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Presentado a:
Brenda Seleny Hoyos Gutierrez
PRÁCTICA DE SÓLIDOS
Para la formación del cristal se emplearon 500 g de azúcar, 200 mL de agua y colorante alimenticio.
Se realizó una solución sobresaturada de 500 g de azúcar y 200 mL de agua como se observa en Fig.2.2
y Fig.2.3.
Después de esto se llevó la solución de 𝐶12 𝐻22 𝑂11 al punto de ebullición ya que se deseaba incrementar
la solubilidad de la misma como en la práctica del NaCl. En este caso, la solubilidad de la solución a
203,9 𝑔 𝐶12 𝐻22 𝑂11
una temperatura de 20 °C es de 100 𝑔 𝐻2 0
y a una temperatura de 100 °C la solubilidad aumenta
285 𝑔 𝐶12 𝐻22 𝑂11
a lo cual indicaba que nuestra solución estaba quedando menos saturada, porque parte
100 𝑔 𝐻20
del azúcar ya estaba disuelta en el agua y al enfriarse se iban a poder formar los cristales.
Tras alcanzar el punto de ebullición, se dejó reposar la solución por 5 minutos y se le adicionó
clorante alimenticio (véase Fig. 2.5).
Se presentaron dificultades con este paso ya que no se tuvo en cuenta la densidad de la solución, y se
vertió ésta primero en el recipiente para luego introducir el hilo, lo que resultó en que la punta del hilo
se doblara y no lograra entrar en la solución. Por esta razón se decidió transferir la solución
temporalmente a otro recipiente y luego regresar a la botella, esta vez con el montaje ya incorporado.
Después de un día de reposo, se evidenció una diferencia de color entre la parte superior de la
solución y la inferior. Esto se pudo atribuir a la presencia de azúcar en la base de la botella. Además,
se observó la formación de una esfera de azúcar alrededor del hilo. Véase la figura 2.8
Con el fin de observar el aumento de crecimiento de los cristales de azúcar en un periodo de tiempo
prolongado, se volvió a retirar el hilo 12 días después. Esta vez no se observaron cristales de un
tamaño considerable y la solución había tomado un color más uniforme y opaco.
Fue bastante interesante observar la distribución respecto al hilo del cristal formado. Se logró observar
el hábito o tendencia a cristalizar que tiene el azúcar y a diferencia de la práctica con NaCl, este
experimento fue más sencillo de realizar, con complicaciones mínimas y resultados óptimos cuando
se dejan pasar suficientes días.
Conclusiones:
1) Se tuvo que modificar el montaje inicial, del experimento con cristales de NaCl, debido a
complicaciones asegurando la integridad física de los cristales. Se propuso la tapa de gaseosa como
alternativa al hilo. Se resalta que el cambio permitió la formación de cristales más firmes. Se concluye
entonces que a veces es necesario alterar el montaje para garantizar mejores resultados.
2) Se usaron colorantes orgánicos en ambos experimentos, pero el pigmento solo afectó los cristales de
azúcar. Por lo tanto, se concluye que antes de comenzar el experimento es necesario conocer su
naturaleza, de esta manera evitamos desperdiciar componentes como el colorante del primer
experimento.