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Marzo 2018

Aunque las cifras hablan por sí solas, no podemos olvidar que hablamos de
personas y no de números: 17 millones de niños padecen desnutrición grave en el
mundo según los datos de ACNUR. África es el continente con más países en
alerta por hambruna, y el 45% de las muertes de los niños antes de los cinco años
se producen por desnutrición. Como consecuencia de lo anterior, queremos que
conozcas los tipos de desnutrición infantil que existen y cuáles son sus síntomas.

¿Qué es la desnutrición?

En alguna ocasión te habrás pregunta qué es la desnutrición. De acuerdo con


los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la desnutrición es un tipo
de la llamada malnutrición. La desnutrición tiene numerosas consecuencias
adversas:

 El retraso en el crecimiento: la estatura es inferior a la que corresponde según la


edad del niño o de la persona que sufre desnutrición.
 La emaciación: el peso es inferior al que corresponde según la edad.
 La carencia o insuficiencia de micronutrientes como las vitaminas y los minerales.

En el mundo hay muchas familias que no tienen la capacidad de adquirir alimentos


como frutas, verduras, carne o leche y, por lo tanto, la alimentación de los niños no
es sana ni equilibrada.

Tipos de desnutrición

No todos los niños sufren el mismo tipo de desnutrición, puesto que existen
diversos niveles o tipos, que son los siguientes:

 Marasmo. Suele aparecer en niños que viven situaciones de pobreza en zonas


urbanas. Se trata de un tipo de desnutrición que se produce por el bajo consumo
de alimentos. Este tipo de desnutrición produce retrasos en el crecimiento, pérdida
del tejido graso o poco peso para la talla del niño.
 Proteica. Se trata de casos en los que el niño se alimenta fundamentalmente de
hidratos de carbono, pero no come proteínas. Los niños suelen tener infecciones
como consecuencia de la desnutrición.

Además, se pueden distinguir tres grados de desnutrición:


 Grado 1 o leve. Se produce cuando el peso es normal para la edad, pero es bajo
para la talla.
 Grado 2 o moderada. Se da cuando el niño menor de un año no llega al peso que
corresponde a esa edad o cuando los niños de uno a cuatro años tienen poco
peso en relación con su talla.
 Grado 3 o grave. Aparece cuando un niño de menos de un año tiene un peso
inferior al 40% respecto al que corresponde a su edad o cuando un niño mayor de
un año tiene un peso inferior al 30% en relación con el que le corresponde.
¿Qué efectos produce la desnutrición?

Para evitar la desnutrición, es necesario realizar inspecciones médicas periódicas.


Por otra parte, con herramientas tan sencillas como la cinta MUAC se puede
saber si un niño está desnutrido midiéndole el perímetro del brazo. Si está
por debajo de 130-134 milímetros, podría tener desnutrición moderada y si lo está
entre 104 y 108 milímetros, se trataría de desnutrición grave, teniendo en cuenta
siempre la edad.

Entre los efectos de la desnutrición podemos destacar los siguientes:

 Anemia;
 Bajada de las defensas;
 Trastornos en el aprendizaje;
 Pérdida de masa muscular.

Como ves, son efectos graves que pueden afectar a la vida de quien padece
desnutrición y más si se trata de un niño. 

https://www.google.com/url?sa=t&source=web&rct=j&url=https://eacnur.org/blog/tipos-
desnutricion-infantil-
tc_alt45664n_o_pstn_o_pst/&ved=2ahUKEwj0_tX_uaTpAhURVd8KHf98DKoQFjACegQIDRAM&usg
=AOvVaw0guqLxAiLjFUmetz2i9nr8

Datos y cifras
 En todas sus formas, la malnutrición abarca la desnutrición (emaciación,
retraso del crecimiento e insuficiencia ponderal), los desequilibrios de
vitaminas o minerales, el sobrepeso, la obesidad, y las enfermedades no
transmisibles relacionadas con la alimentación.
 1900 millones de adultos tienen sobrepeso o son obesos, mientras que 462
millones de personas tienen insuficiencia ponderal.
 52 millones de niños menores de 5 años presentan emaciación, 17 millones
padecen emaciación grave, y 155 millones sufren retraso del crecimiento,
mientras que 41 millones tienen sobrepeso o son obesos.
 Alrededor del 45% de las muertes de menores de 5 años tienen que ver con
la desnutrición. En su mayoría se registran en los países de ingresos bajos y
medianos. Al mismo tiempo, en esos países están aumentando las tasas de
sobrepeso y obesidad en la niñez.
 Las repercusiones en el desarrollo y las consecuencias de índole
económica, social y médica de la carga mundial de la malnutrición son
graves y duraderas, para las personas y sus familias, para las comunidades
y para los países.

Introducción
 

 la desnutrición, que incluye la emaciación (un peso insuficiente respecto de la


talla), el retraso del crecimiento (una talla insuficiente para la edad) y la
insuficiencia ponderal (un peso insuficiente para la edad);
 la malnutrición relacionada con los micronutrientes, que incluye las carencias de
micronutrientes (la falta de vitaminas o minerales importantes) o el exceso de
micronutrientes

Diversas formas de malnutrición


Desnutrición

Existen cuatro tipos principales de desnutrición: emaciación, retraso del


crecimiento, insuficiencia ponderal, y carencias de vitaminas y minerales. Por
causa de la desnutrición, los niños, en particular, son mucho más vulnerables ante
la enfermedad y la muerte.

La insuficiencia de peso respecto de la talla se denomina emaciación. Suele


indicar una pérdida de peso reciente y grave, debida a que la persona no ha
comido lo suficiente y/o a que tiene una enfermedad infecciosa, como la diarrea,
que le ha provocado la pérdida de peso. Un niño pequeño que presente una
emaciación moderada o grave tiene un riesgo más alto de morir, pero es posible
proporcionarle tratamiento.
La talla insuficiente respecto de la edad se denomina retraso del crecimiento. Es
consecuencia de una desnutrición crónica o recurrente, por regla general asociada
a unas condiciones socioeconómicas deficientes, una nutrición y una salud de la
madre deficientes, a la recurrencia de enfermedades y/o a una alimentación o
unos cuidados no apropiados para el lactante y el niño pequeño. El retraso del
crecimiento impide que los niños desarrollen plenamente su potencial físico y
cognitivo.

Los niños que pesan menos de lo que corresponde a su edad sufren insuficiencia
ponderal. Un niño con insuficiencia ponderal puede presentar a la vez retraso del
crecimiento y/o emaciación.

Malnutrición relacionada con los micronutrientes


Las ingestas inadecuadas de vitaminas y minerales (los denominados
micronutrientes) se pueden reunir en un mismo grupo. El organismo necesita
micronutrientes para producir enzimas, hormonas y otras sustancias esenciales
para un crecimiento y desarrollo adecuado.

El yodo, la vitamina A y el hierro son los más importantes en lo que se refiere a la


salud pública a escala mundial; sus carencias suponen una importante amenaza
para la salud y el desarrollo de las poblaciones de todo el mundo, en particular
para los niños y las embarazadas de los países de ingresos bajos.

Enfermedades no transmisibles relacionadas con la alimentación

Las enfermedades no transmisibles relacionadas con la alimentación abarcan las


enfermedades cardiovasculares (como el infarto de miocardio y los accidentes
cerebrovasculares, a menudo asociados a la hipertensión arterial) algunos
cánceres, y la diabetes. La mala alimentación y la mala nutrición se cuentan entre
los principales factores de riesgo de esas enfermedades a escala mundial.

Alcance del problema


Se calcula que en 2016, 155 millones de niños menores de 5 años presentaban
retraso del crecimiento, mientras que 41 millones tenían sobrepeso o eran obesos.
Alrededor del 45% de las muertes de menores de 5 años tienen que ver con la
desnutrición. En su mayoría se registran en los países de ingresos bajos y
medianos. Al mismo tiempo, en esos países están aumentando las tasas de
sobrepeso y obesidad en la niñez.

Población en riesgo
Todos los países del mundo están afectados por una o más formas de
malnutrición. Combatir todas las formas de malnutrición es uno de los mayores
problemas sanitarios a escala mundial.

Las mujeres, los lactantes, los niños y los adolescentes están particularmente
expuestos a la malnutrición. La optimización de la nutrición al comienzo de la vida
(en particular durante los 1000 días que transcurren entre la concepción y el
segundo aniversario del niño) asegura el mejor arranque posible de la vida, con
beneficios a largo plazo.

La pobreza multiplica el riesgo de sufrir malnutrición y sus consecuencias. Las


personas pobres tienen una mayor probabilidad de sufrir distintas formas de
malnutrición. Por su parte, la malnutrición aumenta los costos de la atención de
salud, reduce la productividad y frena el crecimiento económico, lo que puede
perpetuar el ciclo de pobreza y mala salud.

Decenio de las Naciones Unidas de Acción sobre la


Nutrición
El 1 de abril de 2016, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el
Decenio de las Naciones Unidas de Acción sobre la Nutrición 2016-2025. El
Decenio ofrece la oportunidad sin precedente de luchar contra todas las formas de
malnutrición.

El Decenio fija un calendario concreto de aplicación de los compromisos


formulados en la Segunda Conferencia Internacional sobre Nutrición de cumplir un
conjunto de metas mundiales relativas a la nutrición y las enfermedades no
transmisibles relacionadas con la alimentación fijadas para 2025, así como de
cumplir las metas pertinentes de la Agenda 2030 para el Desarrollo sostenible —
en particular el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 2 (poner fin al hambre,
lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura
sostenible) y el ODS 3 (garantizar una vida sana y promover el bienestar de todos
a todas las edades).

Encabezado por la OMS y la Organización de las Naciones Unidas para la


Alimentación y la Agricultura (FAO), el Decenio de las Naciones Unidas de Acción
sobre la Nutrición hace un llamamiento para que se adopten políticas en seis
esferas de acción:

 crear sistemas alimentarios sostenibles y resilientes en favor unas dietas


saludables;
 proporcionar protección social y educación nutricional para todos;
 armonizar los sistemas de salud y las necesidades de nutrición y proporcionar
cobertura universal de las medidas nutricionales esenciales;
 velar por que las políticas de comercio e inversión mejoren la nutrición;
 crear entornos seguros y propicios para la nutrición en todas las edades; y
 fortalecer y promover la gobernanza y la rendición de cuentas en materia de
nutrición en todos los lugares.

 Decenio de las Naciones Unidas de Acción sobre la Nutrición 2016-2025


Resolución WHA69.8
 FAO/OMS Segunda Conferencia Internacional sobre Nutrición (CIN2)

Respuesta de la OMS
La OMS aspira a que desaparezcan del mundo todas las formas de malnutrición, y
a que todas las poblaciones gocen de salud y bienestar. Según la estrategia de
nutrición 2016–2025, la OMS colabora con los Estados Miembros y los asociados
para lograr el acceso universal a intervenciones nutricionales eficaces y a dietas
saludables, con sistemas alimentarios sostenibles y resilientes.

La OMS utiliza su poder de convocatoria para definir, armonizar y promover las


prioridades y las políticas que favorecen el avance de la nutrición a escala
mundial; elabora orientaciones basadas en datos probatorios a partir de marcos
científicos y éticos robustos; respalda la adopción de orientaciones y la aplicación
de medidas nutricionales eficaces; y supervisa y evalúa la aplicación de las
políticas y los programas y los resultados en materia de nutrición.

Estas actividades se enmarcan en el Plan de aplicación integral sobre nutrición de


la madre, el lactante y el niño pequeño, adoptado por los Estados Miembros en
2012 mediante una resolución de la Asamblea Mundial de la Salud. Las medidas
encaminadas a poner fin a la malnutrición son también esenciales para cumplir las
metas relacionadas con la dieta del Plan de acción mundial para la prevención y el
control de las enfermedades no transmisibles 2013–2020, la Estrategia Mundial
para la Salud de la Mujer, el Niño y el Adolescente 2016–2030, y la Agenda 2030
para el Desarrollo Sostenible.

 Plan de aplicación integral sobre nutrición materna, del lactante y del niño pequeño

https://www.google.com/url?sa=t&source=web&rct=j&url=https://www.who.int/es/news-
room/fact-
sheets/detail/malnutrition&ved=2ahUKEwj0_tX_uaTpAhURVd8KHf98DKoQFjAEegQIAhAB&usg=A
OvVaw11fNG9IyYzbXj93BH2GmlV

Factores de riesgo

Un factor de riesgo es cualquier rasgo, característica o exposición de un individuo que aumente su


probabilidad de sufrir una enfermedad o lesión. Entre los factores de riesgo más importantes cabe citar la
insuficiencia ponderal, las prácticas sexuales de riesgo, la hipertensión, el consumo de tabaco y alcohol, el
agua insalubre, las deficiencias del saneamiento y la falta de higiene.

Medidas con doble finalidad para acabar con la


malnutrición en un decenio
19 de mayo de 2017

Hay muchas formas de malnutrición. En el caso de la desnutrición, por ejemplo,


los niños presentan una delgadez extrema en relación con su peso (emaciación), o
su crecimiento se ve frenado de manera permanente (retraso del crecimiento). La
ingesta inadecuada de nutrientes esenciales puede debilitar sus sistemas
inmunológicos, afectar negativamente a su desarrollo cerebral y agravar el riesgo
de que padezcan enfermedades como la anemia o la ceguera. Las dietas ricas en
calorías, muy por encima de las necesidades metabólicas del organismo,
aumentan la carga del sobrepeso y la obesidad, mientras que el consumo de
alimentos con exceso de grasas, azúcares y sal puede aumentar el riesgo de
padecer enfermedades no transmisibles (ENT). 

Según estimaciones mundiales recientes, el retraso del crecimiento en niños


menores de cinco años se redujo de 198 millones a 155 millones entre los años
2000 y 20161. Y, según el Informe Mundial sobre Nutrición2, las puntuaciones
obtenidas por los países indican que estos están en vías de alcanzar las metas
mundiales fijadas para 2025 con respecto al retraso del crecimiento y la
emaciación en menores de cinco años.

En lo que respecta a los hombres adultos, la prevalencia a nivel mundial,


normalizada por edades, del índice de masa corporal (IMC) bajo se redujo del
13,8% al 8,8% entre 1975 y 2014; en el caso de las mujeres, esas tasas eran del
14,6% y el 9,7%, respectivamente3. Con todo, los progresos en los esfuerzos
destinados a poner fin a todas las formas de malnutrición siguen siendo limitados
e insuficientes, y este sigue siendo un serio motivo de preocupación en la mayor
parte de las regiones y los países.

Cerca de 52 millones de niños siguen presentando un retraso del crecimiento, más


de dos tercios de los cuales viven en Asia1. En el grupo de países de ingresos
bajos actualmente hay más niños con retraso del crecimiento que en el año 2000 1.
Sudáfrica registra una alta prevalencia del IMC bajo entre la población adulta (el
23,4% de los hombres y el 24% de las mujeres en 2014), y estas tasas también
son elevadas en África central y oriental1. Las carencias de micronutrientes se han
mantenido en niveles persistentemente altos, y cerca de 264 millones de mujeres
en edad reproductiva padecen anemia ferropénica 4.

El resultado es que actualmente muchos países se enfrentan a la «doble carga de


la malnutrición», caracterizada por la coexistencia de la desnutrición y el
sobrepeso, la obesidad o las enfermedades no transmisibles 6. En 2016, 57 de
entre 129 países sobre los que se realizaron estudios registraban niveles
importantes de retraso del crecimiento o anemia junto con sobrepeso en la
población adulta (definidos como la prevalencia del retraso del crecimiento o de la
anemia3 en un 20% y del IMC elevado3 en un 35%2.

También hay conexiones biológicas entre las distintas formas de malnutrición; así,
por ejemplo, un niño con retraso del crecimiento tiene más probabilidades que un
niño de estatura normal de tener sobrepeso o padecer ENT al convertirse en
adulto. Además, las distintas formas de malnutrición pueden coexistir dentro de un
mismo hogar o incluso en un mismo individuo 6.

Si bien es cierto que esta doble carga de la malnutrición plantea un reto de salud
urgente a la comunidad mundial, a través de los factores comunes que presentan
las distintas formas de malnutrición surgen oportunidades de intervención nuevas
y eficaces. Esta es la posibilidad que ofrecen las medidas con doble finalidad, es
decir, las intervenciones, los programas y las políticas que tienen la capacidad de
reducir simultáneamente el riesgo o la carga de la desnutrición y del sobrepeso, la
obesidad o las ENT relacionadas con el régimen alimentario 7. Las medidas con
doble finalidad ofrecen un enfoque integrado para tratar la malnutrición. La OMS
propone tres ámbitos en los que se puede aumentar la eficiencia de las medidas
nutricionales mediante la adopción de un enfoque con doble finalidad 6.

En primer lugar, asegurándose de que las intervenciones, las políticas y los


programas actuales diseñados para tratar una forma de malnutrición no aumenten
por inadvertencia el riesgo de otras formas de malnutrición. Este enfoque de «no
perjudicar» surge porque, en el pasado, el sector agrícola se centró principalmente
en el problema de la desnutrición. Al realizar mayores inversiones públicas y
privadas para mejorar la productividad de una pequeña gama de alimentos
básicos, se prestó poca atención al impacto en los cultivos autóctonos, más ricos
en micronutrientes o, evidentemente, en el riesgo de consumir en exceso ciertos
tipos de alimentos inadecuados8.

La loable intención de esta revolución basada en la productividad de los cultivos


era garantizar la adecuación de los alimentos, pero podría haber causado,
involuntariamente, otros problemas de nutrición. En el futuro, será fundamental
asegurarse de que los programas actuales diseñados para tratar un tipo de
malnutrición no aumenten los riesgos a largo plazo que comportan otras formas de
malnutrición.
En segundo lugar, es necesario impulsar las medidas existentes diseñadas para
abordar un tipo de malnutrición a fin de reducir simultáneamente sus otras formas.
Sin este enfoque renovado, los responsables de la formulación de políticas
perderán la oportunidad de adoptar medidas más eficientes e integradas. A este
respecto, cabe mencionar la experiencia de América Latina donde, aunque con
diversas tendencias, globalmente el retraso del crecimiento se ha reducido de
manera significativa, pero ha ido acompañado de un rápido aumento de la
obesidad9. Las inversiones que contribuyeron eficazmente a la reducción del
retraso del crecimiento, como los programas de transferencias de efectivo, la
mejora del saneamiento, de la educación de la mujer y del acceso a la atención de
salud, no fueron impulsadas con la finalidad de fomentar y posibilitar una
alimentación saludable y nutritiva.

Así, por ejemplo, los programas de transferencias de efectivo se podrían haber


diseñado de manera que contribuyeran en mayor medida a la promoción de dietas
saludables a fin de reducir el riesgo de obesidad 10. Del mismo modo, se podrían haber
impulsado los programas de comedores escolares centrados en la reducción de la
inseguridad alimentaria para que incluyeran más conocimientos sobre nutrición 9 y
mantuvieran lejos de las escuelas las bebidas azucaradas y la comida rápida. En el
futuro, la integración de las medidas con objeto de tratar todas las formas de
malnutrición por medio de los programas existentes podría aportar un doble beneficio.

En tercer lugar, habría que determinar los factores comunes que intervienen en las
distintas formas de malnutrición con el fin de identificar de manera proactiva
nuevas medidas destinadas a reducir todas las formas de malnutrición. Aunque
muchos de estos factores son distintos—la diarrea, por ejemplo, es una causa de
desnutrición, pero no de obesidad—a un nivel más profundo se pueden identificar
los sistemas alimentarios y los entornos alimentarios conexos, determinadas
normas sociales profundamente arraigadas, la situación socioeconómica o los
aspectos biológicos como algunas causas comunes y, por lo tanto, como
oportunidades comunes para la adopción de medidas.

La nutrición es un determinante que está presente en muchos problemas de salud


y de desarrollo, y que puede servir de catalizador para el logro de objetivos y
metas clave a nivel mundial. En el contexto más amplio de la erradicación de la
malnutrición en todas sus formas, la intersección de diferentes formas de
malnutrición aparentemente opuestas y muchas veces confusas ofrece un punto
crítico para la adopción de un enfoque renovado, así como para nuevas
intervenciones de política y programáticas. Como se señalaba en dos nuevas
reseñas de políticas publicadas por la OMS esta semana 6,7, abordar la doble carga
de la malnutrición mediante la adopción de medidas con doble finalidad será de
fundamental importancia para lograr tanto las ambiciones del Decenio de las
Naciones Unidas de Acción sobre la Nutrición como los Objetivos de Desarrollo
Sostenible.

http://www.who.int/entity/mediacentre/commentaries/actions-ending-
malnutrition/es/index.html

Qué es la malnutrición?
Preguntas y respuestas en línea
Julio de 2016
Por malnutrición se entienden las carencias, los excesos o los desequilibrios de la ingesta
de energía y/o nutrientes de una persona.

El término malnutrición abarca dos grupos amplios de afecciones. Uno es la «desnutrición» —que comprende
el retraso del crecimiento (estatura inferior a la que corresponde a la edad), la emaciación (peso inferior al que
corresponde a la estatura), la insuficiencia ponderal (peso inferior al que corresponde a la edad) y las
carencias o insuficiencias de micronutrientes (falta de vitaminas y minerales importantes). El otro es el del
sobrepeso, la obesidad y las enfermedades no transmisibles relacionadas con el régimen alimentario
(cardiopatías, accidentes cerebrovasculares, diabetes y cánceres).
¿Qué consecuencias tiene la malnutrición?
La malnutrición afecta a personas de todos los países. Alrededor de 1900 millones de adultos tienen
sobrepeso, mientras que 462 tienen insuficiencia ponderal. Se calcula que 41 millones de niños menores de 5
años tienen sobrepeso o son obesos, 159 millones tienen retraso del crecimiento, y 50 millones presentan
emaciación. A esa carga hay que sumar los 528 millones de mujeres (29%) en edad reproductiva que sufren
anemia, la mitad de las cuales podría tratase con suplementos de hierro.
Muchas familias no tienen recursos para adquirir suficientes alimentos nutritivos, como frutas y verduras
frescas, legumbres, carne o leche, o no tienen acceso a ellos, mientras que los alimentos ricos en grasas,
azúcar y sal son más baratos y se pueden adquirir más fácilmente, lo que propicia el rápido aumento del sobre
peso y la obesidad entre los niños y adultos, tanto en los países pobres como en los ricos.
Es bastante frecuente encontrar personas desnutridas y con sobrepeso en la misma comunidad o el mismo
domicilio, o que una misma persona tenga sobrepeso y a la vez presente, por ejemplo, carencias de
micronutrientes.
¿Qué se está haciendo para combatir la malnutrición?
En abril de 2016, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó una resolución en la que se proclamaba
el Decenio de Acción de las Naciones Unidas sobre la Nutrición de 2016 a 2025. El Decenio tiene el objetivo
de catalizar los compromisos políticos que desembocan en actuaciones mensurables contra todas las formas
de malnutrición. La finalidad es que todas las poblaciones tengan acceso a dietas más sanas y sostenibles para
erradicar todas las formas de malnutrición en el mundo entero.https://www.google.com/url?
sa=t&source=web&rct=j&url=https://www.who.int/features/qa/malnutrition/es/&ved=2ah
UKEwiF3Pu0wKTpAhWRTN8KHZTMBBgQFjADegQIAxAP&usg=AOvVaw3DKUVk
Z7h9inspCfw1x3-r

Una publicación de UNICEF de 2006, expresa que todos los años nacen
en el mundo más de 20 millones de niños y niñas con un peso inferior a
los 5.5 libras, lo que equivale al 17% de todos los nacimientos del
mundo en  desarrollo, es decir una tasa que duplica el nivel de los
países industrializados que es de  7%.

Según el “Estado Mundial de la Infancia 2007” de UNICEF , uno de cada


cuatro niños y niñas -alrededor de 146 millones-  que representa el 27%
de la población de menores de cinco años,  tienen peso inferior al
normal.  Para los niños y niñas cuya situación alimentaria es deficiente,
enfermedades comunes de la infancia como la diarrea y las infecciones
respiratorias pueden ser fatales.

De estos 146 millones, 78 viven en Asia Meridional, 22 en Asia Oriental


y el Pacífico, 17 en Africa Occidental y Central, 16 en Africa Oriental y
Meridional, 8 en Oriente Medio y Africa del Norte, y en América Latina y
el Caribe, 4 millones.

https://www.google.com/url?
sa=t&source=web&rct=j&url=https://www.unicef.org/republicadominicana/health_childhood_10
172.htm&ved=2ahUKEwiF3Pu0wKTpAhWRTN8KHZTMBBgQFjALegQIBBAB&usg=AOvVaw3uec5jN
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Introducción

La desnutrición es una alteración sistémica, potencialmente reversible, con diversos


grados de intensidad, que se origina como resultado del desequilibrio entre la ingesta y
los requerimientos1,2.

En la desnutrición, se reconocen distintos factores de riesgo y su alta prevalencia en


una comunidad determinada, está íntimamente ligada al subdesarrollo económico, a la
injusticia social y al analfabetismo1-6. Los estudios prospectivos de los factores de
riesgo de crecimiento infantil de países de bajos ingresos son relativamente escasos,
pero vitales para guiar los esfuerzos de intervención2,6. En niños menores de cinco
años se han señalado diversos factores de riesgo nutricional relacionados con el
individuo, los padres, el medio familiar y el ambiente en general6-10. Ante estos hechos
es necesario explorar acerca de los factores de riesgo ligados a la desnutrición grave
en niños menores de cinco años para poder crear programas que superen estos
problemas y lograr disminuir el número de pacientes con desnutrición grave.

Es por tal motivo que el presente estudio tuvo como principal objetivo identificar los
factores de riesgo asociados a la desnutrición grave en niños menores de 5 años
internados en tres centros hospitalarios de referencia de manejo del paciente
desnutrido en Bolivia.

 
Material y métodos

El estudio fue conducido entre agosto a diciembre de 2011 en 3 unidades de referencia


de manejo del paciente desnutrido en Bolivia. Correspondiendo a los siguientes
centros: Hospital del Niño "Dr. Ovidio Aliga Uría" de la ciudad de La Paz, Hospital de
Niños "Mario Ortiz Suárez" de la ciudad de Santa Cruz y Servicio de Pediatría del
Hospital General "San Juan de Dios" de la ciudad de Oruro; fueron incluidos 144
pacientes de 2 meses a menores de 5 años internados en las unidades de referencia de
manejo de paciente desnutrido agudo grave. Se definió como caso a todos los niños de

 
2 meses a menor de 5 años, con el diagnóstico de desnutrición aguda grave que
estuvieron internados en los centros de referencia de manejo del desnutrido grave y
como controles a pacientes eutróficos internados en los mismos centros hospitalarios
pero que ingresaron por otras enfermedades. Se tomaron dos controles por cada caso.
En todos los sujetos de estudio se aplicó un instrumento pre codificado en el cual se
realizaron las siguientes mediciones: edad del niño, peso y longitud/talla, tablas de
peso para la talla según la OMS para clasificación, factores de riegos inherentes al
paciente, al entorno familiar y al ambiente en general.

Una vez recolectados los datos en el instrumento pre-codificado, fueron analizados en


la base de datos del SPSS y el Epi-Info. La validación del ingreso de datos se realizó
mediante doble entrada que permitirá la corrección de los errores de ingreso y/o
registro.

Con la descripción de los datos a través del uso de la estadística descriptiva, donde en
un análisis uni-variado se examinó al paciente con diagnostico de desnutrición y los
diferentes tipos de desnutrición con las diferentes variables tomadas en cuenta en el
instrumento de trabajo para posteriormente relacionar estas con las variables de los
controles buscando asociación a través de los Odds ratios (OR) con intervalos de
confianza del 95% (IC95).

 
Resultados

Durante el período de estudio comprendido entre el 1 de Agosto y el 30 de Diciembre


de 2011 se enrolaron en el estudio 48 casos y 96 controles, de los cuales el 54,2% (26
casos) fueron en la ciudad de Santa Cruz, 27,1% en La Paz y 18,8% en Oruro.

En cuanto a los casos el 54,16% correspondían al sexo masculino, el 50%


correspondía al grupo de edad de 12 meses a 23 meses.

Tomando en cuenta a todos los casos (La Paz, Oruro, Santa Cruz) la desnutrición
emaciada predominó con un 62,5% (30 casos), seguido del edematoso con 20,8% y el
mixto 16,7%, ver cuadro # 1.

En cuanto al tipo de desnutrición, la desnutrición de tipo emaciado es predominante en


una relación de 2 a 1 contra los otros tipos de desnutrición (edematosa y mixta) no
existiendo diferencias entre el oriente y occidente, existe un mayor porcentaje de
desnutrición mixta en el oriente 26,9% comparada contra 4,5% en el occidente.
Ver cuadro # 2.
Cuando realizamos el análisis bivariado encontramos lo siguiente:

Factores de riesgo inherentes al paciente:

Respecto a la edad del paciente, los niños de 12 meses a 23 meses tienen una
probabilidad de 5,73 veces más de padecer desnutrición grave comparada con los
otros grupos de edad, con un OR de 6,73 (IC 1,93 a 25,79).

En caso de niño el peso bajo al nacimiento (menor a 2500 gramos) el riesgo de


desnutrición es de 1,53 más veces en relación a los niños que tuvieron un peso
adecuado al nacimiento (mayor de 2500 gramos), con un OR de 2,53 (IC 95% 0,87 -
7,45) por lo cual esta variable incrementa el riesgo, pero en nuestro estudio no se
logro demostrar con intervalo de confianza de 95%, porque el intervalo incluye el 1,
ver cuadro #3.
Factores de riesgo relacionados a la madre:

Cuando se analizaron las factores relacionados a la madre de los pacientes desnutridos


graves, se encontró que la edad de la madre, menor de 18 años incrementa el riesgo
en 2,95 veces más de que un niño desarrolle desnutrición grave que cuando este
factor no se encuentra presente, OR de 3,95 (IC: 0,27 - 113,69), pero no se logró un
intervalo de confianza del 95% por que el intervalo incluye el 1. Cuando las madres
tiene un nivel académico inadecuado como haber cursado solo la primaria, el riesgo de
desnutrición grave en sus hijos es 1,06 veces más, OR de 2,06 (0,90 - 4,73). Las
madres que tienen un trabajo, cualquiera que fuere este, se asocia a 1,21 veces más
riesgo de que sus hijos desarrollen desnutrición OR de 2,21 (1 - 4,89). En el caso que
la madre que trabaja y deje al paciente al cuidado de otras personas el riesgo de
desnutrición en su hijo es de 1,05 veces más en relación a las madres que no trabajan
y no dejan a sus hijos al cuidado de otros OR 2,05 (0,78 - 5.35).

Factores de riesgo socio - ambientales:

Cuando el núcleo familiar se analizó se encontró que el antecedente que el paciente


tenga hermanos menores de 5 años además de él, incrementa el riesgo en 1,6 veces
más para desnutrición comparada con los pacientes que no tenían hermanos menores
de 5 años OR 2,60 (IC 95% 1.20 - 5,66) p=0.0078. En relación al inicio de la
alimentación complementaria, se encontró que todos aquellos pacientes que no
iniciaron alimentación complementaria cuando fueron diagnosticados y tenían más de 6
meses presentaron 24,67 veces más riesgo de desarrollar desnutrición grave en
relación a los niños que iniciaban de forma adecuada y a la edad indicada la
alimentación complementaria OR 25,67 (IC 3,06 - 566,32). Encontramos que los niños
alimentados de forma inadecuada tienen más riesgo de llegar a desnutrición aguda
grave en relación a los niños que tienen una alimentación adecuada para su edad, OR
de 4,85 (IC 1,85 - 18,62). El hecho de vivir en área rural se asocia significativamente
a desnutrición grave versus el área urbana OR4,53 (IC 95% 1.60-13.12) p= 0.0010.
La falta de accesibilidad al agua potable comparado con los pacientes que tenían agua
potable en el domicilio se asoció a 3.6 veces más probabilidad de desnutrición grave
OR 4.6 (IC 95% 1.16-19.46) p=0.010.

El porcentaje de pacientes del área rural en La Paz es mayor que los pacientes
encontrados en área rural en Santa Cruz. El antecedente de procedencia del área rural
aumenta el riesgo de desnutrición grave en 6,6 veces en la región occidental (Oruro y
La Paz), no encontrando diferencia significativa en el riesgo para desnutrición grave
entre el área urbana y rural en la región oriental (Santa Cruz).

 
https://www.google.com/url?sa=t&source=web&rct=j&url=http://www.scielo.org.bo/scielo.php
%3Fscript%3Dsci_arttext%26pid%3DS1024-
06752012000200002&ved=2ahUKEwibk5SsxaTpAhURVN8KHdgbDqoQFjADegQIBBAB&usg=AOvVa
w1_y45e_qpBTllGBwKd18_A

Malnutrición emaciación
La malnutrición moderada se define como un peso para la edad entre 2 y 3 puntuaciones zeta por debajo de la
mediana de los patrones de crecimiento infantil de la OMS. Puede deberse a un peso bajo para la talla
(emaciación) o a un peso bajo para la edad (retraso del crecimiento) o a una combinación de ambos. La
emaciación y el retraso del crecimiento moderados se definen igualmente como un peso para la talla o un peso
para la edad entre -2 y -3 puntuaciones zeta.
https://www.google.com/url?
sa=t&source=web&rct=j&url=https://www.who.int/nutrition/topics/moderate_malnutrition/es/&
ved=2ahUKEwi_gN6LyaTpAhXtYt8KHbB4DU8QFjAAegQIARAC&usg=AOvVaw3b_GtNx2xp9xSSJyiAO
Lq5

Kwashiorkor (malnutrición edematosa)


Es una forma de desnutrición que ocurre cuando no hay suficiente proteína en la dieta.
Causas
El kwashiorkor es más común en áreas donde hay:

 Hambre

 Suministro limitado de alimentos

 Bajos niveles de educación (cuando las personas no comprenden cómo consumir una dieta
apropiada)

Esta enfermedad en más frecuente en países muy pobres y, a menudo, ocurre durante una
sequía u otro desastre natural o durante épocas de inestabilidad política. Estas situaciones
son responsables de la falta de alimento, lo cual lleva a que se presente desnutrición.

El kwashiorkor es raro en los niños en los Estados Unidos y sólo se presentan casos aislados.
Sin embargo, un cálculo gubernamental sugiere que hasta el 50% de los adultos mayores en
los asilos de ancianos en los Estados Unidos no reciben la proteína suficiente en su dieta.

Cuando el kwashiorkor sí se presenta en los Estados Unidos, con frecuencia es un signo


de maltrato infantil y descuido grave.

https://www.google.com/url?
sa=t&source=web&rct=j&url=https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/001604.htm&ved=2ah
UKEwjC_5XPyaTpAhWihOAKHeZdAYwQFjAHegQIARAB&usg=AOvVaw23DsFE8AtWE0qZMrKCsz5a

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