Universidad del Rosario

Escuela de Ciencias Humanas

Materia: Teoría 1
Estudiantes: Sara Ramírez Arias, Mónica Hernández, Sara Burgos.

Segundo Taller

En el presente trabajo, se buscará analizar desde distintos puntos de vista, el panorama

actual respecto al coronavirus. Por un lado, se buscará explicar esta pandemia como un hecho
social, en palabras de Durkheim y su texto “Normas para la explicación de los hechos
sociales” (2007). A su vez, se buscarán explicar ciertas transformaciones que se han dado en
la estructura social, en torno a la vida cotidiana de las personas. En primer lugar, se traerán a
discusión dos dinámicas evidentes que han presentado cambios. Por un lado, los fenómenos
sociales en función de las relaciones estrechas entre los individuos de una sociedad, y
también, la economía y los alcances que ha tenido el virus es configurarla en pro del cambio
de prioridades, que estas consecuencias han traído consigo, en este punto se hará hincapié en
el caso Colombia. Para hacer un análisis de corte funcionalista de lo anterior de corte
funcionalista, se tendrán en cuenta las explicaciones de (Radcliffe-Brown, 2007) en “Sobre el
concepto de Función en la ciencia social” y “Sobre la estructura social”. Esto para tener una
noción más detallada, de los cambios en cuanto a la función y estructura que la pandemia
pueda traer consigo.

Durante lo que va corrido de este año, las personas en todo el mundo han tenido que vivir
una situación sin precedentes, al menos para el mundo actual globalizado. Según el Centro
Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades Agencia de la Unión Europea, la
pandemia del Covid-19, ha infectado a un aproximado de 1.391.890 personas y se ha tomado
la vida de 81.478 personas. En respuesta a esta situación, cada país ha tomado diferentes
medidas para evitar la propagación de esta enfermedad, tratando de evitar un colapso en los
sistemas de salud, para tratar de mitigar la cantidad de muertes que podrían presentarse. En el
caso de Colombia, el gobierno aplicó un aislamiento obligatorio nacional, que empezó el 24
de marzo y está programada para terminar el 27 de abril. E, esta medida restringe la libre
movilidad de los ciudadanos, a menos de que la persona en cuestión tenga un permiso
especial o esté dentro de las excepciones dispuestas por el gobierno. También, se
desarrollaron campañas de salubridad que deben ser transmitidas por los canales de
comunicación nacional, donde se les instruye a los ciudadanos sobre las medidas de higiene
para la prevención del coronavirus.
 Al analizar la situación en retrospectiva, se puede apreciar cómo en cuestión de semanas la
vida de miles de individuos se vio transformada drásticamente. En lugar de tener personas
vacacionando, el hecho de salir en carro puede implicar una multa por atentar contra la salud
pública; salir a mercar es algo que ya no puede hacerse sin el uso de tapabocas y sacar a
pasear las mascotas, es el único momento del día en el que muchos pueden salir de sus casas.

Todas estas formas en las que se han reconfigurado la forma en la que las personas actúan,
se relacionan con otras y la constante difusión de información, nos lleva a pensar en lo
propuesto por Durkheim en cuanto a los hechos sociales, pues estos “ consisten en modos de
actuar, de pensar y de sentir, exteriores al individuo, y están dotados de un poder de coacción en
virtud del cual se imponen sobre él.” (Durkheim, E. 2007, pág.41) Hasta resulta un tanto
irónico, el hecho de que Durkheim habla de cómo los hechos sociales van siendo
interiorizados por el individuo, normalmente en la etapa de la niñez, donde por medio de un
esfuerzo continuo por “imponer al niño formas de ver, de sentir y de actuar a los cuales no
llegaría espontáneamente.” (Durkheim, E. 2007, pág.47). Sin embargo, en el contexto actual a
los adultos también se les están imponiendo nuevas formas de comprar, de cuidarse y de
vivir, pues eso es lo que está haciendo el gobierno con sus propagandas de prevención y sus
leyes que al no ser cumplidas implican una sanción.
Así, tenemos el factor de imposición de comportamientos a los cuales el individuo “no
llegaría espontáneamente”, respaldado por la coacción también mencionada por Durkheim.
Por un lado, porque si bien no se puede afirmar que ahora las personas se laven más las
manos, si se ha evidenciado una escasez en los productos de limpieza y en ciertos
supermercados se ha restringido la compra de más de 3 artículos por producto para evitar el
acaparamiento, en cuanto a la coerción, los noticieros anuncian que se han impuesto cientos
de comparendos a aquellas personas que no cumplen la norma. Sin embargo, en el libro
Normas para la explicación de los hechos sociales Durkheim afirma que los hechos sociales
son anteriores al individuo y que a la larga la coacción deja de percibirse, pero el coronavirus
no es algo anterior a los individuos y las leyes impuestas para prevenir más contagios, son
hasta el momento temporales. Además, no sería muy acertado afirmar que la gente va a
seguir confinada en su casa, después de que se levante la cuarentena nacional, pues como se
ha visto evidenciado, hay quienes incluso con las multas sigue infringiendo las normas,
demostrando así, que el covid-19 por sí solo como un virus, no es un hecho social. En ese
orden de ideas, podríamos en su lugar, estudiar ciertos hechos sociales que se han
transformado debido al coronavirus.
 En primer lugar, Durkheim propone que un hecho social particular responde a un modo de
vida particular. Esta lógica impuesta por la sociedad es un producto social que las personas
perpetúan y reproducen, ya que, son prácticas interiorizadas en su cotidianidad. Así pues, un
hecho social plausible que enfrenta la sociedad debido al Covid-19 es saludar. Por tanto,
Saludar es un hecho social colectivo, ya que, es parte de la cultura de la sociedad, coercitivo y
exterior al individuo porque al nacer estas formas de saludar ya existen y además son
aprendidas.
Desde niños, se les enseña a las personas ciertas reglas específicas para entrar en contacto
con otras personas, dar la mano, saludar de beso en las mejillas y si hay más confianza con un
cálido abrazo. Pero, debido al acelerado proceso del virus en la sociedad colombiana, las
personas se han visto obligadas a transformar su forma de pensar y su comportamiento.
Tenemos videos del presidente, refiriéndose a la necesidad de dejar de saludar como se hace
normalmente y se sugiere que una nueva forma de saludar, podría ser tocando codo con codo.
Desde ya, no dar la mano hasta evitar al máximo el contacto físico con otros, es una drástica
transformación que evidencia la realidad actual del funcionamiento de la sociedad frente al
virus.
Como bien se ha dicho a lo largo de este trabajo, el covid-19 ha traído una serie de
cambios que han afectado la forma de concebir la realidad de la humanidad. Para más
exactitud, se ha dado una transformación en distintos campos. En cuanto a la sociedad se ve
dada la necesidad de una confianza al devenir, el cual es incierto, en donde cada individuo
por medio de sus acciones, debe velar por un bienestar colectivo. Las medidas de aislamiento
han hecho que la forma en que se dan las relaciones entre las personas cambien de una
manera significativa, lo cual ha generado que la estructura social que determina cada una de
las sociedades, se vea más allá de dañadas, re articuladas o configuradas. Para entrar en
materia con el análisis, es importante tener claridad respecto a lo que es una estructura social.
Según Radcliffe Brown, la estructura social son relaciones de asociación entre organismos
individuales, en donde los fenómenos sociales constituyen una clase distinta de fenómenos
naturales, en este caso el coronavirus y la emergencia sanitaria mundial.

Conforme a esto, Radcliffe Brown también explicaba que “todas las relaciones de persona
a persona hacen parte de la estructura social” (Radcliffe-Brown A., 2007, pág. 318). Lo cual,
si bien es cierto, deja en incertidumbre esta estructura, pues las relaciones sociales ya no
están dadas de manera directa, sino virtual, lo cual no supone una carencia de estos lazos,
sino una rearticulación en la forma en que se conciben, dejando a las plataformas digitales
que permiten estas conexiones, en un puesto de gran relevancia, conforme al papel que juega
cada una de las partes de la estructura social. Así mismo, el empleo se ha visto afectado de
distintas formas tanto para los empleados, como para los empleadores, dejando la
funcionalidad de cada uno de ellos en relación con las alternativas como el teletrabajo y el
corte de las jornadas laborales, decidir respecto a la continuidad de ellas en la estructura
social. En palabras de Radcliffe Brown, él afirma que, “Por la continuidad del
funcionamiento, se conserva la continuidad de la estructura” (Radcliffe-Brown A. R., 2007,
pág. 310), lo cual encaja muy bien, con el devenir de empleos que no pueden acaparar las
alternativas, dejando un estado crítico de desempleo en estos sectores.

Con lo anterior, es importante hacer hincapié en las implicaciones económicas, las cuales
ya afectan a distintos sectores a nivel mundial, y dejan en consideración, la búsqueda de
soluciones oportunas para un bienestar colectivo. En Colombia, el coronavirus ha afectado la
economía de manera significativa, dejando a muchas personas sin empleo y hasta varias
organizaciones y empresas sin ingresos, dando paso a el cierre de muchas de estas. Los
sectores que más se han visto afectados son el del turismo, el comercio y el entretenimiento,
los cuales antes de la pandemia, estaban emergiendo positivamente la situación financiera del
país. En este sentido, el país se ha visto en la necesidad de buscar otros caminos, sin
embargo, ya no en pro de una emergencia financiera, sino más bien, en una mitigación de la
pandemia. En este punto se podría considerar que más allá de la debilidad de algunos
sectores, la estructura por medio de las instituciones debe buscar una forma de darle
continuidad, pues Radcliffe Brown afirma que “La forma estructural puede cambiar, pero
siempre se debe mantener una continuidad en la estructura.” (Radcliffe-Brown A. R., 2007,
pág. 312).

En este punto, podría hacerse una analogía entre la vida social y orgánica como bien lo
propone Radcliffe Brown en “Sobre el concepto función en la ciencia social”. Para esto, se
tendrá también en cuenta, el primer planteamiento de esta idea dado por Durkheim (1895),
quien explicaba que la función de una institución social es la correspondencia entre ella y las
necesidades del organismo social. Esto, teniendo en cuenta el panorama del coronavirus,
podría ser evidenciado en diferentes aspectos. Uno de ellos es la forma en que las prioridades
han cambiado conforme al virus, dando preponderancia al sector de las ciencias de la salud y
a los que median las medidas para mitigar la propagación del virus. Esto, como bien dice
Durkheim, está dado por las necesidades que en medio de las circunstancias son dadas por su
funcionalidad.

Además, estas necesidades no son iguales para todos los sujetos. Brown habla de que
todos los seres humanos como individuos forman una red de necesidades sociales que son
básicas pero que al unirlas crean una estructura con una función determinada. De ahí que, la
pandemia a dejado en evidencia la gran desigualdad que vive el país, por un lado, la clase
trabajadora de estratos más bajos se ven gravemente afectada al no poder salir a trabajar por
su diario. Mientras que los sectores más grandes despiden y reajustan sus sistemas para
sobrellevar la crisis actual. Es acá donde las instituciones que median estas estructuras se
pronuncian para mitigar mediante apoyos a la clase más pobre quienes han dejado claro que
la economía del pais se mueve en gran parte por ellos. Esto da cuenta de un punto clave en la
teoría funcionalista, la vida social como una totalidad. Aunque, se evidencia la desigualdad
de clases, también se resignifica el valor de los unos con otros a la hora de conformar y
accionar dentro de una sociedad. Es necesaria la reciprocidad para el funcionamiento de una
estructura social.

Por lo anterior, y teniendo como referente las afirmaciones de Brown, “La continuidad de
la estructura social no se destruye por el cambio de sus unidades, (…) Según la función,
implica la noción de una estructura, constituida por un grupo de relaciones entre entidades
unitarias, siendo mantenida la continuidad de la estructura por un proceso vital.” (Radcliffe-
Brown A. R., 2007, pág. 308). Se podría decir que, en medio de la situación del coronavirus,
la estructura social se ha visto afectada de distintas maneras, trayendo como consecuencia
cambios significativos como las medidas de aislamiento y la cuarentena. Así mismo, las
diferentes entidades o instituciones que se relacionan entre sí, para el funcionamiento de la
estructura se han visto afectadas por estas medidas. Esto en cuanto a su labor, suspendiendo o
hasta aboliendo ciertas acciones en pro de la no propagación. Esto, ha generado que las
modificaciones que han hecho, tengan una continuidad incierta, pues teniendo en cuenta las
afirmaciones posteriores de Brown, el coronavirus es un fenómeno social que afecta
directamente al individuo y el cual, al tener involucrados varios hechos sociales, no puede ser
mitigado o controlado con facilidad, trayendo repercusiones relevantes, como la
reconfiguración de un proceso vital de la estructura.
 ● Radcliffe-Brown, A.R. (2007) “Sobre el concepto de Función en la Ciencia Social.”
en Bohannan, P. & Glazer, M. Antropología: Lecturas. Madrid: McGraw Hill. Pp. 308
-315 BC
● Radcliffe-Brown, A.R. (2007) “Sobre la estructura social.” en Bohannan, P. &
Glazer, M. Antropología: Lecturas. Madrid: McGraw Hill. Pp. 315-327 BC
● Durkheim, E. (2007) “Normas para la explicación de los hechos sociales.” en
Bohannan, P. & Glazer, M. Antropología: Lecturas. Madrid: McGraw Hill. Pp. 242
-61 BC

● Ministerio de Salud (2020). Situación Actual: NUEVO CORONAVIRUS.

La discusión sobre Durkheim me parece supert acertada, pero la de Radcliffe Brown está más
suelta y necesita ser desem espacada mas efectivamente. También les faltó una sección corta
de conclusiones. Sin embargo, en general, está muy alineado con los objetivos del taller.

Lecturas 2/2

Análisis 1.6/2

Redacción 0.9/1

Nota: 4.5