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Sputnik ha actualizado su estupendo manual para pasar de Vinilo a MP3.

Una lectura
obligada para aquellos que tengan auténticos tesoros en este “antiguo” soporte y quieran
guardar una copia digital de los mismos. Excelente y extenso Manual.

Introducción.

Cuando apareció el estandard de compresión para cd, a los sibaritas de la buena música nos
resultó bastante molesta la gran diferencia del sonido obtenido con el nuevo suporte
respecto al sonido que nos ofrecian los cabezales de los antiguos tocadiscos, con sus agujas
de diamante, siempre dispuestos a captar cualquier frecuencia, deseada o no, que pudiera
salir del surco del vinilo. El estandard digital para cd requeria de una discriminación de
frecuencias suficiente como para poder guardar 80 minutos de sonido en el espacio físico
del cd. Aunque la digitalitzación nos ofrecia la supresión de frecuencias molestas, como los
zumbidos de fondo (hiss) características de las cintas de cassette, y los ruiditos de corriente
estática y deterioro del soporte (clicks&pops, rumble) característicos del vinilo, con todo el
paquete también desaparecian unas gamas de frecuencias que se consideraban
"imperceptibles para el oido humano" y que debian sacrificarse también para lograr alojar
esos 80 minutos de música. Pero la consideración no era del todo cierta: esas frecuencias,
aparentemente imperceptibles, son necesarias para dotar al sonido de un "cuerpo" que en
los vinilos permanecía intacto. Con el estandard cd, los timbres resultaban más pobres, y
esto se hacía patente muy especialmente en los bajos. Con la aparición del Minidisc, el
problema aún iba más lejos: Nuevamente se trataba de conseguir un mayor ahorro de
espacio, y nuevamente se conseguía mediante la supresión de más y más frecuencias,
siempre bajo la excusa de "que son imperceptibles para el oido humano". Ahora se trataba
de supresiones tan salvages como esta: "De dos frecuencias idénticas que se producen en un
mismo instante (muestra) se suprime aquella que tiene menos intensidad (dbs) sin que el
oido humano lo advierta". Así, pues, ¿Qué pasa con los armónicos? por ejemplo. ¿Qué son
los armónicos, sinó frecuencias idénticas que se sobreponen? Os imagináis que sucede, por
poner un ejemplo, si intentamos copiar un concierto de música coral a formato md? Los
timbres se empobrecen más y más, y al final nuestro oído se acostumbra a escuchar las
cosas de una manera "light", totalmente acorde con los tiempos que corren, de otro lado.

Copiando alegremente

El problema se agrava a medida que vamos haciendo conversiones entre formatos: Una
copia desde un soporte analógico a un md comporta, como hemos visto, una pérdida. Si
después pasamos aquel md a cd, se produce una nueva pérdida. Si a continuación, de aquel
cd realizamos más copias analógicas (por ejemplo una cinta de cassette, para escuchar en el
auto) al sonido, ya empobrecido, le añadimos frecuencias indeseadas (el clasico "zumbido"
de las cintas de cassette). El resultado final de un proceso de copias reiteradas puede ser
lamentable. Por norma general, podemos decir que cada vez que efectuamos una
conversión digital, a partir de un canal analógico, se produce una pérdida de frecuencias
necesarias y se añaden otras no deseadas, que después se reprocesan con la nueva
digitalitzación. Otro tema son las copias directas dentro de un entorno digital, sin cambios
de formato, mediante fibra óptica o por simple transferencia de datos: la copia resultante es
idéntica al original: clónica, ...y es el procedimiento más recomendable para copiar
originales, por supuesto.

El milagro del mp3

Con la aparición de los formatos de compresión mp3, la novedad ha sido que la compresión
no se fundamenta siempre en la supresión de frecuencias "aparentmente imperceptibles",
sinó en la forma de codificar los datos. La supresión se limita, básicamente, a aquellas
frecuencias del espectro que verdaderamente no existen, o sea que su valor efectivo es igual
a 0, y no aquellas que existen por debajo de 0 dbs, que son las que suprimían los estandards
cd y md. La compresión en mp3 aun responde a un modelo de discriminación
"psicoacústico", o sea basado en suprimir lo que el oido no percibe, pero el modelo en si ha
evolucionado bastante y ahora quizás se ajusta mejor a un sonido realmente rico en matices.
Otros formatos más modernos, como el Monkey Audio o el OGG Vorbis ya ahan eliminado
por completo los modelos psicoacústicos. La pérdida de datos no revierte en una perdida de
calidad.

En el caso del mp3 más extendido, la compresión a 128 kbps, el número de bits necesarios
para representar un mismo muestreo disminuye ostensiblemente (prácticamente de 10 a 1)
pero la información del muestreo queda bastante intacta en aquello que nos interesa
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(aquellas frecuencias discretas que tanto enriquecen la música) dependiendo siempre del
nivel de calidad que utilizemos en el momento de codificar el archivo de audio
(bitrate/kbps). La simple possibilidad de elegir los parámetros de codificación es, de por si,
un paso adelante respecto a los estandards cd y md, que ejecutan por norma el muestreo a
44100 Hz y 16 bits de resolución. Esto nos permite valorar la conjugación más adecuada
que buscamos entre la calidad del sonido y las dimensiones del archivo mp3 que
pretendemos crear. Para codificar música con calidad "fm" habitualmente se trabaja a
44100 Hz y 128 Kbps, pero es posible codificar en magnitudes superiores, hasta llegar a lo
que llamamos "calidad cd". De momento, el único punto débil del mp3 respecto a sus
precedentes cd y md está en la velocidad de codificación: Mientras los estandards antiguos
lo pueden hacer directamente y en tiempo real, el mp3 aún requiere una renderización
posterior a la digitalitzación, generalmente a partir de un archivo wav.

Este pequeño tributo que aún tenemos que pagar queda compensado con creces por la
posibilidad de obtener un muestreo de frecuencias mucho más rico y flexible con unas
dimensiones en bits muy inferiores a las del cd y el md, ...y la reducción de volúmenes de
datos aún no se ha acabado: Discretamente ya se habla de encoders en mp4 para un futuro
inmediato. Recordemos que el número que sucede a las siglas mp se refiere al grado de
compresión del estandard originario mpeg. Si el mpg quedó establecido como uno de los
estandards más utilitzados en la compresión de imágen y sonido conjuntamente, en cambio
no está tan claro que el standard mp3 quede establecido definitivamente para la compresión
de audio sólo: aún es posible ir más allá con las condiciones tecnológicas que hoy dia
tenemos al alcance. Por contra, conseguir un mayor grado de compresión en imagen parece
que será, de momento, bastante más complicado. El mp4 incorpora una nueva capa (layer)
esa cuarta capa permite la inclusión de más funcionalidades a la propia música, como
imágenes, textos, reproductores autoejecutables desde el mismo archivo (ya no se requiere
el clásico Winamp para escuchar un mp4)

Que no se pierda aquel sonido.

Sea como sea, y con independencia de lo que nos depare un futuro próximo, ahora el
estándard mp3 nos permite dar un paso atrás en el tiempo para recuperar un sonido que
habíamos perdido con la irrupción del cd. Aquí es donde yo quería llegar! Ahora tenemos la
posibilidad de codificar directamente en mp3 el sonido de los vinilos desde nuestro propio
ordenador, de forma casera pero dentro de unos parámetros de trabajo absolutamente
profesionales. Aunque grandes milagros tampoco vamos a poder hacer. Lo digital será
siempre lo digital, y nunca conseguirá la misma riqueza que lo analógico. Digamos que lo
analógico es lo natural. El sonido se propaga de una forma afín a lo analógico. Lo digital es
un artificio humano, una representación de ondas mediante dígitos: 0 y 1.

Pues bien, para digitalizar el sonido analógico de nuestros vinilos sólo tenemos que grabar
el sonido en nuestro PC. Programas como Cool Edit Pro, de Syntrillium Software
Corporation, nos permiten trabajar cómodamente con archivos wav a 16 bits y relojes de
44,1 KHz, que son los que se usan en el entorno profesional. Este material lo podemos
editar cómodamente con el hardware que se vende hoy día: procesadores superiores a 400
Mhz, memorias RAM de 128 Kb, un disco duro con 4 o 5 Gb de espacio libre y una targeta
de sonido del tipo Sound Blaster 32.

El hardware imprescindible puede ser muy inferior a este. De hecho, con un procesador 486
peleón, 32 Mb de RAM, 1Gb de espacio en el disco duro y una Sound Blaster 16, sería
suficiente, aunque necesitaríamos mucho más tiempo y paciencia. En todo caso, y por lo
que respecta a la targeta de sonido, es aconsejable trabajar con una Sound Blaster 32 como
mínimo. Y en referencia al software, hay muchos otros programas tan válidos como el Cool
Edit Pro. Si os hablo del Cool Edit es porque es el que yo utilizo, y porque es el que aun
hoy día posee los filtros de Click&Pop mejor logrados, que son la herramienta básica para
limpiar el audio que sacaremos de los vinilos. Una vez creados los archivos wav, sólo nos
quedará pasarlos a cd-audio y/o a mp3.

Digitalización de vinilos con Cool Edit Pro

¿Cuando podemos codificar un mp3 directamente de nuestros antiguos vinilos?

Muchos podéis pensar que convertir un vinilo a mp3 es una lamentable pérdida de tiempo,
al menos con las condiciones tecnológicas actuales. Y en muchos casos podéis tener razón.
Yo también estoy de acuerdo: Si te has comprado el cd "Sultans of Swing, the very best of
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Dire Straits" difícilmente volverás a tener ganas de escuchar temas como "Private
investigations" en tu antiguo vinilo. El trabajo de digitalización en este cd ha sido
maravilloso. Pero por desgracia eso no sucede con la mayoria de las reediciones en cd de
antiguos álbumes que salen al mercado. Siempre es una tentación comprar un cd a precio de
oferta de un viejo álbum de nuestro grupo preferido, pero si tu oído aún no está demasiado
desquiciado por la cultura del consumo "light", en muchos casos aquel sonido no te
satisface, y continuas mirando tu viejo vinilo con nostalgia. Es en este momento cuando
vale la pena conectar tu equipo de música al PC y empezar a digitalizar todo lo que salga de
la aguja de diamante. Si además aquel vinilo está descatalogado y tienes la certeza de que
no se editará nunca en cd, harás un gran servicio a la comunidad internauta si cuelgas los
mp3 obtenidos en un servidor, para que todo el mundo se los pueda copiar de forma
totalmente legal.

Problemas para copiar un vinilo a mp3

Otra cuestión es el estado físico del vinilo. Puedes encontrarte con vinilos verdaderamente
irrecuperables, con los que vale más que no te pelees, porque después de muchas horas de
trabajo con el Cool Edit Pro te puedes encontrar con que no hay maneras de sacar un sonido
mínimamente decente. Aquí tienes una breve referencia de possibilidades:

-Discos rayados: Si hay saltos es casi imposible sacar algo en claro. El Cool Edit Pro puede
arreglar muchas cosas, pero no se puede inventar unos compases que no existen. Si la
rayada consiste en una encallada repetitiva de la aguja, no habrá problemas, pues más tarde
podremos cortar las repeticiones, pero si la rayada comporta un salto con pérdida de
compases, poca cosa podemos hacer: Si se trata de música pop comercial tienes la solución
de ir a buscar esos compases más adelante o atrás de la canción, para hacer un "copy &
paste", ya que este tipo de música suele ser bastante repetitiva, pero si se trata de música
clásica o jazz, esto ya puede ser más difícil de conseguir.

-Discos muy castigados: El "crackle" puede ser tan intenso y extenso que casi no podrás oir
la música. Si grabas este sonido y después lo pasas por el Cool Edit Pro, lo puedes volver
loco con el filtrado de "cliks&pops": se puede pasar horas para renderizar un tema de 3
minutos, y es muy posible que el resultado no te sirva. De todas maneras, una regla de oro
es conseguir que la grabación sea lo más límpia posible: tanto como nos permita nuestro
plato. Para conseguirlo existen dos secretos fundamentales: Ante todo una aguja en buenas
condiciones y con un peso bien calibrado, pero también un buen plato profesional. Esto es
muy importante. Cualquier plato no nos servirá para obtener un sonido aceptable. Pero
bueno,... si no dispones de nada mejor, puedes intentarlo.

Además, es conveniente la reproducción del vinilo "en humedo" mientras grabamos:


mezcla en un pulverizador, 3/4 partes de agua y 1/4 parte de alcohol de farmacia, y rocía
todo el disco mientras lo reproduces, verás que el "crackle" disminuye muchísimo.
Tranquilo que con esto no estropeas el disco. El alcohol de farmacia o el agua del grifo no
les hacen ningún daño, lo que es realmente perjudicial son todos esos "líquidos especiales"
que venden en las tiendas de discos, aunque parezca una paradoja. Si lo pruebas me lo
agradecerás toda la vida, ...y el Cool Edit Pro también, pues te hará una trabajo mucho más
acurado y en menos tiempo. Aunque, repito que si el disco está muy castigado, ni con esas
vas a conseguir nada. La valoración de cuando vale la pena meterse de lleno en el asunto la
tendrás que hacer tu con la experiencia propia que vayas adquiriendo.

Reproducción "en húmedo"

Hay mucha gente que no es partidaria de la reproducción en húmedo. Y tienen sus propias
razones. Pero lo que es indiscutible es que le alcohol consigue eliminar todos los ruidos
procedentes de corriente estática acumulada en los surcos del vinilo. Por otro lado, el agua
proporciona un cauce que suaviza el contacto de la aguja con el surco. Los principales
peligros de la reproducción en húmedo son los siguientes:

1. El alcohol puede disolver la pizca de cola que une el diamante a la aguja, por lo que
existe peligro de que se desprenda el diamante. Si la aguja es buena eso no tiene que pasar,
pero es un peligro. Estais advertidos.

2. Si te pasas rociando el vinilo mientras está girando en el plato, existe peligro de que el
líquido penetre por las rendijas del plato y dañe los mecanismos. Los platos profesionales
normalmente estan debidamente aislados para que eso no suceda, pero nuevamente, si tu
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plato no es muy bueno, tendrás que ir con mucho cuidado para evitar que el líquido no
salga de la superficie del vinilo.

En todo caso, el procedimiento para la reproducción en húmedo es el siguiente: Limpia el


vinilo bajo el grifo, con agua y un jabón neutro, de los que se usan para las manos. No lo
frotes con ningún paño, pásale tus propios dedos suavemente par que el jabón se lleve el
polvo que pueda haber en los surcos. Después de aclarar el jabón, sécalo levemente al aire,
para que se vaya el exceso de agua. En todo caso puedes secar totalmente la cara que no vas
a reproducir de inmediato, con un paño de fieltro. Nada de gamuzas, de esas que se chupan
el agua como una chotacabra. El vinilo necesita un poco de humedad. No conviene que se
reseque. Así preparado ya podemos colocar el vinilo en el plato y empezar a reproducir
mientras vamos grabando en el PC. Cuando veas que se va evaporando la humedad vuelve
a rociarlo levemente para que se vaya manteniendo húmedo.

Y finalmente, cuando acabemos de reproducir, conviene que volvamos a lavar el vinilo


bajo el grifo, antes de guardarlo. El motivo es que el alcohol de farmacia contiene aditivos
que se quedan en los surcos cuando se evapora el alcohol. Conviene pues eliminarlos antes
de volver a guardar el vinilo. A continuación te ofrezco en este artículo un pequeño tutorial
donde he intentado comprimir mis experiencias digitalizando vinilos con Cool Edit Pro,
para pasarlos después a mp3 o crear tus propios cd-audio con ellos.

Digitalización de vinilos desde Cool Edit Pro.

Como no sé cual es tu nivel de conocimiento del Cool Edit Pro, intentaré expresarme
suponiendo que has tenido un contacto inicial con este programa o con cualquier otro editor
de sonido (ya que todos se parecen bastante) y que estás trabajando con Windows 95/98 o
superior. Si tu dominio es mayor podrás obviar muchas cosas. En ese caso sólo te pido que
tengas algo de paciencia, pues pretendo que este texto lo pueda entender cualquiera, sea
cual sea su nivel. La primera limitación que podemos tener es que no existe versión en
castellano del Cool Edit Pro (que yo sepa) de manera que tendremos que familiarizarnos
con la terminología inglesa. Intentaré explicar los tecnicismos más complicados a medida
que vayan apareciendo.

1. Adaptando el entorno de trabajo (sólo para usuarios poco experimentados):

Cómo conectar el equipo de música al PC

En primer lugar: El plato NO se conecta directamente al PC. El plato debe estar conectado
al equipo de música, y es el amplificador del equipo de música lo que debemos conectar al
PC. La ÚNICA conexión correcta es del "line out" (o bien "rec out") del amplificador al
"line in" de la targeta de sonido del PC. Siempre conexiones de línea. Nunca conexiones de
micro ni phono ni cualquier otra cosa que te encuentres por ahí. No hagas inventos con
esto, que ya está todo inventado.

No es correcto:

1.- Conectar la salida de auriculares o de altavoces del amplificador a la targeta de sonido.


Si no tienes "line out" ni "rec out" esta podria ser tu única solución. Pero es peligroso:
puedes dañar la targeta de sonido. Si te ves obligado a hacerlo, en todo caso utiliza la salida
de auriculares (nunca la de altavoces) y conectala al "line-in" de la targeta de sonido. Pero
tienes que ser muy riguroso con el control del volumen que envias al PC. debes comenzar
con el volumen totalmente a "0" e ir subiendo muy suavemente hasta que la señal que entre
al PC sea suficiente, y sobre todo que nunca sea excesiva. Repito que como te pases te vas a
tener que comprar una targeta de sonido nueva. Yo ya he avisado.

2.- Conectar directamente el plato a la entrada de micro "mic in" de la targeta de sonido. De
ninguna manera se te ocurra hacer esto. Para empezar, a la entrada de micro sólo hay que
conectarle micros, que para eso se llama así. Ninguna otra cosa sonará decentemente a
través de esa entrada. y en segundo lugar, como ya os he dicho, el plato tiene que pasar por
un amplificador. Si lo conectas directamente a la targeta de sonido vas a grabar una miseria
de sonido que no te va a servir absolutamente para nada.

3.- Crear bucles entre el equipo de música y el PC: Mucha gente piensa "Mira que bien, le
meto sonido desde el Hi-fi (o la minicadena) al PC por el "line in" para poder grabar en el
PC, y al mismo tiempo la salida de sonido del PC "line out" se la envio al mismo
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amplificador, por ejemplo a la toma de Auxiliar, Video o MiniDisc externo, y así puedo
escuchar la música del PC a través del Hi-fi." Que gran idea ¿verdad? Pues si haces eso te
puedes cargar tu equipo de sonido. Tenlo muy presente. O una cosa u otra, pero las dos a la
vez NO. Si conectas el Hi-fi al PC para grabar, desconecta la salida del PC al Hi-fi para
escuchar. Y si quieres escuchar el PC a través del Hi-fi, desconecta la conexión para grabar
en el PC. Las dos NUNCA pueden estar al mismo tiempo.

Activando la entrada de línea de la targeta de sonido para poder grabar en el PC

Los menos experimentados recordad que para recibir sonido de una fuente externa tenemos
que abrir el canal correspondiente del "Control de volumen" del Windows, y esto ya lo
tendrías que haber hecho antes de empezar. A través de ese control tienes que ajustar el
volumen del sonido que le entra al PC: Es muy importante que no se produzca ningún pico
de distorsión cuando vayamos a grabar, porqué después ya no tendrá solución y tendremos
que volver a grabar. De esto hablaremos enseguida. Pero ahora lo que vamos a hacer es
activar la entrada de línea de la targeta de sonido, ya que si nunca antes la has usado lo más
probable es que esté deshabilitada. Cargamos pues el Control de Volumen de Windows. Si
no tienes un acceso directo desde tu escritorio, lo encontrarás en
Inicio>Programas>Accesorios>Entrenimiento

Cuando abres el control de volumen te aparecen los controles de "dispositivos de


reproducción" Te vas al menú Opciones>Propiedades y allí seleccionas "dispositivos de
grabación" (que son los que nos interesan) y de la lista de dispositivos que hay debajo
seleccionas com mínimo "Entrada de línea". Al salir de ahí te encuentras que la parrilla de
controles ha cambiado, ahora son los controles de los "dispositivos de reproducción", los
que tienes a la vista. Ahí tienes que comprobar que el dispositivo "Entrada de línea" está
abierto y con su control de volumen levantado. Lo más probable es que ahora lo tengas
cerrado o con el volumen a 0. Cuando lo actives podrás grabar lo que te entra por el "line
in" de la tarjeta de sonido.

Adaptando el entorno del Cool Edit a nuestras necesidades

Cuando entremos por primera vez al Cool Edit, lo primero que vamos a hacer es adaptar
todo el entorno visual a las necesidades de la actividad que llevaremos a cabo. En este caso,
queremos digitalizar el sonido que nos llega desde el plato, a través de un amplificador
externo, después realizaremos diversas operaciones de filtrado hasta dejar los temas
musicales limpitos y flamantes. Pues bien, para hacer todo eso necesitamos ver el entorno
de trabajo del Cool Edit Pro de la siguiente manera:

1.- En el menú activad sólo estas opciones: Waveform view / Show Status Bar / Show
Level Metters.

2.- En el menú activad /Show Levels on play & Record / y allí mismo, en el submenú
activad estas opciones: File / Edit / View / Options / Noise Reduction

3.- Además, en el menú debemos activar la opción /Enable Undo/ Esto es importante, pues
la función Undo (deshacer) nos permite retroceder los pasos que hemos ido realizando en
caso de equivocarnos. Si esta opción no la tienes activada te será completamente imposible
deshacer los errores que cometas.

Cuando te encuentres cómodo/a con esta configuración, podrás ir quitando o añadiendo lo


que más te convenga a través de estos dos menús. La ilustración muestra como queda la
pantalla del Cool Edit Pro con muchos más botones activados. Pero si lo ajustas como te
acabo de decir verás sólo una hilera de botones En la ilustración tenemos ya cargado un
archivo wav que nos aparece en la ventana central: en la parte superior aparece
representado el sonido del canal izquierdo del estéreo y en la parte inferior el canal derecho.

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2. Grabando desde una fuente externa (plato y amplificador externo):

Ahora ya puedes empezar a grabar el sonido externo. Primero haremos una grabación de
prueba para ajustar el volumen. Ten en cuenta que cada vinilo tiene su propio volumen, y
esta prueba deberás repetirla con cada vinilo para ajustar su propio volumen idóneo de
grabación. En el Cool Edit sólo tienes que apretar el botón con el punto rojo que está en la
botonera del ángulo inferior izquierdo de la pantalla. Si pones el mouse encima, sin clickar,
ya te lo dice: "Record". La primera vez que lo hagas te pedirá que ajustes los parámetros de
grabación. La más adecuada es 16 bits a 44100 Khz y estéreo. Una vez lo ajustes todo y
elijas "ok", el Cool Edit ya estará grabando; pones en marcha el "tocata" y ya está. Ahora
tenemos que ajustar el volumen de entrada para que no se produzca NINGUNA distorsión.
Esto lo conseguiremos pinchando los fragmentos del vinilo donde la música adquiere más
fuerza y volumen y comprobando en el Cool Edit cual es su nivel de entrada. A tal efecto,
el Cool Edit incorpora dos "vu-meters" uno para cada canal del estéreo. Fíjate en la
ilustración. Verás que en la parte inferior debajo de las botoneras, hay un banda negra
horizontal que va de extremo a extremo de la pantalla, y debajo de ella una graduación
numérica. La banda negra es el vu-meter. Cuando entra sonido se llena de color rojo, de
izquierda a derecha. Pues bien. El color rojo NUNCA debe llegar al extremo derecho en
ninguno de los dos canales. Si un pico de sonido llega el extremo derecho (0 dbs) significa
que ha distorsionado. Debes ajustar el control de volumen de Windows de manera que los
picos nunca toquen el extremo derecho, pero que se acerquen bastante. En pocas palabras,
conviene que el vu-meter se llene de sonido (color rojo) conviene que la señal sea viva y
potente, pero es imprescindible que nunca distorsione.

Cuando tengas el volumen así ajustado puedes parar la grabación. no es necesario que
guardes el sonido que has grabado, pues sólo era una prueba de volumen. Puedes borrarlo
todo y empezar a grabar de nuevo, ahora sí, de forma definitiva. Llevamos la aguja al
principio del vinilo ...y adelante. Cuando se acabe el tema musical le damos al "Stop" en la
botonera del Cool Edit y guardamos el material (File>save). Otra opción es grabar toda una
cara completa, si tenemos espacio suficiente en el disco duro del PC. Una cara entera de
vinilo puede llegar a ocupar 400 mb o más incluso. Si hemos grabado una cara completa,
esto es 5, 6 o 7 temas musicales de una vez, los iremos guardando por bloques.
Seleccionamos el primer tema con un bloque, asegurandonos de que la totalidad del tema
queda dentro del bloque, incluso podemos abarcar un poco del final del tema precedente y
un poco del inicio del tema siguiente. Luego ya borraremos lo que sobre. Pero ahora lo
guardamos así (File>Save selection) y le damos un nombre ("tema 1", por ejemplo)
seleccionamos el formato WAV/PCM y pulsamos "OK" Una vez hecho esto vamos a por el
siguiente tema: Abrimos otro bloque (los bloques se abren arrastrando con el mouse
pulsado desde el principio del bloque y los acabamos soltando el botón del mouse) que
abarque totalmente el segundo tema y lo guardamos de igual manera con otro nombre
("tema 2") y así hasta tener guardados todos los temas que hemos grabado. Luego ya
podemos borrar la grabación original (File>Close, y cuando nos pida guardarlo le decimos
que no)

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Se nos queda la pantalla en blanco (o sea, toda negra, je je) y ahora ya podemos cargar el
primer tema que hemos guardado para empezar a acondicionarlo (File>Open) Cuando
acabemos con el primero lo guardaremos y abriremos el siguiente, hasta acabarlos todos.
Luego lo repetiremos todo con la cara B del vinilo, hasta tener la totalidad de los temas
musicales limpitos y preparados para disfrutarlos. Cada tema será un archivo WAV. Una
buena manera de ir nombrando los temas es por su número de orden + nombre de la
canción, aunque otros prefieren incluir además el nombre del artista. Por ejemplo:

“01 - Summertime.wav” o bien “01 - Billie Holiday - Summertime.wav”

“02 - A Fine Romance.wav” o bien “02 - Billie Holiday - A Fine Romance.wav” “03 -
Detour Ahead.wav” o bien “03 - Billie Holiday - Detour Ahead.wav” ....etc.

3. Editando el archivo wav.

Ahora vamos a limpiar nuestra grabación, tema por tema. Este es el proceso más complejo
y minucioso. Si no has trabajado mucho con él, aquí podrás ver al Cool Edit en acción, con
toda su potencia. El proceso se divide en dos partes: 1. Recomponer la pieza en todo lo que
sea necesario. 2. Filtrar todo tipo de ruiditos.

3.1. Recomponiendo la pieza.

Se trata de dejar la pieza "coherente", de pies a cabeza. O sea, suprimir los blancos por
delante y por detrás, suprimir las repeticiones originadas por una rayada, etc., etc. La forma
de editar todo esto consiste en trabajar directamente sobre la onda, que está representada
gráficamente en la ventana central, la cual nos muestra por defecto el canal izquierdo del
estéreo en la parte superior y el canal derecho en la parte inferior. La onda la puedes editar
abriendo bloques, arrastrando el mouse por encima de ella, cortando y empalmando o
borrando, mediante las órdenes habituales de windows "copy", "cut", "paste", etc. Si
aprietas "play" con un bloque seleccionado oirás sólo el fragmento seleccionado: esto te
permite verificar que el trozo seleccionado es verdaderamente lo que quieres borrar, copiar,
cortar, mover, etc. Aquí hay que hacer especial referencia al juego de 6 botones que tienes
en la esquina inferior-izquierda de la pantalla (mira la ilustración más abajo) justo al lado
de la botonera de control: son los zooms, que nos permiten ver la representación gráfica de
la onda en diversas escalas.

Cuando el Cool Edit ha acabado de grabar te enseña la totalidad del tema musical encajado
en la ventana, pero esta escala te puede resultar demasiado pequeña para editar. Según el
tipo de actividad que vayas a realizar en cada momento, tendrás que ir ampliando o
reduciendo esta escala para poder trabajar adecuadamente. No profundizaré más en el
funcionamiento general del Cool Edit Pro, porque esto no es un manual para este programa.
En todo caso, si aún no lo dominas, sus menús de ayuda son bastante completos. Las tareas
básicas que vamos a llevar a cabo para recomponer la pieza serán las siguientes: -Suprimir
los blancos del principio y el final de la pieza: En cada extremo sólo debe quedar un
pequeño blanco, de 0,3 segundos aproximadamente. Salvo algunas excepciones: Es el caso
de conciertos en directo o suites de música clásica, que se dividen en temas, pero de hecho
el sonido nunca cesa entre tema y tema. por lo cual cada archivo deberá empezar y acabar
sin blancos, cortados en seco. De esta manera luego, cuando los escuchemos todo de una
vez, no oiremos ningun blanco de separación, tal como sucede en el vinilo original.

De todas formas, esto lo podrías hacer más tarde, justo antes de guardar el archivo wav
definitivo. La razón es que estos espacios que te han quedado al principio y al final de la
pieza contienen ruidos de fondo que también existen dentro de la pieza. Si estos ruidos son
muy exagerados, conviene que los conserves hasta el último momento, porque después te
servirán de muestra (profile) para aplicar un filtro de reducción de ruido (Noise Reduction)

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a la pieza. Por lo tanto conviene que de momento conserves estos espacios de 3 ó 4
segundos (o más) que puedan quedar por delante y por detrás. Lo que si puedes hacer ahora
es cortar otras cosas que te pueden haber quedado en los extremos: Por ejemplo, es posible
que hayas tenido que comenzar la pieza dos o más veces, porque has tenido que ajustar el
volúmen de entrada. Si has tenido que hacer este tipo de cosas mientrar garbabas el tema,
ahora si es el momento de eliminar estos inicios "en falso". Si se da el caso, también ahora
es el momento de recortar repeticiones originadas por rayadas del vinilo. El proceso
siempre es el mismo: vamos abriendo bloques que después eliminaremos a través del
menú . La operación es minuciosa: se debe empalmar la pieza de manera que no se note el
corte. A tal efecto conviene utilizar una escala de zoom mediana, que te permita mostrar la
totalidad del bloque a cortar dentro de la pantalla, pero no demasiado pequeña como para
no dejarte ver los detalles.

Una vez ya tienes la pieza en condiciones podemos dar el segundo paso.

3.2. Filtrando ruiditos.

Los filtros de reducción de ruido (Noise Reduction) que utilitzaremos son 2 de los 4 que
tiene el Cool Edit. Estos 3 botones estan en el extremo derecho de la segunda batería de
botones de menú. En el menú textual los encontrarás en Click/Pop Eliminator - Hiss
Reduction - Noise Reduction. Es mejor que te acostumbres a acceder desde los botones,
porque a partir de ahora los tendrás que cargar muchas veces. Para el caso que nos ocupa
sólo necesitamos el "Click/Pop Eliminator" y el "Noise Reduction", pero sobre todo el
primero.

Click/Pop Eliminator

Cuando selecciones el Click/Pop Eliminator, se te abre una ventana para ajustar los
parámetros. Si tienes un bloque abierto en la ventana de edición, estos parámetros se
aplicaran sólo al trozo seleccionado. Así pues, antes de acceder al filtro, no debe haber
ningún bloque abierto si lo que queremos es ajustar parámetros para la totalidad de la pieza,
o bien sí debe haber un bloque si lo que queremos es afectar sólo a ese fragmento. Una vez
ajustados los parámetros, en la misma ventana del "Click/Pop Eliminator", cuando aprietes
"Ok", el Cool Edit empezará a trabajar. Cool Edit ajustará los parámetros el solito si le
damos al botón "Auto Find All levels"

Es recomendable que primero apliques el filtro sobre un pequeño bloque, de 20 ó 30


segundos, por comprobar el resultado. Si te gusta como queda lo podrás aplicar después al
resto de la pieza con una mayor seguridad de que lo que te va a hacer el Cool Edit te
quedará bien. Cada vez que cargas el filtro para aplicarlo a un nuevo fragmento debes
pulsar el "Auto Find All Levels" antes de darle al "Ok"

En caso de que la pieza tenga unas partes de instrumentación muy bien diferenciadas, como
por ejemplo unos primeros compases de balada, seguidos de un fragmento enérgico, para
acabar con otro fragmento de balada, lo más recomendable es proceder por bloques (en este
caso serían 3 bloques) La diferencia entre cada fragmento se hará muy evidente en la
representación gráfica: los más enérgicos mostrarán un dibujo muy ancho, mientras que los
fragmentos de menos instrumentación los verás mucho más estrechos.

Si después de una primera sesión de filtrado aún queda un "crackle" persistente, tendremos
que ejecutar una nueva sesión, ahora aplicando parámetros especiales. Para ello
seleccionaremos alguno de los "Presets" que ya hay definidos. En la ventana del Click/Pop
Eliminator se encuentran arriba a la derecha. De hecho tu podrías incorporar los tuyos
propios para usarlos en otras ocasiones. Pero con los 3 o 4 que ya vienen deifinidos tendrás
suficiente. Podemos seleccionar por ejemplo el que se llama "Constant Hiss & crackle" Al
hacerlo vemos que todos los parámetros de la ventana se reajustan. Le damos al Ok y le

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dejamos actuar. Luego escuchamos el resultado. Si no nos convence retrocedemos
(Edit>Undo) y probamos con otro preset.

Después de una, dos o tres, sesiones de filtrado con el "Click/Pop Eliminator" es probable
que aún persistan algunos clicks o pops aislados que con el proceso automático no se han
eliminado. Cuando esto sucede no queda más remedio que eliminarlos manualmente,
aunque esto se puede hacer desde el propio filtro: Debes ir escuchando toda la pieza con
una escala de zoom bastante alta. Cuando oigas un click/pop, también lo verás reflejado en
la ventana de edición, tal y como se ve en esta ilustración, donde tienes un mismo
fragmento de onda duplicado: los click/pops sobresalen como una punta de lanza (un pico)
que destaca del resto de la onda. Aquí veis una escala de zoom muy alta, de manera que el
pico ha pasado a mostrarse como un rectángulo vertical muy pronunciado. Debemos
seleccionar el click/pop con un bloque (arrastrando con el mouse) pero hay que procurar
que el bloque abarque el área más pequeña posible: estrictamente lo que es la punta de
lanza y nada más. En el ejemplo de la izquierda, el bloque aún se podría reducir mucho
más, hasta seleccionar sólo el pico. Si pulsas "play" con el click seleccionado de esta
manera, oirás efectivamente sólo el click/pop, con una poco de música por delante y por
detrás. Una vez verificado que tienes el click aislado abres nuevamente el filtro "Click/Pop
Eliminator" y pulsas el gran botón cuadrado que está en la parte inferior de la ventana: "Fill
single click now". Si este botón está inhabilitado, quiere decir que el bloque que has abierto
es demasiado grande. Por eso es muy importante trabajar en una escala de zoom bastante
grande, a fin de poder seleccionar el trozo de audio más pequeño posible. Cuando el bloque
sea lo bastante pequeño, al volver a la ventana del "Click/Pop Eliminator" encontrarás el
botón "Fill single click now" habilitado. Sólo tienes que pulsarlo y el click/pop
desaparecerá en un 90% de los casos.

En la segunda parte de esta ilustración puedes ver aislado un click que sólo estaba en el
canal izquierdo del estéreo (o sea, en la mitad superior) de manera que no ha sido necesario
seleccionar también el canal derecho (parte inferior) Fijaos en cambio que en el primer
ejemplo el click/pop seleccionado afectaba a los dos canales. Siempre que el click/pop
afecte sólo a un canal es mejor seleccionar sólo ese canal, porque el Click/Pop Eliminator
no hace otra cosa que castigar la onda, ...y si podemos conseguir que "castigue" un solo
canal, mejor que mejor. Pues bien, esto es lo que debes ir haciendo con todos los clicks y
pops persistentes que te vayas encontrando. Es un poco laborioso, pero cuando acabes te
quedará un trabajillo impecable. Te recomiendo que trabajes con auriculares, porque este
proceso requiere escuchar y reescuchar un pequeño fragmento de sonido muchas veces y, a
parte de que los auriculares te permiten escuchar los defectos con mayor nitidez, te
ahorraras de poner histérica a la gente que te pueda rodear, ...pues resulta muy molesto
escuchar todo el proceso, y con uno que se machaque los tímpanos ya es suficiente. Cuando
hayas acabado de filtrar clicks y pops, es posible que aún te quede algún ruido residual de
fondo que el Cool Edit no puede interpretar como "Clicks&Pops", y esto puede ser
especialmente molesto nuevamente en los fragmentos con poca instrumentación. Si se da
este caso, ha llegado el momento de utilizar el filtro "Noise Reduction". ...Cuidadín
cuidadín! porque este filtro te puede destrozar todo lo que llevas hecho hasta ahora con el
"Click/Pop Eliminator". Debes manipularlo con cuidado ...Incluso me permitiría sugerirte
que a partir de ahora trabajes con una copia del wav original.

Noise Reduction

Antes te he dicho que, en el momento de la grabación desde el vinilo, convenía preservar


un poco del ruido que produce el disco, sin música, por delante y por detrás de la pieza
musical. La razón es que ahora, estos ruidos los tomaremos como muestra (Profile) para
eliminarlos de la pieza. Lo primero que haremos es abrir un bloque que abarque un
fragmento de ruido. Con 2 ó 3 segundos puede ser suficiente, y es muy importante que el
fragmento no contenga música: sólo ruido y nada más! Además tienes que procurar que la
muestra abarque la mayor variedad posible de ruidos. Por ejemplo, en una secuencia de
ruido que hace "smwak/clock/click/wmoook", asegurate de no tomar un trozo que sólo
contenga "smwak/clok", porque todo lo que suene a "click/wmoook" no lo eliminará.

Con este bloque seleccionado, cargamos el filtro "Noise Reduction". Lo primero que
haremos es cargarle el perfil del ruido a eliminar (la muestra, en inglés, Profile). Esto se
hace desde los botones que hay en la parte superior-derecha de la ventana del filtro (mira la
ilustración): Pulsa "Get profile from selection". Ahora el filtro ha adoptado como perfil la
muestra de ruido que habías seleccionado con el bloque. Cuando cierres la sesión global
con Cool Edit Pro, este perfil se descargará, de manera que, si lo quieres conservar para
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posteriores sesiones de trabajo, debes guardarlo en un archivo. Allí mismo pulsas "Save
profile", le das un nombre, y cuando vuelvas a trabajar con el Cool Edit Pro lo podrás
llamar con "Load profile". Si la única cosa que pretendemos es aplicar este perfil
inmediatamente, no vale la pena guardarlo. De hecho es absurdo guardarlo, porqué cada
vinilo genera su propio ruido, y el perfil que has obtenido de un vinilo no te servirá para
otro, es posible que ni siquiera te sirva para otro tema musical del mismo vinilo que estás
editando.

Continuando con nuestro trabajo, una vez has cargado el perfil, debes salir del filtro sin
hacer nada más ("Close") Vuelves a la ventana de edición, y ahora seleccionas con un
bloque toda la pieza musical o bien sólo el fragmento afectado por el ruido, como por
ejemplo un fragmento con poca instrumentación. Si el fragmento a filtrar está hacia el final
de la pieza, convendría que el perfil cargado en el filtro procediera también del final de la
canción. En cambio, si el fragmento corresponde al principio de la pieza, deberías haber
extraído el ruido también del principio. La razón de esto es que el ruido más próximo será
siempre más parecido al que se encuentra en el fondo del fragmento de música afectado.

Con el fragmento de música seleccionado, volvemos a cargar el filtro "Noise Reduction"


donde verás que el perfil introducido previamente continua vigente: El ruido aparece
representado en el gráfico de la parte superior-izquierda de la ventana, tal y como muestra
la ilustración (si no hubiera ningún perfil cargado, este gráfico estaría vacío) Ahora es el
momento de aplicar el filtro con este perfil como base de referencia: El filtro eliminará del
fragmento seleccionado todas les frecuencias que se corresponden con los ruidos del perfil.
Pero antes de pulsar "Ok" y empezar el filtrado debemos ajustar un parámetro
importantísimo, no lo olvides:

Justo debajo de la representación gráfica del perfil hay una barra ajustable horizontal que
nos sirve para calibrar el nivel de reducción de ruido que queremos aplicar. En el caso que
nos ocupa este nivell debe ser muy pequeño (Low): inferior a 15. Te recomiendo que
empieces con una magnitud "8", y si después ves que no ha sido suficiente puedes repetir el
filtrado aumentando este parámetre poco a poco. Pero insisto, no pases de "15", porque el
filtro te eliminará frecuencias útiles y la pieza te quedará hecha una pena. En todo caso, si
la pifias siempre podrás utilitzar el . Una vez ajustado este parámetro, ya puedes pulsar
"Ok", para aplicar el filtro.

4. Ya casi acabamos.

Es muy posible que no hayas tenido que aplicar el filtro "Noise Reduction", y que con una
o dos sesiones con el "Click/Pop Eliminator" ya tengas tu archivo wav limpito y acabado.
Pero tenemos que considerar los casos más graves posibles. Si has tenido que usar el
"Noise Reduction" quiere decir que la pieza estaba muy castigada. En ese caso, después de
haber filtrado los ruiditos, es posible que hayan emergido nuevos "cliks&pops" que antes
quedaban enmascarados por los ruiditos. Si es así, es posible que ahora el "Click / Pop
Eliminator" sea capaz de detectarlos automáticamente. Prueba entonces con una nueva
sesión con este filtro. Si llegado este punto no has obtenido un trabajo decente vale más que
lo dejes por inútil. Has perdido el tiempo tontamente y tu vinilo es irrecuperable. Es así de
duro: Cómprate la edición en CD, ...no seas rata! Si eres tozudo aún podrías intentar otras
técnicas menos ortodoxas, com añadir un leve efecto de reverb o distorsión, según el
fragmento sea melódico o enérgico respectivamente: En ocasiones estos efectos pueden
enmascarar los ruidos residuales, pero tienes que ser muy bueno ajustando los parámetros.

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Si has decidido meterte en ese zapateao quiere decir que dominas el programa, y por lo
tanto no necesitas mi ayuda. Pero no le digas a nadie que yo recomiendo hacer estas cosas.
Estas cosas son muy feas. Son un atentado contra la música y son tretas de mal perdedor.
Pero bueno, si no tienes más remedio lo haces.

Convirtiendo el archivo wav a mp3.

Pero en un 80% de los casos, antes de llegar a estas situaciones terminales tu trabajo ya
habrá dado frutos, y ya podrás dar por buenos tus archivos wav. Un último paso, bastante
conveniente, consiste en "normalizar" el archivo wav ( ) Con este procedimiento consigues
reducir cualquier pico de audio que supere un nivel máximo que tu determines, a fin de
evitar distorsiones: La distorsión se produce a un invel del "100%", por lo tanto lo
normalizaremos todo al 98%. de esta manera nos aseguramos el máximo flujo de volumen
posible sin llegar nunca a la distorsión. Haremos esto con todos los wav de un mismo
álbum. Así, luego al escucharlos todos juntos sonaran todos al mismo volumen Hecho esto,
ya puedes guardar definitivamente cada archivo wav ( ) Ahora ya sólo nos falta crear con
ellos un cd-audio y también crear una copia en mp3 que además nos servirá como backup.
Para crear el cd-audio necesitaremos una barbacoa y su correspondiente programa. Mi
preferido es el Nero. Bueno, a parte de ser mi preferido, es el mejor. Independientemente de
lo que piense yo ¿Queda claro? El Nero lleva un asistente de entrada que te permite elegir
el tipo de compilación que deseas crear. Elegimos Cd-audio, que lleva un icono de una
guitarra eléctrica. Una vez en la compilación no tenemos más que endosarle los archivos
wav, uno detrás de otro, respetando el mismo orden que llevaban en el vinilo, y ya podemos
quemar nuestro cd. Después del currito que te has pegado no estaría nada mal que te
hicieras un par de copias, por si una se deteriora o la pierdes o te la roban o la policia te la
confisca por pirata o se la regalas a un colega o lo que sea.

Y bien, a parte de esto, antes de borrar nuestros preciado archivos wav, que tanto trabajo
nos han dado y que tanto espacio ocupan en nuestro disco duro, podemos finalmente crear
unas copias en formato mp3. Si realmente te gusta como han quedado los temas y la música
lo merece conviene que utilices la compresión mínima. Mi sugerencia es que utilices el
encoder LAME y que comprimas a 320 kbps en modo stereo (nada de joint stereo ni
tonterías de esas, stereo y punto) o bien en VBR 0 igualmente stereo.

Esto en cuanto a una copia en mp3 de calidad, para usarla como backup y que si quieres
borrarla también de tu disco duro, la puedes almacenar antes en un cd de datos.

Si además quieres copias "ligeras" para esuchar en reproductor portátil, comprimir a 128 o
160 kbps será suficiente, y así ahorrarás mucho espacio. El encoder LAME, junto con un
buen programa para comprimir a mp3, como es el Audiograbber, los encontrarás en
http//:www.audiograbber.com-us.net Además, el Audiograbber está en español. Cool Edit
tambié puede covertir de wav a mp3, pero sólo permite usar un encoder, el Fraunhofer, que
tampoco está mal.

Pues nada, disfruta de tu música, ...después de tantos años sin poder escuchar tu vinilo
como Dios manda: Oirás una gama de detalles insospechada, que se escondía bajo el
crackle insoportable de tu vinilo!!

Manual "De Vinilo a MP3" en PDF.

Fuente: HispaMP3.com

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