TRABAJO DE FILOSOFIA

ANDRES HENRIQUEZ
10B

Define con tus propias palabras:

o Asombro como una de las actitudes fundamentales del filósofo.

o Actitud teorética en contraposición a la actitud mítica.

 Explica, con tus propias palabras, el significado de la frase subrayada en un escrito

de una cara tamaño carta.

DESARROLLO

1. El Asombro es la actitud que presentamos al ver o conocer algo que es nuevo

para nosotros, ya que el asombro nos motiva a descubrir el porqué de las cosas,
de donde fueron creadas, como surgieron, para que sirven, y seguir
profundizando más y más sobre el sentido de lo que hoy conocemos.

El Asombro es como el motor que impulsa al que hacer filosófico, por el afán de
conocer y dar respuesta a las cosas. El Asombro es la puerta al conocimiento, por
eso hoy en día conocemos el porqué de las cosas gracias al asombro que tuvieron los
filósofos hoy conocemos más a profundidad el sentido de todo lo creado.

2. Actitud teorética en contraposición a la actitud mítica.

Es característico de la actitud mítica (mito ) el usar mitos, que son relatos o

leyendas que explican fenómenos o sucesos naturales recurriendo a seres
sobrenaturales, fuerzas ocultas, magia... ,Emplea la imaginación para crear los
mitos, ritos,... con los que explicar y dominar la naturaleza, Personifica y diviniza
las fuerzas naturales: el viento, por ejemplo, Así, se pueden pedir mediante
oraciones, plegarias, sacrificios,... a ese dios intervenciones beneficiosas para las
personas. Hace depender los sucesos naturales de fuerzas sobrenaturales, como la
 voluntad de un dios: el que se produzca o no un suceso natural depende lo que
quiera el dios correspondiente. Por ejemplo, si llueve en exceso o si no llueve nada
será porque no se ha rendido culto adecuadamente al dios de la lluvia.
La Actitud teorética o racional que poco a poco se fue extendiendo y aún hoy
muchas personas siguen buscando la explicación de fenómenos naturales en
planteamientos míticos o religiosos. Mito --> Imaginación --> Arbitrariedad -->
Caos, es decir, los mitos creados con la imaginación conducen a una naturaleza
arbitraria, dependiente de fuerzas sobrenaturales por lo que el mundo es caótico,
imprevisible.
 Utiliza la razón para construir explicaciones racionales para la comprensión y
dominio del mundo natural y humano. La naturaleza está sometida a la necesidad, es
decir, las cosas suceden cuando, donde y como deben suceder. No dependen de
voluntades caprichosas sino exclusivamente de sucesos naturales. Si llueve, por
ejemplo, es por un fenómeno atmosférico y nunca adquieren propiedades mágicas o
sobrenaturales.

3. Solo como algo que es pueden ser las cosas verdaderas o falsas.

Para diferenciar lo verdadero de lo falso necesitamos un criterio de verdad, es decir, un

modo de juzgar que posibilite delimitar lo verdadero de lo falso. Ser verdad es algo que
se puede decir de pensamiento y de ideas, de frases y de opiniones, pero no de cosas.
Nuestro juicio sobre la realidad puede ser verdadero (o también falso), pero calificar las
realidades mismas —las “cosas”— de verdaderas es algo que nos parece absurdo y
carente de sentido: ¡las cosas son reales, pero no “verdaderas”! Si se considera este
hecho desde el punto de vista histórico, se ve que se trata de algo más que una simple
renuncia a la utilización de un determinado concepto o de un término concreto. No se
trata simplemente de una ausencia por así decirlo “neutral”, o de una forma particular de
ver las cosas. Antes bien, esta no utilización y esta ausencia del concepto “verdad de las
cosas”, son el resultado de un largo proceso de presiones y fraudes: o sea, para decirlo
de forma algo menos agresiva, de un proceso de eliminación.

Para poder alcanzar verdades absolutas y válidas, de alcance universal. Nos

encontraríamos en dos argumentos el  averiguar si algo es verdadero depende de cada
sujeto, o para reconocer algo como verdadero o falso depende de cada cultura, época o
grupo social, niega existan verdades universales y absolutas.
Solo aquello que es comprobado y probado podemos decir que es verdadero mientras
aquello que no tiene explicación alguna y carece de pruebas reales decimos que es falso.