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LOVING CARE: CUANDO SE SIENTE CARIÑO POR LAS MÁQUINAS

Un nuevo concepto se ha establecido entre los Ingenieros de Mantenimiento. Se trata


del LOVING CARE, que es el “cuidado amoroso” que se presta a las maquinas en su
vida diaria en las plantas industriales. Entonces, si las má quinas hablaran,¿ Se
quejarían con el encargado del mantenimiento que les molesta? Por variadas razones,
muchos profesionales no pueden soportar ver a su preciosa má quina en mal estado, y
mucho menos que fallen. De esta forma, nace este concepto.

Escribir sobre Gestió n de Mantenimiento es siempre una aventura. Existe mucha


literatura desde la má s variada en el mercado con posiciones desde el Mantenimiento
Correctivo y Mantenimiento Preventivo natural de los equipos. Todoello hasta las
nuevas ideas como el RCM.
Hace poco dicte un taller bá sico del soporte de la energía eléctrica en las
telecomunicaciones  donde uno de los temas fue la Gestió n de Mantenimiento.

En esa oportunidad le comentaba a los chicos las experiencias en poco má s de 20 añ os


de dedicació n a la operació n y mantenimiento. Y no pocos cuestionaban el no cumplir
siempre lo que indica el fabricante en sus manuales de operació n y mantenimiento.
Ademá s de la posició n de los ingenieros de mantenimiento de preocuparnos por
nuestras má quinas y equipos al extremo de cuestionar toda idea o propuesta nueva.

LOVING CARE: CUIDADO AMOROSO DE LAS MÁQUINAS


Así que volví a releer un libro muy interesante del profesor Celzo Azevedo “Se as
má quinas falassem”. Y volví a recodar el tema del “LOVING CARE” que me pareció
interesante comentarlo en este artículo.

El profesor define “LOVING CARE” como el sentimiento que tiene el Ingeniero de


Mantenimiento de no soportar ver a su preciosa má quina degradarse. Y mucho menos
presentar fallas.

Ese sentimiento le hace limpiarla, pararla para revisar internamente, desmontarla,


cambiarle elementos, etc., Al punto de sentir la seguridad de que nunca cumplirá su
ciclo de vida.
En el libro, el Profesor Azevedo recuerda sus experiencias cuando era Gerente de
Mantenimiento en diferentes partes del mundo. Yo en mi humilde posició n y solo en el
á mbito nacional, recordaré un par de casos muy similares que viví. Y que espero les
sirva a quien tenga la voluntad de leer este artículo.

En mis primeros añ os en la operació n se me encargó poder estructurar la Gestió n de


Mantenimiento. De tal manera que el personal de la central hidroeléctrica en la que
laboraba pudo dividirse en dos y así tener mejores horarios. Esto para descansar fuera
del campamento, que se ubica a 10 horas aproximadamente de Lima.

Esto me exigió revisar no solo las frecuencias de mantenimiento, si no cada tarea que
se hacía. En este proceso encontramos una actividad: “limpieza de contactores de las
bombas del sistema de regulació n de velocidad”.
Al revisar el procedimiento y la tasa de fallas del sistema, confirmamos que no variaba
si se ejecutaba o no este mantenimiento, terminando finalmente con cambiar el
contacto.

Cuando se dejó de hacer el “LOVING CARE” de los ingenieros y técnicos se nos dijo que
la planta se afectaría por dejar de hacerlo. La actividad no se ha vuelto hacer, la central
sigue generando sin problemas, y el personal disfruta de su descanso de 9 días fuera
de la planta en compañ ía de sus familias.

En otro momento, ya en mi posició n actual en una empresa de Telecomunicaciones, se


nos encargó reducir el Opex (se lee mejor que “gasto”) de Mantenimiento. Para lo cual
se revisó los planes de mantenimiento, encontrá ndose que el mantenimiento de las
celdas de los Bancos de Baterías que atienden a las estaciones tenía una actividad de
“inspecció n y limpieza”. Siendo estas baterías libres de mantenimiento.

En este caso se acordó solo dejar la medició n de impedancia de baterías como


actividad importante para el control de las baterías con una frecuencia de 2 veces al
añ o.
La actividad se dejó de hacer y la fecha la tasa de fallas no se ha incrementado. Má s
aú n con la medició n de impedancia como ú nico control, el personal se ha centrado en
analizar los resultados y atender algú n problema inicial.

Como verá n en ambos casos la decisió n de revisar los planes de mantenimiento


empujados inicialmente por una mejora econó mica de la empresa, la cual muchas
veces es tomada como un obstá culo.

Y por otro en la mejora de las condiciones de trabajo para el personal, nos permitieron
entender que como Ingenieros de Mantenimiento necesitamos encontrar el límite
entre ser realmente responsables de nuestras funciones y nuestro natural “LOVING
CARE”.

Estas dos historias podrían ser entendidas como casos puntuales, pero la verdad es
que escribir de ellas podría tomarme má s de un solo artículo…como el profesor Celso
nos comentaba.

El tiempo nos hace darnos cuenta que la necesidad de cambiar nuestra forma de
pensar es siempre importante, toda vez que debemos cuestionarnos siempre y pensar
que todo obstá culo puede ser usado como oportunidad.

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