Está en la página 1de 12

UNIVERSIDADA DE GUAYQUIL

FACULTAD DE ODONTOLOGIA

ODONTOPEDIATRIA

VARICELA

DOCENTE: Dra. KatuscaVelasco Cornejo

INTEGRANTES:

 Andrés Mazzini
 Lidia Castro
 Bryan Calderón
 Ricardo Moyano
 Tatiana Calderón

Curso: 10mo /1

Año Lectivo:Online

Periodo:

CI 2020-2021
VARICELA
La varicela es una infección sistémica aguda que suele aparecer en la infancia
y es causada por el virus varicela-zóster (virus herpes humano tipo 3). En
general, se manifiesta con síntomas generales leves seguidos poco tiempo
después por lesiones cutáneas que aparecen en brotes e incluyen máculas,
pápulas, vesículas y costras. Los adultos, los recién nacidos y los pacientes
inmunodeficientes o con ciertas enfermedades subyacentes presentan mayor
riesgo de presentar complicaciones neurológicas u otros trastornos sistémicos
(p. ej., neumonía). El diagnóstico es clínico. Los individuos con riesgo elevado
de complicaciones graves deben recibir profilaxis posexposición con
inmunoglobulina, y si presentan la enfermedad deben ser tratados con
antivirales (p. ej., valaciclovir, famciclovir, aciclovir). La vacuna confiere
protección eficaz en pacientes inmunocompetentes.

La varicela se debe a la infección por el virus varicela zóster (virus herpes


humano tipo 3). La varicela constituye la fase invasora aguda de la infección,
mientras que el herpes zóster (culebrilla) representa la reactivación de la fase
latente.

Características generales
 El virus varicela-zóster es el causante de la varicela.
 Necesita un periodo de incubación de 10 a 21 días.
 Es muy contagiosa.
 La infección se propaga de forma muy similar a los resfriados y a la
gripe.
 Normalmente, el médico puede dar un diagnóstico con la simple
observación de los signos y los síntomas.
Se transmite por:

 Inoculación de la mucosa (por lo general nasofaríngea) a través de


gotitas en el aire partículas de aerosol infectadas
 Contacto directo con el virus (p. ej., a través de lesiones cutáneas)

La varicela se transmite sobre todo durante la fase prodrómica y los estadios


iniciales de la erupción. El contagio se produce desde 48 h antes de la
aparición de las primeras lesiones cutáneas hasta la conversión de la última
lesión en costra. No se demostró la transmisión indirecta del virus (por
portadores que son inmunes).

Las epidemias se producen en invierno y al comienzo de la primavera y se


repiten en ciclos de 3 a 4 años. Algunos lactantes pueden tener inmunidad
parcial hasta los 6 meses, que puede haberse transmitido por vía
transplacentaria.

Signos y síntomas

En los niños inmunocompetentes, la varicela rara vez es grave. En los adultos y


los niños inmunodeficientes, la infección puede ser más peligrosa.

Entre 10 y 21 días después de la exposición, el paciente puede presentar


cefalea leve, fiebre moderada y malestar general, aproximadamente entre 24 y
36 h antes de la aparición de las lesiones cutáneas. Este prodromo se observa
con mayor asiduidad en individuos > 10 años y suele ser más grave en adultos.

Erupción inicial

El exantema inicial, que es una erupción maculosa, puede asociarse con un


eritema evanescente. En pocas horas, las lesiones se convierten en pápulas y,
luego, en vesículas patognomónicas en forma de lágrima, apoyadas sobre
bases eritematosas, que suelen provocar prurito intenso. A continuación, las
lesiones se transforman en pústulas y luego en costras.

En un principio, las lesiones aparecen en la cara y el tronco y surgen en brotes


sucesivos; algunas máculas aparecen cuando las primeras lesiones se
convierten en costras. La erupción puede ser generalizada (en los casos
graves) o más limitada, pero casi siempre compromete la parte superior del
tronco.

También pueden aparecer lesiones ulceradas en las mucosas, como la


bucofaringe y las vías respiratorias superiores, la conjuntiva palpebral y las
mucosas rectal y vaginal.

En la boca, las vesículas se rompen de inmediato, son indistinguibles de la


gingivoestomatitis herpética y a menudo causan odinofagia.

Las lesiones en el cuero cabelludo pueden promover la formación de


adenomegalias dolorosas en las áreas suboccipital y cervical posterior.

En general, hacia el quinto día dejan de aparecer lesiones nuevas y la mayoría


de las lesiones se convierten en costra hacia el sexto día; casi todas las costras
desaparecen < 20 días después de su aparición.

Varicela en vacunados
A veces los niños vacunados desarrollan varicela (llamada varicela
modificada); en estos casos, la erupción suele ser más leve, la fiebre es
menos común y el curso de la enfermedad es más breve; las lesiones son
infecciosas.

Diagnóstico
Evaluación clínica

La varicela se sospecha en pacientes con el exantema característico, en el que


suele basarse el diagnóstico. El exantema puede confundirse con el de otras
infecciones cutáneas virales.

Si existen dudas en torno al diagnóstico, pueden pedirse estudios de


laboratorio para confirmarlo; requiere uno de los siguientes:
PCR para DNA viral

Detección del antígeno vital por inmunofluorescencia en lesiones o cultivos

Pruebas serológicas

En las pruebas serológicas, la detección de anticuerpos IgM contra el virus de


la varicela-zóster (VVZ) o seroconversión de negativo a positivo para
anticuerpos contra VZV indica una infección aguda.

Las muestras suelen obtenerse mediante raspado de la base de las lesiones y


se transportan al laboratorio en medios adecuados para virus.

Pronóstico

En los niños, la varicela rara vez es grave. La enfermedad grave oletal es más
probable en las siguientes situaciones:

 Adultos
 Los pacientes con inmunodeficiencia de células T (p. ej., cáncer
linforreticular)
 Los que reciben corticosteroides o quimioterapia

Tratamiento
Normalmente, la varicela se supera tras una o dos semanas sin tratamiento. No
existe ninguna cura, pero puede prevenirla con una vacuna.

El médico podría recetar medicación o aconsejar algunos remedios para


reducir los síntomas de comezón y malestar. También puede ayudarle a
prevenir la transmisión a otras personas.

Dolor o fiebre: El Tylenol (acetaminofeno), disponible para la compra en línea,


podría ayudar con los síntomas de altas temperaturas y dolor. Es importante
seguir las instrucciones del fabricante. Los productos que contienen aspirina
NO deberían utilizarse durante la varicela, ya que puede provocar
complicaciones. El acetaminofeno (Tylenol) puede utilizarse también durante el
embarazo.
Evitar la deshidratación: Es importante beber abundantes líquidos,
preferiblemente, agua, para evitar la deshidratación. Algunos médicos
recomiendan helados sin azúcar o Pedialyte para los niños que no beben lo
suficiente.

Dolor en la boca: Los helados sin azúcar ayudan a facilitar los síntomas del
dolor si la persona presenta granos en la boca. Las comidas saladas o picantes
deberían evitarse. Si sufre dolor al masticar, la sopa podría ser una buena
opción, pero no debería estar muy caliente.

Comezón: Puede ser grave, pero es importante no rascarse para reducir el


riesgo de que aparezcan cicatrices.

Los siguientes consejos podrían ayudar a no rascarse:

 Mantener las uñas de los dedos limpias y lo más cortas posibles.


 Colocar guantes o incluso calcetines en las manos del niño cuando se
va a dormir, por lo que, si intenta rascarse durante la noche, no se
romperá la piel.
 Aplicar loción calmante o bañarse en avena para reducir la comezón.
 Llevar prendas holgadas.

Se pueden recetar medicamentos antivirales durante el embarazo, para los


adultos con un diagnóstico temprano, en recién nacidos o para aquellos que
tenga un sistema inmunológico debilitado. Por ejemplo, el Aciclovir.

Los medicamentos funcionan mejor si se aplican durante las primeras 24 horas


en las que se desarrollan los síntomas. El Aciclovir reduce la gravedad de los
síntomas, pero no cura la enfermedad.

Tratamiento sintomático
Valaciclovir o famciclovir para los pacientes ≥ 12 años

Aciclovir por vía intravenosa a los pacientes inmunodeficientes y a otros


individuos con riesgo elevado de presentar una enfermedad grave

La enfermedad varicelosa leve en niños sólo requiere tratamiento sintomático.


El alivio del prurito y la prevención del rascado, que predispone a la
sobreinfección bacteriana, pueden ser tareas difíciles. Las compresas húmedas
o, en caso de prurito intenso, la administración de antihistamínicos sistémicos y
los baños con avena coloidal pueden ser de utilidad. La administración
simultánea de dosis elevadas de antihistamínicos sistémicos y tópicos puede
causar una encefalopatía y debe evitarse.

Con el fin de prevenir la infección bacteriana, los pacientes deben bañarse


regularmente y mantener su ropa interior y sus manos limpias, con las uñas
recortadas. No deben aplicarse antisépticos salvo que las lesiones se infecten.
La sobreinfección bacteriana se trata con antibióticos.

Los pacientes no deben regresar a su hogar o su trabajo hasta que las últimas
lesiones se hayan convertido en costras.

Antivirales y varicela

La administración de antivirales por vía oral, a pacientes inmunocompetentes


durante las primeras 24 h del exantema disminuye un poco la duración y la
gravedad de los síntomas. No obstante, dado que la enfermedad suele ser
benigna en los niños, no se recomienda el tratamiento antiviral en forma
sistemática.

Se administra valaciclovir, famciclovir o aciclovir por vía oral a personas sanas


con riesgo elevado de enfermedad moderada o grave, como los pacientes ≥ 12
años y los que tienen enfermedades cutáneas (sobre todo eccema) o
enfermedad pulmonar crónica. La dosis del famciclovir es de 500 mg 3 veces al
día y la del valaciclovir es de 1 g 3 veces al día. El aciclovir constituye una
opción menos óptima dada su menor biodisponibilidad por vía oral, aunque
pueden administrarse 20 mg/kg 4 veces al día en niños de hasta 40 kg. Los
adolescentes y adultos pueden recibir aciclovir oral en una dosis de hasta 800
mg 4 o 5 veces/día.

Los niños > 1 año con inmunodeficiencias deben recibir 500 mg/m2 de aciclovir
cada 8 h por vía intravenosa. Los adultos inmunodeprimidos deben ser tratados
con aciclovir, en dosis de 10 a 12 mg/kg por vía intravenosa cada 8 h.

Dado que las mujeres embarazadas tienen un alto riesgo de complicaciones


por varicela, algunos expertos recomiendan administrar aciclovir o valaciclovir
por vía oral a las mujeres embarazadas con varicela. El aciclovir es un
medicamento de categoría B para el embarazo. El aciclovir intravenoso se
recomienda para mujeres embarazadas con enfermedad varicelosa grave.

Prevención
La infección confiere protección de por vida.

Las personas susceptibles deben implementar precauciones estrictas para


evitar el contacto con individuos capaces de transmitir la infección.

Vacunación

Hay tres vacunas a virus vivos atenuados disponibles en los Estados Unidos:

 Vacuna contra la varicela


 Vacuna combinada para sarampión, parotiditis, rubéola y varicela
(MMRV)
 Vacuna contra herpes zóster

Todos los niños sanos y los adultos susceptibles deben recibir 2 dosis de
vacuna contra la varicela a virus vivos atenuados (ver Cronograma de
vacunación recomendado para los 0-6 años de edad y Cronograma de
vacunación recomendado para los 7-18 años). La vacunación es especialmente
importante en las mujeres en edad reproductiva y en los adultos con
enfermedades crónicas subyacentes. En general, no es necesario pedir
estudios serológicos a los adultos para determinar el estado inmunitario antes
de la vacunación . Si bien la vacuna puede causar varicela en pacientes
inmunocompetentes, la enfermedad suele ser leve (< 10 pápulas o vesículas) y
breve y causa pocos síntomas sistémicos.

Se recomienda una nueva vacuna recombinante contra herpes zóster para


adultos inmunocompetentes ≥ 50 años, en forma independiente de si tuvieron
herpes zóster; se administran 2 dosis separadas por 2 a 6 meses. La vacuna
recombinante más nueva parece proporcionar una protección más eficiente y
duradera que la vacuna contra herpes zóster de dosis única a virus vivos
atenuados más antigua. La vacuna a virus vivos atenuados se recomienda para
adultos inmunocompetentes ≥ 60 años y está autorizada para personas ≥ 50
años. Ambas vacunas están disponibles y se ha demostrado que ambas
reducen la incidencia de herpes zóster, aunque se prefiere la vacuna
recombinante. Actualmente no hay datos sobre la eficiencia de la vacuna
recombinante en pacientes inmunocomprometidos y no se establecieron
recomendaciones para su uso en pacientes inmunocomprometidos. La vacuna
a virus vivos atenuados está contraindicada en pacientes
inmunocomprometidos.

Se recomienda la vacunación de los trabajadores de la salud que no tienen


evidencia de inmunidad contra la varicela. Los trabajadores de la salud
susceptibles que hayan estado expuestos a la varicela deben vacunarse lo
antes posible y mantenerse fuera de servicio durante 21 días.

La vacunación está contraindicada  en

 Pacientes con enfermedad aguda moderada o grave concurrente (la


vacunación se pospone hasta que la enfermedad se resuelva).
 Pacientes inmunocomprometidos.
 Mujeres embarazadas o que tienen la intención de quedar embarazadas
dentro del mes posterior a la vacunación (basado en las
recomendaciones del Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización) o
en los 3 meses posteriores (basado en el prospecto de la vacuna).
 Pacientes que reciben dosis elevadas de corticoides.
 Niños que ingieren salicilatos.

Profilaxis posexposición

Después de la exposición, la varicela puede prevenirse o atenuarse a través de


la administración IM de inmunoglobulina contra varicela-zóster. Los candidatos
para la profilaxis posterior a la exposición son

 Personas con leucemia, inmunodeficiencias, u otra enfermedad


debilitante grave.
 Mujeres embarazadas susceptibles.
 Recién nacidos cuyas madres desarrollaron varicela dentro de los 5 días
anteriores o 2 días posteriores al parto.
 Los recién nacidos con < 28 semanas y expuestos a una fuente no
materna, incluso si su madre tiene evidencia de inmunidad (rlos ecién
nacidos ≥ 28 semanas y expuestos a una fuente no materna no
necesitan inmunoglobulina si la madre tiene evidencia de inmunidad).

La inmunoglobulina debe administrarse tan pronto como sea posible (y dentro


de los 10 días siguientes a la exposición) para modificar o prevenir la varicela.

La vacunación debe administrarse tan pronto como sea posible a los pacientes
sanos susceptibles elegibles para la vacunación (p. ej., edad ≥ 1 año). La
vacuna puede ser eficaz para prevenir o mejorar el cuadro si se administra
dentro de los 3 días, y posiblemente hasta los 5 días, después de la exposición.

Para prevenir la transmisión intrahospitalaria, los Centros para el Control y la


Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan la profilaxis posterior a la
exposición con la vacuna o con inmunoglobulina para varicela-zóster,
dependiendo del estado inmunológico, para los trabajadores de atención de la
salud y los pacientes expuestos y sin evidencia de inmunidad (Disponible
en Immunization of Health-Care Personnel).
Complicaciones

Las vesículas pueden presentar una infección bacteriana


secundaria (típicamente, estreptocócica o estafilocócica) y provocar celulitis
o, rara vez, fascitis necrosante o shock tóxico estreptocócico.
La neumonía puede complicar la varicela en adultos, recién nacidos y
pacientes inmunodeficientes de todas las edades, aunque en general no se
produce en niños pequeños inmunocompetentes.
La miocarditis, la hepatitis y los trastornos hemorrágicos también pueden
complicar la infección.
La ataxia cerebelosa aguda posinfecciosa es una de las complicaciones
neurológicas más comunes; se produce en 1/4000 casos en niños.
También puede producirse mielitis transversa.
Los adultos son más susceptibles a tener complicaciones que los niños, pero,
aún así, es muy raro que aparezcan.

Si las ampollas se infectan con bacterias, el riesgo de sufrir complicaciones es


mayor.

Las mujeres embarazadas, los recién nacidos y los niños de hasta 4 semanas,
así como las personas con un sistema inmunológico debilitado, son más
propensos a experimentar complicaciones.

Si la piel que rodea a los granos y las ampollas se vuelve rojiza, sensible e
irritada, es posible que estén infectados. Algunas personas con varicela pueden
desarrollar neumonía.
Encefalitis: Se puede producir una inflamación en el cerebro. Entre 1 y
2/1.000 pacientes adultos con varicela presentan , que puede ser mortal.
Síndrome de Reye: una complicación de la infancia infrecuente pero grave,
puede aparecer entre 3 y 8 días después del establecimiento del exantema; la
aspirina aumenta el riesgo.

Son casos muy raros, pero se puede producir una enfermedad muy grave
cuando los niños y los adolescentes se están recuperando de una infección
viral, como la varicela. Provoca que el hígado y el cerebro se hinche.

La mayoría de los individuos que desarrollan complicaciones se recuperan por


completo.

Bibliografía

 https://www.msdmanuals.com/es-ec/professional/enfermedades-
infecciosas/virus-herpes/varicela
 Recommendations of the Advisory Committee on Immunization Practices
for Use of Herpes Zoster Vaccines
 https://www.medicalnewstoday.com/articles/323917#complicaciones

También podría gustarte