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Las gallinas son aves de corral y fuente de proteína. Por eso, es importante conocer varios
aspectos importantes sobre las gallinas ponedoras. En este sentido, la importancia que
tienen estos animales de granja influye mucho en la alimentación del ser humano.
De ahí se deriva la importancia de conocer algunas características sobre las gallinas
ponedoras, como la crianza, así como también saber cuántas razas existen, también es
fundamental conocer su alimentación, así como otros aspectos importantes que se
analizarán a lo largo de este artículo.
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1 Qué es una gallina ponedora
2 Cómo se cría una gallina ponedora
o 2.1 Crianza casera
o 2.2 Crianza comercial o industrial
o 2.3 Cómo criar gallinas ponedoras en casa
3 Alimentación
4 Cómo influye el alimento en la producción de huevos
o 4.1 La yema
o 4.2 Albumen
o 4.3 La cáscara
o 4.4 Cómo preparar el pienso
5 Razas de gallinas ponedoras
o 5.1 Gallinas ligeras
5.1.1 Hy-line
5.1.2 Hisex Brown
5.1.3 Hisex White
5.1.4 Leghorn
5.1.5 Babcock
o 5.2 Gallinas semipesadas
5.2.1 Rhode Island red
5.2.2 Plymouth rock barred
o 5.3 Gallinas pesadas
5.3.1 Ross
5.3.2 Cobb
6 Ciclos de puesta
7 Enfermedades
o 7.1 Peste
o 7.2 Bronquitis infecciosa
o 7.3 Gumboro
o 7.4 Gripe o influenza aviar
ponedora
Hay que tener en cuenta que existen diversos tipos de gallina. En este sentido, hay
quienes crían gallinas para el engorde con el fin de sacrificarlas y prepararlas como
alimento. Así mismo, están las gallinas de corral, cuya crianza es para el mismo propósito.
Debido a que las gallinas son fuente de proteínas, y sobre todo porque ponen huevos,
en muchas granjas las crían para este propósito. Así que, una gallina ponedora es,
básicamente, aquella que es criada solamente para poner huevos para el consumo
humano.
Crianza casera
En las granjas familiares se construyen corrales para la crianza de gallinas. Por lo tanto, lo
que se genera es abastecer a la casa con la cantidad suficiente de gallinas ponedoras.
En este caso, un gallinero casero constará de la cantidad suficiente de gallinas para
el consumo interno. Ahora bien, hay granjas o casas grandes que cuentan con un poco
más de diez gallinas. Hay otras que amplían la cantidad.
En este sentido, se construye uno o varios gallineros o corrales de gallina con el fin de
que estas puedan habitarlo. Lo importante es crear el ambiente propicio para que las
gallinas puedan acomodarse. En este sentido, es mejor evitar el hacinamiento.
Por otra parte, es importante mantener estos corrales limpios. Esto con el fin de evitar
plagas o enfermedades que puedan poner en peligro la salud de las gallinas. Más
adelante hablaremos sobre algunas de estas enfermedades.
Los corrales no son difíciles de hacer. Sin embargo, para mayor comodidad, estos se
pueden adquirir por precios razonables en tiendas especializadas.
Por otro lado, en algunas granjas solo es necesario cercar el área donde habitarán las
gallinas. Una ventaja de esto, es que podrán alimentarse, además de los alimentos que se
le suministran, del contenido de la tierra, tales como el forraje y los insectos que logren
conseguir en su alrededor.
en casa
Criar gallinas caseras es muy distinto a criar gallinas a nivel industrial. Por eso, es
importante seguir las siguientes indicaciones para una crianza efectiva de gallinas
ponedoras a nivel casero, o si se quiere, de granja.
Un factor importante es la alimentación de la gallina. También hay que estar muy
pendientes de la salud de estas. En este sentido, es importante contar con
las recomendaciones de un experto en aves para saber qué enfermedades puede tener
las gallinas y cómo combatirlas o curarlas.
Alimentación
Para que una gallina ponedora pueda producir o poner huevos de alta calidad, un factor
muy importante es la alimentación. Esto también repercutirá en el desarrollo y
Albumen
La consistencia del albumen es lo que indicará su calidad. La consistencia, además de la
alimentación, también está ligada a la frescura del huevo, así como también a la edad de
la misma gallina. Por esta razón, las gallinas deben consumir una cantidad considerable de
proteínas para colaborar con la consistencia del albumen.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que factores como la contaminación o el exceso
de metaleso de magnesio puede modificar la consistencia del albumen del huevo, y esto
generará problemas a la hora del consumo.
Por esta razón, en el pienso, o alimento para gallinas ponedoras, no debe haber mucha
concentración de proteínas; esto se debe a que la reducción de la concentración de la
misma ayuda a la consistencia del albumen; mientras que un exceso podría causar el
efecto contrario.
La harina de haba, así como la de carne son fuentes proteicas que ayudarán y pueden
mejorar la consistencia del albumen. Por otro lado, la harina de girasol o de colza tendrá el
efecto contrario. Por eso es mejor evitarlas.
La cáscara
La cáscara es lo que recubre todo el contenido del huevo. Está formada por un noventa
y cuatro por ciento de carbonato cálcico. Por esta razón, las gallinas deben consumir una
cantidad considerable de calcio para producir huevos de calidad.
Aunque influye mucho la difusión del dióxido de carbono para la formación de la cáscara;
es el calcio el que también, combinado con carbono, le dará la consistencia y el grosor
necesario para que sea resistente.
Por esta razón, la gallina necesita de una dosis extra de calcio. Esto debido a que, a la
hora de poner los huevos, el calcio se extrae de sus propios huesos. Así que, la provisión
de calcio, además del fósforo, son elementos que contribuirán a la salud física de las
gallinas, y contribuirá con la fecundación de huevos de alta calidad.
Esto indica que una alimentación apropiada, con los nutrientes necesarios ayudará a que
la gallina ponedora ponga huevos de alta calidad. Estos nutrientes se pueden encontrar en
una mezcla apropiada de pienso, o de comida para aves de corral. También, como se
mencionó antes, en alimentos como el maíz, y ciertos frutos o vegetales caseros que se le
pueden suministrar a las gallinas ponedoras.
Razas de gallinas
ponedoras
Existen varias razas de gallinas ponedoras. Algunas son más productivas que otras;
mientras que hay razas autóctonas de ciertas regiones y cuya fertilidad es más efectiva si
permanece en su hábitat o zona de crianza.
También existen razas hibridas, esto es, la mezcla de dos razas de gallinas para mejorar la
calidad de las gallinas ponedoras. Sin embargo, es mejor tener cuidado con el cruce de
razas, dado que en ocasiones, si no se tienen los conocimientos técnicos precisos, el cruce
podría salir mal. Esto tendría como consecuencias gallinas ponedoras infértiles, o con poca
producción de huevos.
Las consecuencias serían una baja productividad de la granja, lo que representa una
importante pérdida de la inversión económica realizada. Algunas razas de gallinas tienen
como nombre el lugar de su procedencia. Un dato interesante para saber de dónde
provienen.
Gallinas ligeras
En líneas generales, las gallinas ligeras son las mejores para la gestación de huevos. Como
lo indica su nombre, las gallinas ligeras no son muy grandes, y se caracterizan por poner
los mejores huevos, así que pueden poner huevos en prácticamente todo el año.
Hy-line
Se caracteriza por ser una raza de gallina pequeña, de color, por lo general café, aunque
también se pueden encontrar ejemplares de color blanco. Por sus características, es una
de las gallinas ponedoras más usadas para el desarrollo industrial.
Hisex Brown
Esta raza de gallinas se caracteriza porque sus huevos son de un color marrón intenso.
Además, destaca su fortaleza física. En condiciones óptimas, puede llegar a poner más de
doscientos cincuenta huevos al año.
Hisex White
También son gallinas ponedoras resistentes, y pueden adaptarse en los criaderos para
gallinas. Además, es una de las razas que producen huevos de alta calidad, y estos son de
tamaño intermedio.
Leghorn
Esta raza se caracteriza por ser más productiva en granjas. Su efectividad es mucho más
grande que las demás razas de gallinas. Por esta razón, es la favorita por los granjeros. Su
capacidad de adaptación es impresionante. Además, puede llegar a poner hasta 300
huevos al año. Además, a diferencia de otras razas, consume cantidades pequeñas de
alimento, lo que hace más rentable su cría.
Babcock
Estas gallinas pueden poner al año trescientos huevos de gran tamaño. También se
caracteriza por su carácter apacible. También son apropiadas para la cría casera debido a
su docilidad y adaptabilidad.
Gallinas semipesadas
Las gallinas semipesadas cumplen dos propósitos: el de poner huevos para el consumo
humano, y para la producción de pollos de engorda. A diferencia de las ligeras, que son
exclusivamente para la producción de huevos para el consumo humano.
Además, existe la posibilidad de cruzar estas razas entre sí. Esto puede dar una variedad
de crías interesante, Así como huevos de tamaño grande. Claro, el cruce de estas razas
debe hacerse con mucho cuidado para evitar errores después.
Gallinas pesadas
Esta raza de gallinas es usada, sobre todo, para criar pollos de engorda. Por esta razón,
aunque son gallinas ponedoras, su producción es más bien baja con respecto a las otras
razas. Así que es importante saber muy bien qué razas de gallinas escoger y la finalidad de
estas: si es solo para que pongan huevos para el consumo humano, o para la cría de pollos
de engorda.
Ross
Esta es una de las razas más populares para la gesta de huevos y cría de pollos. Es uno de
los favoritos entre los granjeros, esto debido a que es una raza que crece muy rápido, y
además, consume la mínima cantidad de alimento. Lo que hace que su crianza sea
económica.
Cobb
Al igual que la raza Ross, también crece rápido y consume una cantidad mínima de
alimentos. La diferencia está en que estas pueden adaptarse a diferentes climas. Por esta
razón, es una raza que puede ser llevada a casi cualquier parte.
También existen las gallinas hibridas, que consiste en cruzar dos razas de gallinas para
conseguir un mayor efecto en cuanto a calidad de huevos y de crías. Cabe destacar que las
razas de gallinas ligeras y semipesadas son usadas para la gestación de huevos para el
consumo humano, o para gestar crías de engorde, en el caso de los segundos.
Pero en el caso de las gallinas pesadas, su único objetivo es obtener pollos para engorda.
Por eso, no son aptos para poner huevos con fines de consumo.
Esto es algo que hay que tener muy claro, ya que es importante escoger el tipo de gallinas
para su cría y fines. La mayoría de ellas son usadas para fines comerciales. Pero también
pueden adaptarse con rapidez a las granjas o corrales caseros.
Ciclos de puesta
Es interesante conocer cómo es la puesta de las gallinas y todo su proceso. Los procesos
varían de acuerdo a las razas de las gallinas. Pero es interesante saber cómo es el proceso
en general.
Algunas gallinas son altas productoras de huevos. Hay razas que incluso pueden poner
más de un huevo al día. Pero estos factores dependerán de la alimentación, así como del
uso de productos estimulantes para la puesta de huevos.
Aunque el ciclo de vida de una gallina es de diez años y un poco más, en el caso de la
producción industrial, su vida fértil llega a ser de tres años. En condiciones normales, si
bien las gallinas pueden poner huevos con frecuencia, después de esta edad deja de ser,
por decirlo de alguna manera, productiva.
Aunque después de los tres años sigue poniendo huevos, estos no son de mayor calidad, y
la puesta no es tan frecuente como al principio. Por eso es que, luego de este tiempo,
muchas gallinas son sacrificadas y reemplazadas por otras más jóvenes.
En este sentido, hay que tener en cuenta que las gallinas alcanzan su madurez a las 22
semanas de edad. A partir de este momento, comienza su vida productiva, que puede
durar hasta un poco más de sesenta semanas. A partir de este punto, comienza una nueva
fase con el cambio de plumas.
Si bien con el cambio de plumas se inicia una nueva fase de puesta, la verdad es que será
un poco inferior a la primera, pues ya la gallina ha alcanzado el máximo de su peso. Esto
no quiere decir que no ponga huevos de excelente calidad. Para ello, es importante contar
con una buena alimentación rica en proteínas y calcio.
Por otro lado, hay que señalar que, a nivel industrial, se hacen ajustes genéticos para que
las gallinas puedan llegar a su edad de puesta mucho más rápido, e incluso extender este
período por un poco más de tiempo. En este caso, el propósito que se persigue es
aumentar y mantener el rendimiento de las gallinas ponedoras.
Aunque esto también se podría hacer a nivel casero, es mejor mantener el ciclo
natural de estas aves si se piensa en una producción más bien interna que comercial. Esto
redundará en que los huevos serán de mayor calidad, y por lo tanto, en sentido
alimentario, beneficiará más a los consumidores.
Enfermedades
Como todos los animales de granja, las gallinas no se escapan de padecer de
enfermedades. Es importante conocerlas para saber cuáles son y cómo combatirlas.
Además, hay que tener cuidado, porque algunas de estas enfermedades repercuten en el
ser humano; y al ser animales que se usan para el consumo, podría traer problemas
mucho más graves.
Por esta razón, existen antibióticos para aves de corral, incluyendo las gallinas, como la
amoxicilina. Claro que el uso de estos antibióticos debe ser usado bajo supervisión de un
veterinario especializado en aves de corral.
Algunas de las siguientes enfermedades que pueden afectar a las gallinas son las
siguientes:
Peste
Es uno de los virus más comunes en las aves de corral. Este virus se da con mayor
frecuencia en los gallineros donde hay hacinamiento, ya que su transmisión se da por vía
nasal.
Los síntomas que produce son: catarro, trastornos nerviosos, bronquitis, así como tos y
supresión del equilibrio; además de problemas respiratorios, y una característica
fundamental en la sintomatología es la torsión del cuello del ave.
Para evitar esta enfermedad, es importante la vacunación de las aves, así como evitar los
hacinamientos. Pero también es importante no introducir al corral aquellas gallinas que
aún no estén vacunadas.
Bronquitis infecciosa
La bronquitis infecciosa es causada por un coronavirus. Este solo afecta a los pollos y las
gallinas. Al igual que la peste, se contagia por la vía respiratoria.
Los síntomas que produce son la tos, así como secreción nasal, además de los ojos llorosos
y dificultad para respirar. Este virus se puede transmitir fácilmente por el aire, lo que
podría ocasionar la infección en las demás gallinas. Por eso, en estos casos, es importante
evitar el hacinamiento de los gallineros.
Además, si una gallina está infectada, debe aislarse de manera inmediata para evitar el
contagio a los demás. La manera más efectiva de prevenirla es con la vacuna, ya que no
existe un tratamiento para ella.
Gumboro
Esta enfermedad la causa un agente birnavirus; y este es muy resistente a condiciones
ambientales que son desfavorables. Es un virus con una alta probabilidad de transmisión, y
cuyo tratamiento más efectivo es la vacuna. Su transmisión se da a través del contacto
directo entre las aves o con sus excrementos; e incluso se puede dar a través de la ropa
de los operadores.
Por esta razón, para prevenirlo, hay que limpiar los corrales con frecuencia, además de
crear más gallineros en caso de haber bastantes gallinas.