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Para el IPCC, la adaptación facilitada por los organismos públicos es una parte
importante de la respuesta de la sociedad al cambio climático. Según el artículo 4,
numerales 1 y 2 de la Convención Marco sobre Cambio Climático, todos los países
que han ratificado la Convención tienen el compromiso de formular, aplicar,
publicar y actualizar medidas para facilitar la adaptación adecuada al cambio
climático. En el caso 91 de los países desarrollados, éstos deberán ayudar a los
países en desarrollo particularmente vulnerables a que puedan financiar dichas
medidas95 . En este sentido, en El Salvador se están realizando algunos esfuerzos
para mitigar la emisión de gases de efecto invernadero y, a la vez, adaptarse a las
nuevas condiciones producidas por el cambio climático a través del Gobierno y
particularmente del ente responsable de coordinar la elaboración y seguimiento
de la política ambiental, el Ministerio de Medio ambiente y Recursos Naturales
(MARN), Las políticas en materia del clima se encuentran implícitas en algunas
leyes, reglamentos, decretos, ordenanzas, programas, proyectos y tratados
internacionales ratificados por El Salvador, como la Convención Marco sobre
Cambio Climático (CMCC), suscrita en Rio de Janeiro, Brasil, durante la cumbre de
la Tierra, ratificada en agosto de 1995. La convención tiene como objetivo la
estabilización de las concentraciones de GEI en la atmósfera a un nivel que impida
las interferencias antropogénicas peligrosas en el sistema climático. De acuerdo
con la Convención, los países deben desarrollar programas para reducir emisiones
de los GEI, y al mismo tiempo, tomar medidas para la adaptación a los posibles
impactos del cambio climático. Establece a su vez, compromisos para los países
desarrollados de proporcionar apoyo técnico y financiero a los países en vías de
desarrollo para ejecutar las acciones que les permitan adoptar modelos
económicos con baja intensidad de carbono, y políticas nacionales de desarrollo
que disminuyan la vulnerabilidad socioeconómica y ambiental, mejorando la
capacidad de adaptación de las poblaciones humanas ante los impactos de la
variabilidad y del cambio global climático global. En virtud de ello, El Salvador ha
desarrollado y participado en iniciativas tales como el Proyecto Regional de
Adaptación III Etapa, mediante el cual se llevo a cabo un proyecto en las
comunidades aledañas a la planicie costera central, en las cercanías de la cuenca
baja del río lempa.
Asimismo, en el año 2000, fueron creadas dentro del MARN las Unidades de
Cambio Climático y de Desarrollo Limpio, con el propósito de institucionalizar
dentro del quehacer gubernamental programas permanentes de adaptación
climática y de reducción de emisiones de GEI y de fortalecer la gestión
intersectorial e intergubernamental con el fin de contribuir al objetivo de la
Convención. En el 2001 fue creado el Servicio Nacional de Estudios Territoriales
(SNET) como una entidad adscrita al MARN, dentro del cual se encuentran los
Servicios Meteorológico, Hidrológico, Geológico y de Gestión de Riesgos. Dentro
de las responsabilidades de dicho Servicio se encuentran el monitoreo de los
parámetros hidrometeorológicos y vulcanológicos, los pronósticos del tiempo y
de la variabilidad climática.
Dado que los efectos benéficos de las medidas de adaptación podrían ser
anulados por las políticas de desarrollo vigentes, los gobiernos deberían de
evaluar los factores generadores de las vulnerabilidades de la desadaptación
climática y cambiarlas a favor de políticas que favorezcan y mejoren la
sustentabilidad integral de las sociedades.