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Universidad Autónoma del Estado de

México

Facultad De Medicina Veterinaria Y Zootecnia

Cirugía 1

Resumen Apuntes Anestesia

Docente: José Mauro Mora

Pamela Arista Rodríguez

Sexto Semestre Grupo 301

2020A
VALORACIÓN PREANESTÉSICA Y RIESGO ANESTESICO
La evaluación preanestésica del paciente previo al proceso anestésico es de vital
importancia, con base a esa evaluación, es posible conocer el estado físico y
determinar en parte el riesgo anestésico. De esta forma, el resultado de la
investigación puede identificar complicaciones potenciales en la anestesia, así
como mejorar la condición del paciente antes de someterse al proceso anestésico.
Esta valoración preanestésica también ayudará a escoger con antelación el
protocolo y/o técnica anestésica necesaria para el paciente de acuerdo a su
condición. Esta valoración deberá de realizarse poniendo particular atención en los
sistemas cardiovascular, respiratorio, hepático, renal y nervioso. Es un error
diagnosticar el estado de salud en el quirófano; no hacer el diagnóstico previo
evita determinar si los problemas que han aparecido durante el proceso
anestésico son resultado de la propia técnica anestésica, o los anestésicos han
exacerbado los signos de enfermedad ocultos y que no fueron adecuadamente
diagnosticados en el periodo preanestésico. Escoger el tranquilizante, sedante y/o
anestésico es de importancia en función del estado físico del paciente, sin
embargo, es igualmente importante la manera en la cual esos fármacos son
utilizados. Esto determina la calidad del manejo anestésico.
La historia clínica y el examen físico general
El Expediente Clínico Orientado hacia Problemas (ECOP) es una metodología
médica que permite, de manera ordenada y secuencial, organizar la información
del paciente para llegar a un diagnóstico, establecer un plan terapéutico y dar un
seguimiento de la evolución clínica.
Existen algunos factores farmacocinéticos a considerar, asociados a la especie y
raza por lo que es necesario consultar ECOP.
La tasa de absorción en perros y gatos es bastante similar salvo algunas
excepciones. A diferencia del perro, en el gato la tasa de absorción por la vía
subcutánea se ve comprometida en mayor medida en grados de deshidratación
leves (5-7 %), por lo que se preferirán, otras rutas para la administración de los
fármacos
Los perros del grupo de los lebreles tenderán a mayores tiempos de recuperación
cuando fármacos como tiopental o propofol son administrados. Los perros de raza
Boxer tienen un marcado incremento a la sensibilidad a los tranquilizantes
fenoctiacínicos (acepromazina, propiopromazina) manifestada por tremores
musculares, opistótonos y reacciones tónico-clónicas, entre otras. Los gatos
pueden generar cuerpos de Heinz y tener recuperaciones prolongadas tras la
infusión constante de Propofol. Los perros de raza Schnauzer Miniatura se
predisponen a enfermedad del seno enfermo, por lo que el ECG previo y su
monitorización trans-anestésica es importante.
De igual forma en este apartado se circunscriben los datos obtenidos de la historia
clínica. Debe preguntarse directamente al dueño o responsable de la mascota por
la historia de algún padecimiento previo, específicamente de enfermedad cardiaca,
respiratoria, renal, hepática o del sistema nervioso central.
De igual manera se puede implementar un cuestionario que incluya ciertas
preguntas que nos ayuden en la valoración del paciente.
Medicación Previa Examen físico
En esta parte de la historia se le dará particular importancia a los fármacos
administrados con antelación al evento anestésico, con el afán de evitar o
minimizar una reacción adversa al interactuar con los tranquilizantes y
anestésicos.
Clasificación del estado físico (ASA), Riesgo anestésico
Una vez realizada la exploración física y de acuerdo a la historia clínica, es posible
clasificar el estado físico de los pacientes de acuerdo a la clasificación ASA, ésta
es una escala ordinal del estado físico, que sirve para categorizarlo antes o
durante la anestesia. Asignar un valor ASA es de gran ayuda para la planificación
del protocolo anestésico y al mismo tiempo permite estimar, en parte, el riesgo de
la anestesia en un paciente en
particular.
La clasificación del estado físico se
correlaciona con la tasa de
mortalidad perioperatoria, sin
embargo, el riesgo anestésico no
depende sólo del valor asignado,
ASA; depende también del
conocimiento y entrenamiento del
anestesiólogo y del cirujano en su
caso. A mayor calificación ASA
asignada a un paciente, se
incrementa proporcionalmente la
probabilidad de muerte.
La anestesia de urgencia
incrementa también el riesgo
anestésico, sobre todo por el poco
tiempo que existe para la
evaluación y preparación del paciente.
INDUCTORES
Propofol
Es el agente anestésico inyectable más utilizado para la inducción dentro de la
anestesiología veterinaria, propofol, es un compuesto fenólico (2,6-disopropifenol).
Trabaja generando depresión de la corteza cerebral y de los reflejos polisinápticos
del SNC a nivel del GABA de manera dosis-dependiente, puede potenciar los
efectos de los bloqueantes neuromusculares no despolarizantes, posee
propiedades anticonvulsivas similares a los tiobarbitúricos. El propofol se puede
utilizar en infusión continua para el mantenimiento de la anestesia, se metaboliza
rápidamente y su duración es similar a la obtenida por el tiopental sódico.
Una vez administrado Propofol, su efecto se presenta entre 30-45 segundos, es
importante asegurar una vía endovenosa totalmente permeable debido a que la
extravasación genera dolor, la administración, la debemos realizar de manera
lenta, con la finalidad de evitar que el paciente presente depresión respiratoria, el
propofol, es un buena alternativa como inductor a otros anestésicos intravenosos,
aunque la recuperación anestésica es rápida, se produce cierto grado de
desequilibrio psicomotor en el periodo del despertar. En cualquier caso la
administración de un tranquilizante previo disminuye su dosis en un 20-30 %, la
dosis de inducción puede variar y como en el caso de otros anestésicos
inyectables, las dosis establecidas en perros sin premedicación son de, 4-8 mg/kg
y en gatos 8 mg/kg y con premedicación, estas fluctúan entre los 2-3 mg/kg en
perros y 5-6 mg/kg en gatos, lo cual puede proporcionar un tiempo de anestesia
de unos 20 minutos. El propofol, no genera efectos acumulativos con respecto a
los barbitúricos, lo que nos permite realizar inyecciones repetidas, cada 5 a 10
minutos o en infusión continua (IC), la cual se puede administrar a 0.5-2
mg/kg/min, siempre será importante monitorizar la condición del paciente.
La utilización de propofol, es una buena alternativa para la cirugía menor y en
general en cualquier procedimiento de corta duración, otro aspecto importante es
la utilización del propofol para la neurocirugía, debido a que no aumenta la presión
intracraneal, sin embargo, en cirugía oftálmica no es la mejor alternativa debido a
que aumenta la presión intraocular (PIO), durante y después de la inducción, por
lo que se recomienda la utilización de otros agentes como podría ser los
tiobarbitúricos en los casos en que el aumento de la presión puede generar daños.
En los gatos y en los galgos, el metabolismo es más lento debido a su escasa
capacidad de conjugación, con ácido glucorónico, se debe tener cuidado en los
gatos cuando se maneje en (IC), debido a que puede generar hemolisis y cuerpos
de heinz, otro aspecto importante a considerar es que atraviesa la barrera
placentaria lo que puede provocar depresión fetal esto va en función de la dosis.
Debido a que su base es lipídica se debe tener extremada precaución cuando se
maneje en paciente con altos niveles de triglicéridos y en pacientes con patología
de pancreatitis dado que estas se podrían exacerbar.
Etomidato
Anestésico inyectable que aparece dentro de la anestesiología en la década de los
70, genero gran popularidad y esto debido a que presenta características que lo
hacían hemodinamicamente estable, ya que tiene poca influencia sobre la parte
cardiovascular y respiratoria, es un derivado imidazólico, el cual presenta un
vehículo a base de propilenglicol, es un agonista del GABA.
Se utiliza exclusivamente para la inducción anestésica por sus propiedades
hipnóticas, la duración es dosis-dependiente, las dosis que se utilizan para la
inducción en perros son de 1-3 mg/kg, sin embargo siempre es importante
premedicar al paciente debido a que cuando se utiliza como único fármaco el
paciente puede despertar de manera muy excitada, con mioclonias. La
recuperación, tras un bolo único, se presenta dentro de los 10-20 minutos, debido
a la redistribución a otros tejidos y el metabolismo a través de esterasas
plasmáticas y hepáticas, debido a su rápido a eliminación, puede ser considerado
para utilizarlo en infusión continua (IC), para el mantenimiento de la anestesia, es
importante siempre, combinarlo con un opiáceo o analgésico debido a que no
genera analgesia. El etomidato, no atraviesa la barrera placentaria, por lo que
puede considerarse dentro del protocolo para procedimientos de cesárea. Se debe
considerar que el etomidato, deprime la función adrenal durante 3 horas en perros,
inhibiendo el incremento de cortisol durante la cirugía.
Produce hemolisis debido al propilenglicol. Además y como otros agentes
utilizados en la medicación anestésica, produce dolor cuando se está
administrando por vía endovenosa, otro efecto que se puede presentar, es la
presencia de náusea y vómito tanto en la inducción, como en la recuperación,
sobre todo, cuando se administran varios bolos.
Ketamina
Agente anestésico disociativo, antagonista de los N-metil de Aspartato (NMDA),
con gran potencia anestésica, produce sus efectos analgésicos y anestésicos por
unión competitiva al receptor NMDA y en menor medida a receptores opiáceos,
monoaminergicos, muscarínicos, y canales de sodio y calcio. Cuando se utiliza
ketamina durante la recuperación, se puede observar la presencia de midriasis,
alucinaciones, las cuales pueden contrarrestarse con la utilización de un sedante.
Su efecto, por parte de la ketamina tras la inyección intravenosa, se da a los 30-60
segundos, con dosis de 2-5 mg/kg, las dosis utilizadas por vía intramuscular
presenta sus efectos a los 2-3 minutos, la duración del efecto con las dosis
habituales es de aproximadamente 15-30 minutos. Su metabolismo es hepático
(Citrocromo P-450), dado que su metabolismo es hepático y su eliminación es
renal, se debe tener especial cuidado en pacientes que cursan con insuficiencia
hepática y renal.
no se recomienda en pacientes epilépticos y en pacientes con aumento de la
presión intracraneal, ya que aumenta el consumo metabólico de oxígeno y el flujo
sanguíneo cerebral, aunque también se sabe que puede tener efectos
neuroprotectores en algunos casos. Además, aumenta la presión intraocular (PIO),
por lo que no es una buena opción en cirugía oftálmica.
La ketamina en infusión continua (IC), es un excelente fármaco para el manejo del
dolor en el transquirúrgico, lo que favorece disminuir la concentración alveolar
mínima de los anestésicos inhalatorios (CAM), por lo que debe considerarse
dentro de la anestesia. Por otro lado, se debe tener especial atención, debido a
que la ketamina, es un fármaco estupefaciente con potencial de abuso humano,
por lo que se encuentra sujeta a un estricto control legal.
Tiletamina y zolacepam
La tiletamina, es una ciclohexanona, con un efecto más prolongado que la
ketamina y el zolacepam perteneciente a las benzodiacepinas. Las rutas de
administración pueden ser la vía intravenosa, así como la intramuscular, se
recomienda su uso para procedimientos cortos, tanto en perros como en gatos, se
debe tener especial cuidado cuando se consideren procedimientos muy
prolongados, hoy en día no se recomienda, y debido a que la analgesia que
genera, es insuficiente y los despertares son de mala calidad, este producto tiene
su lugar fundamental en el manejo de animales poco cooperadores. Los efectos
son similares a los descritos para la ketamina en combinación con diazepam, las
dosis que comúnmente se utilizan en perros y gatos son de 6-15 mg/kg vía
intramuscular.
En lo que respecta a la inducción con anestésicos inhalatorios a través de
mascarilla, no se recomienda por ser un factor de estrés tanto para el perro, como
para el gato, y además de las grandes pérdidas del anestésico que se genera así
como, por parte del anestesiólogo, es de vital importancia que cuando hablamos
de esta combinación no se recomienda mantener planos por más de 50 minutos.
TIOPENTAL
El tiopental es el análogo azufrado del pentobarbital sódico y difiere sólo en que el
carbono 2 está unido a un átomo de azufre en vez de uno de oxígeno. Tiene
acción ultracorta debido a su redistribución rápida (p. ej., en el tejido muscular) y
se aloja en la grasa corporal. Cuando las concentraciones de tiopental en plasma,
músculo y vísceras decrecen, la concentración en grasa sigue en aumento. Por
otra parte, una cantidad considerable se metaboliza en el hígado y ello contribuye
a la rápida reducción temprana de la concentración arterial del fármaco. Para la
inducción rápida de anestesia de corta duración, la dosis es de 10 a 12 mg/kg. Si
se requieren 10 a 20 min de anestesia quirúrgica, el intervalo posológico es de 20
a 30 mg/kg. Un tercio de la dosis calculada se inyecta con rapidez en 15 s y el
resto se administra con lentitud hasta el efecto deseado. Pueden infundirse dosis
adicionales para prolongar la anestesia cuando se requiera. Después de dosis
grandes, la recuperación (hasta la incorporación) requiere 1 a 1.5 h. Las dosis
grandes saturan los tejidos y causan un final de la anestesia prolongado.
MONITORIZACIÓN
Durante la anestesia los procesos fisiológicos normales se ven afectados, lo que
puede alterar la homeostasis del paciente. Existen metas durante la monitorización
son asegurar que la profundidad anestésica sea adecuada pero no excesiva, que
las funciones vitales sean adecuadas, detectar de forma rápida la presencia de
alteraciones en las funciones vitales que puedan comprometer la homeostasis,
ayudar a instaurar la terapia necesaria para corregir las alteraciones en estas
funciones, aumentar la seguridad anestésica disminuyendo la mortalidad y las
complicaciones perianestésicas; mantener un registro escrito de los sucesos que
ocurren durante la anestesia. La vigilancia de la profundidad de la anestesia,
circulación, oxigenación, ventilación y termorregulación debe considerarse un
estándar de atención en todos los pacientes caninos y felinos. Los colegios
internacionales de anestesia y analgesia (ACVAA, ECVAA) así como la asociación
de anestesistas veterinarios (AVA) recomiendan la monitorización durante la
anestesia en animales. La mortalidad y las complicaciones perianestésicas
disminuyen cuando se monitorizan las funciones vitales durante la anestesia, ya
que esto permite la detección temprana de problemas (hipotensión, hipoxia,
hipercapnia grave).
Monitorización básica
La combinación de la respuesta motora y del sistema nervioso autónomo son la
base de la monitorización de la profundidad anestésica en la clínica diaria, por lo
que cuando el nivel de anestesia es insuficiente, el estímulo quirúrgico o cualquier
otro estímulo externo causan una descarga simpática y como consecuencia
observamos incremento de la presión arterial, frecuencia cardiaca y respiratoria.
Color de las mucosas Indican de manera subjetiva la oxigenación de la sangre
arterial y deben de tener un color rosado.
Tiempo de llenado capilar El tiempo de llenado capilar normal (retorno de la
circulación) es <2s. Cuando el tiempo es >2 segundos puede indicar
deshidratación, hipovolemia, vasoconstricción periférica, o disminución de la
perfusión por disminución del gasto cardiaco.
Pulso yugular La existencia de pulso yugular muestra un aumento de la presión en
la aurícula derecha por insuficiencia cardiaca congestiva derecha o un problema
en la válvula tricúspide.
Pulso periférico El pulso que se palpa es el resultado de la presión arterial sistólica
menos la diastólica, conocido como presión de pulso. Las características normales
deben de ser fuerte, rítmico, correspondiente y con una frecuencia cardiaca
adecuada.
Auscultación cardiaca La auscultación del tórax nos permite evaluar los sonidos
cardiacos y pulmonares, la frecuencia y el ritmo cardiaco. Durante la anestesia se
puede hacer uso del estetoscopio esofágico para la auscultación.
Frecuencia respiratoria (FR) Se puede determinar con el movimiento del tórax y se
tiene una idea de la profundidad de la inspiración. Se recomienda durante la
anestesia el uso de un estetoscopio esofágico que nos dé información de la FR y
en cierta manera de la profundidad de la respiración,
Monitorización avanzada
Electrocardiografía (ECG) La detección de la actividad eléctrica del corazón se
realiza a través del ECG que nos permite el diagnóstico de arritmias, pero no así la
actividad mecánica del corazón.
Pulsioximetría El oxímetro de pulso mide la saturación porcentual de hemoglobina
en sangre arterial periférica y también registra de manera continua una frecuencia
de pulso digital. Algunos equipos pueden proporcionar una imagen de onda
pletismográfica. Durante la anestesia el sitio más común para colocarlo la sonda
es la lengua, se pueden utilizar otros sitios como labio, prepucio, vulva y
membrana interdigital.
El registro de la concentración de la presión parcial o porcentaje de CO2 espirado
al final de la espiración (EtCO2) se puede realizar con un capnómetro o un
capnografó. Este CO2 proviene directamente de los alveolos y representa el CO2
en sangre arterial (PaCO2). El EtCO2 indica si la respiración es adecuada o no ya
que la eliminación de CO2 depende del volumen minuto. La capnómetro es la
medida numérica de la EtCO2.
Gasometría arterial. Es la técnica para evaluar el sistema respiratorio más eficaz,
se pueden obtener valores reales de O2 y CO2 en sangre arterial. La muestra de
sangre arterial se obtiene de arterias periféricas palpables, las más utilizadas son
la dorsal metatarsiana y la femoral a través de una jeringa heparinizada y
analizada de forma inmediata
Concentración alveolar mínima (CAM). La concentración de anestésico espirado,
es en teoría muy próxima a la concentración alveolar y está a la concentración en
el sistema nervioso central. La CAM se define como la concentración alveolar
mínima de un anestésico volátil necesaria para que el 50% de los individuos no
respondan a un estímulo doloroso.
Presión arterial La presión arterial resulta del gasto cardiaco (CO) y la resistencia
vascular periférica (RVP). La presión arterial es un indicador indirecto de perfusión
tisular, ya que la presión depende del CO y de a RVP. Cuando existe
vasoconstricción periférica el CO está reducido, la perfusión disminuye, pero la
presión arterial aumenta, por lo que las presiones normales o altas no son siempre
sinónimo de una adecuada perfusión de los tejidos. Durante la anestesia para
tener una adecuada perfusión de los órganos vitales, la presión arterial media
(PAM) no deberá de bajar en general de 60-70 mm Hg y la presión arterial sistólica
(PAS) de 80-90 mm Hg
Presión arterial no invasiva Los diferentes métodos no invasivos para medir la
presión arterial no son totalmente exactos o preciso, por lo que es importante
observar los cambios que ocurren a lo largo del tiempo. Oscilometría Se basa en
la oclusión de una arteria periférica mediante un manguito que se insufla y
después libera el aire de manera gradual hasta que la sangre regresa a la arteria,
produciendo unas oscilaciones características. Con este sistema se obtienen las
tres presiones (sistólica, diastólica y media) de manera intermitente y automática.
Monitor Doppler Este método detecta el flujo de sangre en una arteria mediante la
emisión de ultrasonidos y su posterior detección cuando estos son reflejados por
los eritrocitos en movimiento.
Presión arterial invasiva Método más exacto, especializado e invasivo, dado que
es necesario canalizar una arteria existe el riesgo de complicaciones como
hematomas, trombosis e infecciones. Se pueden cateterizar la arteria auricular,
lingual, femoral o coccígea, sin embargo, en perros la más común es la
metatarsiana dorsal. Con este método se obtienen las tres presiones arteriales de
manera continua y automática lo que permite detectar los cambios
inmediatamente. Para obtenerla una vez colocado el catéter en la arteria este se
conecta a un transductor de presión a través de una extensión llena de suero con
heparina (2 UI/ml). El transductor Se debe de calibrar a cero a nivel de la aurícula
derecha abriéndolo al aire y estar conectado a un monitor.
Presión venosa central (PVC) La PVC es un indicador del balance entre el retorno
venoso y la capacidad cardiaca de eyectar ese volumen. Los cambios en la
presión intratorácica que ocurren durante la respiración o ventilación mecánica
influyen en la PVC. El valor normal de la PVC osccila entre 0-5 cm de H2O y
valores hasta 10 cm de H2O pueden ser normales bajo anestesia general.
Gasto cardiaco (CO) Nos permite evaluar el sistema cardiovascular. Existen varios
métodos tanto no invasivos como invasivos, siendo estos últimos por lo general
limitados a estudios de investigación. Índice biespectral (BIS) El sistema de
vigilancia patentado Bispectral IndexTM (BIS) salió al mercado de medicina
humana desde 1994. El BIS analiza las características temporales y cualitativas
(fase, amplitud y frecuencia) del EEG y mediante fórmulas matemáticas
(transformación de Fourier) obtiene un número del 0 al 100, donde 0 significa
ninguna actividad cerebral (EEG isoeléctrico) y 100 representa el paciente
despierto y alerta. El BIS no vigila la analgesia y no predice movimiento reflejo o
actividad hemodinámica en respuesta a estimulación dolorosa.
Monitorización de otros parámetros Existen otros parámetros que deben de
vigilarse en pacientes o circunstancias seleccionados
Temperatura corporal El control de la temperatura del paciente es un elemento
básico dentro de la monitorización anestésica. La observación continua de la
temperatura corporal permite la detección temprana de hipertermia maligna, así
como las pérdidas accidentales de calor, lo que es mucho más frecuente.
Durante la anestesia es común que se pierda entre 1 y 4 ºC. Esta pérdida
moderada no conlleva efectos serios, puede producir letargo en el paciente,
reducción de los requerimientos anestésicos, enlentecimiento de la recuperación y
escalofríos anestésicos. Pacientes que tiritan aumentan su consumo de O2 hasta
en un 300%.
Glucemia La respuesta metabólica se caracteriza por un estado catabólico
hiperglucémico y la respuesta cardiovascular por un estado hemodinámico
aumentado. Durante la cirugía se ha observado un aumento de la glucosa que es
normal y no requiere tratamiento.
PREANESTESICOS
SEDANTES
Dexmedetomidina
La dexmedetomidina es un agente agonista muy potente y altamente selectivo de
los receptores adrenérgicos α2. la dexmedetomidina es la única responsable de
los efectos sedantes y analgésicos que se le atribuyen a la medetomidina. La
dexmedetomidina, sin embargo, da lugar a los efectos característicos de los
agentes agonistas de los receptores adrenérgicos α-2, como por ejemplo sedación
e hipotermia, e induce cambios neuroquímicos en el metabolismo cerebral de la
norepinefrina y serotonina.
Además, atenúa la respuesta hemodinámica de los pacientes durante el proceso
de intubación endotraqueal y cuando se produce el estímulo quirúrgico,
proporcionando estabilidad cardiovascular durante la cirugía.
Los agonistas de los receptores alfa 2 adrenérgicos tienen una influencia muy
marcada sobre la parte cardiovascular, lo cual es uno de los principales temores
que se presentan tras su administración entre los clínicos y por lo que se debe
tener extrema precaución en pacientes con compromiso cardiovascular.
la dexmedetomidina tiene poca influencia sobre la temperatura corporal en el
perioperatorio, esto al parecer, está relacionado con el efecto depresor directo
sobre el centro termorregulador, la vasoconstricción periférica tiende a minimizar
la pérdida de temperatura, lo cual parece ser un efecto benéfico durante el
procedimiento de sedación o anestésico.
Los efectos sedantes y cardiovasculares de la dexmedetomidina pueden ser
revertidos a través de la administración de antagonista alfa-2 adrenérgicos, como
es el atipamezol, dado que presenta una alta selectividad por el receptor alfa-2, lo
hace más específico hacia ésta. Tras su administración intramuscular y
subcutánea, los efectos cardiovasculares y la sedación desaparecen, es
importante asegurarse de que la analgesia sea complementada con diferentes
clases de fármacos, tales como opiáceos, AINES, antes de llevar a cabo el
antagonismo con atipamezol, la recuperación parece ser buena tras el
antagonismo, la vía intravenosa no está registrada en animales debido a sus
marcados efectos secundarios como son excitación, hipotensión, y taquicardia, por
lo cual no se recomienda esta vía.
ACEPROMACINA
La acepromacina (una fenotiazina) es uno de los sedantes más utilizados en
medicina veterinaria. Su nombre químico es 2-acetil-10-(3-dimetilaminopropil)-
fenotiazina. Muchas veces se administra en combinación con un opioide como
preanestésico para facilitar la colocación de catéteres IV y reducir 19 la dosis de
anestésicos inyectables e inhalables necesarios para inducir y mantener la
anestesia. La acepromacina también puede indicarse en el posoperatorio para
hacer más suave la recuperación, siempre que el paciente tenga estabilidad
hemodinámica y haya recibido analgesia eficaz. Las dosis IM para gatos y perros
pequeños fluctúan entre 0.01 y 0.2 mg/kg y para perros más grandes entre 0.01 y
0.05 mg/kg. En general, para la sedación leve a moderada en el periodo
preanestésico o postanestésico son adecuada las dosis menores de 0.05 mg/kg.
Es de vital importancia mencionar que los feniotacinicos generan hipotensión, así
como hipotermia lo cual es de suma importancia en el paciente anestesiado,
controlar estas constantes.
DIACEPAM
El diazepam es muy liposoluble y se distribuye con rapidez por todo el organismo.
Alrededor de 90% del fármaco está unido a proteína y el diazepam se metaboliza
por desmetilación e hidroxilación a Ndesmetildiazepam (nordiazepam), 3-
hidroxidiazepam, y oxazepam. El nordiazepam y el oxazepam producen efectos
farmacológicos significativos a concentraciones clínicas. En perros, la semivida de
eliminación del diazepam después de una dosis relativamente alta (2 mg/kg IV) es
de 3.2 h. El nordiazepam aparece pronto en el plasma y excede con rapidez las
concentraciones del diazepam, mientras que el oxacepam alcanza valores
máximos en un lapso de 2 h. La semivida de eliminación de nordiazepam y
oxacepam es de 3.6 y 5.7 h, en ese orden. En gatos, la semivida de eliminación
del diazepam después de administrar dosis relativamente altas (5, 10 y 20 mg/kg
IV) es de 5.5 h. Alrededor de 50% de la dosis del diazepam se convierte en
nordiazepam y la semivida de eliminación media del metabolito es de 21 h, que es
unas cuatro veces mayor que la semivida del diazepam. El diazepam no seda a
los perros de manera confiable y puede causar excitación, disforia y ataxia. En
perros, la administración IV de este fármaco (0.5 mg/kg) produce vigilia y
excitación. El diazepam puede causar disforia y agresividad en gatos y debe
emplearse en esta especie sin perder de vista dicha respuesta posible.

Midazolam.
El midazolam es una benzodiazepina con un anillo imidazol fusionado que explica
la hidrosolubilidad del fármaco a valores de pH menores de 4.0. Su nombre
químico es 8-cloro-6-(2- fluorofenil)-1-metil4H-imidazol(1,5-a)(1,4)-benzodiazepina.
El pH de la formulación parenteral es de 3.5 y el fármaco es fotosensible, como el
diazepam. Al pH sanguíneo, el midazolam cambia su configuración química y se
torna más liposoluble, lo cual facilita la difusión en los tejidos. El midazolam se
absorbe casi por completo (>90%) después de inyección IM y las concentraciones
plasmáticas máximas se alcanzan 20 en un lapso de 15 min. El fármaco también
sufre unión extensa a proteína (>95%) y cruza con rapidez la barrera
hematoencefálica. Se hidroxila en el hígado y los conjugados glucurónidos se
excretan en la orina. Por lo regular, el midazolam se administra para promover la
relajación muscular y facilitar la intubación en perros y gatos, y se coadministra
con ketamina, etomidato o Propofol.
Flumazenilo
El antagonista de las benzodiacepinas es el flumazenilo es un antagonista del
receptor de benzodiazepinas competitivo muy selectivo. Su nombre químico es 3-
carboxilato de etil-8-fluoro-5,6- dihidro-5-metil-6-oxo-4Himidazol-( 1,5-a)-
benzodiazepina. Se dispone de datos farmacocinéticos limitados para animales.
Se ha informado una semivida de eliminación de 0.4 a 1.3 h en perros. En
personas, el Midazolam y el flumazenilo tienen perfiles farmacocinéticos similares,
lo cual hace a este último un antagonista adecuado para el midazolam. El
flumazenilo revierte con rapidez los efectos sedantes y miorrelajantes de los
agonistas de benzodiazepinas en animales. En perros, la administración del
flumazenilo revierte por completo los efectos conductuales y miorrelajantes de una
sobredosis de diazepam (2 mg/kg IV) o midazolam (1 mg/kg IV) en un lapso de 5
min. Además, el flumazenilo puede revertir los efectos anticonvulsivos de los
agonistas de benzodiazepinas. Aunque tiene actividad intrínseca mínima, la
administración del antagonista puede facilitar el desarrollo de convulsiones en
animales predispuestos
Anticolinérgicos
Los anticolinérgicos se administran en el perioperatorio para tratar la bradicardia y
el bloqueo AV relacionados con la manipulación quirúrgica (reflejos oculovagales y
viscerovagales) o con la administración de otros fármacos coadyuvantes de
anestésicos (p. ej., agonistas 2 u opioides). En ocasiones también se emplean
para controlar el exceso de secreciones bucales y de vías respiratorias. Los
anticolinérgicos no deben suministrarse en el perioperatorio de manera ilimitada.
Más bien deben evaluarse los riesgos y beneficios de la administración de
diferentes fármacos y elegirse los más seguros para cada paciente. Los
anticolinérgicos se llaman a menudo parasimpaticolíticos porque bloquean los
efectos del sistema nervioso parasimpático en otros aparatos y sistemas, en
especial los aparatos circulatorios y digestivo. La atropina y glucopirrolato son los
anticolinérgicos más empleados en medicina veterinaria. Estos dos fármacos no
bloquean a receptores colinérgicos nicotínicos y es más exacto clasificarlos como
antimuscarínicos. Existen tres tipos principales de receptores muscarínicos: M1,
M2 y M3.
Atropina
Desde el punto de vista químico, la atropina consta de dos componentes (ácido
trópico y una base orgánica) unidos por un enlace éster. La atropina tiene más o
menos la misma afinidad por los tres tipos principales de receptores muscarínicos.
Respecto de otros antagonistas muscarínicos sintéticos, la atropina es muy
selectiva para los receptores muscarínicos y tiene escaso efecto sobre los
receptores nicotínicos. La atropina se absorbe con rapidez después de la
administración intramuscular (IM). El inicio de los efectos cardiovasculares
aparece en el transcurso de los 5 min siguientes y los efectos máximos se
alcanzan en 10 a 20 min. Tras la administración intravenosa de una dosis de 0.03
mg/kg, el inicio de los efectos cardiovasculares ocurre en el minuto siguiente, los
efectos máximos se presentan en el transcurso de 5 min y la FC aumenta en 30 a
40% por unos 30 min. Los efectos de la atropina en otros aparatos y sistemas
desaparecen en unas pocas horas, pero los efectos oculares pueden persistir por
uno o dos días. La atropina se elimina con rapidez de la sangre después de la
administración parenteral. Parte del fármaco se hidroliza hasta metabolitos
inactivos (tropina y ácido trópico), y parte se excreta sin cambio en la orina.
Glucopirrolato
El glucopirrolato es un antagonista muscarínico sintético constituido por un
compuesto de amonio cuaternario. Como la atropina, tiene dos componentes
(ácido mandélico y una base orgánica) unidos entre sí por un enlace éster. El
glucopirrolato es cuatro veces más potente que la atropina y tiene más o menos la
misma afinidad por los tres tipos principales de receptores muscarínicos. La
estructura polar del fármaco (amina cuaternaria) limita la difusión a través de las
membranas lipídicas y hacia el SNC y la circulación fetal.

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