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Informe de los ganglios basales

Ganglios basales: anatomía y funciones


La corteza cerebral es la parte más visible del cerebro humano, así como la más
conocida. Su división en dos hemisferios, así como en cuatro lóbulos (frontal,
parietal, temporal y occipital) ha sido conocida y estudiada desde antiguo.
Sin embargo, el cerebro humano es un órgano complejo, poseyendo en su interior
diferentes estructuras y subestructuras fundamentales para el funcionamiento y
mantenimiento de las funciones corporales y cognitivas, participando en gran
cantidad de ámbitos. Ejemplos de estas partes del cerebro son el hipocampo, el
sistema límbico o el conjunto de núcleos del que trata este artículo, los ganglios
basales.
¿Qué son los ganglios basales?
Denominamos ganglios basales a un conjunto de núcleos subcorticales
interconectados situados en torno al sistema límbico y del tercer ventrículo. Se
ubican a ambos lados del tálamo, a la altura del lóbulo temporal. Se trata de
cúmulos de sustancia gris (es decir, zonas en las que se concentran las partes de
las neuronas que no están mielinizadas) que poseen una gran número de
conexiones con otras zonas del cerebro, como la corteza o el tálamo, tanto a nivel
de aferencias como de eferencias (reciben información de otras áreas cerebrales).
Los ganglios basales están repartidos entre zonas cercanas al centro del encéfalo,
bajo la corteza cerebral y alrededor del diencéfalo, y por su localización tienen un
papel en acciones que están entre lo automático y lo voluntario.
Los principales neurotransmisores que actúan en estas áreas cerebrales son la
dopamina como excitador y el GABA como componente inhibidor, teniendo
diferentes efectos según el núcleo y los circuitos nerviosos en el que actúen.
Principales componentes de los ganglios basales
A pesar de considerarse un como un conjunto de núcleos dada su interconexión,
los ganglios basales constan de diversas subestructuras diferenciadas y, de
hecho, físicamente es fácil reparar en los espacios que hay entre ellos. A
continuación puedes encontrar las principales estructuras de este conjunto de
estructuras cerebrales:
1. Cuerpo estriado
El estriado es considerado la principal zona de recepción de información de los
ganglios basales. Es decir, se trata de una zona que recibe numerosas
proyecciones de diversas áreas cerebrales, integrando la información y actuando
con ella. Está compuesto por el núcleo neoestriado (compuesto por núcleo
caudado y putamen), el cual se encarga fundamentalmente de recibir aferencias
del tracto nigroestriado, y el núcleo lenticular (conformado por putamen y globus
pallidus), más centrado en el envío de mensajes a otros núcleos cerebrales.
2. Núcleo Caudado
Situado debajo del lóbulo frontal y en conexión con el occipital, esta estructura
está vinculada con la sensación de alarma, avisando de que algo no funciona
correctamente, así como a la motivación. Esto se debe a sus conexiones con el
lóbulo frontal, especialmente con el córtex orbitofrontal.
3. Putamen
Elemento fundamental en el control de los movimientos automatizados, Situado
debajo del núcleo caudado y unidos por la zona anterior. Se vincula al movimiento
de la cara y extremidades.
4. Globus pallidus
Derivado del diencéfalo, se sitúa entre putamen y cápsula interna. En este caso
posee neuronas mielinizadas que son utilizadas para transmitir información al
tálamo y a la sustancia negra.
5. Sustancia negra
Localizado bajo el tálamo, en el tronco del encéfalo, esta estructura es conocida
por ser una de las principales fuentes de dopamina del cerebro. Participa
activamente en el sistema de recompensa cerebral. En su conexión con el estriado
(formando parte del tracto nigroestriado) también tiene gran importancia en el
control del movimiento fino, tanto de extremidades como de los ojos.
6. Núcleo accumbens
Situado bajo el globus pallidus, recibe señales del área tegmental ventral y envía
señales al globo pálido. Este núcleo participa en el mantenimiento de conductas
reforzadas por drogas y habituación, poseyendo conexiones con el sistema
límbico.
7. Núcleo subtalámico
Situado en el punto de unión entre mesencéfalo y tálamo, la principal función que
se le otorga al núcleo subtalámico es la de regular funciones motoras.
8. Sustancia roja
Esta estructura mantiene importantes conexiones con el cerebelo y la médula
espinal, estando especialmente vinculada a la coordinación motriz.
Concretamente, posee especial relevancia en el control de brazos y hombro.
Funciones de los ganglios basales
Como se ha podido observar en la explicación de sus componentes, las funciones
de los ganglios basales son variadas, participando en numerosos e importantes
aspectos de nuestra vida. Haciendo un repaso general de los aspectos en los que
participan podemos decir que algunas de sus principales funciones son las
siguientes:
1. Planificación, integración y control del movimiento voluntario
Una de las funciones por la que más se conoce a los ganglios basales es por la
regulación y gestión de las acciones motoras voluntarias. Actuando a través del
circuito corticoestriatal, actúan concretamente como filtro inconsciente que inhibe o
selecciona los movimientos a realizar, concretamente ayudando a controlar la
postura corporal y a coordinar el movimiento fino/preciso de las extremidades.
Los ganglios basales permiten marcar el final de un movimiento, planificar
secuencias y corregirlas en caso de necesitar hacerlo.
2. Aprendizaje procedimental
Otro de los aspectos en que los ganglios basales tienen una actuación
predominante es en el aprendizaje procedimental y en la automatización de la
conducta. Este tipo de aprendizaje es el que permite acostumbrarse a realizar
secuencias de acciones tales como las necesarias para conducir, tocar un
instrumento, afeitarse o coser, permitiendo la gestión de los recursos atencionales
de forma que puedan dirigirse hacia otros menesteres.
3. Funciones ejecutivas
Los ganglios basales también participan de forma activa en las funciones
ejecutivas. Concretamente contribuye al mantenimiento de la velocidad de
procesamiento, la planificación a nivel cognitivo y la elaboración de estrategias
para solucionar problemas. Del mismo modo, las conexiones de los ganglios
basales con la corteza orbitofrontal provocan que estén implicados en la
capacidad de inhibición conductual.
4. Participación en conducta emocional y motivacional
Como se ha mencionado anteriormente, algunos ganglios basales como el núcleo
accumbens tienen conexiones con el sistema límbico y el sistema de recompensa
cerebral, habida cuenta de su importancia en la gestión de la dopamina. Así, se
puede considerar que los ganglios basales participan en la conducta emocional y
en el reforzamiento producido por drogas o estimulación.
Por ejemplo, los ganglios basales tienen un papel muy importante tanto en el
condicionamiento clásico como en el condicionamiento operante.
Trastornos vinculados a problemas en ganglios basales
Como se puede observar, todos estos elementos y funciones hacen de los
ganglios basales elementos fundamentales para la correcta funcionalidad del
organismo.
Pero..., ¿qué ocurre cuando existe una lesión o un suceso provoca que estos
núcleos no se coordinen o actúen como deberían? En ese caso nos podemos
encontrar con algunos de los siguientes problemas y trastornos, generalmente
tratándose problemas de tipo hipo o hipercinéticos, es decir, vinculados al
movimiento.
1. Parkinson
El trastorno más común y más conocido derivado de un mal funcionamiento de los
ganglios basales es la enfermedad de Parkinson. Los síntomas más reconocibles
de este trastorno son los temblores parkinsonianos o en reposo. Asimismo,
también aparece rigidez muscular y pérdida de movimientos espontáneos. junto
con una marcada bradicinesia o pérdida de velocidad motora y trastornos de la
marcha.
Este trastorno se da especialmente ante la degeneración y muerte de las células
dopaminérgicas del nigroestriado, que hace que la transmisión de la dopamina se
pierda en gran medida, no llegando la información a la corteza motora.
2. Corea de Huntington
Se trata de un trastorno genético neurodegenerativo causado por una alteración
un gen dominante en el cromosoma número cuatro, con penetrancia completa.
Produce síntomas hipercinéticos: la enfermedad causa movimientos incontrolados
semejantes a una danza (de ahí el nombre de corea), y pérdida importante de
funciones ejecutivas y memoria. Los déficits son producidos principalmente por la
muerte de neuronas del núcleo caudado, especialmente de neuronas gabaérgicas
y colinérgicas.
3. Síndrome de pérdida de autoactivación psíquica
Tal y como se ha mencionado anteriormente los ganglios basales tienen relación
con la motivación personal. Una lesión en dichas zonas puedan comportar pues
graves implicaciones en este aspecto, como sucede en el síndrome de pérdida de
autoactivación psíquica o PAP.
Este trastorno, también conocido como acinesia psíquica pura o pérdida del inicio
o mantenimiento de la acción, produce una pasividad extrema en quien lo padece,
perdiendo la capacidad de interesarse, la espontaneidad y la motivación. Quien lo
sufre es capaz de reconocer sus déficits, de manera que no se presenta
anosognosia, pero presentan una gran indiferencia por ellos.
4. Trastornos por tics y síndrome de la Tourette
En estos trastornos, como el síndrome de Tourette, los cuales se caracterizan por
la presentación de movimientos, vocalizaciones, gestos o conductas muy
estereotipadas que se realizan de forma inconsciente, se presenta una afectación
severa de los ganglios basales. Más específicamente, se cree que estos
trastornos pueden estar relacionados con problemas en el putamen.
5. Otros trastornos vinculados
Al margen de estos trastornos, alteraciones de los ganglios basales suelen darse
en una gran cantidad de problemas psicológicos. Por ejemplo, en el trastorno
obsesivo compulsivo o el TDAH pueden y parecen darse alteraciones de estos
sistemas cerebrales.

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