Está en la página 1de 2

Tercer Paso

“Decidimos poner nuestras voluntades y nuestras vidas al


cuidado de Dios, como nosotros lo concebimos”

Personalizándolo lo puedo traducir a: “Yo decido entregar mi voluntad y


mi vida al cuidado de Dios, tal y cómo lo concibo.”

LEER

Libro AA: Capítulo 5. Cómo funciona (4 primeras páginas, hasta comienzo del
4º paso)

12&12: Paso 3.

Yo decido…

"Cinco ranas estaban apostadas en un tronco de su estanque favorito. Dos de


ellas decidieron saltar a una roca soleada ¿cuántas ranas quedan en el tronco?
Si alguien responde “tres” sugiérele que vuelva a leer el enunciado…. Para
hacer este paso sólo se requiere tomar una decisión, eso es todo.

… entregar mi voluntad y mi vida...

La voluntad - según el diccionario Casares - es:

1. Facultad de los seres racionales de gobernar libre y conscientemente sus


actos externos y su actividad espiritual.
2. Cada uno de los actos con que esta facultad rechaza o admite una cosa.
3. Decreto, determinación o disposición de Dios.
4. Libre albedrío.
5. Elección de una cosa sin precepto o impulso externo que a ello obligue.
6. Intención o resolución de hacer una cosa.
7. Amor, cariño, afición.
8. Gana o deseo de hacer una cosa.
9. Disposición o mandato de una persona.
10. Consentimiento, asentimiento, condescendencia.

Y “entregar” significa transferencia de posesión y control.

Si tengo muchas reticencias puedo hacer una lista de los miedos se oponen a
tomar esta decisión.

…al cuidado de…

Lo primero que suele venir a la cabeza es la imagen de que una entidad a la


que se le ofrece algo para que lo cuide: un encargado, custodio, guardián, un
cuidador/a. Esta figura solo es necesaria cuando el propietario está ausente o
es incompetente ( o ambos… ¡¿Adivina a quién le pasa esto?!).
Un cuidador/a ideal a quien dejar algo precioso a su cuidado debería de ser: 1)
competente, 2) alguien en quien se pueda confiar 3) que esté disponible y 4)
que acepte el cuidado de mi voluntad y vida.

… Dios tal y cómo lo concibo.

Tal y cómo ya vimos en el 2º paso esta frase no significa que tengamos que
creer en “Dios” y tampoco significa que conciba o comprenda en lo que creo.
Lo que dice la frase es que he decidido entregar mi voluntad y mi vida al
cuidado de un poder espiritual que ya considero - más o menos - el mío (que
probablemente – o no – irá después cambiando con el tiempo).

Sellando el compromiso
A algunos de nosotros nos ha resultado útil arrodillarnos con un compañero/a
de A.A. o la madrina o padrino y rezar, por primera vez, juntos/as la oración del
tercer paso. Parece que es una buena idea hacer un pequeño rito que
represente mi voluntad de comprometerme con esta decisión que he tomado.
Después aprendo y rezo todos los días esta misma oración. (Si no me gusta
como está escrita la traduzco a otra fórmula que diga algo parecido y con la
que esté más cómoda/o.)

La importancia de la práctica diaria. Por lo que se ve, en el desarrollo


espiritual es imposible vivir de las rentas y aquí tampoco regalan nada. Así que
empiezo a buscar los ratos que más me convengan: yendo a trabajar, en el
coche, los que prefiera y que me permitan ir estableciendo y desarrollando la
conexión con mí poder superior. Y sobretodo, voy recordando involucrar a mi
Poder Superior en todas las decisiones de mi vida, pequeñas, medianas o
grandes y voy observando el resultado que voy obteniendo.

Lo más extendido entre la gente que trabaja el programa es buscar todos los
días (y es más fácil establecer el hábito si es más o menos a la misma hora) un
rato - por la mañana o la noche - en el que rezar esta oración, la entrada de las
“Reflexiones diarias” o lo que más nos ayude a ponernos en contacto con
nuestro poder superior.

La oración del 3er paso (libro grande)

“Dios (o lo que sea), yo me ofrezco a ti para que hagas en mí tu


voluntad.
Libérame de la esclavitud de mí mismo/a, para que pueda cumplir
mejor, tu voluntad.
Elimina mis dificultades, y que la victoria sobre ellas sirva de
testimonio de tu amor, de tu poder y de tu forma de vida a todos
aquellos a quienes pueda ayudar.
Que siempre cumpla tu voluntad.”

También podría gustarte