ENSAYO ISO 19011:2018

“Auditar sistemas de gestión”

Esta es una norma internacional que sirve como guía en los principios generales de
auditoría, la gestión de programas de auditoría, la dirección de auditorías de sistemas de
gestión de la calidad y ambiental, así como la calificación de los auditores de sistemas de
gestión ambiental y de la calidad. Desde la segunda edición de esta norma se han
actualizado diferentes estándares, se implementó un enfoque más amplio para auditar
sistemas de gestión y la promoción de una guía más genérica que contribuyera a la
identificación de mejora de necesidades y actividades.

Esta norma pretende brindar una orientación para todos los tipos y tamaños de
organización, así como auditorías de diferentes enfoques y escalas. Se puede aplicar a todas
las entidades que tienen la necesidad de llevar a cabo y dirigir auditorías de sistemas de
gestión de la calidad o ambiental internas o externas.

La norma propone un lineamiento que debe ser adaptado en base al enfoque, complejidad y
escala de programa de auditoria, también hace una diferencia entre los tipos de auditoria: de
primera parte; auditorías internas que se hacen en una organización, de segunda parte; son
aquellas realizadas por proveedores externos u otras partes interesadas y de tercera parte;
con fines de certificación o acreditación, todas aquellas que sean de cumplimiento legal o
normativo. La ISO 19001 DE 2018 brinda una guía para auditorías de primera y de
segunda parte.

La norma se compone de 7 capitulos en el presente ensayo ahondaremos sobre algunos

capítulos desde el cuarto.

Los principios de auditoria son importantes para brindarle validez y confianza a un sistema
de gestión, los auditores deben adoptarlos en su labor, estos son; la integridad, es un
fundamento esencial de los profesionales, los auditores deben realizar su trabajo de forma
ética, con honestidad y responsabilidad, desempeñando su función de forma imparcial y sin
que se convierta en un juicio. La presentación adecuada, obligación de reportar los
hallazgos con veracidad. El debido cuidado profesional, la aplicación de diligencia y
juicio al auditar, se refiere a que los auditores deben ejercer el cuidado necesario en la
auditoria que elaboran y contar con la habilidad de elaborar juicios razonables en diferentes
contextos. La confidencialidad, un auditor debe garantizar la seguridad de la información
en los procesos que audite. La independencia, es la base para ser imparcial durante la
auditoria y tener la objetividad para desarrollar las conclusiones de la auditoria. El enfoque
basado en evidencias. Método racional para generar conclusiones confiables en el proceso
y por último el enfoque basado en riesgo, un enfoque que considera Riesgos y
Oportunidades en cada proceso que se audite, en sus planeación, conducción y reporte de
los hallazgos significativos.

El manejo o gestión del programa de auditoria, corresponde al auditor líder elegido en la

organización, el programa se establece considerando si se va a auditar uno o más programas
de gestión, con la estructura del nuevo nivel de las normas es más fácil auditar múltiples
sistemas de gestión que con la misma auditoria. La extensión del programa de auditoria
varía dependiendo del tamaño y complejidad de la empresa, también considerando cada
uno de sus procesos, riesgos, oportunidad y madurez del mismo Sistema. Todas las
empresas no se auditan igual. Los auditores deben tener cuidado en aquellos procesos en
los que se tomen decisiones importantes para el proceso.

Esta gestión incorpora sus lineamientos bajo el ciclo PHVA (Planear, Hacer, Verificar,
Actuar), es importante porque incluye en el programa de auditoria los riesgos y
oportunidades la norma dice que los auditores internos de un Sistema de gestión deben
reflexionar sobre los riesgos que estén asociados en el Sistema con el fin de minimizarlos y
convertirlos en oportunidad, por otro lado se debe considerar las necesidades de las partes
interesadas en la elaboración del programa a fin de garantizar la satisfacción.

Como se debe conducir una auditoria, los auditores deben planificar todas sus actividades
previo a ejecutarla, cuando los auditores inician su gestión deben solicitar información
relevante para asegurar que los auditados están identificando y controlando los riesgos
importantes a su proceso, por otro lado se debe garantizar que se determinen los requisitos
legales y reglamentarios aplicables, posterior a la conducción de la auditoria el auditor debe
exponer los hallazgos y establecerlos por escrito a su auditado como soporte de su
auditoria, cuando se entrega el reporte es necesario que el auditor brinde un seguimiento a
la misma, tomando como base lo que encontrado los auditores deben asegurar que sus
auditados definan acciones concretas para corregir o mejorar estableciendo un tiempo
límite para hacerlo. El éxito del cierre de una auditoria es la comunicación entre la auditada
y el auditor.

La competencia y evaluación de los auditores, se tiene en cuenta la competencia tiene en

cuenta las experiencias, conocimientos y habilidades de cada auditor a la hora de asignarlos
para auditar un Sistema de gestión específico, por ejemplo, cada persona es especialista en
su área un ingeniero industrial que más conveniente que audite una empresa productora. Es
importante que a la hora de escoger un auditor específico este conozca los riesgos y
oportunidades del Sistema de gestión por auditar, estos puntos son importantes para el
auditor líder a la hora de determinar el programa de auditoria. La evaluación, es importante
que el auditado evalúe su auditor, las evaluaciones deben contener aspectos claros y
enfocados a la auditoria, cómo considerar si el auditor cumplió los principios de auditoria,
si se basó en el alcance definido, si expuso las conclusiones de la auditoria, entre otros.
Estos resultados permitirán a los auditores seguir mejorando el proceso, su desempeño y
habilidades en el puesto.

El proceso de auditoría es un proceso sistemático, independiente y documentado para

obtener evidencias de la auditoría y evaluarlas objetivamente a fin de determinar hasta qué
punto los criterios de auditoría se cumplen. Esta norma es bastante funcional e importante
porque actualmente nos encontramos en un entorno tan competitivo dónde las empresas
deben garantizar que sus productos y servicios son confiables, seguros y de buena calidad,
pero como logran esto, con una ejecución eficaz de los criterios de la norma ISO 19011. El
cumplimiento de los requisitos de la norma permite planificar, llevar a cabo y hacer un
seguimiento de las auditorías. De este modo, las empresas mejoran su productividad y están
mejor preparadas para competir en el mercado.
En ese sentido, la ISO 19011 establece los criterios operativos para auditar los sistemas. En
otras palabras, sostiene que esta norma mejora los principios de cómo debe ser una
auditoría y su realización.

REFERENCIAS.

 ISO 19011. (2018). Directrices para la auditoría de los sistemas de gestión.

Recuperado de: https://www.iso.org/obp/ui#iso:std:iso:19011:ed-3:v1:es

 Gonzalez, J. C., & Beltrán, R. F. M. (2020). Herramienta para la realización de

auditorías internas para empresas con sistemas HSEQ. SIGNOS-Investigación en
sistemas de gestión, 12(2), 47-57.

 Pinzón. Q. J. E., (S.f) ICONTEC Internacional. ISO 19001:2018. DIRECTRICES

PARA LA AUDITORÍA DE SISTEMAS DE GESTIÓN.