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UNIDAD 9: “Operaciones y Contratos Bursátiles”

1.- Principios referidos a los contratos de mercado:

Principio de transparencia: para conocer el valor económico de los activos que cotizan, es preciso facilitar al inversor toda la
información sobre los sujetos que emiten los valores, características de los valores en sí y de los mercados en los que cotizan.
Los pilares de la transparencia podrían resumirse en el “deber de información” y de “fiscalización”. Comprende la información
de hechos relevantes (obligación de informar todo hecho o situación que, por su importancia, sea apto para afectar en forma
sustancial la colocación de los valores negociables, el curso de su negociación, o el desenvolvimiento de la actividad propia de
cada sujeto alcanzado) y de tenencia (cantidad y clases acciones, deuda, opciones de compra o venta).

Deber de secreto: todos los intervinientes en las operaciones y contratos bursátiles tienen la obligación de guardar secreto
respecto de las informaciones relevantes obtenidas en ejercicio de tal actividad (máxime si están en ejercicio de sus funciones).

Levantamiento de secreto: las restricciones y limitaciones respecto al deber de guardar secreto, no regirán ante los
requerimientos formales que se efectúen respecto a tales informaciones, siempre que sean efectuados por un ente autorizado.

Principio de eficiencia: el derecho debe ofrecer normas que permitan que se cumplan debidamente (de la manera más rápida,
segura y con el menor coste posible) las funciones económicas atribuidas al mercado (permitir una relación fluida entre
ahorradores e inversionistas para que los ahorros se canalicen hacia las inversiones más productivas).

Principio de protección al inversor: la ley debe proporcionar al ahorrador individual (lo distingue del inversor profesional) un
grado suficiente de protección para tener acceso a la información, evitar engaños y abusos, y para hacer valer sus derechos en
forma similar (aunque no igual) a como se procede en el caso de los consumidores.

Principio de profesionalidad de los intermediarios: a los que las normas les exigen requisitos previos para acceder a la actividad
y normas de conducta para el ejercicio de la misma.

Operaciones de mercado (del sistema bursátil)

De contado: operaciones que permiten a una persona disponer la compra o venta de una cantidad determinada de títulos
valores (acciones, títulos de renta fija, obligaciones negociables, etc) a un precio convenido. En la actualidad, los contados son
liquidados en un plazo único de 72 horas.

A término (o plazo): operaciones concertadas a un plazo determinado (superior a 72 horas) para su liquidación. Como su
liquidación está extendida en el tiempo, es garantizada por el Mercado de Valores, y quienes participan en ellas, deben
constituir garantías a satisfacción. Comprende:

De futuro: acuerdo entre dos partes para comprar o vender un activo (activo subyacente) en un momento futuro determinado,
a un precio prefijado. Las partes se obligan a realizar la operación pactada al finalizar el plazo. Se pueden realizar futuros sobre
productos financieros (índices, monedas, tasas, etc) o sobre commodities (petróleo, soja, etc).

La inversión en futuros permite a quien lo utiliza asegurar el valor de sus activos en un momento posterior. Si el inversor teme
que los precios de algún activo bajarán, toma una cobertura vendedora. Por su parte, quien toma una cobertura compradora, lo
hace porque cree que los precios pueden subir.

Por opciones: operación por la cual una de las partes (titular de la operación) adquiere el derecho a comprar o a vender una
determinada cantidad de títulos valores autorizados, en un período de tiempo establecido, a un precio también fijado, pagando
por ello una determinada suma de dinero o prima.

De pase: es un único contrato que contempla dos operaciones simultáneas. El inversor vende (o compra) valores negociables a
un precio de contado o a plazo y pacta simultáneamente la operación inversa de compra (o venta) para un mismo comitente y
en un vencimiento posterior.

Quien vende los títulos en contado deja de ser su propietario, por lo que al momento de fijar el precio futuro debe tener en
cuenta si los títulos pagarán dividendos u otros conceptos, ya que durante la vigencia del contrato el vendedor no goza de los
derechos patrimoniales.
La ganancia para el colocador es una tasa fija de interés que surge de la diferencia entre el precio de compra a plazo y el de
venta de contado (la tasa que paga el tomador por el préstamo de fondos).

Cauciones: es una operación similar al pase, pero a diferencia de éste, al precio de venta de contado de los valores objeto de la
caución se le aplica un aforo (garantía) determinado por el Mercado de Valores. Este aforo es un porcentaje que fija el límite de
fondos que puede obtener el tomador a cambio de los títulos que entregó.
De manera que un inversor que cuenta con fondos líquidos puede prestarlos a cambio de valores y, al vencimiento del plazo
convenido, obtener el dinero prestado más un rendimiento cierto (dado que el interés se calcula al comienzo del contrato).
La caución no implica cambio de propiedad de los títulos, sino su inmovilización por un tiempo determinado.

El inversor obtendrá un rendimiento que surge de la diferencia entre el monto que invierte al inicio de la operación y el precio a
plazo. El monto de inversión inicial se calcula restando los intereses al valor final de la operación.

2.- Fondos comunes de inversión (Ley 24.083):

Concepto: patrimonio formado por los aportes de un grupo de personas (inversores), que suscriben cuotapartes y se convierten
en cuotapartistas del mismo (los inversores tienen los mismos objetivos de rentabilidad y riesgo).
Estos fondos no constituyen sociedades y carecen de personería jurídica.

Naturaleza jurídica: el FCI es calificado como un “condominio indiviso”, cuyos titulares son los cuotapartistas.
La indivisión permanece siempre que el fondo no se liquide, y los cuotapartistas ejercen el derecho de disponer de su propiedad
mediante el rescate o transmisión de sus cuotapartes.
El activo del FCI es un patrimonio separado o de afectación colectivo, que requiere de una autorización legal, es independiente
del patrimonio general de cada persona, y responde solo por las deudas que corresponden al núcleo patrimonial particular.

Partes intervinientes: funciones y responsabilidad:

Sociedad gerente: sociedad anónima que tiene como funciones básicas:

 Management (dirección y administración) del FCI, determinando la compra y venta de los activos, sin intervención de los
cuotapartistas ni de la sociedad depositaria.
 Representación colectiva de los copropietarios indivisos.
 Puede administrar varios fondos comunes de inversión (siempre que cumpla determinadas condiciones).
 Obligaciones del mandato: deber de informar, de rendir cuentas, de preservar el interés del mandante, etc.

Debe tener un patrimonio de $50.000 (que nunca podrá ser inferior al equivalente de U$S 50.000), y no puede tener las mismas
oficinas que la sociedad depositaria, debiendo ser totalmente independientes.

Inversores: existe una delegación decisoria por parte del inversor, y una gestión de intereses ajenos por parte de la sociedad
gerente (se aplican subsidiariamente las reglas del mandato representativo). El mandatario (sociedad gerente) no está sujeto a
instrucciones de sus mandantes (inversores o cuotapartistas), ni tienen éstos facultades para revocar el mandato. Si están en
desacuerdo con la gestión del patrimonio del FCI, pueden pedir el rescate de sus cuotapartes y ejercer acciones judiciales a las
que se creyeren con derecho, pero no entremeterse en la administración.

Sociedad depositaria: sociedad anónima que tiene como funciones básicas (obligación de control):

 Custodiar los activos que integran el patrimonio del FCI.


 Controlar la legalidad de la administración que lleva a cabo la sociedad gerente.
 Percibir el importe de las suscripciones.
 Pagar los rescates requeridos por los cuotapartistas.
 Registrar las cuotapartes.
 Expedir las constancias que soliciten los cuotapartistas.

Debe tener un patrimonio neto mínimo de $ 100.000, que debe mantenerse actualizado al equivalente de U$S 100.000.

Órgano de fiscalización: la Comisión Nacional de Valores (CNV) tiene a su cargo la fiscalización y registro de las sociedades
gerente y depositaria de los fondos comunes de inversión (art. 32 ley 24.083).
Responsabilidad: La sociedad gerente y la depositaria, sus administradores, gerentes y miembros de sus órganos de fiscalización
son solidaria e ilimitadamente responsables de los perjuicios que pudiera ocasionarse a los cuotapartistas por incumplimiento
de las disposiciones legales pertinentes y del Reglamento de Gestión (art. 4 ley 24.083).

Clases de fondos: según el art. 2 de la ley 24.083:

1. Fondo común de inversión propiamente dicho: patrimonio integrado por: valores mobiliarios con oferta pública, metales
preciosos, divisas, derechos y obligaciones derivados de operaciones de futuro y opciones, instrumentos emitidos por
entidades financieras autorizadas por el BCRA y dinero, pertenecientes a diversas personas a las cuales se les reconocen
derechos de copropiedad representados por cuotapartes cartulares o escriturales (art. 1 ley 24.083). (Abierto)
2. Fondo común de inversión inmobiliario: fondos con una cantidad máxima de cuotapartes, cuyo patrimonio se halla
integrado, además de los bienes previstos en el art. 1, por derechos sobre inmuebles, créditos hipotecarios en 1° o ulterior
grado y derechos de anticresis constituidos sobre inmuebles. (Cerrado)

Según su forma de constitución:

1. Abiertos: aquellos en los que el cliente puede suscribir (comprar) y rescatar (vender) cuotapartes a su voluntad (en cualquier
momento y lugar). No tienen cotización en Bolsas o Mercados. Son los más utilizados.
2. Cerrados: aquellos cuyas cuotapartes cotizan en Bolsas y/o Mercados y, por lo tanto, su liquidez depende de la oferta y la
demanda. El número de cuotapartes es limitado, y sólo pueden suscribirse en la oferta inicial o a través del mercado
secundario en el Mercado de Valores.

Según el objetivo de inversión:

1. Fondos de Liquidez (Mercado de Dinero): inversión muy conservadora y apropiada para quienes quieren invertir su dinero a
corto plazo, con liquidez inmediata y libre de fluctuaciones de precios.
2. Fondos de Bonos o de Renta Fija: inversión a mediano/largo plazo, de rendimiento y fluctuaciones de precio moderados.
3. Fondos Mixtos: combinan distintos activos financieros, tales como bonos, acciones y plazos fijos. Su riesgo y rendimiento
dependerán del comportamiento de cada uno de ellos.
4. Fondo de Acciones o de Renta Variable: inversión a largo plazo. Son de rendimientos potencialmente elevados y están
sujetos a las fluctuaciones de precios de los mercados bursátiles.

Características:

 Permite acceder a más y mejores alternativas de inversión que a las que se puede acceder invirtiendo en forma individual.
 Cuando una persona realiza una suscripción (invierte) en un FCI, lo que hace es comprar una cantidad de cuotapartes a un
determinado valor (compra pequeñas partes del fondo). Los precios de las cuotapartes varían diariamente, de acuerdo a la
fluctuación de los precios de los activos que componen la cartera del Fondo.
Un inversor puede invertir en un fondo tantas veces como lo desee, inclusive traspasarse de un fondo a otro.
 Pueden emitir distintas clases de cuotapartes con diferentes derechos.
 La desvinculación de los copartícipes en la indivisión de un fondo común de inversión se opera, exclusivamente, por el
rescate de partes (art. 16).
 Las cuotapartes emitidas estarán representadas por certificados de copropiedad nominativos o al portador, en los cuales se
dejará constancia de los derechos del titular de la copropiedad y deberán ser firmados por los representantes de ambos
órganos del fondo. Deben expedirse contra el pago total del precio de suscripción, no admitiéndose pagos parciales (art. 18).
 Las suscripciones y los rescates deben efectuarse valuando el patrimonio neto del fondo mediante los precios promedios
ponderados, registrados al cierre del día en que se soliciten (art. 20).
 Los cuotapartistas tienen derecho a exigir en cualquier momento el rescate, que debe verificarse obligatoriamente por los
órganos del fondo dentro de los 3 días hábiles de formulado el requerimiento, contra devolución del certificado (art. 22).
 Los suscriptores de cuotapartes gozan del derecho a la distribución de las utilidades que arroje el fondo común (cuando así lo
establezca el Reglamento de Gestión) y al de rescate, pero en ningún caso a exigir el reintegro en especie (art. 24).
 Las sociedades gerente y depositaria pueden rescindir (total o parcialmente) el Reglamento de Gestión con preaviso (art. 30).
La rescisión podrá evitarse si se celebrase nuevo convenio en reemplazo del que se rescinde (art. 31).
Reglamento de gestión: contrato en virtud del cual giran las relaciones jurídicas entre los órganos del FCI (sociedad gerente y
depositaria) y los cuotapartistas.

Se presenta como el producto de la voluntad conjunta de las sociedades gerente y depositaria, a la que los inversores prestan su
conformidad por el sólo hecho de incorporarse al FCI (“la suscripción de cuotapartes emitidas por los órganos del fondo implica,
de pleno derecho, adhesión al reglamento de gestión...”).

Sin embargo, esa voluntad está fuertemente acotada por la generalización en la adopción del “Reglamento de Gestión Tipo”
(aunque no es obligatorio, ya que las sociedades gerentes y depositarias pueden presentar un texto diferenciado), que se
integra por 2 partes:

a) Cláusulas generales (se adoptan voluntariamente por la sociedad gerente y depositaria, y solo pueden modificarse por
norma legal o reglamentaria, que de existir se incorporan de pleno derecho al Reglamento de Gestión Tipo).
b) Cláusulas particulares (complementan e incluyen cuestiones no tratadas en las cláusulas generales). Su modificación con
posterioridad a su aprobación inicial es viable, mediante acuerdo de la sociedad gerente y depositaria, y sin que sea
necesario el consentimiento del inversor (cuotapartista).

Está prohibido a las sociedades órganos establecer condiciones diferentes en beneficio de algún cuotapartista. Y cualquier
reforma o modificación que se haga al Reglamento de Gestión debe formalizarse e inscribirse con las mismas solemnidades
prescriptas para su celebración (art. 31 ley 24.083).

Es un contrato oneroso, consensual, típico (cuenta con recepción normativa y regulación específica), conmutativo (porque lo
que depende del alea no es la entidad de las prestaciones de las partes, sino el beneficio), formal (requiere su celebración por
escritura pública o instrumento privado con firmas ratificadas ante escribano público o la CNV de las sociedades gerente y
depositaria), de ejecución continuada (de manera ininterrumpida) y plurilateral (existen obligaciones de los cuotapartistas,
sociedad gerente y sociedad depositaria), con cláusulas predispuestas o por adhesión (con la particularidad de una aprobación
administrativa de su contenido).

El Reglamento de Gestión debe especificar (art. 13 ley 24.083):

a) Planes que se adoptan para la inversión del patrimonio del fondo.


b) Normas y plazos para la recepción de suscripciones rescate de cuotapartes y procedimiento para los cálculos respectivos.
c) Límites de los gastos de gestión, comisiones y honorarios que se percibirán por las sociedades gerente y depositaria.
d) Condiciones para el ejercicio del derecho de voto correspondientes a las acciones que integren el haber del fondo.
e) Procedimiento para la modificación del Reglamento de Gestión por ambos órganos del fondo.
f) Término de duración del estado de indivisión del fondo o la constancia de ser por tiempo indeterminado.
g) Causas y normas de liquidación del fondo y bases para la distribución del patrimonio entre los copropietarios y requisitos de
publicidad de la misma.
h) Régimen de distribución a los copropietarios de los beneficios producidos por la explotación del fondo.
i) Disposiciones que deben adoptarse en caso de que la sociedad gerente o depositaria no estén en condiciones de continuar
sus funciones.
j) Determinación de los topes máximos a cobrar en concepto de gastos de suscripción y rescate.

3.- Contrato de Underwriting: (o “Suscripción Temporal”)

Concepto: contrato por medio del cual una entidad financiera (underwriter) se obliga a prefinanciar (en firme o no) a una
sociedad comercial (emisora) la emisión de títulos valores, colocándolos luego en el mercado a mayor valor, ganando un
porcentaje. Además, el underwriter ofrece servicios de asesoramiento, consultoría y gestión.
Ej: una S.A. necesita U$S 4.000.000 para instalar una planta industrial; emite acciones por ese valor y para no esperar a
venderlas al público, celebra un underwriting con un banco, el cual si la operación es en firme le dará el dinero en carácter de
compra de las acciones, y si no es en firme, en carácter de préstamo.

Si una empresa necesita obtener dinero, puede emitir acciones o debentures. Pero como suele tardarse mucho tiempo en
colocar esos títulos en el mercado, puede recurrir al underwriting, y obtener el dinero de inmediato.
Naturaleza: se trata de un contrato, con las siguientes características:

 Consensual, oneroso, bilateral, conmutativo, no formal (debe ser escrito), de tracto sucesivo, a plazo fijo o indeterminado, de
cambio (promueve la circulación de la riqueza), atípico (no se encuentra regulado en nuestra legislación) y nominado (tiene
nombre y características conocidas universalmente).
 Financiero, principal (no depende de ningún otro para su validez) y complejo.
 De colaboración (por el beneficio económico-financiero mutuo que genera a las partes).

Clases:

1. Underwriting con compromiso “en firme”: el underwriter se obliga a prefinanciar la totalidad de los títulos valores en forma
inmediata a la emisora y a efectuar su colocación en el mercado por su cuenta y riesgo (compra los títulos para revenderlos).
Asume el máximo riesgo, siendo la forma que más favorece a la empresa emisora.
2. Underwriting con compromiso “stand-by”: (o “colocación garantizada”) el underwriter se obliga a prefinanciar los títulos
valores que la emisora no pudo colocar por sí misma en manos de los inversores durante el plazo establecido en el contrato.
Una vez vencido el plazo, se hacen exigibles las obligaciones correlativas de las partes: la entrega de los títulos sobrantes por
la emisora al underwriter, quien los recibirá prefinanciando el valor nominal y los colocará en el mercado.
3. Underwriting con compromiso “best-effort”: el underwriter se compromete únicamente a poner “su mejor esfuerzo” para
vender los títulos que pueda colocar en el mercado, y si quedare algún remanente después de la fecha límite fijada, no está
obligado a comprarlo. Implica mínimo riesgo para el underwriter y poco costo para el emisor.
4. Underwriting mixto: el underwriter se obliga a colocar los títulos en el mercado (dando o no un anticipo en préstamo), sin
comprar “en firme”, pero garantizando que comprará por sí todas las acciones que no hayan podido colocarse.
5. Underwriting con compromiso “no en firme”: el underwriter efectúa una entrega de dinero a la emisora en calidad de
préstamo, que ésta aspira a devolver mediante la afectación del precio de venta de los títulos valores (por un lado, existe un
mutuo comercial y, por el otro, un mandato por el que el underwriter se encarga de colocar los títulos emitidos).
6. Underwriting de todo o nada: (esta modalidad se subsume dentro del underwriting “best-effort”) el underwriter busca
promesas de posibles clientes para colocar la emisión dentro de un plazo determinado. Si se logra colocar el total, se lanza al
mercado; caso contrario, la emisión no se realiza.

Partes y sus obligaciones:

 Sujeto activo o emisor: cualquier persona que tenga autorización legal para emitir títulos valores (sociedades anónimas,
sociedades con participación estatal mayoritaria y sociedades en comandita por acciones) u obligaciones negociables
(cooperativas, asociaciones civiles y las sociedades del Estado).
 Pre-financiador u underwriter: bancos de inversión, compañías financieras autorizadas por la Ley de Entidades Financieras y
bancos comerciales.
Es posible que el underwriter no sea una sola entidad, sino varias (caso del “sindicato financiero” o “consorcio colocador”).
Se forma con la finalidad de repartir los riesgos y disponer de los recursos suficientes para realizar la prefinanciación (ya que
se da con frecuencia en los casos de grandes inversiones).

Obligaciones del emisor:

 Informar al underwriter todo lo relacionado con la emisión.


 Notificar al underwriter sobre cualquier modificación que se haya producido desde que se realizó la oferta.
 No vender ninguno de los títulos y valores durante el periodo acordado para la operación.
 No contratar con ninguna otra colocadora mientras el contrato de underwriting se encuentre vigente.
 Pagar la comisión de administración al underwriting.

Obligaciones del underwriter:

 Realizar las gestiones necesarias para la obtención de la autorización administrativa.


 Realizar las gestiones necesarias en el mercado de valores, con la finalidad de lograr la colocación de los títulos que se le han
confiado como intermediario.
 Mantener el precio de la colocación y sus condiciones por el plazo convenido, una vez que haya realizado la función de
intermediación y ofrecido los títulos valores a los inversionistas.

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