PELÍCULA PANDILLA DE NUEVA YORK

INTEGRANTES:

DALILA DE LA HOZ PACHECO

JOSE LUIS HINOJOSA LAPEIRA

Hablar de la película pandillas de Nueva York, es como hacer una sinopsis de

todas las luchas que ha tenido el hombre a lo largo de la humanidad por la

dignificación y por la búsqueda de una vida en armonía, en paz y del reconocimiento

de sus derechos. Vemos como desde el principio se asimila a un estado primitivo,

donde imperaba la fuerza, los intereses personales y sobre todo una ausencia de

autoridad, ausencia de un estado que vele por los intereses de todos sus asociados

y sobre todo la falta de conciencia de sus habitantes, que quizás, actuando de

manera natural o por los factores externos que se dan a lo largo de la historia,

inmersos en la ignorancia popular que busca todo gobernante con el único fin que el

pueblo no conozca sus derechos y más aún, que no los pueda exigir.

Esta historia, revive situaciones originadas en la ciudad de Nueva York hacia el

año 1846, hoy capital del mundo, donde cohabitaban un sinnúmero de

nacionalidades, como los chinos, árabes, ingleses e irlandeses etc., los nativos, es

decir los nacidos en Nueva York, no lograban convivir de manera armónica y

solidaria con los inmigrantes, que en muchos casos venían huyendo de guerras
internas en cada uno de sus países, y recorrieron medio mundo en busca de un

mejor vivir y un ambiente donde se puedan desarrollar libremente, buscando ese

sueño americano, pero al llegar a tierra firme se encontraban con un mundo hostil

que los discriminaba y que desde su arribo no les brindaba las más mínimas

condiciones de ayuda humanitaria, los hombres eran reclutados para la guerra,

mientras que mujeres y niños eran humillados, menospreciados, atentando contra la

dignidad humana, la libertad y la vida.

Los pobladores de los barrios más pobres de Nueva York se agrupaban en

pandillas, cada una tenía su propia identidad, con un líder, con un interés, con un

propósito, unas en busca de la igualdad, otros la justicia, otros la violencia y atentar

contra el orden, pero, con el único fin de impartir autoridad en el territorio y buscar el

bienestar para cada uno de los que la integran, pero resulta inverosímil que lo único

que tenían en común era la devoción religiosa, pese al sinnúmero de religiones y

nacionalidades y su descontento con el gobierno. Al no existir un régimen propio de

libertades, llámese libertad de expresión y libertades de asociación, derechos que

les eran coartados, estas se reunían en sótanos, en salones comunales, en

callejones para agruparse entre sí, tener identidad y luchar contra su mayor enemigo

la desigualdad, la pobreza
 el abandono y el racismo. Dichas pandillas confluían en un sitio llamado five

points, o cinco esquinas, sitio emblemático de los suburbios de Nueva York, donde

habitaban las personas más humildes de la ciudad, lugar de encuentro de estas para

luchar por sus propios intereses, era como una constante lucha entre el bien y el

mal.

Esa lucha entre el bien representado por el padre Ballón, en representación de

la pandilla los Conejos Muertos y otras más de inmigrantes y la de Bill el “Carnicero”

los nativos, dan como ganador en primera instancia a este último, simbólicamente

representando el mal. A raíz de ese enfrentamiento se genera una transformación

en el poder, en la convivencia, en el modo de vida de los habitantes de Nueva York,

en nuestro concepto de los peores 16 años que haya tenido la ciudad, sumida en el

caos, abuso de poder, discriminación, violación a la propiedad privada, asesinatos,

hurtos y una serie de violaciones sistemáticas a los derechos humanos que

marcaron una época desagradable y repudiable que sirvieron para cimentar unas

bases sólidas de la democracia que hoy en día viven.

La muerte del padre Ballón no solo deja una huella imborrable, porque en el

representaba la esperanza de un mundo mejor, por un mejor vivir y sobre todo que

su muerte dejo una semilla plantada en los habitantes de Nueva York, en especial

en los inmigrantes, que fueron víctimas de abusos constantes, malos tratos,

esclavitud, abuso a la propiedad, violaciones, desigualdad, discriminación, y ese

deseo de venganza fue creciendo en su hijo Ámsterdam, quien durante 16 años

espero ese momento que tuvo su padre para enfrentarse a “El Carnicero” y luchar
por su legado. Fue así como se dio cuenta con el pasar del tiempo que la ciudad

que dejo de niño en ese momento era un gran caos y que era su responsabilidad

hacer algo, en pro de la reivindicación de los derechos de los inmigrantes, fue así

como avivo esa llama que había dejado su padre, en sus amigos de infancia más

cercanos, también se dio cuenta que ese entramado criminal funcionaba como al

mejor estilo de un sistema piramidal todos trabajaban para el que estaba en la

cúspide.

No tardo mucho tiempo para darse cuenta que la sociedad estaba destruida,

sin valores, hizo parte de ella desde adentro para tomar venganza, fue así como

también se dio cuenta que los inmigrantes el único valor que tenían era servir de

instrumento para que los que ostentan el poder se mantengan en él, eran tomados

más como un voto que como personas, mientras los inmigrantes pasaban por todas

las necesidades, los que ostentaban el poder comían a mantel y dormían

plácidamente en sus palacios.

Ámsterdam en tan poco tiempo se ganó el aprecio de los que eran enemigos

de su padre, como dice el adagio que al enemigo hay que tenerlo cerca, pensó como
ellos, actuó como ellos, hizo parte de su entramado criminal, pero con su visión clara

de reivindicar el nombre de su padre y de los derechos de los más oprimidos. Pero

también vio como los antiguos seguidores de su padre fueron absorbidos por el

sistema corrupto, que a falta de un líder natural sucumbieron ante el poder

dominante de la otra pandilla. Sin duda alguna esto fue motivo para que Ámsterdam

se diera cuenta que quería llegar al poder, pero sabía que no podía llegar solo,

porque el mismo sistema estaba diseñado para que los mismos corruptos ganen las

elecciones, fue así como negocio por decirlo así la entrada al poder político,

representado en un antiguo amigo de su padre, pero en un cargo importante, que

finalmente fue asesinado por las fuerzas del mal.

Una vez descubierto Ámsterdam busca ese duelo que la historia le había

esperado durante 16 años para vengar la muerte de su padre y es así, como Bill y

Ámsterdam fueron traicionados por la misma autoridad a la que ayudaron a

mantenerse en el poder, en un ataque cruel donde murieron muchos inocentes, pero

Ámsterdam pudo cobrar su venganza, no como él quisiera pero la muerte de Bill al

final de ese bombardeo sirvió para que se diera un gran renacimiento para Nueva

York, que la ha convertido en la ciudad que es hoy; no sin embargo a pesar que han

transcurrido más de 150 años y en pleno siglo XXI en la ciudad, que fue testigo de

estas sangrientas luchas es hoy en día escenario de violaciones a los derechos

humanos, racismo, discriminación, pero sin embargo con el resurgir de los tiempos

Nueva York también ha mostrado avances muy importantes en materia de

libertades, en materia de reconocimiento de derechos a los inmigrantes que buscan

ese sueño americano convirtiéndose en una de las ciudades que alberga la mayor

cantidad de nacionalidades.
 Vemos como esta película nos muestra que Nueva York no ha sido la

excepción, para llegar a ser lo que hoy es, ha sido testigo de innumerables

hechos y vivencias que han forjado su carácter y a su vez ha permitido una sana

convivencia y ha brindado un espacio para todas aquellas personas que buscan

establecerse ahí. El hombre en su constante lucha por su autodeterminación, por

buscar ese fin tan preciado como es la paz, la libertad, la dignidad humana y su

autoestima ha sido a través de cruentas luchas, constantes situaciones adversas,

que han teñido se sangre y que de alguna u otra manera en su momento tuvieron

un sin sabor, pero que hoy gracias a ese sacrificio podemos gozar de todos estos

privilegios, libertades y derechos que en 1846 en la hoy capital del mundo no

gozaba.

Referencia Bibliográfica: Película PANDILLAS DE NUEVA YORK, GANGS OF

THE NEW YORK, dirigida por Martin Scorsese