Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Objetivo
Preparación
1. 1.
2. 2.
Materiales necesarios:
1. a.
Una Biblia.
2. b.
La lámina 1–3, “Jesús el Cristo” (“Las bellas artes del Evangelio” 240; 62572).
3. 3.
Haga los preparativos para las Actividades Complementarias que desee llevar a cabo.
Actividades de aprendizaje
Pregunte a los niños mientras se señala usted mismo: “¿Quién soy yo?” Posiblemente le digan su
nombre o contesten diciendo que es el maestro (la maestra). Dígales que, además de lo que ellos
hayan mencionado, usted es su amigo[a], y que ellos también son amigos suyos. Explíqueles que
los amigos son personas que se agradan el uno al otro.
Forme un círculo con los alumnos. Uno por uno, vaya mirándolos y diciendo: “(Nombre del niño)
es mi amigo (amiga)”. Después, haga que ellos se turnen haciendo lo mismo; asegúrese de que
cada niño nombre a todos los demás.
Déles tiempo para que hablen de sus amiguitos. Destaque el hecho de que podemos tener amigos
de todas las edades y que entre los miembros de la familia quizás estén nuestros mejores amigos.
Haga hincapié en el hecho de que todos los niños de la clase son amigos.
Muéstreles la lámina 1–3, “Jesús el Cristo” y explíqueles que esa persona es el mejor amigo de
todos los niños de la clase.
Canción
Cante o repita la letra de la canción “Fiel amigo es Jesús” (Canciones para los niños, pág. 37).
manda Su solaz.
Relato
Cuénteles la historia que se encuentra en Juan 11:1–7, 17–44, de cuando Jesús levantó a Lázaro de
los muertos. Explíqueles que Lázaro y sus hermanas eran amigos de Jesús y que cuando Él estaba
en Betania, se quedaba en su casa y comía con ellos.
Explíqueles que cuando somos buenos amigos, ayudamos a los demás a hacer lo bueno; nos
interesa el bienestar de nuestros amigos y queremos que sean felices. Hable con los alumnos
sobre la importancia de tratar a los demás de la misma manera en que nos gustaría que nos
trataran a nosotros. Pídales que piensen en cómo podrían demostrar que son buenos amigos en
situaciones como las siguientes:
• Están jugando con un amigo y viene otro niño que quiere jugar con ustedes.
• Un niño nuevo llega por primera vez a la clase y está asustado porque no conoce a nadie.
• Un niño está muy triste porque otros se han burlado de él o lo han fastidiado.
Canción
Cante o repita la letra de la canción “La bondad por mí empieza” (Canciones para los niños, pág.
83).
• ¿Cómo creen que se sienten sus amigos cuando ustedes son buenos con ellos?
Hágales comprender que si desean tener amigos, ellos mismos deben ser buenos amigos.
• Si están jugando con (mencione un juguete u objeto determinado) y se acerca un amigo que
quiere jugar con ustedes, ¿qué tienen que hacer?
Explíqueles que si dejamos a otra persona jugar con nosotros, o si damos parte de lo que tenemos
a alguien, a eso se llama “compartir”; a veces, cuando lo que tenemos no se puede dividir, nos
turnamos para tenerlo. Eso también es compartir.
• Si ven que un amigo tiene hambre y ustedes tienen algo de comer, ¿qué deben hacer?
Relato
Muéstreles la Biblia y cuénteles la historia que se encuentra en Juan 6:1–13, de cuando Jesús dio
de comer a las cinco mil personas. Destaque el hecho de que por haber estado un muchachito
dispuesto a compartir la comida que tenía, Jesús empleó Su poder para que lo que había alcanzara
para dar de comer a toda la gente.
Hágales recordar el relato que les contó en la lección anterior (lección 32), sobre Elías y la viuda de
Sarepta, y el hecho de que la viuda recibió bendiciones por haber compartido el alimento que
tenía, a pesar de que era muy poco.
Hágales ponerse de pie y cantar la canción “Qué divertido es” (Canciones para los niños, pág. 129);
emplee la frase “Qué divertido es compartir (juguetes, libro, o cualquier cosa que los niños
indiquen)”. Hágales hacer los movimientos correspondientes a lo que digan.
Dígales que los amigos se ayudan los unos a los otros; pídales que ayuden a juntar juguetes y libros
o a poner en orden lo que sea necesario en la sala de clase.
Testimonio
Exprese su testimonio de la importancia que tiene ser buen amigo. Si lo desea, cuénteles alguna
experiencia edificante que haya tenido con un amigo. Recuérdeles que nuestro Padre Celestial y
Jesús son nuestros amigos y que nos aman. Exhórtelos a ser buenos con sus amigos durante la
próxima semana.
Actividades complementarias
Elija algunas de las siguientes actividades para llevar a cabo durante la lección.
1. 1.
Cante o repita la letra de la canción “Ama a todos, dijo el Señor” (Canciones para los niños, pág.
39) y “El arroyito da” (Canciones para los niños, pág. 116).
2. 2.
Cante o repita la letra de la canción “Somos diferentes” (Liahona, agosto de 1992, pág. 11). Ayude
a los niños a entender que debemos ser amigos de los que parecen ser diferentes de nosotros, tal
como de los que son como nosotros.
3. 3.
Pida a los niños que se pongan de pie y diríjalos para que hagan los movimientos correspondientes
al siguiente verso. Puede repetirlo, diciendo “amiga” en lugar de “amigo” (y cambiando a
“querida”, “la veo”, etc.).
Tengo un amigo
Tengo un amigo querido (ponerse las manos en los hombros, como abrazándose);
todos los días lo veo.
Con las muñecas jugamos (simular que se mece una muñeca entre los brazos);
y los dos nos columpiamos (con las manos a los lados, como sosteniéndose del columpio, mecerse
hacia adelante y hacia atrás).
pues somos buenos amigos (cruzar los brazos y asentir con la cabeza).
4. 4.
Lleve a la clase algunos dulces (caramelos), galletas o una fruta, suficiente para que alcance para
dar a todos una porción (hable primero con los padres para saber si alguno de los niños es alérgico
a algún alimento). Coloque lo que lleve a la vista de la clase y comente sobre el aspecto sabroso
que tiene; pregúnteles si les gustaría que usted compartiera con ellos lo que ha llevado. Luego,
pregúnteles qué pensarían y sentirían si usted lo compartiera sólo con unos y con otros no. Hable
de lo que sienten las personas cuando alguien no las incluye o no comparte con ellas algo bueno
que tenga. A continuación, invítelos a compartir lo que haya llevado.
5. 5.
Prepare hojas de papel, una para cada niño, escribiendo en la parte superior de cada una Me gusta
compartir con mi amigo o amiga, según la cantidad de niñas y varones que tenga en su clase.
Entréguelas a los niños y dígales que dibujen un retrato de sí mismos compartiendo algo con un
amigo.
6. 6.
Cuénteles, con sus propias palabras y con términos sencillos, el siguiente relato tomado de la vida
real:
Cuando los pioneros fueron a vivir al estado de Utah, la mayoría de ellos eran muy pobres, pues
habían gastado todo lo que tenían en comprar cosas que iban a necesitar en el largo viaje y las
herramientas que tenían que usar para construir las casas y plantar huertos y sembrados. Por la
escasez de dinero que había, muchos de los niños tenían sólo un par de zapatos que usaban los
domingos para ir a la Iglesia; el resto de la semana andaban descalzos.
Una niña pionera llamada Melinda tenía un par de zapatos pesados y feos, con un refuerzo de
cobre en la punta, que había usado durante todo el invierno. En el verano, sus padres le
compraron un par de zapatos nuevos y cómodos, muy bonitos, que ella iba a usar para un desfile.
Amanda, otra niña pionera que era la mejor amiga de Melinda, no tenía zapatos, ni siquiera viejos
y feos. Sintiendo mucha lástima de ella, Melinda le pidió permiso a la mamá para prestarle a su
amiguita uno de sus pares para el desfile. La mamá le dijo que sí, pero cuando ella fue a buscar los
zapatos viejos y pesados, con las puntas de cobre, hizo este comentario: “Si quieres compartir
algo, debes prestar lo que a ti misma te gustaría recibir”.
Melinda pensó mucho rato sobre esas palabras; pensó en lo que haría Jesús en esa situación;
pensó en cuál sería el par de zapatos que ella querría usar; y al fin, se decidió. Buscó los zapatos
nuevos y se los prestó a su amiga, mientras que ella usó para el desfile los zapatos viejos y feos
con puntas de cobre, pero se sintió muy feliz porque sabía que había compartido algo en la forma
en que Jesús quería que lo hiciera.
1. 1.
Ponga varios juguetes para que los niños jueguen con ellos. Hábleles de la importancia de decir
“por favor”, cuando se pide algo, y “gracias” cuando se recibe. Exhórtelos a compartir los juguetes
y a ayudarse mutuamente a guardarlos una vez que hayan dejado de jugar.
2. 2.
Mientras usted repite las palabras del verso siguiente, dirija a los niños para que hagan los
movimientos. Repítalo, si los niños lo desean.
Días felices
dos manos para ayudar a otros (levantar las manos y moverlas de un lado a otro);
dos oídos con los que puedo oír (poner las manos ahuecadas junto a las orejas).
3. 3.
Cante o repita la letra de la canción “Mis manitas” (Canciones para los niños, pág. 126).