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Actividad Evaluativa Sobre Película
Actividad Evaluativa Sobre Película
A manera de conclusión, debe ser muy difícil conseguir que un psicópata deje de vulnerar
las normas sociales y legales, ya que durante el tratamiento el psicópata no suele implicarse
en la búsqueda de su curación en el caso de los adultos. Cada niño o adolescente en este
caso, responde de forma distinta a los diferentes tratamientos. Es posible que se deban
probar varios tratamientos antes de encontrar uno que sea adecuado para el niño o el
adolescente. Este tipo de alteraciones o trastornos, puede ser tratado en primera instancia
por un terapeuta capacitado, donde la terapia pueda ser individual con el niño, solo con los
padresggb o toda la familia, de ser necesario, trabajar de manera multidisciplinar con un
psiquiatra para brindar apoyo farmacológico
3. ¿Qué lugar ocupa la psicopatía infanto – juvenil como factores de riesgo para
la delicuencia?
Como lo aborda la autora Eugenia V. (2010) La psicopatía infanto-juvenil como factor de
riesgo para la delincuencia es estudiada generalmente a través de las características
conductuales y los rasgos de personalidad que están incluidos en la conceptualización de
psicopatía, dichos rasgos hacen parte de las dimensiones Dureza / insensibilidad que posee
cada uno de los individuos que padece la patología, son niños que presentan altos niveles de
agresión, es importante recalcar como lo exponen los autores (Frick, et al., 2003) citado
por Eugenia V. (2010) se encontró que la estabilidad de los rasgos psicopáticos está
relacionada con el contexto psicosocial del niño, específicamente con el estatus
socioeconómico y la calidad de las estrategias parentales de cuidado, siendo importante el
cuidado parental en el desarrollo de la culpa, la empatía y otros aspectos de la consciencia,
al igual que se observó en el artículo que los niveles más altos de problemas conductuales
en el niño , se asocian con niveles más estables de rasgos psicopáticos; al respecto se
plantea que es probable que el involucramiento crónico en conducta antisocial, agresiva y
criminal a través del tiempo desensibilice a los jóvenes sobre las consecuencias de su
conducta en ellos mismos y en los otros, posibilitando que sus rasgos de dureza personal
sean más estables.
Existe un factor común en la Psicopatía Infanto-Juvenil, una de ellas es la impulsividad y
los problemas de conducta, donde el niño o el joven posee un pobre autocontrol y en
ocasiones presenta comportamientos delictivos, cuando se habla de delictivos; se hace
énfasis en la trasgresión de normal del hogar, escolares, se identifica que el menor presenta
rasgas desafiantes con las figuras de autoridad, es aquí donde algunos rasgos más comunes
son la crueldad, desafección y frialdad emocional, al combinarse con problemas de
conducta, son los que mejor detectan la psicopatía en niños y jóvenes de ambos sexos, las
personas que cumplen con estas características , pueden estar más expuestos a desarrollar la
patología a medida que se va desarrollando el menor, teniendo una mayor predisposición a
la delincuencia.
Como podría intervenir a los protagonistas de la película “elephant” y evitar que sus
comportamientos continúen.
Como se ha venido evidenciando en el anterior trabajo, Los individuos que padecen de
psicopatía, son personas capaces de actos delictivos y graves agresiones sin que muestren
un sentimiento de culpa, al momento de realizar una analogía con la película Elephan del
director Gus Van Sant, dirigida en 2003, donde se cuenta la historia de Eric Harris de 18
años y Dylan Klebold de 17 años, dos jóvenes estudiantes de la misma institución quien
deciden rodear todo el colegio, en algunos lugares esconden explosivos y deciden arremeter
a sus compañeros de campus con armas de largo y corto alcance, quitándole la vida a 12
estudiantes y 1 profesora, 24 heridos, quizás lo que desencadeno este tipo de
comportamientos en los dos individuos se debió al acoso escolar o bullying que padecían en
la institución, los demás estudiantes los rechazaban, ya que no eran chicos de importancia,
vestían de modo diferente a la mayoría de los alumnos; eran torpes practicando deportes y
no tenían muchos amigos; de hecho, los llamaban The Outcasts (Los excluidos). Los
hechos ocurrieron en la institución de Columbine, en el condado de Jefferson en EE.UU. el
20 de abril de 1999.
Una vez contextualizados, este tipo de comportamientos se podrían intervenir con un
proceso terapéutico cognitivo – conductual, donde se buscará una reestructuración de los
esquemas maladaptativos que tengan ambos chicos y de las posibles ideas irracionales que
puedan tener , el mayor problema es si debemos conciliar con ellos, minutos después de
haber ejecutado la masacre, lo más probable es que los chicos no quieran concertar, ni
hablar con nadie en ese momento, lo que generaría un homicidio más, ya que puede que la
persuasión del psicólogo no funcione en ese caso, entonces, si la situación sucede una vez
capturados los individuos, hay que tener presente que los trastornos de personalidad son
incurables, no remiten en su totalidad porque son manifestaciones exageradas de rasgos de
personalidad normales. Y de igual forma que la personalidad es mutable hasta cierto punto,
los patrones rígidos de personalidad también son permeables sólo hasta cierto punto, esto
no quiere decir que no pueda ser tratado,por eso hablaríamos de tratar y no de curar.
Una vez se inicie la sesión de la terapia cognitivo conductual combinada con el enfoque
centrado en el insight , el profesional deberá plantear e indagar por cuestiones que
abarquen pensamientos sobre sí mismo, como ven a los demás y que piensan del mundo,
con el fin de poder tener mejores resultados, teniendo como paso fundamental el rapport
con el paciente, poder escuchar sus emociones y sentimientos , el porqué hicieron eso, y
que sienten por haberlo hecho.
Con estos pacientes es necesario hacer un intenso trabajo de conciencia de enfermedad y
motivación para el cambio previo a la propia terapia. Este esfuerzo extra desgasta tanto al
paciente como al terapeuta, que con frecuencia termina por abandonar o etiquetar
injustamente al paciente de intratable, hay que recordar nuevamente que esta patología a
hoy no tiene ningún método que proporcione resultados satisfactorios para la recuperación
del paciente.
En caso de que este tipo de terapia no sea favorable, se tendrá que trabajar de manera
multidisciplinar con un psiquiatra, para que este vea la viabilidad de medicar y llevarlo a un
centro institucionalizado, donde este pueda adaptarse a un medio a través del conductismo.
n¿Considera usted, que los actos de violencia , vandalismo, agresión , acoso sexual,
pueden tener una intervención psicológica hacia los victimarios? ¿Cómo podríamos
generar que este tipo de comportamientos disminuyan?
http://www.papelesdelpsicologo.es/pdf/2567.pdf
https://scielo.conicyt.cl/pdf/terpsicol/v28n1/art10.pdf