Objetivo: identificar los conceptos básicos de virutabilidad.
El proceso de arranque de la viruta se realiza mediante la penetración de una
herramienta de corte, realizando un movimiento relativo entre la pieza que se desea mecanizar y la herramienta, el material de la herramienta de corte debe ser de mayor dureza que la pieza a tratar, puesto que la dureza de un material define su oposición a ser rallado.
El arranque de la viruta se produce debido a que el filo de la herramienta produce
una deformación elástica en el material, provocando grandes tensiones en la parte del mismo que se convertirá en viruta. Se supera el límite de fluencia del material provocando la rotura y separación de la capa a causa de la deformación plástica sufrida.
El mecanizado por arranque de viruta es un proceso de mecanizado que consiste
en separar material de una pieza fabricada previamente. El nombre de esta técnica se debe a que el material es arrancado o cortado con una herramienta dando lugar a un desperdicio o viruta. La herramienta consta, generalmente, de uno o varios filos o cuchillas que separan la viruta de la pieza en cada pasada.
Las virutas se diferencian entre sí, dependiendo de la herramienta con que se esté mecanizando.
Los principales movimientos que nos encontramos en el mecanizado por arranque
de viruta de una pieza son:
Corte: Con este movimiento penetra la herramienta en el material, siendo la
causante de producir la viruta. Se define mediante la Velocidad de Corte. Avance: Este movimiento es el realizado al desplazar el punto de aplicación del corte. Se define mediante la Velocidad de Avance. Alimentación: Se define con el parámetro de Profundidad de Pasada y es el encargado de cortar un espesor del material.