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1,,", 2005
h 1"1.1,.'11'11"1'111 n, 2012
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8 ÍNDICE ÍNDICE 9
III. Enseñar la complejidad del oficio de maestro, Louise Bélair 88 11 ""//'1111'1 icante al experto: cómo construir las habilidades
1. El contexto sociopolítico de los dispositivos expe- /1111/", lunule«, Nadine Faingold. . . . . . . . . . . .. 197
rimentados . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 89 1tll!'ndti in...................... 197
2. Los principios subyacentes al dispositivo de for- I 1':11 qu nsisten las habilidades profesionales de
mación 92 1014 lila tros expertos? ... 199
3. La interconexión de algunos conceptos . . . . 93 , I,()$dos ejes de la formación 210
4. Redefinir y estructurar las habilidades . . . . 96 l '(1) lusión 219
5. Las formaciones experimentadas y sus efectos 99
6. ¿Qué procesos activar en la formación? . . . . 105 111, l'unnacion continua y videoformación: qué habilidades
SI'deben priorizar, Léopold Paquay y Marie-Cécile
IV. La formación práctica de los maestros y el nacimiento de Wagner. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 222
una inteligencia profesional, Michel Carbonneau y Introducción 222
Jean-Claude Hétu. . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 107 I. Seis paradigmas relativos al oficio de maestro .. 224
Introducción 107 2. Las prácticas de los cursillos sobre el terreno: las es-
1. Una experiencia de formación a la práctica docente 108 trategias y habilidades que resultan privilegiadas 238
2. Intentando establecer un modelo 120 . Prácticas de microenseñanza y videoformación:
Conclusión 133 las estrategias y habilidades que resultan favore-
cidas (M.-C. Wagner) 248
V. Cómo formar maestros profesionales. Por una formación A modo de conclusión '".' .. 263
continua vinculada con la práctica, Évelyne Charlier 139
1. El maestro, un profesional . . . . . . . . 139 IX.El trabajo sobre el habitus en laformación de maestros.
2. ¿Las habilidades profesionales? . . . . . 147 Análisis de las prácticas y toma de conciencia, Philippe
3. Una formación vinculada con la práctica 154 Perrenoud . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 265
Conclusión 169 1. El habitus como vector de la acción pedagógica .. 269
2. Toma de conciencia y transformación de esquemas 282
VI. Enfoque clínico,formación y escritura, Mireille Cifali . 170 3. Los dispositivos de formación 288
Introducción 170 4. ¿Se puede enseñar la lucidez? . . . . . . . . . .. 304
1. El espacio del enfoque clínico 171
2. La formación. . 179 X. El maestro como "actor racional": racionalidad, conoci-
3. Los formadores 185 miento, juicio, Maurice Tardif y Clermont Gauthier 309
4. La escritura 189 1. La investigación: los juegos del poder y los retos
Conclusión .... 196 del saber 314
2. Las concepciones del saber o las exigencias de ra-
cionalidad y su interés para la investigación . .. 322
10 ÍNDICE
11
32 INTRODUCCIÓN
33
34 LA COMPETENCIA DEL MAESTRO PROFESIONAL I . (' )MI ETENCIA DEL MAESTRO PROFESIONAL 35
lativos a las materias), tal como sucedía en los anteriores si tt' a través de la formación que les imparten; tam-
111111' íro
mas de formación. I,.tlllll le ver cómo se construyen, según ellos, estas habi-
La constatación de este cambio institucional y social r s· I ,d\' u manera las han adquirido, y cómo éstos orga-
pecto de la profesionalización de la enseñanza, en el sentido I It 1'1\ It práctica cotidiana la formación necesaria para que
que Perrenoud (1993a) la define, como "el grado de avance qu ' h.tllilld. d s profesionales sean aprehendidas.
experimenta una transformación estructural del oficio hacia 111110.' stos trabajos parten de diversos fundamentos:
una profesión", nos incitó a desarrollar, en el Centro de Inve - /1) lo aportaciones recientes de la psicología cognitiva y el
tigación Educativa de Nantes (CREN,por sus siglas en francés), IlId 11 1 la evaluación pedagógica (Anderson et al., 1978;
algunas investigaciones sobre la profesión de maestro y sobre el h tl'l. in y Stern, 1981; Leinhardt y Greeno, 1986; Berliner,
proceso de construcción de sus conocimientos y de sus habili- 1 114ft, 'alderhead, 1987; Glaser, 1991);
dades profesionales. 11) 1) trabajos de orientación más fenomenológica sobre el
Hemos considerado importante identificar los modelos .t/l",. I cente relacionado con las representaciones y las situa-
subyacentes a la profesión de maestro. Con esta finalidad pre- , IJIIII'S vividas a partir de la práctica (Elbaz, 1983; Louden,
guntamos a los sujetos que practican esta profesión, y a los for- Iljlj 1; Z ichner et al., 1987; Lampert, 1985);
madores que los preparan para ella, cuáles son, según ellos, los (') las recientes investigaciones de Schon (1983, 1987),
conocimientos y las habilidades que configuran su actividad Ig ris (1974) y Tochon (1993) sobre el maestro experto;
profesional y, además, qué les ha permitido construir su profe- tl) todos estos trabajos se inscriben en el paradigma de in-
sionalismo. ,'. ligación sobre el teacher thinking y también en las reflexio-
Vamos a presentar las conclusiones de una investigación 11\'/4 de Perrenoud (1994i) sobre la "capacidad de 19s maestros
realizada por la Dirección de Evaluación y Prospección (DEP; dI' plicar y actualizar sus conocimientos en la práctica", y so-
G
La especificidad de la labor docente consiste en que ésta s dl' tipos diferentes, de los cuales debemos identificar la natura-
refiere a dos campos de prácticas distintos pero interdepen- It'~a para intentar restituir su funcionamiento. ¿Cómo se co-
dientes: por un lado, la gestión de la información, la estructu- 11 • tan conocimientos y acciones en el trabajo profesional del
ración del conocimiento de parte del maestro y su apropiación maestro? ¿Los conocimientos profesionales son SOBREla acción,
por el alumno (el campo de la didáctica); por el otro, el proce- I U acción o EN acción? ¿Son "conocimientos traducidos en
samiento y la transformación de la información que se convier- ,1 tos del sujeto", según la expresión de Vergnaud (1991), o son
te en conocimiento en el alumno, mediante la práctica relacio- r 'cursos cognitivos transferibles en acciones gracias a los" es-
nal y las acciones emprendidas por el maestro para estructurar quemas de pensamiento" o al habitus que vinculan varios esque-
las condiciones de aprendizaje que mejor se adapten a la situa- mas (Perrenoud, 1993b)? Más adelante abordaremos esta cues-
ción (el campo de la pedagogía). tión, que constituye el objeto del presente simposio.
La pedagogía interviene en la transformación de la infor-
mación en conocimiento mediante los intercambios cognitivos
y socioafectivos que el profesor realiza a través de interaccio- 3. LASHABILIDADES
Y LOSCONOCIMIENTOS
• la información es "exterior al sujeto y de orden social"; mientes de una acción automatizada por la rutina. Este enfo-
• el conocimiento es "integrado por el sujeto, y es de orden 111 \ cognitivista ha contribuido a delimitar mejor los procesos
personal". 11' decisión de los maestros, ya que la enseñanza se asimila a
11l1a actividad de resolución de problemas complejos, por razo-
El saber se sitúa "entre los dos polos", en la interfaz o, se- n.rmiento lógico inductivo o deductivo (Charlier, 1989; Tochon,
gún Lerbert (1992), "entre la interfaz del conocimiento y la 1993;Altet, 1993). En cambio, dicho enfoque no permite cono-
información". El saber se construye en la interacción entre co- ll'r la naturaleza de los conocimientos subyacentes en los proce-
nocimiento e información, entre sujeto y entorno, dentro y a o de toma de decisiones. No parece que los algoritmos, los
través de la mediación. 111 todos heurísticos, las normas de acción y los planes raciona-
En la enseñanza, las habilidades comprenden los conoci- 1, prestablecidos puedan rendir cuentas de la adaptabilidad
mientos plurales que entran en juego en la planificación, la del maestro durante la acción frente a una situación pedagó-
organización y la preparación cognitiva de la sesión, y también gica siempre singular, incierta y muy compleja. El maestro no
en la experiencia práctica surgida de las interacciones en clase. puede decidir por sí mismo. Tochon nos muestra que el maes-
Las clasificaciones de los conocimientos docentes son muy tro emplea razonamientos maleables, ana lógicos, intuitivo s o
numerosas, y pueden variar según los paradigmas de investi- "abductivos"; "la abducción se refiere a los resultados del ins-
gación y las disciplinas que las han generado (filosofía, psico- tinto, de la introspección o de la intuición". Para Tochon, la in-
logía o etnología). Todas las clasificaciones sobre la naturaleza vestigación debería orientarse hacia el estudio" de las caracte-
del conocimiento de los maestros que se han presentado hasta rísticas importantes de la competencia profesional que no deriva
ahora indican una pluralidad de conocimientos docentes: teóricos del pensamiento lógico sino de la producción de ideas nuevas, de
y prácticos, conocimientos conscientes que preparan y guían la la creación de soluciones originales en situaciones paradóji-
acción, pero también implícitos, saberes de experiencia, ruti- cas". Tochon presenta el ejemplo del médico experto, quien, para
nas automatizadas, interiorizadas, que intervienen en las im- hacer un diagnóstico, utiliza casos específicos sacados de la
provisaciones o a la hora de tomar una decisión interactiva du- experiencia y propone soluciones originales.
rante la acción. Otro modelo conceptual, el del "practicante reflexivo" de
Los trabajos de las ciencias cognitivas han permitido des- Schón (1983), caracteriza el pensamiento de un profesional
arrollar la corriente de investigaciones sobre" el pensamiento experto como una reflexión en acción, fundamentada en las cog-
de los maestros"; los modelos de procesamiento de la informa- niciones implícitas, imbricadas en la situación que el profesio-
ción y, en particular, la distinción hecha por Anderson entre las nal es incapaz de describir. Es el polo opuesto de una reflexión
tres formas del saber: declarativo ("saber que"), procedimental sobre la acción, la cual se lleva a cabo antes o después de la ac-
("saber cómo") y condicional o contextual ("saber cuándo y ción y se basa en los conocimientos explícitos.
dónde"), permiten identificar los distintos aspectos que ad- Otros enfoques conceden un espacio más grande a los co-
quieren los conocimientos docentes, además de poder descri- nocimientos profesionales que derivan de la experiencia prác-
bir las etapas de transformación de los diversos conocimientos, tica. La corriente fenomenológica que describe la experiencia
especialmente en la planificación, para explicitar los procedi- vivida por el maestro nos da a entender que el conocimiento
44 LA COMPETENCIA DEL MAESTRO PROFESIONAL LA COMPETENCIA DEL MAESTRO PROFESIONAL 45
práctico sería indisociable de sus vivencias personales. Los co- Estos conocimientos teóricos son inseparables.
nocimientos profesionales también se desarrollan sobre el 2. Los saberes prácticos son el resultado de las experiencias
terreno, en la práctica profesional, a través de la singular cons- cotidianas de la profesión, están contextualizados y se adquie-
trucción del sentido; según Tochon (1991),se trata de "conoci- ren en una situación laboral; también los llamamos saberes
mientos estratégicos", ubicados en la intersección de lo cogni- empíricos o de experiencia. Aquí es necesario distinguir algu-
tivo y lo afectivo, o de "saberes pragmáticos", según Tardif nas categorías que tomamos de la psicología cognitiva:
(1993b); "los saberes de los practicantes de la enseñanza no
I corresponden a un conocimiento, en el sentido usual del térmi- • Los saberes sobre la práctica: saberes procedimentales sobre
no, sino más bien a representaciones concretas, específicas, a cómo hacer algo, y los formalizados.
'prácticas' orientadas al control de las situaciones, a la solución • Los saberes de la práctica corresponden a los de experien-
II de problemas y a la realización de objetivos en contexto. En cia, a los que resultan de una acción exitosa, de la praxis,
resumen, se trata de saberes pragmáticos, en el primer sentido y también a los condicionales de Sternberg (1985) (el sa-
de la palabra; esto es, de aquellos que se han forjado en contac- ber cuándo y dónde): los distintos tipos de saber hacer
to con 'las mismas cosas', es decir, con las situaciones concretas -saberes de acción a menudo implícitos-o El saber del
del oficio de maestro". maestro profesional, que permite distinguir al debutante
¿ Cómo se construyen estos saberes a través de la experien- del experto, se sitúa en este nivel.
cia práctica? Las verbalizaciones de los maestros sobre sus
acciones, y los enunciados explícitos que éstos formulan acerca Para comprender cómo moviliza el maestro estos saberes
de las mismas, nos permiten conocer la naturaleza de este tipo de -que la mayoría de las veces son no conscientes-, diversos au-
conocimientos. tores han introducido el concepto de operador de esquema de pen-
En lo que a nosotros concierne, proponemos la siguiente samiento, "un instrumento cognitivo" operatorio. El esquema es,
tipología de conocimientos: para Vergnaud, "lo que permite que una acción sea operatoria".
El enfoque de Malglaive (1990) nos ayuda a comprender
1. Los conocimientos teóricos pertenecen al orden declarati- las interacciones entre los distintos tipos de conocimientos y la
vo, y entre ellos podemos distinguir: acción. Entre los conocimientos teóricos, los procedimentales,
I i los prácticos y los que se vinculan con el saber hacer, Malglai-
• Los que se deben enseñar: conocimientos de las disciplinas, ve propone "el saber en uso", que articula los distintos conoci-
los científicos y aquellos presentados de forma didáctica mie~tos en la acción. Para ello, toma en préstamo el concepto
para hacerlos adquirir a los alumnos, los recientemente de sistema de representación y tratamiento (SRT) de Hoc (1987),
constituidos y los exteriores. para representar las operaciones cognitivas encargadas de vin-
• Los conocimientos necesarios para enseñar: conocimientos cular los conocimientos y la acción con la práctica profesional.
pedagógicos sobre la gestión interactiva en clase, los di- Los SRT corresponden a "una interiorización de los campos de
dácticos sobre las distintas disciplinas, y los de la cultura tareas a los que el sujeto ha sido confrontado, y en los cuales
docente. éste ha desarrollado su actividad".
46 LA COMPETENCIA DEL MAESTRO PROFESIONAL
LA COMPETENCIA DEL MAESTRO PROFESIONAL
47
Pero ¿qué función tienen estos distintos conocimientos en
CUADRO 1.1. Funciones del saber en el transcurso de una tarea
la acción? ¿Cuál es la relación funcional de estos conocimientos res-
(f. M. Pieters, 1994)
pecto a la acción? ¿Cómo se articulan conocimientos y acció~, en
qué medida son interdependientes? Nos hacem?s l~,mlsma Saber Saber condicional
pregunta que Piaget (1974b): cómo puede el sujeto pensar Saber declarativo procedimental (¿ cómo decidir, qué
(¿cómo funciona?) (¿cómo hacerlo?)
adecuadamente" después de "haber comprendido en el curso hacer y cuándo?)
de la acción". Parece ser que los conocimientos básicos utiliza- • Automatismo
dos en una acción, durante el proceso de transformación de • Competencia Compartimentación Experiencia Transferencia
una experiencia y un resultado, se convierten en nuevos cono- de rutinas Saber rudimentario Efecto de rutina próxima
cimientos, en saberes de la práctica, lo cual permitirá al sujeto • Representación
adaptarse a la situación. . declarativa
Ninguna forma de conocimiento puede ser reducida a ~n
saber declarativo, procedimental o condicional. Tal como escnbe • Esquemas
Pieters (1994):"Cuando conocemos algo, podemos conocer no inductivos
Compartimentación Transferencia
sólo las informaciones factuales (el saber declarativo), sino tam- • Competencia
lejana
bién cómo podemos utilizar este saber en ciertosprocesoso rutinas de adaptación
Flexibilidad
(el saber procedimental); asimismo podemos comprender cuán- • Representación
cognitiva
do y dónde se puede aplicar dicho saber (el saber .c~n~icion~l)". integrada
Respecto a los saberes vinculados con la accion interviene (compilada)
otra dimensión: la adaptación a la situación; el saber de la prácti-
ca se construye durante la acción con la finalidad de eficacia; es
tarse y actuar, reúne muchos elementos de la situación. Esta
contextualizado, encarnado, responde a una finalidad precisa;
vinculación de los saberes con la adaptación en la acción se hace
es un saber adaptado a la situación. Esta adaptabilidad del sa-
de forma implícita, y el profesional debe adoptar un comporta-
ber se construye con la ayuda de las percepciones e interpreta- miento reflexivo sobre sus actos.
ciones resultantes de situaciones anteriormente vividas.
Por este motivo, vamos a utilizar el concepto de saberes in-
Parece que la construcción del saber práctico y su transfe-
~ermediarios para analizar, leer, nombrar y teorizar las prácticas;
rencia se lleva a cabo mediante la articulación de dos dimen-
estos son conceptos operatorios que nos permitirán traducir en
siones: la de los saberes existentes y la de "adaptación de estos
palabras las prácticas, a las que denominamos saberes-herramien-
saberes a la acción", y esto en dos niveles. Por un lado, el de las
tas, instrumentos para describir las prácticas. Estas herramientas
rutinas interiorizadas, no conscientes; por el otro, en el nivel
nos permitirán desarrollar una habilidad clave: el saber anali-
consciente de los esquemas. Pieters (1994)propone un modelo
zar, auténtica metahabilidad, que nos permite construir las habi-
de síntesis sobre la utilización del saber (véase cuadro 1.1). Este lidades profesionales.
modelo puede evidenciar la utilización de los saberes de la
El modelo de maestro" experto en tomar decisiones" no con-
práctica. Éstos son saberes de integración. El maestro, para adap-
cuerda con la descripción de una profesión que es, ante todo,
48 LA COMPETENCIA DEL MAESTRO PROFESIONAL LA COMPETENCIA DEL MAESTRO PROFESIONAL 49
una práctica relacional que necesita múltiples interacciones, cia vivida, al conocimiento íntimo de las situaciones, de las
que padece las limitaciones de la situación y las permanentes charlas sobre el oficio, a los periodos de prácticas con otros co-
incertidumbres que generan las reacciones de los demás suje- legas, a la experimentación de iniciativas pedagógicas, a las in-
tos. Ahora bien, la experiencia de estas limitaciones y de estas novaciones. Para ellos, la formación profesional es una cons-
situaciones puede ser muy formativa; gracias a ella el maestro trucción individual enraizada en acciones prácticas cotidianas
podrá desarrollar unos habitus (es decir, unas disposiciones en las clases, a las que sigue un proceso de reflexión y análisis
adquiridas en y a través de la práctica real) que le permitirán de dichas acciones (análisis llevado a cabo con un formador, un
precisamente "enfrentarse a las limitaciones y a los impondera- tutor u otros practicantes, colegas suyos). El profesionalismo
bles del oficio" (Tardif, 1993a).Llevar a cabo un trabajo sobre el se construye gracias a la experiencia y a la práctica en el terre-
habitus a través del "saber analizar" será formativo para el maes- no, pero con la ayuda de un mediador, que favorece la toma de
tro en el sentido en que éste tomará conciencia de sus actos, se conciencia y la adquisición de conocimiento, y participa en el
"formará en la lucidez" (Perrenoud, más adelante, capítulo IX). análisis de las prácticas dentro de un enfoque de coformación
(Altet, 1994).
e) Los formadores declaran que "no disponen de las herra-
4. UNA FORMACIÓN BASADA EN EL ANÁLISIS mientas necesarias para analizar las prácticas y las situacio-
DE LAS PRÁCTICAS Y EN LA REFLEXIÓN nes" y que los conceptos generados por la investigación didác-
tica y pedagógica podrían ayudados a explicitar sus acciones.
Los resultados de las dos investigaciones que hemos presen- De todas formas, los conocimientos pedagógicos son a
tado al principio del capítulo, DEP y MAFPEN, convergen en al- menudo empíricos. ¿Cómo se pueden formalizar los saberes
gunos puntos: surgidos de la práctica? ¿Qué herramientas nos permiten for-
a) La formación "partirá de la práctica" y "hará reflexionar malizados? ¿Cómo hacer que los maestros expliciten sus prác-
sobre las prácticas reales"; ésta tiene que "cuestionadas y ha- ticas y puedan así construir sus habilidades profesionales?
cedas explícitas con el fin de que salgan a la luz". Pensamos que los dispositivos de análisis de las prácticas y
b) Los maestros y formadores han adquirido sus conoci- la investigación sobre el proceso de enseñanza-aprendizaje
mientos profesionales "sobre el terreno, en acción, por sus pro- constituyen dos procedimientos de formación que favorecen
pios medios, a través de su experiencia", y estos conocimientos la construcción del profesionalismo a través del desarrollo de
les parecen esenciales. La primera formación inicial los "ini- una metahabilidad: el saber analizar.
ció" en el oficio, pero su profesionalismo lo forjaron ellos solos, En la presentación anterior de una investigación sobre la
paulatinamente, a través de sus experiencias prácticas. Los interconexión del proceso de enseñanza-aprendizaje (Altet,
maestros destacan, sea cual fuere su formación inicial -y las 1994) ya habíamos dado algunos ejemplos de herramientas
formas que ésta puede tomar son muy variadas-, la inciden- conceptuales extraídas de investigaciones pedagógicas sobre
cia primordial de su formación práctica, la cual les ha permitido las variables de dicho proceso, que sirven para describir la prác-
adquirir "un conocimiento de lo que conviene hacer y de lo tica docente. Éstas son las funciones de los actos pedagógicos,
que conviene hacer hacer"; por ejemplo, recurrir a la experien- los episodios de comunicación y las formas de reajuste. La es-
LA COMPETENCIA DEL MAESTRO PROFESIONAL 51
LA COMPETENCIA DEL MAESTRO PROFESIONAL
50
extender la problemática, plantear y determinar proble- FIGURA 1.2. El saber analizar, el saber reflexionar y el saber justificar
mas; están en el centro de laformación de un maestro profesional capaz
• una dimensión instrumental: son saberes-herramientas, de adaptarse (Altet, 1995)
criterios de interpretación; se trata de conocimientos ins-
trumentales, aptos para describir las prácticas y las si- Prácticas en situación Formación
tuaciones que ayudan a racionalizar la experiencia prác-
Desarrollo
tica; de conocimientos Desarrollo
• una dimensión de cambio, ya que estos saberes crean nuevas
y habilidades de metahabilidades
representaciones y, en consecuencia, preparan al cambio.
Son saberes nuevos, reguladores de la acción, que intentan
solucionar un problema o modificar las prácticas; son -1" "'P"!"tac,=," - el "saber analizar"
herramientas de cambio.
de acción
nuevas y corroborados. Estos conocimientos pedagóg~-
el habitus - tomar conciencia
cos, una vez organizados y formalizados, son transfen-
de su habiius
bles y transmisibles a través de un discurso argumenta-
do. La reflexión sobre los conocimientos profesionales y su
ADAPTACIÓN A CUALQUIER SITUACIÓN /
correspondiente clarificación permiten al maestro cre~r
sus propias normas estratégicas adecuándolas a las SI- ~
tuaciones, a los alumnos y a los contextos encontrados, UN MAESTRO PROFESIONAL
así como rendir cuenta de ellos. Dichos conocimientos
constituyen lo que Gauthier (1993b)identifica como "la
razón pedagógica", y pueden compararse con los cono- Si el maestro profesional pasa a ocupar el lugar del maes-
cimientos de la jurisprudencia, que permiten emitir juicios tro experto en tomar decisiones, la formación ya no puede con-
sobre las acciones que se han llevado a cabo a partir de sistir en formalizar modelos de toma de decisiones sino que
casos identificados, tal como proponen Tardif y Gauthier ésta debería proponer dispositivos variados y complementarios
(en el capítulo x). que, mediante el trabajo del maestro sobre sus propias prácti-
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SIMONEBAILLAUQUES*
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