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CUADERNO:
MANOS A LA BORA: ECONOMÍA POLÍTICA, CAMBIO CULTURAL, DEMOGRÁFICO Y LOS MODOS DE
VIDA URBANIZADOS EN PUERTO RICO (1945-2000)
económico fue catapultada al término de la Segunda Guerra Mundial. Desde las primeras
iniciativas legislativas aprobadas en 1941, la estrategia de desarrollo estuvo pensada para
promover desde la estructura gubernamental insular, un esquema de tácticas para el
desarrollo económico en la Isla, fundamentado principalmente, en una agrupación de planes
para promover y alcanzar la industrialización de la Isla. La idea no es novel. La experiencia
puertorriqueña fue pensada había sido utilizada en otras partes del mundo. La manera como
se hizo en Puerto Rico sí fue novedosa. El principio filosófico que argumenta que el Estado
tiene un rol protagónico e indispensable en la actividad económica tanto en la esfera de la
regulación y la fiscalización, como en la promoción del desarrollo económico, no es nueva.
Quizás lo “novedoso” es que ese principio filosófico ya no era del exclusivo dominio de la
izquierda intelectual.
El marxismo socialdemócrata alemán desde finales del siglo XIX, así como la escuela
austríaca del Marxismo, proponían que el Estado debe tener un rol protagónico en la esfera
de la actividad económica. Ese papel incluye desde la regulación y fiscalización de la
actividad económica, pasando por acciones distributivas de la riqueza para incluir promover
e incentivar la actividad económica. Proponían igualmente y contrario al mismo pensamiento
político de Karl Marx, que el Estado tiene una responsabilidad como garantizador de un
nivel de equidad social, inclusive para crear una red de seguridad social destinada a proteger
los sectores más vulnerables ante las fluctuaciones y frecuentes crisis en la economía. Por
otra parte, era ya conocido el diseño y relativo éxito inicial que tuvieron los planes de cinco
años inicialmente puestos en marcha por el mismo Vladimir Lenín después de la Revolución
de 1917 en Rusia y la creación de la Unión de las Repúblicas Socialistas Soviéticas. Estos
planes fueron una estrategia para el desarrollo económico totalmente orquestada desde el
aparato de Estado dirigida a la industrialización masiva de la ciudad y el campo a partir de
la década de 1920. En América Latina ese principio de industrialización desde el Estado fue
recogido por una de las figuras mas puntales del populismo modernista latinoamericano en
la década de 1920. Lázaro Cárdenas adoptó el modelo soviético, adaptándolo a las
realidades económicas de México. Las promesas del armisticio después de la Revolución
Mexicana de 1910 estaban muy lejos de cumplirse. Cárdenas entonces orquestó un
abarcador proyecto de reforma agraria basado en el doble propósito de industrializar la
agricultura (proyecto semilla de lo que se conocerá como la Revolución Verde a partir de la
década de 1950) mientras se gestó un proyecto de estabilización y reforma social en el
campo basado en la distribución de tierras o ejidos. Proyectos de industrialización y
programas de distribución social también fueron implementados en el Brasil de Getulio
Vargas y las Argentina de Juan Domingo Perón.
Los Estados Unidos de la década de 1930 no estuvo ajeno a las corrientes políticas
y económicas que para esos tiempos sucedían en el mismo país y en otras partes del mundo.
El país estaba inmerso en el doble golpe económico y social que había traído hambre a un
considerable segmento de la población ocasionado por los dramáticos eventos de sequías
ocurridos en todo lo largo y ancho de los territorios del centro continental hacia el oeste
del Río Misisipi1. El segundo evento económico catastrófico fue el impacto financiero que
1 A este episodio se le conoce como el Dust Bowl. El evento climático de sequía se había extendido por poco más de una
década, pero su efecto se multiplicó entre 1927 a 1932. Para entonces el extenso sistema de represas construidas en
el Río Colorado, los canales que de éstas salen sobretodo en dirección del oeste y suroeste, así como el sistema de
embalses a los que llegan esos canales, nada de eso existía. La sequía literalmente desertificó el suelo, el que era
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tuvo la precipitada caída de la Bolsa de Valores de la Ciudad de Nueva York en 1929. Estos
eventos degeneraron en una depresión y contracción económica que persistió por una
década, hasta el mismo umbral de la Segunda Guerra Mundial. Durante la década, el discurso
y cultura política estadounidense tuvo que replantearse el rol del Estado a todos los niveles,
pero en particular, al nivel federal.
Figura #1: De izquierda a derecha, una tormenta de polvo cruzando cerca de los límites metropolitanos de la ciudad de St. Louis, Misuri
en 1931; una tormenta de polvo cruzando las zonas rurales de Iowa, 1929. (National Archives and Records Administration,
EE. UU.).
levantando en gigantescas y catastróficas nubes de polvo que se podían extender por millas. Estos eventos todavía
suceden hoy en toda la región central de las planicies norteamericanas. Empero, los sistemas de aguas subterráneos,
colosales represas, canales y embalses reducen el impacto mortífero sobre la población humana.
6 CUADERNO: OPERACIÓN MANOS A LA OBRA; ECONOMÍA POLÍTICA Y CAMBIO CULTURAL
mismas ciudades las que cargan con la principal responsabilidad por la seguridad social, la
infraestructura y bienestar económico y los servicios y utilidades. En el pasado como hoy,
son las ciudades las cuentan con el mayor peso representativo en la Cámara de
Representantes federal. Dependiendo del estado y su historia demográfica, pueden también
llegar a dominar las dos candidaturas que cada estado tiene al Senado.
La crisis económica y social de la década de 1930 desembocó en una verdadera
crisis nacional para los Estados Unidos. El alivio a los problemas sociales y económicos
generados por la depresión no pudieron ser ni tan siquiera aliviados, desde la sola acción
de las jurisdicciones locales. Esta situación creaba enormes inconsistencias geográficas y
demográficas. Consecuentemente, hubo un incremento en los problemas sociales asociados
con la pobreza extrema, el hambre y la frecuencia episódica de las enfermedades de
contagio. Las ciudades no estuvieron exentas a estos problemas. En muchos casos, se
volvieron los epicentros muy a pesar de que éstas contaban con más recursos para enfrentar
lo peor de la contracción económica. Los intentos por parte de las ciudades de Nueva York,
Filadelfia, Chicago, Los Ángeles y San Francisco por aliviar los severos problemas de
desempleo y salud provocaron una avalancha migratoria de cientos de miles de desposeídos
quienes emigraron desde las geografías más golpeadas por el hambre y las enfermedades
epidémicas que explosionaron durante la década. Flujos de personas desde las planicies en
el centro del país marcharon en dirección de estas y otras ciudades. Alrededor y en el interior
de éstas se conglomeraron cientos de miles de estadounidenses en arrabales o “make-shift
shanty-towns” a la espera de poder acceder a los “public soup kitchens” y los limitados
servicios de salud que las ciudades proveía. También se dispararon largas filas de personas,
hombres y mujeres con la esperanza de lograr un contrato de empleo en los puestos
temporeros que afloraban para proyectos locales de infraestructura de calles, alambrado
eléctrico y el más común, limpieza. Estos esfuerzos no fueron suficientes y eventualmente,
la escasez alimentaria terminó golpeando a las ciudades.
Es para esa misma época que al interior de la cultura política federalista
estadounidense toman prioridad las preguntas que hacía más de 60 años incidían,
sobretodo en los círculos intelectuales y políticos del noreste del país, sobre qué papel debía
tener el Estado, en específico, cuál debe ser el rol del gobierno federal en materia de
seguridad social, empleo y desempleo, desarrollo económico, infraestructura, vivienda,
educación y salud. Esas preguntas se hicieron urgentes con la depresión justo en los albores
de la política del Nuevo Trato (New Deal) y la presidencia de Franklin Delano Roosevelt. El
pensamiento socio económico del británico John Maynard Keynes (1885-1946), comienza
a ser un factor de influencia en el proceso político económico al interior de la Casa Blanca.
Otras figuras locales fueron calladamente repensadas, como fue el caso de Eugene V. Debs2
(1855-1926) o el industrialista utópico, el inglés Robert Marcus Owen3 (1771-1858).
2 Activista, sindicalista, escritor, senador en el estado de Indiana y miembro del Partido Demócrata. En 1901 fundó el
Partido Social Demócrata de los Estados Unidos en línea ideológica y programática con partidos similares europeos,
especialmente el Partido Social Demócrata alemán. En 1918 fue acusado y encarcelado por sedición por su oposición y
protesta contra la entrada de los Estados Unidos a la Primera Guerra Mundial. La sentencia le fue conmutada en 1921
y murió en 1926.
3 Nacido en Gran Bretaña fue un empresario inglés quien abrazó para finales del siglo XVIII las ideas del socialismo utópico
inglés. Implementó reformas laborales en su fábrica mejorando las condiciones de trabajo, salarios, seguridad y hasta
pensión de sus trabajadores. Defendió la idea que entonces se denominaba como “socialismo cooperativo” y hoy se
conoce mejor como el movimiento cooperativista, donde cada uno de los componentes humanos que participan de una
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Figura #2: De izquierda a derecha, “hotterville” o arrabal cerca del centro de la ciudad de Seatle (1931); arrabal en vecindario del Bronx
en la Ciudad de Nueva York (1933); filas para llenar solicitudes de empleo en la ciudad de Chicago (1931); fila para recibir
un plato de comida en un “soup-kitchen” en la ciudad de Pittsburg (las filas eran dividas por sexo, 1935). Library of Congress
Como sabemos, la iniciativa del Nuevo Trato asignó un importante rol social y
económico al gobierno federal, otorgándole a éste un principal papel como impulsor de
estrategias para el mejoramiento de la vida social y económica de los ciudadanos a través
de programas de incentivos en diferentes renglones y sectores de la economía nacional, y
en la esfera de la seguridad social. Esta última incluyó los renglones de salud, educación y
vivienda. La política del Nuevo Trato no sustituyó, ni promovió sustituir la injerencia
protagónica que tienen las jurisdicciones locales (ciudades, condados, estados) en estos
ámbitos. Solamente, pretendió en algunos casos, añadir a los programas que localmente se
desarrollaban, en otros ayudar a financiar proyectos de infraestructura extra e intra estatales,
como fueron los proyectos de construcción represan hidroeléctricas en el Río Colorado (eje.
Hoover Dam) y proyectos para el manejo y distribución de agua hacia el oeste y suroeste de
la nación. La administración Roosevelt justificó el alcance de sus acciones como respuestas
a una emergencia nacional. Los programas que fueron creados, todos, tuvieron un carácter
temporero. Durante este periodo la única legislación nacional que se adelantó en materia
de seguridad social como una garantía nacional para todos los ciudadanos fue la creación
empresa (granja, taller, fábrica) participan de la propiedad colectiva de la empresa y sus beneficios. Fundó cooperativas
de trabajo en 1825 en los Estados Unidos (New Harmony, Indiana) y en Gran Bretaña en 1839. Murió en Escocia en
1858.
8 CUADERNO: OPERACIÓN MANOS A LA OBRA; ECONOMÍA POLÍTICA Y CAMBIO CULTURAL
en 1932 del plan de retiro conocido como la Administración del Seguro Social de los
Estados Unidos. Al interior de la estructura administrativa que se creó para administrar los
programas de emergencia y asistencia social en los Estados Unidos despuntó una figura que
más tarde se vinculará con Puerto Rico, precisamente para inicios de la década de 1940;
Rexford Guy Tugwell (1891-1979).
Economista y planificador, antes de su designación como gobernador de Puerto Rico
en 1941, Guy Tugwell laboró en diferentes puestos en la administración Roosevelt,
destacándose como director del Federal Emergency Relief Administration (FERA), una
entidad muy similar en programas a la recién creada en la Isla, Puerto Rico Emergency Relief
Administration (PRERA). También fue director del New York City Planning Commission.
Ambas posiciones serán experiencias determinantes para su rol como gobernador. Entre sus
primaras acciones fue impulsar en la Asamblea Legislativa de Puerto Rico la creación de la
Junta de Planes y Zonificación Urbana de Puerto Rico, mejor conocida hoy como la Junta de
Planificación. También impulsó la creación de la Autoridad de Tierras y la Autoridad de
Transporte de Puerto Rico. Esta última consistió en tres divisiones, una de ella habrá de ser
bien importante en los planes de desarrollo. Esas divisiones fueron, la División de Aviación,
la División de Puertos y la División de Autobuses. Esta división se convirtió en el primer
sistema operario público para el transporte colectivo en los Estados Unidos.
Figura #3: De izquierda a derecha, Rexford Guy Tugwell (1941), Teodoro Moscoso (1960), Rafael Picó (izquierda) y Roberto Sánchez
Vilella (derecha; atendiendo un diplomático en La Fortaleza) (1955). Fotos Biblioteca Digital de Puerto Rico, Colección
Puertorriqueña, UPR RP
Rexford Guy Tugwell encontró eco y apoyo para sus ideas sobre el papel
gubernamental en la planificación de estrategias de desarrollo económico en tres
importantísimas figuras puertorriqueñas. Entre los cuatro se constituirán como los
arquitectos intelectuales del modelo de desarrollo puertorriqueño que cuajará a lo largo de
la década de 1940. Esas figuras fueron: Teodoro Moscoso, Rafael Picó y Roberto Sánchez
Vilella. Cada una ocupará y en ocasiones, se alternarán en puestos claves en la toma de
decisiones asociada con la estrategia de desarrollo. Teodoro Moscoso encabezará la
Compañía de Fomento Industrial y el Banco Gubernamental de Fomento. También formará
parte de la Junta de Gobierno de la Autoridad de Transporte de Puerto Rico. El geógrafo y
planificador puertorriqueño, Rafael Picó encabezará la Junta de Planificación y dirigirá los
esfuerzos de desarrollo y eliminación de arrabales de la Autoridad de Hogares de Puerto
JOHN H. STINSON FERNÁNDEZ, PHD 9
Figura #4: La primera fase de Operación Manos a la Obra promovió principalmente, el establecimiento de industrias y plantas
manufactureras para la producción de bienes no duradero y consumo. Tal fue el caso de la panificadora Holsum que abrió
su primera planta en 1958 en Bayamón. El éxito de la empresa la llevó a expandir sus facilidades en el Barrio Candelaria en
Toa Baja para 1975. La empresa fue adquirida por la mexicana Bimbo cuando esta última adquirió en los Estados unidos la
operación de Sara Lee. La Panificadora Pan Pepín, competidor de Holsum también se expandió de una panadería local en el
sector de Hato Rey a un enorme complejo de producción en Bayamón. Fotos Biblioteca Digital de Puerto Rico, Colección
Puertorriqueña, UPR RP y Municipio de Bayamón.
Este modelo no fue exclusivo de Puerto Rico. Se ensayó en otros países como México.
Fue también el modelo que facilitó la transformación de otros países pequeños como Puerto
Rico. Tal es el caso de Singapur y Taiwán, o la ciudad de Hong Kong. Más recientemente, es
el modelo que siguió la República Dominicana comenzando en la década de 1980,
incluyendo, el componente de una emigración planificada. Panamá también implementó una
versión contemporánea del modelo después de la invasión estadounidense en 1989.
Previamente, Costa Rica también siguió una versión mas cautelar y pausada de este modelo
añadiendo un fuerte componente proteccionista del medio ambiente y una orientación social
10 CUADERNO: OPERACIÓN MANOS A LA OBRA; ECONOMÍA POLÍTICA Y CAMBIO CULTURAL
4 Constituye un código que regula la navegación y comercio entre las costas territoriales de los Estados Unidos. Esta
regulación aparece en el Acta Jones de 1920, mejor conocida como Merchant Marine Act of 1920. La sección #7 del
Acta regula el tránsito naviero entre todos los estados federados y territorios no incorporados de los Estados Unidos
estableciendo tres términos para el tránsito naviero: (a) la carga marítima se tiene que hacer en navíos de propiedad y
licencia de los Estados Unidos; (b) en barcos construidos en los Estados Unidos y (c) en barcos operados con una
tripulación compuesta mayoritariamente por ciudadanos estadounidenses. El sector marítimo naviero de los Estados
Unidos tiene los costos operarios más altos del mundo, inclusive, entre países como Noruega, Alemania o Japón que
pagan salarios mucho más altos a los que se pagan en los Estados Unidos en este sector.
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5 La producción de petróleo en Venezuela creció de manera exponencial durante la Segunda Guerra Mundial. En parte
gracias al descubrimiento de enormes reservas del crudo al tiempo que se convirtió en el mayor proveedor de petróleo
para los Estados Unidos en tiempos de la guerra. En 1976 durante el primer término de la presidencia de Carlos Andrés
Pérez se creó la empresa estatal, Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) y se nacionalizó toda la actividad de extracción
y exportación del crudo al monopolio de esta empresa. La empresa puede libremente participar en los mercados
bursátiles en el mundo y es propietaria de varias filiales a nivel internacional, entre las que destaca la empresa
estadounidense CITGO Petroleum (Texas). También es dueña de cuatro refinerías en Illinois, Luisiana y Texas. PDVSA
también mantiene operaciones conjuntas (aunque en litigios) con la empresa estadounidense Conoco Phillips.
12 CUADERNO: OPERACIÓN MANOS A LA OBRA; ECONOMÍA POLÍTICA Y CAMBIO CULTURAL
Figura #5: Commonwealth Oil Refining Company fue pensada y diseñada que simbolizara el éxito del modelo de desarrollo industrial
puertorriqueño y la solvencia y sustentabilidad que éste aparentemente ofrecía. Entre 1950 y 1975 ese propósito se cumplió.
Hasta que en 1973 se interpuso a la viabilidad de esos planes el embargo petrolero a los Estados Unidos por parte de los
países productores del crudo. De izquierda a derecha, la primera fase de construcción de la empresa en Guayanilla, cerca de
la bahía en 1954. La segunda y más amplia fase de expansión y construcción ocurrió para principios de la década de 1960
en Peñuelas. Esa fase consistió en las operaciones de la refinería.
acostumbrado a recibir pagos con intereses por cada préstamo y deuda emitida, se vio
obligado a recurrir a la Asamblea Legislativa para proponer la liquidación y cierre de la
CORCO. Cierre que ocurrió en 1982. Con la desaparición de la CORCO, Puerto Rico se
convirtió en un destino totalmente importador de combustible y con una capacidad limitada
para su almacenamiento. La esperada expansión de esta fase del proyecto desarrollista
sucumbió con la desaparición de la CORCO.
Operación Manos a la Obra: Tercera Fase
Para la segunda mitad de la década de 1970 la expresión “Operación Manos a la Obra”
desapareció de la jerga política puertorriqueña. El proyecto estuvo a lo largo de su historia
vinculado con el Partido Popular Democrático. El solo mencionarlo significaba para la
oposición política reconocer la acción política “popular” y el éxito que ésta había tenido. Tal
hecho resultaba muy problemático cuando precisamente para esa década comienza el ciclo
político, que persiste hasta nuestros días, de alternancias políticas administrativas entre el
Partido Popular y el Partido Nuevo Progresista. Para este partido, vinculado a un proyecto
dirigido a anexar a la Isla como estado federado a los Estados Unidos, con un corte
ideológico mucho más conservador que el defendido por el Partido Popular, asociar la Isla
con la posible autonomía política y económica que Operación Manos a la Obra había traído,
aunque de manera temporera, no era una opción viable a su proyecto y versión política de
anexión. Consiguientemente, entre 1976 a 1978 la frase desapareció de todo tipo de
documento gubernamental hasta que para la década de 1980 ya ni siquiera era utilizado
por el propio Partido Popular.
La tercera fase del modelo desarrollista comienza a tomar forma por un interés muy
específico que se desarrollaba en los Estados Unidos desde finales de la década de 1960.
Si bien es cierto, que la manufactura de bienes económicos no duraderos dejaba de ser
patrimonio económico manufacturero exclusivo a ese país, el ascenso de otros sectores
tecnológicos reflejaba un peso cada vez mayor y hegemónico en la acumulación de capital
estadounidenses. Esos sectores en ascenso estaban principalmente formados por el sector
farmacéutico por un lado, y por el otro, por la tecnología electrónica de las comunicaciones
cada vez más asociada al desarrollo y uso de computadoras personales y los programas
necesarios para su operación 6 . Este sector, como otros vinculados a la tecnología y la
automatización, se caracterizan por la necesidad de grandes sumas de capital para su
inversión, razón por la cual el sector es denominado con el término, capital intensivo. La
inversión de capital y el tipo de manufactura empleada no está destinada a la masificación
del empleo. Todo lo contrario, es un sector que emplea a una fuerza de trabajo
6 En este punto me parece que es muy importante aclarar que existen dos sectores económicos manufactureros en los
Estados Unidos que se compartan de una manera diferente a lo aquí reseñado. Los Estados Unidos es indiscutiblemente
hoy el mayor productor de armas en el mundo y sigue siendo líder en el diseño de tecnologías aeroespaciales y militares
en el mundo. Ese sector sin embargo, es uno altamente reglamentado, fiscalizado y subsidiado por el aparato estatal
federal estadounidense, que es a su vez, su principal cliente. Inclusive, la venta de armas al exterior tiene que cumplir
con estrictas medidas regulatorias que incluyen la aprobación del Departamento de Estado y el mismo Congreso
estadounidense. Este sector no participa en un mercado abierto de consumo de bienes. El otro sector es el agrícola
manufacturero de alimentos. Los Estados Unidos posee una de las manufacturas procesadoras de alimentos en el mundo
más innovadoras que existen en ese mercado. La agricultura está totalmente subsidiada con agua y una bonanza de
créditos, así como el mismo programa de asistencia nutricional o “cupones”. También es un sector que disfruta de
amplias medidas proteccionistas contra competidores agrícolas mundiales. No obstante, los Estados Unidos ya no es el
mayor productor de alimentos en el mundo ni es el mayor consumidor. Ese lugar lo ocupa hoy China. China es el mayor
productor agrícola neto de alimentos y es también el mayor importador y consumidor neto de alimento en el mundo.
14 CUADERNO: OPERACIÓN MANOS A LA OBRA; ECONOMÍA POLÍTICA Y CAMBIO CULTURAL
Figura #6: Para el año 2002 la Compañía de Fomento Industrial en sus informes anuales ilustraba la importancia que tenía para la
economía de Puerto Rico el número de filiales de farmacéuticas establecidas en la Isla. No todas eran de origen
estadounidense, como son las alemanas Pfiser y Merck, pero todas tenían que estar incorporadas en los Estados Unidos, así
como sus patentes, para poder establecerse en Puerto Rico. Luego de la eliminación de la Sección 936 solamente quedan
siete filiales todavía operando manufactura en Puerto Rico, destacándose Lilly en Carolina. La mayoría solamente mantienen
algún tipo de facilidades de almacén.
Si bien es cierto, que estas empresas estaban exentas del pago de contribuciones
por concepto de ingresos generados por sus ganancias al nivel federal y disfrutaban también
de varias exenciones contributivas a nivel local, los bancos que recibían las cuentas de
depósitos no estaban exentos al pago de contribuciones por esas cuentas y los servicios
prestados y cobrados por esas cuentas de depósitos y carteras de inversiones. De esta
manera, la banca local se convirtió en la mayor fuente de ingresos contributivos que eran
remitidos al Departamento de Hacienda de Puerto Rico a lo largo de la década de 1980
hasta el mismo momento cuando la Sección 936 desapareció en el año 2006. A partir de
16 CUADERNO: OPERACIÓN MANOS A LA OBRA; ECONOMÍA POLÍTICA Y CAMBIO CULTURAL
ese mismo año y ante la falta de un modelo capaz de atraer capital foráneo o incentivar el
empresarismo local (fuera de la esfera de contratos y clientelismo político partidista), la
economía entró a un espiral de recesión y contracción económica que se acerca a cumplir
15 años, la más prolongada en el hemisferio occidental.
El estancamiento del modelo de desarrollo junto con la eliminación de la Sección 936
incrementó la existente estrategia por parte de la alternancia política en la administración
gubernamental de depender de continuamente pedir y mantener abierta un grifo de
asignaciones de fondos federales estadounidenses, o lo que se puede denominar como una
FEDERALIZACIÓN MONETARIA O FISCAL de la operación y la administración pública del gobierno
central de la Isla, sus corporaciones públicas y sus municipios. Municipios que en su mayoría
(al menos 60 de los 78 municipios) siempre han contribuido a un acumulado déficit
presupuestario y estructural de deuda pública. La estrategia gubernamental cambió su
orientación política de estimular la inversión para crear actividades empresariales
productivas a una estrategia basada en la construcción de grandes proyectos de
infraestructuras (a nivel isla y a nivel municipal) acompañada de un planificado énfasis en las
esferas de la circulación y el consumo como el principal indicador y garantizador de la
actividad económica. Este renovado énfasis desistió de la creación de empleos, incentivó la
baja en la tasa de participación laboral (hoy por debajo del 38% de la fuerza laboral hábil
para el empleo), la dependencia en fondos federales para solventar programas de asistencia
económica, las formas de trabajo irregular, mal llamadas “informales” y la no diferenciación
y regulación sobre la fuente monetaria (eje. narcotráfico, lavado de dinero) que alimenta una
circulación consumista que excede por mucho en dólares la actividad productiva.
Gráfica #1: Tasa de participación laboral en Puerto Rico (2006-2011). Fuente; Departamento del Trabajo y Recursos Humanos de Puerto
Rico.
éstos estuvieran bien pagados (de acuerdo con los criterios de la época). Esta estrategia fue
reemplazada por una basada en implorar en Washington por una continua e incremental
asignación de fondos federales a todos los ámbitos de la gobernabilidad económica y social
de Puerto Rico. La segunda estrategia (y la más reciente) se enfocó en enfrentar la
desaparición del ingreso contributivo resultado de los depósitos de las empresas acogidas
a la Sección 936 en la banca local con una estrategia de un desmedido y acelerado proceso
de ENDEUDAMIENTO PÚBLICO. Este se caracterizó por un sistemático financiamiento de deuda
basado en la emisión de deuda mediante la aprobación legislativa de bonos para financiar
la operación gubernamental cada vez más costosa, los planes de retiro, el déficit estructural
y una deuda acumulada de las funciones del aparato gubernamental. Vale añadir y aclarar
que la federalización y dependencia en asignaciones fiscales federales NO es una actividad
económica gratuita. El continuo recibo de asignaciones de fondos federales conlleva y exige
la inversión gubernamental de fondos presupuestados locales para administrar y cumplir
con los términos y requisitos de esos mismos fondos fiscales a los programas de
beneficencia federal.
Operación Manos a la Obra: cambio cultural y transformación social
La organización material y el modo de vida cultural que hubo en la sociedad puertorriqueña
hasta la Segunda Guerra Mundial dejó de existir para finales de la década de 1960. La
sociedad agraria caracterizada por las experiencias culturales y hasta identitarias
fundamentadas en los nexos de proximidad rural y una geografía cultural dominada por la
subsistencia económica en las montañas o en las costas, esa modalidad de vida social fue
sustituida por la expansión edificada de una nueva geografía arquitectónica y espacial. Esta
se caracteriza por el tránsito, la distancia, la dispersión horizontal de los asentamientos
construidos y una densificación dominada por la arquitectura edificada de los espacios y
mucho menos por la densificación vertical de la población. El urbanismo se convirtió en el
modo de vida puertorriqueño. Un urbanismo poco tradicional si lo comparamos con los
centros metropolitanos latinoamericanos, canadienses, asiáticos y europeos; o con las
ciudades del corredor urbanos del noreste metropolitano estadounidense.
El urbanismo puertorriqueño está dominado por el perpetuo tránsito motorizado e
individualizado, por una planificada distancia necesaria a recorrer para poder realizar o
participar en cualquier actividad económica de empleo, comercio y consumo, banca o la
interacción social basada en el ocio. La vida cultural está también dominada por la
energización eléctrica de todo cuanto rodea la vida material de la cultura. Todo eso fue
levantado durante un periodo relativamente corto de tiempo. Entre 1950 y 1970 la sociedad
y demografía agraria de 1940 fue sustituida por una sucesión de generaciones totalmente
desvinculadas del campo, cuya vida material transcurre en una dinámica cultural urbana del
espacio siempre continuo tránsito. Ese tránsito no se limita a la movilidad entre puntos
construidos en la Isla. El tránsito también es migratorio. Un patrón migratorio circular,
continuo y frecuente se asentó como parte de la vida cultural puertorriqueña, inclusive
alternado la composición y densidad demográfica de quienes étnicamente pueden ser
identificados o prefieren ser identificados como puertorriqueños. La Isla ya no es el asiento
primordial identitario de esa identificación étnica. En términos exclusivamente demográficos
ese lugar se trasladó primero, al corredor urbano en el noreste estadounidense, donde
todavía se encuentran los asentamientos más antiguos puertorriqueños. A esta localidad de
18 CUADERNO: OPERACIÓN MANOS A LA OBRA; ECONOMÍA POLÍTICA Y CAMBIO CULTURAL
académicas. Esa expansión se extendió también a sistemas universitarios privados, entre los
que destacan; la Universidad del Sagrado Corazón, la Universidad Pontificia Católica de
Ponce, el Sistema de la Universidad Ana G. Méndez y el Sistema de la Universidad
Interamericana de Puerto Rico. Estos últimos dos rivalizan en extensión geográfica y cantidad
de programas con el Sistema de la Universidad de Puerto Rico.
Figura #7: Junto con la tenencia privada y uso del automóvil, la construcción numerosa de centros comerciales fue uno de los símbolos
consistentemente utilizados como propaganda ideológica y valorización cultural de “progreso” y “calidad de vida” durante
el periodo de mayor crecimiento y expansión económica entre 1950 y 1975. La imagen recoge un esquema gráfico
presentado en 1963 donde se muestra la construcción del centro comercial, Plaza Las Américas y la red vial de autopistas
que facilitaría su acceso desde el oeste y desde el sur. En la imagen se aprecia los terrenos al este del complejo limpios de
los arrabales que habían cerca de la procesadora y vaquería Tres Monjitas. También se aprecia al oeste de la imagen, la
primera fase terminada del residencial público, Nemesio Canales. Todavía se aprecia por el norte el surco del Río Puerto
Nuevo en su recorrido hacia la Bahía de San Juan. Foto Biblioteca Digital de Puerto Rico, Colección Puertorriqueña, UPR RP.
ilusorio) que desde el año 2014 exige que el monto de la deuda pública de la Isla se audite
desde diferentes sectores y movimientos políticos, la Historia Económica de ese proceso y
sus actividades relacionadas, no necesitan, mucho menos requiere, de una narrativa
denunciativa y populista para hacer una auditoria. Los fondos documentales para realizar
ese ejercicio existen y siempre han estado disponibles. Algunos, por los pasados nueve años,
otros desde más tiempo.
El ARCHIVO GENERAL DE PUERTO RICO cuenta con el Fondo De la Oficina del
Gobernador (1935-1960). Ese fondo documental, disponible desde el año 2012, contienen
entre sus miles de cajas con legajos, la colección completa de todos los estados financieros
e informes anuales correspondientes al Banco Gubernamental de Fomento de Puerto Rico
para los años entre 1942 a 1958. Cuenta también con informes anuales para la
Administración de Fomento Industrial de Puerto Rico (1945-1957) y para las corporaciones
públicas como la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados, la Autoridad de las Fuentes
Fluviales y hasta para la Autoridad de Transporte de Puerto Rico, cuya División de Aviación
tuvo a su cargo la ampliación del Aeropuerto de Isla Grande (1946-1949) y la planificación
y construcción mediante financiamiento del Aeropuerto Internacional en Isla Verde, hoy, Luis
Muñoz Marín (1950-1956).
El portal electrónico del Banco Gubernamental de Fomento de Puerto Rico cuenta
con cinco series especializadas en datos estadísticos económicos (econometría) que entre
otras cosas, incluye los informes auditados para Puerto Rico (1998-2015) [http://www.gdb-
pur.com/spa/investors_resources/commonwealth-cafr.html], informes anuales (2001- 2014)
[http://www.gdb-pur.com/spa/investors_resources/gdb-annual-report.html] e informes
sobre el flujo de caja (Fondo General del Estado Libre Asociado), informes sobre el índice
de precios y de ventas, entre otros. [http://www.gdb- pur.com/spa/index_spa.html] Queda
por preguntar entonces; ¿por qué un proyecto académico y científico para desarrollar esta
indispensable Historia Económica del endeudamiento puertorriqueño no se está elaborando
y desarrollando desde la Academia? Posiblemente, porque requiere de un arduo trabajo de
investigación científica documental con fuentes primarias. Esta faena requiere de centenares
de horas dedicadas a un tipo de trabajo totalmente ajeno a la acostumbrada renta resultado
de la consultoría. Así las cosas, constituye una actividad totalmente ajena a la práctica de
disciplinas tales como la Economía o la Ciencia Política en Puerto Rico.
Todavía hoy prevalece en la discusión política singularizando el origen de la “crisis”
como resultado del cierre de las operaciones gubernamentales del Estado Libre Asociado
en el año 2006. Evento que a su vez se dice fue el resultado de un tranque político partidista
entre la administración gubernamental encabezada por el Lcdo. Aníbal Acevedo Vilá del
Partido Popular Democrático y la entonces Asamblea Legislativa, controlada por el Partido
Nuevo Progresista (PNP) (partido dividido entonces, internamente por dos bandos, unos
denominados como “auténticos” y los otros afiliados a la figura política del Dr. Pedro
Rosselló). Otra parte de esa discusión política atribuye la presente situación a la desaparición
de la Sección 936. Ambas racionalidades no son incorrectas, pero no explican un proceso
económico de endeudamiento que ya había comenzado tan temprano como 1975. Un
examen superficial de la documentación en el Archivo General de Puerto Rico apunta que la
historiografía económica está constituida por varios escenarios caracterizados por la
acumulación decenal de los indicadores numéricos de la actividad económica. Estos
indicadores exhiben al menos, seis (6) importantes factores asociadas a lo que denomina
JOHN H. STINSON FERNÁNDEZ, PHD 21
como la “crisis” económica y fiscal de Puerto Rico. Cada uno de estos factores contiene una
“inflación” de múltiples variables económicas, políticas y sociales, así como demográficas.
La baja tasa de participación laboral en Puerto Rico es posiblemente, uno de los
peores problemas económicos, sociales y culturales que incide de manera irremediable,
sobre la presente crisis de contracción y recesión económica. Puerto Rico tiene la tasa más
baja de participación laboral de todo el hemisferio posiblemente en el mundo, para una
economía que no está basada en actividades de subsistencia económica agrícola a
agropecuaria. La baja tasa de participación laboral y escasa participación contributiva por
concepto de ingresos de esa población está paralela del indicador más alto en el hemisferio
de participación y dependencia en los programas de beneficencia y asistencia
gubernamental, así como dentro de la jurisdicción de los Estados Unidos.
FIGURA #8: La frágil situación económica de Puerto Rico se ilustra muchas veces, por el alto número de negocios y propiedades que han
cerrado y han sido abandonadas en la Isla, particularmente, en San Juan. Otro indiscutible indicador es la tendencia
emigratoria que ya se registraba desde el año 2011 y que para el año 2015 sobrepasaba la cifra de 225,000 personas.
Esta tendencia se disparó después del paso del Huracán María con un efecto multiplicador que ya ha añadido unas 250,000
personas a esa cifra. (Foto Noticel, 2018)
Gráfica #2: Ilustración comparativa sobre la tendencia recesionista y contracción económica de Puerto Rico desde el año 2006 al año
2016. La primera gráfica ilustra la contracción del Producto Interno Neto (PIN), mientras la segunda ilustra la caída de todos
los indicadores de la actividad económica de la Isla. Fuente: Banco Gubernamental de Fomento de Puerto Rico.
TEXTOS
NOTA AL LECTOR:
Ø Los siguientes títulos pertenecen a la colección personal del autor. Éstos sin embargo, forman
parte de la Colección Puertorriqueña del Sistema de Bibliotecas de la UPR RP. Todos estos títulos
están también disponibles en la Colección de Circulación. Ambas colecciones están ubicadas en
la Biblioteca General José M. Lázaro.
Ø Algunos títulos forman también parte de otras colecciones en el recinto riopedrense como por
ejemplo, la Biblioteca de Planificación Rafael Picó, la Biblioteca de Administración Pública
(Facultad de Ciencias Sociales) y el Centro de Investigaciones Históricas (Facultad de
Humanidades).
Ø Cada ficha bibliográfica ha sido redactada utilizando como inicio el nombre de pila de su autor
o autores. Esta acción es intencional, pensada en facilitar la búsqueda electrónica de mis
estudiantes quienes no pocas veces, prefieren utilizar el metabuscador comercial GOOGLE®.
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