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INICIARSE EN LA RESPIRACIÓN PARA RUNNERS PARA GANAR

ENERGIA, TENER BUENA SALUD Y MENOS ESTRES

Hoy haremos un primer acercamiento a la una técnica de Respiración


para Runners. Es una “receta” muy simple y te la detallo a
continuación. Te prometo que, si la entrenas, tendrás muy buenos
resultados a corto plazo y en este tiempo de “cuarentena” es ideal
para practicarlo y aprenderlo rápidamente.
En primer momento, busquemos en nuestra casa un lugar cómodo y
tranquilo, en el que no haya interrupciones y que sea silencioso, que
nos permita entrar en un estado de estado de relajación. Dejemos el
celular en otra habitación o lo ponemos por un rato en modo avión,
nos ponemos cómodos nos recostamos en el piso, en la cama o un
sillón.
Es muy recomendable practicar esta técnica de respiración con el
estómago liviano y preferentemente al iniciar un nuevo día, si bien
esto último no es excluyente. Se puede realizar en cualquier momento
del día, aunque es mejor alejado de las comidas.
Ponemos la atención a nuestra respiración, principalmente estando
atento en un punto de nuestro cuerpo, como puede ser por ejemplo, la
nariz, la entrada de aire por nuestra nariz, el estómago, el tórax, los
pulmones, etc. Que sea un acto simple y que te permita concentrar
toda tu atención, haciendo consciente la respiración, tomamos el
control inspirando profundamente, haciendo una respiración
diafragmática como si fuéramos un bebé (la panza debe extenderse
hacia adelante), llevando el aire al estómago, inflando y expandiendo
bien el tórax y luego dejando escapar el aire de manera natural, sin
forzar. Las inhalaciones profundas debemos hacerlas por nariz.
Lo importante es lograr relajar todo el cuerpo, “salir” de la mente y
entrar en el comando de la respiración, con disciplina, inhalando
siempre bien profundo. El ritmo es el siguiente: contar hasta 4 en la
inspiración, hasta 7 de retención y hasta 8 para la exhalación.
Esta secuencia de inhalaciones profundas la repetimos
sistemáticamente, de manera continua y constante, con ritmo e
intentando en cada bocanada tomar el máximo de aire. Luego de 30
inspiraciones, retenciones y exhalaciones vamos a soltar todo el aire
en los pulmones, y entraremos en un estado de apnea, nos quedamos
sin aires y dejamos de respirar. Simplemente contemplo mi cuerpo y
dejo que el oxígeno que está en la sangre y en las células se consuma
al detener la respiración. Llegado el punto en que el oxígeno se
consume sentiremos el impulso natural del cuerpo de volver a respirar
y en esta instancia nuevamente inhalamos profundamente y
retenemos el aire en los pulmones por 10 segundos. Esta última
secuencia, de respirar profundamente, la repetimos 4 veces, dejando
una breve pausa entre ciclos para tragar y retomar el control sobre la
respiración.
Síntesis muy simple del ejercicio completo:

 30 inhalaciones profundas, con la técnica de respiración


diafragmática: 4-7-8.
 Apnea, sin aire en los pulmones, hasta llegar al máximo de
tiempo posible, al principio casi se llega al minuto, aunque no lo
creamos, y con entrenamiento hasta 2 minutos y hay personas que
más tiempo.
 Inhalación profunda y retención con aire en los pulmones por 10
segundos. Este último paso repetir de 4 veces para llegar a mayor
profundidad

Luego de esta serie habremos logrado alcalinizar nuestra sangre,


habremos incorporado más oxígeno al cuerpo que en todo un día de
respiración normal, generaremos mayores niveles de adrenalina y
habremos llenado nuestro cuerpo de energía como para comenzar un
día con todo vigor.
Una respiración completa, larga y profunda alcalinizará la sangre,
dado que mejora el pH, dándonos más energía, vitalidad y resistencia
a nuestro cuerpo. Una respiración superficial y corta la acidificará. La
alcalinización de la sangre viene dada por la cantidad de oxígeno que
hay en sangre.
El estado normal de nuestro cuerpo sano es el que las células tienen
un metabolismo oxidativo óptimo (alimentos y oxigeno). Los nutrientes
y el oxígeno se utilizan para generar energía, logrando un mejor
funcionamiento del organismo.
Te propongo hacer este ejercicio todos los días y seguramente
percibirás un cambio fundamental en tu rendimiento físico y mental.

Lic. Marcelo Palavecino (Psicólogo – MBA)

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