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TEMA 11: GESTALT

Los gestaltistas buscan las leyes del comportamiento de las estructuras


psicológicas, y para ello optan por estudiar la experiencia directa desde la TOTALIDAD
y no desde las sensaciones locales como lo hacen los introspeccionistas; en este
intento utilizan un análisis estructural basado en la consideración de las relaciones
existentes entre el todo y las partes siguiendo un procedimiento de corte
fenomenológico, cualitativo, aunque no rechazan métodos experimentales o
estadísticos.
Se puede hablar de dos épocas en la teoría gestáltica:
1) ALEMANA: se escriben textos epistemológicos y se insiste en los fenómenos
perceptivos extendiendo las cuestiones de la Gestalt al aprendizaje.
2) PERÍODO NORTEAMERICANO: se dan a conocer a ese público los principales
postulados de la teoría. En EE.UU., la psicología introspeccionista ha sido
barrida por el conductismo y esto hace que las críticas de la Gestalt a la
introspección analítica hasta cierto punto resulten incomprensibles; por eso
dirigen sus críticas hacia el conductismo, contra su mecanicismo que renuncia a
la conciencia convirtiendo a la psicología en una mecánica de músculos y
glándulas. Esta es además una de las razones por las que en EE.UU. los
gestaltistas dejan de lado las cuestiones teóricas. En cualquier caso, nunca
llegan a ocupar posiciones académicas importantes, por lo que en EE.UU. su
presencia no es muy influyente.

Wertheimer (1880-1943).
Lucha contra la visión fragmentaria ofrecida por la ciencia mecanicista evitando
las dicotomías, como la de mente-cuerpo; y concibiendo el universo como una
totalidad, como un mundo armónico donde todos los componentes forman parte de
una totalidad dotada de sentido.
El propósito inicial de
Wertheimer es elaborar una
teoría general que englobe a
todas las ciencias, y por eso
cree que se debería de hablar
de teoría de la Gestalt y no de
psicología de la Gestalt. No es
un autor dado a la
especulación sino que se
mantiene en el terreno de los
hechos estudiando
principalmente la percepción.
Él mantiene la prioridad de las totalidades ya que no vemos montones de sensaciones
que asociamos sino objetos globales.
De ahí que proponga una concepción unitaria del sistema nervioso basada en el
concepto de ISOMORFISMO, según el cual los procesos nerviosos tienen las mismas
características estructurales que los procesos psicológicos; de modo que los procesos
de la percepción y los del sistema nervioso comparten la misma forma, siendo la
relación entre ellos análoga a la del mapa con lo representado, y así al explicar lo que
pasa en la percepción en cierto modo se concibe lo que pasa en el sistema nervioso.
Wertheimer presenta un artículo sobre el movimiento puro o movimiento sin
objeto, también llamado estroboscópico, imposible de estudiar en términos y
sensaciones puntuales, y lo denomina movimiento phi; la psicología tradicional
considera este movimiento simplemente una ilusión y no puede darle una explicación
valida mientras que para Wertheimer es una percepción que se deriva de la relación
entre nuestro entorno, el funcionamiento de nuestra fisiología y los procesos
psicológicos. Wertheimer se ocupa de este último factor y elabora las LEYES
PSICOLÓGICAS DE LA PERCEPCIÓN según las cuales se organizan los campos
perceptivos.

Köhler (1887-1967).
Mantiene su crítica a los modelos neurológicos existentes fundados en un
mecanicismo estricto, planteando como alternativa una actividad cerebral regida por
un principio de equilibrio y determinada tanto por su propia estructura como por las
fuerzas externas que actúan sobre ella, lo cual nos vuelve a llevar a la TEORÍA DEL
CAMPO: el campo dinámico de la experiencia psicológica viene determinado por la
propia estructura del sujeto y por su entorno, y la interacción de estos elementos
conforma la conciencia y así la conducta de ese sujeto.
También realiza trabajos llegando a obtener resultados en el campo del
aprendizaje, en el que critica las teorías basadas en el ensayo y error insistiendo en los
aspectos cognitivos. Explica concluyendo que sus actos no se deben al azar sino que
parecen fluir de la estructura de la situación, siendo así que sus ensayos engarzan con
cuestiones cognitivas y no se deben meramente a la casualidad. En este sentido
postula un continuo de actos significativos que no corresponden a impulsos ciegos y
que culminan con el encuentro de la solución, siempre repentina, proceso que
denomina CONDUCTA INTELIGENTE o “EINSICHT” (insight, en inglés; iluminación, en
español). Esto hace referencia a que encontramos la solución de forma súbita,
mediante el entendimiento iluminador de las relaciones instrumentales entre el
problema y los medios requeridos para resolverlo, entendimiento que implica
razonamiento.
Koffka (1886-1941).
Fue el que desarrolló las principales leyes psicológicas de la atención, que son
las siguientes:
× LEY DE LA PREGNANCIA (BUENA FIGURA): todo patrón estimular tiende a
percibirse de forma que la estructura resultante sea la más simple y estable de
todas las estructuras posibles.
× LEY DE LA SIMILITUD: los estímulos más semejantes tienden a percibirse como
formando parte de la misma unidad perceptual.
× LEY DE LA BUENA CONTINUACIÓN O DIRECCIÓN: tendemos a percibir como
formando parte de una misma figura los estímulos que guardan entre sí una
continuidad sin cambios bruscos de dirección.
× LEY DE PROXIMIDAD O CERCANÍA: los estímulos más próximos tienden a
percibirse como formando parte de una misma unidad perceptual.
× LEY DEL DESTINO COMÚN: tendencia a agrupar aquellas unidades que se
mueven en la misma dirección y a la misma velocidad.
× LEY DE CIERRE O CLAUSURA: plantea que una figura incompleta tiende a
percibirse como completa.

Rubin (1886-1951).
Recurre al empleo de FIGURAS REVERSIBLES, en las que no es fácil determinar
lo que es fondo y lo que es figura, con el objetivo de estudiar otro aspecto perceptivo
que tiene que ver con la ORGANIZACIÓN FIGURA-FONDO, que es la diferenciación de
una parte o estructura inmersa en un trasfondo de carácter más indiferenciado en casi
todas nuestras percepciones.

La psicología de la personalidad y de los grupos de Lewin (1890-1947).


Desarrolla una teoría de la personalidad basada en la noción de ESPACIO
HODOLÓGICO que define como una globalidad, un espacio geométrico regido por el
movimiento psíquico del individuo, la dinámica de sus relaciones con el entorno y su
comportamiento ante las trabas con las que se encuentre, siendo su conducta el
resultado de la suma de esas fuerzas; y a partir de aquí se elabora una TERAPIA
GRUPAL que a través de la manipulación de esas fuerzas intenta alcanzar nuevos
estados de equilibrio en el propio espacio hodológico que resulten más satisfactorios
para el individuo. De esta forma, a través de diferentes técnicas grupales, e
intercambiando los papeles con las demás personas, ve que las relaciones entre los
miembros del grupo cambian pues este es un todo que debe mantener cierto
equilibrio, y que lo mismo pasa en los diferentes grupos de los que forma parte en su
vida cotidiana; tras darse cuenta de esto, el sujeto debe trasladar ese conocimiento a
su entramado de relaciones, al conjunto de fuerzas que lo configuran, y cambiar el
equilibrio de estas tomando papeles que le resulten más satisfactorios. A partir de
esto, surgen las terapias de pareja, de familia, sistémicas, etc.

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