Lopez Núñez Alan Eduardo 21/11/19

Edgard Varèse

Lonisation (1931) pour 13 percussions dont 1 piano – Ensemble intercontemporain

Editions Ricordi

Dirección : Susanna Mälkki

L onisation es una obra que pertenece meramente a la familia de los instrumentos de

percusión en donde trece músicos tocan un total de 37 instrumentos (3 bloques chinos, 3
bombos aflojados, 2 bongos, 3 tam-tam de diferentes tamaños, 2 yunques, 2 sirenas ; lo más
curioso es que una de ellas imitando el sonido de las sirenas del Cuerpo de Bomberos , un gran
címbalo chino, un gong, cencerros, tambor redoblante, caja clara destimbrada, tambor militar,
tambor de cuerda, látigo, güiro, llaves, triángulo, maracas, sonajas, castañuelas, pandereta, platillo
suspendido, campanas tubulares , glockenspiel y piano. Los timbales, algunos que tienen una
altura determinada de sonido, los excluyen).

La pieza de Varèse parece querer demostrar la variedad y riqueza extraordinaria de timbres y

ritmos que es posible obtener de un conjunto instrumental semejante, en la introducción se
explota la sonoridad translúcida del metal sobre figuras rítmicas del bombo, presentando un
primer tema expuesto por el tambor militar. Luego se producen una serie de variaciones y
episodios en donde adquieren un alto protagonismo los bloques chinos.

El desarrollo va marcado por una serie de bruscas rupturas en donde todos los motivos se hallan
presentes. Tras un seco fortissimo, la escena musical cambia radicalmente y tan sólo se escuchan
sonoridades metálicas por encima de las cuales planean las sirenas, en La recapitulación progresa
hacia una majestuosa coda en donde los clusters del piano refuerzan el gong más grave mientras
que campanas y glockenspiel añaden un sentimiento de solemnidad. Verdadera obra maestra del
autor, Ionisation encontró un buen contaste y demostró que también los instrumentos de
percusión pueden transmitir, mezclando algo magnifico y lo “no tan común” para convertirse en
arte ,que es lo que llama la atención al integrar elementos que no son instrumentos como lo son
esos sonidos peculiares de sirenas.

Para concluir ,las emociones que me llevo a sentir esta obra en particular fue llevarme a deslices
entre simulación de desorden en alguna ciudad , caos o situaciones un poco bizarras e inesperadas
con mucho suspenso intermitente aunque gozando sus diferentes colores y matices de sonido con
el fino toque de sentimientos de tranquilidad y euforia , esto interpretando metafóricamente mi
sentir.

Luego descubres que la obra pasa jugando con ritmos y dinámicas que parecieran improvisadas
pero con coherencia, cuando menos lo esperas ya estás en un estado donde te sumerges en esta
pieza captando y poniendo atención a cada movimiento de los participantes y aunque no tiene un
sonido como al que estamos acostumbrados en que se comparten con instrumentos de otras
familias más melódicas que te dejan un deleite dulce, se degusta de diferente manera y única .
Esta obra de Varèse te envuelve demasiado y te deja un sabor de boca nunca antes
experimentado que es lo que la hace muy especial incluyendo la atrevida inclusión de sus
ingredientes poco comunes y con la actuación tan excepcional de la Directora Sussana que
disfrute mucho cuando marcaba los tiempos de los compases siendo también parte protagonista
puesto que le dio un sazón particular propio para deleitarnos y envolvernos con todo ese
dramatismo que interpreto a lo largo de esta impactante obra .