Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Resumen
La prevalencia está aumentando de forma alarmante en todo el mundo y en todas las eda-
des. Las complicaciones aparecen cada vez antes, son ya visibles en niños y adolescentes: pro-
blemas psicológicos, de adaptación social, ortopédicos, hiperlipidemia, hipertensión, apneas
del sueño...
La obesidad infantil es el principal factor de riesgo para el desarrollo de obesidad en el
adulto, que se asocia a un mayor número de factores de riesgo cardiovascular y a la disminu-
ción de la esperanza de vida.
Aunque existen factores genéticos, el aumento de la obesidad está claramente unido al
cambio del estilo de vida (mayor ingesta calórica y menor actividad física).
El tratamiento es difícil, requiere de una estrategia multidisciplinaria actuando sobre el pa-
ciente y su entorno (familia). Por este motivo es clave la prevención primaria estimulando un
estilo de vida saludable.
Palabras clave: Sobrepeso, Obesidad, Factores de riesgo, Prevención, Tratamiento, Niños,
Adolescentes.
Abstract
Obesity prevalence is an increasing and alarming problem in the whole world and at all
ages. Important consequences are coming earlier and they are visible in childhood and adoles-
cence: Psychological problems, social acceptance, orthopaedic problems, high level of lipids,
hypertension, sleep apnoeas…
Children’s obesity is the main risk factor for adult obesity, what is related to more cardio-
vascular risk factors and to a decrease in life expectancy.
Although there are genetics factors, the rise of obesity is eventually in relation with life stile
(more food calories intake and less practice of physical activity).
Treatment is difficult. It is mandatory a multidisciplinary strategy effort toward patients
and their families. Primary prevention is a key factor through encouraging a healthy life style.
Key words: Overweight, Obesity, Risk Factors, Prevention, Treatment, Children, Adoles-
cence.
Las autoras declaran no presentar conflictos de intereses en relación con la preparación y publicación de este artículo.
239
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
240
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
241
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
Los que abogan por utilizar un percen- rativamente la obesidad respecto a las
til determinado tomando como referen- curvas del CDC15.
cia a individuos de igual grupo de edad, En la actualidad no existe suficiente
sexo y de la misma región, tienen limita- información para determinar las refe-
da la extrapolación de datos. Mientras rencias más adecuadas para el diagnós-
que los que utilizan el IMC tomado a los tico y cribado del sobrepeso y la obesi-
18 años como referente, obtienen unos dad en la población infantil española.
datos más neutros a la hora de extrapo- Las recientemente aparecidas curvas de
larlos a otros grupos de población. Lo crecimiento de la OMS con población
que ha de tenerse en cuenta a la hora de infantil de varios países podrían ser la
evaluar trabajos epidemiológicos14. respuesta a la búsqueda de la población
ideal de comparación. Pero de momen-
¿Qué valores y población to parece razonable seguir utilizando,
de referencia son los ideales? para el cribado clínico, las referencias
Los expertos recomiendan utilizar las nacionales de uso muy extendido, y que
tablas de referencia de IMC del país. además se utilizan para supervisar el
Aunque no hay estudios que correlacio- crecimiento y detectar cambios en su
nen las curvas españolas de IMC con evolución16. Hay varios estudios espa-
otros indicadores de grasa corporal (sí ñoles que determinan los datos de refe-
existen de las curvas de IMC del CDC y rencia de la población infantojuvenil es-
demuestran su buena correlación en los pañola: la Fundación Orbegozo 1998 y
niños americanos). No hay ninguna pu- 2002 (curvas más utilizadas), el estudio
blicación que valide las curvas del CDC enKid, y el centro Andrea Prader.
para la población infantil española. Se propone el empleo de los puntos de
Si se compara la prevalencia de sobre- corte de p85 para sobrepeso y el p95 pa-
peso-obesidad en la población española ra obesidad. Para diagnosticar obesidad,
utilizando las curvas de la CDC y las de además del IMC, hay que utilizar otro in-
Orbegozo, se observa que las diferencias dicador de grasa corporal, como la medi-
son escasas en el diagnóstico de sobre- ción de pliegues.
peso, pero son importantes en la obesi- Es recomendable que las gráficas de
dad, ya que las curvas de Orbegozo pre- comparación se fijen en un cierto punto
sentan valores más bajos de IMC para el del tiempo, para que se puedan monito-
punto de corte, y sobreestiman compa- rizar los cambios, ya que la actualización
242
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
243
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
244
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
245
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
246
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
247
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
248
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
249
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
250
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
El orlistat puede servir de ayuda al tra- jos, favoreciendo en las familias co-
tamiento habitual de la obesidad en esta nocimientos adecuados para adop-
edad, usándolo el primer año de trata- tar hábitos saludables mantenidos
miento para disminuir el IMC38,40. en el tiempo.
Los datos sobre cirugía bariátrica in- – En la consulta pediátrica, ofreciendo
fantojuvenil son muy escasos, y no exis- un entorno coherente con los con-
ten ensayos controlados. Debe restringir- sejos, evitando televisión en las sa-
se a casos graves muy seleccionados. las de espera, recompensas con ca-
ramelos, etc.
Prevención – A nivel colectivo, con acciones y
La prevención primaria es la base de la políticas (legislación, control de
lucha contra la obesidad infantil, ya que precios, de publicidad...); y a nivel
es más efectiva que el tratamiento de la comunitario, en la escuela y el en-
enfermedad una vez establecida. Debe torno familiar. Los profesores jue-
formar parte de la política nacional de sa- gan un papel importante en la pro-
lud pública: mejorar la alimentación de la moción de hábitos saludables. El
comunidad y el ejercicio físico para redu- equipo directivo del colegio tiene
cir enfermedades crónicas en la edad responsabilidad en los menús esco-
adulta. lares y en la incorporación en el cu-
La estrategia se basa en consejos dirigi- rrículo escolar del ejercicio físico y
dos a toda la población con un enfoque del desarrollo de programas de pro-
familiar y desde los distintos ámbitos so- moción de actividad física y de una
ciales que rodean al niño: atención sani- alimentación sana.
taria, guarderías, centros escolares, co- – Las intervenciones ambientales ne-
munidad y medios de comunicación. cesitan cambios políticos y sociales,
Es clave actuar desde todos los niveles: fundamentales para que la elección
– Desde la atención sanitaria, promo- saludable sea una elección fácil. Los
cionando la lactancia materna, la macro ambientes para estas inter-
alimentación saludable y la activi- venciones incluyen el sector de in-
dad física frente al sedentarismo. fraestructuras y transporte, los me-
Con un enfoque familiar, involu- dios de comunicación y el sector de
crando a los padres y su responsa- alimentación. Como por ejemplo,
bilidad en la alimentación de sus hi- disminuir la densidad energética de
251
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
252
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
253
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
254
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
255
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
21. Baird J, Fisher D, Lucas P, Kleijnen J, Roberts En: Estudio enKid, 2001. Barcelona: Masson;
H, Law C. Being big or growing fast: systematic re- 2004.
view of size and growth in infancy and later obe- 32. Davis CL, Flickinger B, Moore D, Bassali
sity. BMJ. 2005;331(7522):929. R, Domel Baxter S, Yin Z. Prevalence of cardio-
22. Barker DJ, Osmond C, Forsen TJ, Kajantie E, vascular risk factors in schoolchildren in a rural
Eriksson JG. Trajectories of growth among children Georgia community. Am J Med Sci. 2005;330:
who have coronary events as adults. N Engl J Med. 53-9.
2005;353(17):1802-9. 33. Yarnell JW, Patterson CC, Thomas HF,
23. Oken E,.Gillman MW. Fetal origins of obe- Sweetnam PM. Comparison of weight in middle
sity. Obes Res. 2003;11:496-506. age, weight at 18. years, and weight change bet-
24. Himes JH, Dietz WH. Guidelines for over- ween, in predicting subsequent 14 year mortality
weight in adolescent preventive services: recom- and coronary events: Caerphilly Prospective
mendations from an expert committee. The Expert Study. J Epidemiol Community Health. 2000;54:
Committee on Clinical Guidelines for Overweight 344-8.
in Adolescent Preventive Services. Am J Clin Nutr. 34. Sivanandam S, Sinaiko AR, Jacobs DR Jr,
1994;59:307-16. Steffen L, Moran A, Steinberger J. Relation on in-
25. Fox CS, Esparza J, Nicolson M, et al. Is a low crease in adiposity to increase in left ventricular
leptin concentration, a low resting metabolic rate, mass from childhood to young adulthood. Am J
or both the expresión of the “thrifty genotype”? Cardiol. 2006;98:411-5.
Results from Mexican Pima Indians. Am J Clin 35. Wearing SC, Henning EN, Byrne NM, Steele
Nutr. 1998;68:1053-7. JR, Hills AP. Musculoskeletal disorders associated
26. Rönnemaa T, Koskenvuo M, Marniemi J, et with obesity: a biomechanical perspective. Obes
al. Glucose metabolism in identical twins discor- Rev. 2006;7:239-50.
dant for obesity: the critical role of visceral fat. J 36. Summerbell CD, Ashton V, Campbell KJ, et
Clin Endocrinol Metab. 1997;82:383-7. al. Intervenciones para tratar la obesidad infantil
27. Jain, A. What works for obesity? A summary (Revisión Cochrane traducida). En: Biblioteca
of the research behind obesity interventions. Lon- Cochrane Plus, 2007 número 4. Oxford: Update
dres: BMJ, Publishing Group; 2004. Software Ltd. Disponible en www.update-softwa
28. Robinson TN. Reducing children’s television re.com
viewing to prevent obesity: a randomized contro- 37. Collins CE, Warren JM, Neve M, McCoy P,
lled trial. JAMA. 1999;282:1561-7. Stokes B. Systematic review of interventions in the
29. Peeters A, Bonneux L, Nusselder WJ, De La- management of overweight and obese children
et C, Barendregt JJ. Adult obesity and the burden which include a dietary component. Int J EB He-
of disability throughout life. Obes Res. 2004;12(7): althcare. 2007;5:2-53.
1145-51. 38. Obesity Canada Clinical Practice Guidelines
30. Reilly JJ, Methven E, McDowell ZC, Hacking Steering Committee and Expert Panel. 2006. Ca-
B, Alexander D, Stewart L, et al. Health consequen- nadian clinical practice guidelines on the manage-
ces of obesity. Arch Dis Child. 2003;88:748-2. ment and prevention of obesity in adults and chil-
31. Hernández Rodríguez M. Consideraciones dren [en línea]. CMAJ. 2007;176(8S):1-107.
sociosanitarias de la obesidad infantil. Capítulo 1. Disponible en www.cmaj.ca
256
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009
Duelo Marcos M, y cols. Obesidad
39. Perrin EM, Finkle JP, Benjamin TJ. Obesity cing physical activity for young people: statement
prevention and primary care padiatrician´s office. of the UK expert consensus conference. Pediatr
Curr Opin Pediatr. 2007;19:354-61. Exerc Sci. 2001;13:12-25.
40. Scottish Intercollegiate Guidelines Network. 42. Colomer Revuelta, J. Prevención de la obesi-
Management of obesity in children and young pe- dad infantil. En Recomendaciones PrevInfad/
ople. A national clinical guideline. Edimburgh; PAPPS [en línea] [consultado el 18/12/2008]. Dis-
2004. Disponible en www.sign.ac.uk ponible en http://www.aepap.org/previnfad/obe
41. Cavill NA, Biddle SJ, Sallis JF. Health enhan- sidad.htm [actualizado el 10/2004].
257
Revista Pediatría de Atención Primaria
Volumen XI. Suplemento 16, 2009