Está en la página 1de 5

La concepción tópica y la concepción dinámica de la neurosis

El análisis de los sueños nos han demostrado que para comprender los procesos
psíquicos no alcanza el solo distingo entre procesos inconscientes y conscientes.

En la neurosis nos enfrentamos a las mismas dos clases de inconsciente que en el


sueño: una que puede devenir consciente con facilidad, y que se llama preconsciente, y
otra que puede llegar a ser consciente por medio del trabajo de interpretación, lo
inconsciente propiamente tal. Los factores psíquicos individuales que determinan el
síntoma neurótico provienen, entonces, de estratos que pertenecen a diversos niveles
de profundidad de lo inconsciente, del mismo modo como, según, averiguamos, los
diversos elementos del sueño tenían su raíz en diferentes estratos de lo inconsciente.

Los determinantes psíquicos de los síntomas neuróticos no son equivalentes si se toma


en cuenta el sistema a que pertenecen. Surgen diferentes niveles psíquicos: algunos se
originan en el inconsciente; otros en el preconsciente. Son determinadas características
de los diversos elementos del sueño las que revelan aquella pertenencia.

El Sistema Icc (Inconsciente)

El inconsciente no es asequible a la observación directa. Solo podemos deducir su


existencia, de ciertas cualidades que es preciso atribuirle sobre la base de datos
empíricos. El inconsciente se revela por su contenido y por su modalidad de
funcionamiento.

a. El contenido consistente es representante de instinto y en representaciones


concretas o representaciones – cosa. El instinto como tal no es susceptible de
observación directa. Solo observamos sus manifestaciones psíquicas:
aspiraciones y emociones, que se asocian a representaciones y dan origen a
deseos. Los representantes de instintos se acompañan de determinadas
modificaciones, de índole motriz y secretoria, y nos aparecen como afectos. Los
afectos, entonces, pueden tomar una vía consciente o puna inconsciente; es
decir pueden ser o no ser apercibidos por la conciencia. Como los afectos son
representantes psíquicos de instinto, toda neurosis representa una parte de la
vida instintual inconsciente y tiene por contenido un afecto o deseo sofocado o ,
mejor diríamos reprimido.
Además de afectos, el inconsciente contiene los efectivos objetos a que los
afectos pertenecen en su condición de representantes de instinto. Los objetos
pueden ser almacenados en la psique en la forma de representaciones, es
decir , huela mnémicas de percepciones de objetos, y de las sensaciones a ellas
conectadas. Las representaciones de objeto consisten en representaciones-
cosa o representaciones concretas, y en las representaciones palabra que les
corresponden. las representaciones concretas están formadas por huellas
mnémicas de percepciones y sensaciones que han ingresado en el sistema
nerviosos central por estimulación de los órganos de los sentidos; de la visión, el
gusto, y el olfato, y del aparato motor y receptor; están formadas también por
pensamientos, imágenes mentales y sensaciones y percepciones del cuerpo
propio del individuo. Todo esto representa un reflejo o impresión en la vida
psíquica,, del mundo exterior e interior del individuo. Las representaciones
palabra transmiten principalmente por el sentido del oído y son de formación
más tardía que las representaciones concretas. Los adultos transforman a veces
en algo concreto el significado abstracto de una palabra o pensamiento. Es
frecuente que esto suceda en los sueños y la esquizofrenia.
En la neurosis, los afectos y objetos genuinos que son los contenidos del
inconsciente se traslucen de diversas maneras, pero sobretodo se revelan en
síntomas. Como expresión psíquica de los instintos, los afectos pueden ser tanto
conscientes como inconscientes. Por la mayor parte son conscientes; en la
mediad en que están desasidos por las representaciones correspondientes, y
desplazados sobre otras representaciones, su sentido es consciente. También
son esto último cuando están inhibidos en su progreso a la conciencia.

b. Como habremos de considerar lo preconsciente por separado, atenderemos


ahora lo métodos de operación de lo inconsciente que son responsables de la
configuración del sueño manifiesto. El proceso primario se caracteriza por la
facilidad con que se desplazan las energías psíquicas, y por la condensación. El
proceso primario importa desorden y caos en el sistema Icc. La exclusiva meta
de ello es descargar su energía en motilidad. (acción) y emociones. Todo
enfermo está dominado por el proceso primario. Pero este se manifiesta
diversamente en cada forma de neurosis; así, la condensación es característica
de la histeria de conversión, el desplazamiento lo es de la neurosis obsesiva, y
la proyección, de la paranoia. La identificación está presente en todas las
neurosis. Pero si en estas es solo parcial, en cambio es total en diversos
estados psicóticos
c. En primer lugar, el inconsciente no conoce contradicciones. Así como el soñante
no tiene manera de expresar contradicciones, y sin dificultad alguna deja de
subsistir los opuestos uno al lado del otro, llegando a sustituir un si por un no, lo
propio le sucede al neurótico.
d. Es preciso llamar la atención sobre las omisiones. En particular en la neurosis
obsesiva, se suelen omitir palabras o asociaciones, con lo cual la conexión se
interrumpe o una representación se elimina. Así queda oculto para la conciencia
el significado del afán.
e. El sistema Icc no tiene concepto del tiempo. No conoce ni pasado ni futuro, sino
solo el presente. Toda porfía, aunque se relacione con el pasado o el futuro, se
vivencia en el inconsciente siempre como algo presente.
f. Es preciso mencionar también el lenguaje simbólico del inconsciente. En los
sueños, el censor tiene por función impedir el acceso a la conciencia. Si un
impulso consigue un disfraz simbólico, sortea al censor y se procura admisión en
la conciencia.
g. Es preciso reparar en que en el inconsciente la realidad externa es reemplazada
por una realidad interna. Lo mismo que la realidad externa es sustituida por una
interna en el sueño, así sucede en general en la neurosis.

El sistema Cc (Consiente)

El acto de devenir consciente significa percepción de un estímulo. Por lo tanto,


investigar la conciencia supone percibir el aparato perceptivo como tal; el sujeto de la
investigación es idéntico a su objeto. En los sueños vemos imágenes, oímos palabras,
tenemos sensaciones y sentimientos; en suma percibimos. También lo hacemos en el
estado de vigilia; pero la gama de percepciones es más amplia que en el sueño. En
este los estímulos percibidos provienen exclusivamente de dentro; en el estado de
vigilia no solo se originan en el mundo interior, sino en el exterior.. Hay que concebir la
conciencia como un órgano sensorial que se sitúa en la frontera entre el mundo interno
y el externo, y que procura la percepción de procesos tanto internos como externo. Una
representación consciente es un fenómeno fugitivo, aunque es cierto que se puede
repetir y atraer la atención por un periodo más o menos largo.

El inconsciente tiene una tendencia progresiva con arreglo a la cual las mociones
inconscientes esfuerzan su admisión en el sistema Cc, donde procuraran producir
relaciones motoras y emocionales. En otras palabras, la energía psíquica acumulada
en el Icc presiona en sentido ascendente a fin de descargarse en acciones y
emociones. Por eso el aparato psíquico se puede comparar a un ser vivo elemental
que, a la percepción de un estímulo, produce una respuesta refleja.
Es sabido que un individuo no reacciona a todo estimulo siempre. Puede ocurrir que no
se perciban muy intensos estímulos, no obstante están dirigidos al sistema Cc. Se tiene
la impresión que un dispositivo especial estuviera instalado en el sistema P- Cc. (Esta
abreviatura P-Cc da expresión al nexo especialmente estrecho del sistema Cc con la
percepción.) La función de este dispositivo parece consistir en la protección frente a
ciertos estímulos. Si un estímulo externo es demasiado intenso para la psique,
entonces la protección anti estimulo lo intercepta, lo reduce, y es por fin admitido en el
sistema Cc en cantidades menores. La protección anti estimulo, por consiguiente, tiene
la capacidad de regular cantidades de energía psíquica. Cuando ella permite un
estímulo pasar al sistema Cc, se produce el fenómeno que en nuestra terminología
designamos con la palabra consciente. La energía del estímulo que ingresa en el
sistema no deja huellas en él, sino que se gasta por completo en el acto de devenir
consciente. Por eso el sistema Cc no tiene memoria.

El sistema Prcc (Preconsciente)

Este último es el sistema perceptivo, y guarda relación estrecha con la motilidad y la


afectividad. Contiene por un lado retoños del inconsciente, y por el otro almacena
impresiones del mundo externo. Se conecta entonces con la realidad, y también con el
inconsciente.. Así por ejemplo, el sueño recurre a una vivencia actual, a un
pensamiento de estado de vigilia, a fin de dar expresión a deseos inconscientes.

En este proceso, los influjos externos se internalizan y se depositan en un sistema


psíquico especial, el preconsciente que tópicamente se sitúa entre el sistema Cc y el
sistema Icc. Y en el interior de este sistema se desarrolla una instancia especial, que
ejerce la crítica moral y lógica. Gobierna las mociones que acuden del inconsciente
permitiendo a algunas pasar al interior de la conciencia y no admitiendo a otras.
El aparato preconsciente tiene la llave del aparato perceptivo del sistema Cc y de su
motilidad y afectividad. Si fracasa en esta función de instancia reguladora, las
reacciones motoras, viscerales y emocionales resultan perturbadas.

El Proceso Secundario
El preconsciente está gobernado por el proceso secundario. Este proceso procura la
concepción de la secuencia temporal, la formación de las relaciones lógicas, llena los
hiatos en la ilación del pensamiento, introduce el factor causal. Opera en el estado de
vigilia y también en el sueño. Mientras mejor funciones, más lógico será el
pensamiento. El proceso del pensar es producido por pensamientos preconscientes, y
solo deviene consciente cuando estos consiguen ser admitidos en el sistema Cc.

Actividad de Fantasía
No todo proceso psíquico se puede clasificar en aquel esquema sin más restricción; en
efecto puede pertenecer en parte al sistema Prcc, en parte al sistema Icc.. Las
fantasías y los sueños sin duda que son conscientes por su forma, pero dejan traslucir
su origen inconsciente no solo porque descuidan la realidad y el tiempo, y porque a
menudo contienen símbolos, sino por su mismo contenido.

Regresión
Distinguimos entre regresión tópica, temporal y formal. La primera designación significa
que una actividad psíquica que normalmente discurre dentro de un sistema más
elevado, en condiciones alteradas recae en uno inferior. La segunda significa que una
vivencia actual, que revive a una vivencia del pasado, es sentida y a ella se reacciona,
como si fuera esta experiencia del pasado, de la niñez. A esta se conecta el tercer tipo
de regresión, la formal. Pensamientos vivenciados figuralmente, o palabras lo son
como objetos animados; el proceso de pensamiento se vuelve arcaico. Una forma de
regresión se eslabona con otra; lo común es que las tres aparezcan juntas.

También podría gustarte