudar a hacer cambios de material de
apoyo, descansar la garganta, así como crear intriga o expectación en el público.
E) Comunicación no verbal.
La comunicación no verbal es aquella que se integra de mensajes no hablados, como el volumen,
tono y ritmo. Se recomienda variar el volumen de la voz para acaparar la atención del oyente,
ayudando a evitar el tedio.
El ritmo es determinado por la naturaleza del tema, entre mayor sea su complejidad menor debe
ser el ritmo. Los movimientos faciales deben ir de acuerdo a la naturaleza del tema, así se apoya la
comunicación verbal con la no verbal. Se debe tener cuidado al utilizar las manos, ya que éstas
pueden ser un distractor; lo ideal al hablar en público es no traer ningún objeto en ellas con la
finalidad de tener mayor libertad de movimiento y evitar desvíos de atención. Es importante
establecer contacto visual con el auditorio, esto logrará mayor integración y atención hacia la
presentación. El medio ambiente debe ser agradable para el orador y el público, un lugar bien
iluminado, ventilado y confortable ayuda a que el estado de ánimo de las personas sea adecuado
para una mayor receptividad.
11.- APTITUD INTELECTUAL DEL ORADOR
La aptitud intelectual es el estado intelectual acorde a las exigencias de un buen discurso. El buen
orador quiere alcanzar su meta sobre la base de la transmisión de conocimiento, de verdades y no
sobre la base de la palabrería.
Si se quiere hablar bien hay que pagar el precio debido. Hay que trabajar, pensar y practicar.
Nadie ha encontrado nunca un sustituto satisfactorio para la inteligencia, ni para la preparación.
El orador ha de poseer una inteligencia clara y penetrante para ahondar en los asuntos
trascendentales; su agudeza de ingenio le permite ver en visión panorámica todos los aspectos de
un tema para poder desarrollarlos en toda su amplitud para que cuantas veces se le solicite la
aclaración de una duda pueda hacerlo con erudición y clarividencia. Ayuda mucho al orador tener
imaginación para encarar con imágenes sensibles ideas totalmente abstractas; es pintar con
pinceladas magistrales conceptos espirituales propio de un maestro, lo cual no es fácil, pues
requiere una destreza intelectual extraordinaria, capacidad de retención para recordad todos los
datos que son necesarios para exponer con fluidez un tema.
Winston Churchill señalaba lo siguiente; “Si tengo que dirigir un discurso de dos horas, empleo
diez minutos en su preparación. Si se trata de un discurso de diez minutos, entonces me lleva dos
horas...”
La aptitud intelectual demanda TRABAJO. Tomás Alva Edison, el gran inventor, compartió su
secreto: "1% de inspiración + 99% de transpiración".Es por ello que se establece la siguiente frase:
"EL TALENTO VALE POCO, LA DEDICACIÓN ES COSTOSA".
De esta manera se dice que las actitudes intelectuales del orador son:
Aprender:
Mantente siempre dispuesto a aprender. Aquí algunas recomendaciones:
ü Estudia siempre.
ü Escucha o mira noticieros.
ü Lee clásicos literarios.
ü Lee cultura general.
ü Observa, no sólo mira.
ü Analiza, no sólo escucha.
Vocabulario:
El vocabulario es la riqueza de palabras que posee el orador para hacer uso de ellas en el
momento adecuado. Modos de adquirir tal riqueza:
ü Lee buena literatura.
ü Consulta el diccionario mientras lees.
ü Usa una pequeña libreta para anotar las palabras nuevas que escuches.
ü Lee periódicamente un diccionario de sinónimos y antónimos.
Recuerda: "VAGO NUNCA, PRECISO SIEMPRE", "CONFUSO NUNCA, CLARO SIEMPRE". "EL PODER
NO ESTA EN LA LENGUA, SINO EN LA PALABRA".
Memoria:
La memoria es la capacidad mental de retener impresiones o estados y evocar o llamar al
consciente tales impresiones.
Las fases son:
ü Percepción
ü Almacenamiento
ü Evocación.
A continuación, recomendaciones para mejorar la memoria:
ü Presta atención. Es decir, dirige tus facultades mentales a un objeto específico. Concéntrate, fija
tu pensamiento con deseo de aprender, entendiendo el valor del tema para el futuro y mirando
sin distracción.
ü Ten un concepto claro y definido del asunto a memorizar.
ü Practica la repetición en voz alta.
ü Asocia ideas
12.- APTITUD FÍSICA DEL ORADOR
Se conoce que una intervención retórica de una hora en público demanda las energías y calorías
de 8 horas de trabajo físico. El orador debe estar en condiciones físicas idóneas a las exigencias
físicas del buen discurso.
Dice una máxima: "Si trabajas con la mente, ejercita los músculos; si trabajas con los músculos,
ejercita la mente." El orador que trabaja principalmente con la mente debe procurar el ejercicio
muscular (caminatas, labores que demandan esfuerzo, ejercicios estacionarios, trotes, etc.). Aun
15 min. diarios serán muy provechosos.
Horario para acostarse y levantarse. Se debe dormir más o menos 8 horas cada noche. La luz
eléctrica y la televisión han producido una generación que vive de noche y duerme de día.
El dormir es voluntario. Tomás Alva Edison, quien nos dio más de 1,100 inventos en 60 años,
dormía y despertaba a voluntad. Ello es posible, sólo depende de la disciplina y el uso de ciertas
técnicas.
Cuida tu Imagen. La primera impresión es vital. Ya que nadie tiene una segunda oportunidad para
dar una primera impresión.
13.- ¿QUIÉN ES UN BUEN ORADOR?
Un buen orador es el que:
A) Informa Bien
Informar, del latín informare, significa enterar, dar noticia de algo. Dicho de una persona o de un
organismo:
B) Argumenta sólidamente
Argumentar, del latín argumentare, argüir sacar en claro, descubrir, probar. Aducir, alegar, poner
argumentos. Disputar, discutir, impugnar una opinión ajena. Sólidamente, con solidez, con razones
verdaderas y firmes. Sólido, da, del latín solidus, firme, macizo, denso y fuerte. Dicho de un
cuerpo: Que, debido a la gran cohesión de sus moléculas, mantiene forma y volumen constantes.
C) Utiliza las Fuentes
Fuente, del latín fonsntis, manantial de agua que brota de la tierra. Aparato o artificio con que se
hace salir el agua en los jardines y en las casas, calles o plazas, para diferentes usos, trayéndola
encañada desde los manantiales o desde los depósitos.
Fuentes de información, confidencias, declaraciones o documentos que sirven de base para la
elaboración de una noticia o reportaje periodístico. Personas que emiten esas declaraciones.
C) Trasmite Credibilidad
La confianza es primordial para un orador con ello logra ganarse el respeto de la audiencia.
14.- ¿QUIÉN NO ES UN BUEN ORADOR?
Un buen orador no es el que:
A) Miente
Mentir, del latín mentiri, decir o manifestar lo contrario de lo que se sabe, cree o piensa. Inducir a
error, mentir a alguien los indicios, las esperanzas. Fingir, aparentar.
Falsificar algo, faltar a lo prometido, quebrantar un pacto. Miente más que habla, expresión para
ponderar lo mucho que alguien miente.
B) Manipula
Manipular, del latín manipulus, manojo, unidad militar, Operar con las manos o con cualquier
instrumento. Intervenir con medios hábiles y, a veces, arteros, en la política, en el mercado, en la
información, etc., con distorsión de la verdad o la justicia, y al servicio de intereses particulares.
C) Elude Expresar sus Puntos de Vista Verdaderos.
Esto es, evita informar de sus intenciones reales.
15.- ¿QUIÉN ES EL AUDITORIO Y CÚAL ES EL OBJETIVO QUE PERSIGUE?
Un auditorio se refiere a uno o mas oyentes que son los receptores presentes o no de un discurso
en un espacio y tiempo variable; ya que existen diferentes tipos de auditorio y diferentes maneras
de recibir la información de un discurso (radio , prensa ,televisión, entre otros.) Personaje
colectivo que tiene sus propias características. No es una simple aglomeración o suma de
individuos. Es un personaje social totalmente nuevo. El hombre en multitud actúa y reacciona
totalmente de manera diferente al hombre considerado en forma individual.
El objetivo al que se dirige el discurso y el árbitro decisivo del éxito o el fracaso del orador
Condiciona en gran medida el discurso. Entre orador y auditorio se establece un nexo espiritual. El
orador debe conocer quienes están dentro de su auditorio.
El que únicamente razona con lógica y solidez será filósofo, pero no orador; el que lo deleita con
bellas expresiones, será poeta, pero no orador; el que sacude su sistema nervioso con emociones
superficiales, será prestidigitador, pero no orador.
El fin del orador es que sea entendido en sus anchas todo lo que desea otorgar al auditorio, para
tal cometido los términos usados deben ser de interés de todos los reunidos en dicha oportunidad,
debe imperar un ambiente participativo y leal.
A raíz de esto, es necesario que el orador conozca a quienes tiene en frente, por tal motivo, a
razón de ejemplo, debe interrogarse ¿Cómo es mi auditorio?, ¿El tema qué deseo serles partícipes,
llegará a ellos y Cómo lograr esto?, dichas interrogantes deben ser respondidas por él mismo
realizando una investigación cuidadosa al respecto, pero no debiendo caer en una preocupación
desmedida al respecto.
16.- TIPOS DE AUDITORIO
A) Favorable
Salvo catástrofe el orador sale aclamado por el auditorio que esta totalmente de acuerdo con las
ideas expuestas.
B) Neutro
El orador debe conseguir convencer al auditorio para que así su objetivo pueda cumplirse, ya es
delante de este tipo de auditorios donde se demuestra la valía de un buen orador.

C) En contra
El auditorio está totalmente en contra y el orador debe intentar ganarse la confianza o al menos
que sus ideas sean escuchadas ante el auditorio.
Todas estos tipos de auditoría comparten la idea de que para el orador es fundamental el uso
correcto y medido de la simpatía, aportando toques de humor o anécdotas en algún momento
oportuno para hacer el discurso más ameno.
17.- DEFINICION DEL DISCURSO
Es un acto de habla, y por tanto consta de los elementos de todo acto de habla: en primer lugar,
un acto locutivo o locucionario, es decir, el acto de decir un dicho (texto) con sentido y referencia;
en segundo lugar, un acto ilocutivo o ilocucionario, o el conjunto de actos convencionalmente
asociados al acto locutivo; finalmente, un acto perlocutivo o perlocucionario, o sea, los efectos en
pensamientos, creencias, sentimientos o acciones del interlocutor (oyente).
En el uso un discurso es un mensaje oral de dirigirse a un público. Su principal función ha sido
desde sus orígenes comunicar o exponer pero con el objetivo principal de persuadir.
También podemos decir que un discurso El discurso es el razonamiento extenso dirigido por una
persona a otra u otras, es la exposición oral de alguna extensión hecha generalmente con el fin de
persuadir, y que ella como dijimos se encuentra conformada por tres aspectos que son: Tema o
contenido del discurso, Orador y Auditorio.
18.- PARTES DEL DISCURSO:
El discurso, según el ámbito en que toque disertarlo o el grupo al que está dirigido, obedece a
diferentes esquemas o partes, pero, para efectos de un discurso de corte genérico podemos decir
que consta de tres partes bien definidas, cada una de ellas con sus propias características y ligadas
intrínsecamente la una con la otra para lograr el cometido esperado.

A) Introducción
Es el inicio del discurso, sirve para motivar la atención del público hacia las palabras del orador y
para dar a conocer, brevemente, en que consistirá el tema a tratarse y los objetivos que se
esperan alcanzar. Pueden utilizarse hasta cinco formas diferentes de introducción, cada una de
ellas según el público y la ocasión en que toque pronunciarlas:
ü Fraseológico:
Puede iniciarse mencionando una frase célebre, un poema, las letras de una canción o un pasaje
bíblico que tenga relación con el tema a tratarse. Por ejemplo, para un discurso sobre "El éxito" se
puede iniciar diciendo: Señores, como decía el Dr. Cristian Barnard, "El éxito comienza con la
voluntad del hombre... piensa que puedes y podrás,… todo está en el estado mental del hombre".
ü Anecdótico:
El público es un grupo de personas que siempre muestran curiosidad por conocer algo peculiar
sobre el expositor o sobre el tema que se está presentando. Contar una anécdota de nuestra vida
o sobre otra persona suele cautivar la atención de los oyentes. Por ejemplo: “Amigos, quiero
contarles lo que me ocurrió la noche en que, en vez de besar a mi esposa bese a su hermana
gemela, ese día yo estaba…”
ü Humorístico:
También es válido contar un chiste u ocurrencia graciosa que tenga relación con el tema. No
siempre los discursos tienen que ser serios o aburridos, la jocosidad le pone la chispa de vida a la
exposición y evita que el público se canse o se aburra. Ejemplo: "¿Mamá, las pasas vuelan?" No
hijito, ¿porque? "¡Ah... entonces me comí una mosca!"
ü Interrogativo:
Esta introducción consiste en hacer preguntas al público sobre el tema a abordarse, pero nunca
esperar una respuesta pues las preguntas son sólo de tipo referencial. El hacer preguntas sirve
para demostrar al público que nosotros sabemos algo que ellos no saben y que estamos ahí para
instruirlos. Ejemplo: ¿Sabían ustedes que don José de San Martín era “drogadicto”? ¿Sabían
ustedes que Ramón Castilla nunca liberó a ningún negro?
ü Teatralizado:
Es una forma efectiva de llamar la atención del público y comunicarle el tema que vamos a
exponer. Se hace uso de la mímica, expresividad corporal y mucho ingenio. Por ejemplo, salir al
frente y soltar un vaso de vidrio al suelo; éste se hará añicos pero nos dará pie para hablar, por
ejemplo, de la Ley de la gravedad, sobre la destrucción del mundo o sobre cualquier otro tema
relacionado.
B) Desarrollo
Es la parte medular del discurso, en ella el orador desarrolla su idea central de forma clara y
detallada. En el desarrollo se explican los argumentos en los que se basa nuestra teoría o
hipótesis, también sirve para refutar las ideas, ejemplificar una demostración y adoptar una
posición académica especifica. Algunas recomendaciones dignas de tenerse en cuenta en el
desarrollo del discurso son las siguientes:
ü Documentarse ampliamente sobre el tema a exponerse.
ü Cerciorarse de la veracidad de los datos a exponerse, no sea que nos retruquen y nos hagan
pasar un mal momento.
ü Elaborar un pequeño esquema de las ideas a presentarse.
ü Citar ejemplos, anécdotas, cifras y/o casos reales relacionados con el tema para hacerlo más
didáctico.
ü Y sobre todo, hacer un discurso ameno y no muy extenso.
Otras recomendaciones que nos brindan los especialistas son las siguientes:
ü Considerando el carácter inconstante de la atención, un discurso largo puede resultar fastidioso,
no debe durar más de 45 minutos.
ü Si el esquema del discurso es complicado y los pasos a seguirse no son claros, puede perturbar
la atención de los oyentes.
ü La exposición de la parte central de nuestro discurso debe poseer un atractivo interés para los
oyentes.
ü El auditorio debe mantenerse atento; concentrado en nuestra charla, esto se logra por medio
de preguntas adecuadas, dinámicas grupales y dejándolo participar.
C) Conclusión
La conclusión es la parte final del discurso, en ella el orador hace un breve resumen de lo tratado,
mencionando los puntos más importantes de la exposición o realizando recomendaciones que se
desprenden del tema central. La conclusión es un elemento estratégico pues lo que se dice queda
sonando en los oídos del público y tiene mayor probabilidad de quedar en la memoria. Para
efectos de conclusión y/o despedida, recomendamos las siguientes 05 formulas:
ü Fraseológico:
Se puede culminar mencionando una frase célebre o algunas palabras impactantes o motivadoras.
Por ejemplo: “Y ya para terminar permítanme decirles que, ‘el éxito está compuesto de 1 % de
inspiración y de 99 % de transpiración’, Muchas gracias."
ü Con Vivas o Hurras:
Esta es una forma de conclusión que tiene por objeto dejar motivados a los oyentes a través de su
participación activa y “cantada”. Por ejemplo: _ "Y ya para terminar, queridos amigos: ¡Viva la
oratoria!” _ ¡Viva! -contesta el público. _ “¡Viva el éxito!” _¡Viva! –vuelven a contestar los oyentes.
ü Por Respuesta del Público:
En esta modalidad el orador hace una serie de preguntas al auditorio para que le contesten a
través de un “Si” o un “No”. Las preguntas deben ser siempre de corte positivo. Por ejemplo: _
Señores, ¡¿somos los mejores?! _ ¡Sí! -responde el público. ¡¿Somos triunfadores?! _ ¡Sí! -vuelve a
contestar el auditorio.
ü Por agradecimiento:
El orador culmina su exposición agradeciendo a los organizadores, auspiciadores, público presente
y algunas veces a los oradores que lo antecedieron. Ejemplo: _ "Y para culminar quiero expresar
mi agradecimiento a la Cámara de Comercio por haber permitido mi presencia esta noche... Hasta
pronto"
ü Mixto:
Es una forma que combina indistintamente los diferentes tipos de conclusiones existentes. Pueden
mezclarse una forma fraseológica con una de agradecimiento. Ejemplo: “Para despedirme quiero
expresar mi agradecimiento a la Universidad Nacional de Trujillo por haberme permitido estar con
ustedes y sobre todo reiterarles aquellas palabras cristianas que dicen: ¡Sed firmes hasta el fin y
recibiréis la corona de gloria…Hasta siempre.”
19.- 10 CLAVES PARA MEJOR TU ORATORIA
A) La Preparación
Uno de los problemas más recurrentes en un alto porcentaje de oradores es la ansiedad que
sienten en los minutos iniciales de su exposición. He aquí algunas recomendaciones:
ü Procura tener un sueño reparador.
ü No consumas alimentos flatulentos.
ü Llega con antelación para reconocer el lugar y sus accesos.
ü Dedica al menos 10 minutos a relajarte y alongar tu cuerpo, especialmente en zonas proclives a
acumular tensión, tales como cuello y zona lumbar.
ü Chequea que tus complementos estén en las condiciones debidas (audio, powerpoint, objetos,
etcétera).
ü Ejercita tu garganta y tu respiración a través de un texto cualquiera.
ü Ten un vaso de agua a la mano.
Probablemente para quien te escucha no haga demasiada diferencia, pero SÍ lo hará para ti.
B) El Comienzo
Inicia tu discurso con alguna imagen sugerente, anécdota, refrán o aforismo, cualquiera sea el
tema del cual te toque exponer. Eso permitirá que tu auditorio pueda distenderse y predisponerse
de forma positiva frente a tu presencia y eventualmente sentirse impactado por un “inicio poco
habitual”.
Rompe lo predecible.
C) El Vocabulario
El poseer un vocabulario rico y amplio es una gran ventaja para comunicar. Los matices, la
sinonimia, los énfasis, sólo pueden construirse en la medida de contar con un vocabulario vasto y
apropiado.
D) El Uso del Espacio
Desplázate con soltura y libertad, pero hazlo con intencionalidad significativa. Cada
desplazamiento que ejecutas tiene un efecto directo (e inconsciente) sobre tu audiencia. Evita
situarte tras escritorios, sillas o cualquier otro mueble que impida la visión total de tu cuerpo.
Cuando te desplaces hazlo evitando dejar fuera del arco de influencia (180°) a alguno de los
asistentes. Los movimientos sin sentido y monótonos denotan nerviosismo y angustia, además de
desconcentrar al auditorio.
E) El Uso de la Voz
Haz un uso adecuado de tu voz. Cualquiera sea tu fortaleza en este aspecto, sácale el partido que
merece. Un volumen elevado de la voz, genera respeto por su “imposición” en el ambiente. Una
buena dicción permite ser comprendido íntegramente. Una inflexión consciente y compenetrada
con tu relato permite generar matices y crear imágenes en la mente de los asistentes.
F) Los Gestos Conscientes
Es frecuente que un orador no repare conscientemente en los efectos y significación que muchos
de sus gestos connotan en el auditorio. Como también es frecuente que el auditorio
(conscientemente) tampoco lo haga. Pero lo que sí es un hecho es que una vez finalizada la
exposición, cada asistente evaluará la calidad de la presentación, así como la valoración del orador
conforme hayan sido los gestos regularmente utilizados.
Toma conciencia de ello, debes saber cómo dirigirte con tus manos, debes saber dónde situarlas y
dónde no. No sólo saber lo que dices, sino, cómo lo dices.
G) El Contacto Visual
El contacto visual regular y sistemático con todos y cada uno de los miembros del auditorio es una
de las reglas fundamentales que todo orador debe procurar cumplir al momento de comunicar.
Más que un protocolo, es un acto altamente significativo pues permite que cada asistente no
pierda foco en el orador y en lo que éste comunica. El contacto visual lo involucra, compromete y
responsabiliza del acto comunicativo en general.
H) El Uso de PowerPoint
Respecto de esta herramienta no existen dos lecturas: o favorece o perjudica la comunicación del
orador.
Una presentación PowerPoint debe ser siempre un complemento y/o apoyo de la presentación,
pero jamás la presentación en sí misma.
Frases ancla desplegadas secuencialmente que sirvan de impulso a tu discurso. Imágenes como
únicos pesos visuales, evitando la “sobre comunicación” de estímulos: sonidos y transiciones
animadas.
No pretendas decir lo que quieres decir a través de una diapositiva.
I) El Auditorio
El conocimiento de las características del público al que te dirigirás es esencial. Hacer presente
detalles y aspectos que te conecten con los asistentes: lugar, historia, experiencias, anécdotas,
costumbres, entre otras.
Todo lo anterior facilita el habla más propicia a utilizar, el metalenguaje, expresiones nacidas en
ese reducto y con significación exclusiva, vocablos técnicos y coloquiales.
Cerciórate de recabar la información necesaria para “ser parte de”.
J) Tu Impronta
Sé tú. Parece simple, y lo es. El reconocer quién eres y saber cómo actúas es desde todo punto de
vista la clave de todo orador. La gran mayoría de los expositores asumen un rol que no les es
propio. Eso afecta tu credibilidad y reconocimiento. Los moldes y esquemas son el peor camino
para persuadir y convencer. Sácale partido a quien eres.
20.- CONSEJOS AL INICIAR EL PROCESO DE LA ORATORIA
Antes de plantear una intervención es preciso conocer el lugar donde se va a dar la conferencia,
para no dejarse llevar por las influencias del mismo. Tanto comportamiento, como presentación,
ademanes, trato, lenguaje, postura, deben variar en función del recinto donde nos encontremos.
La puntualidad y la ausencia de prisa son los aspectos más importantes tanto como el hecho de
apagar el celular ante los disertores, llevar clasificados y ordenados todos los documentos
necesarios, no mirar nunca al reloj, cuidar el aliento y el perfume, mirar siempre a los ojos de una
persona, y mantener las formas y el tono de la voz.
Comprobar la superficie de trabajo (atril, mesa). Evite excesivos desplazamientos y realice un
guión si tiene que utilizar varios soportes a la vez.
21.- TIPOS DE CONFERENCIAS
A) Una Simple Conferencia.
Se puede denominar simplemente conferencia cuando los organizadores nos solicitan que
hablemos de un tema determinado, haciendo una amplia exposición de éste y una vez expuesto se
dé por finalizado el acto. En este caso no habrá posibilidad que el público formule algún tipo de
preguntas. Por lo general se trata de intervenciones a tiempo fijado, por lo que se debe acordar
con los organizadores cuánto tiempo se dispone para hablar.

B) Conferencia Con Ruegos y Preguntas.


Por lo general los organizadores ya advierten que se debe ser más breve para dejar paso a la
intervención del público que preguntará sobre el tema. Es importante en este tipo de conferencias
la presencia de un moderador, alguien que ayude y ponga punto final a las preguntas o evite que
las preguntas se conviertan en un diálogo entre el espectador y el conferenciante.
C) Conferencia – Entrevista.
Se trata de una modalidad que últimamente se realiza mucho en algunos ámbitos, al margen de la
radio y la televisión. En este caso el conferenciante expone el tema de una forma breve y
seguidamente deja paso al presentador para que este formule preguntas a las que el
conferenciante va respondiendo ampliamente y sin límite de tiempo.
22.- DIALECTICA
Es el proceso ontológico y lógico resultante de las tensiones entre contrarios. En oratoria pueden
convertirse en un conjunto de preguntas y respuestas que conducen a una verdad o a una
definición. Muchos oradores utilizan ésta técnica para desarrollar su conferencia. Empiezan por
formularse preguntas sobre el tema que tratan, preguntas que a la vez van contestando hasta
llegar al objetivo que pretenden alcanzar en su disertación.
Heráclito fue el precursor de la dialéctica, y su creador fue, según Aristóteles, Zenón de Elea,
discípulo de Parménides. Platón transformó la dialéctica en un método científico, y Hegel creó los
cuatro principios de la dialéctica: totalidad, de venir, contradicción y transformación cuantitativa

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