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1.

SUPUESTOS DE PARTIDA

Pasamos ahora al modelo de generaciones solapadas de Diamond. La principal


diferencia entre este modelo y el de Ramsey-Cass-Koopmans es que ahora
tenemos un recambio de la población: en vez de suponer la existencia de una
cantidad fija de hogares con horizontes temporales infinitos, en el modelo de
Diamond nacen continuamente nuevos individuos que vienen a sustituir a los que
se van muriendo.

Cuando se adopta la hipótesis del recambio poblacional, es más sencillo suponer


que el tiempo es discreto en vez de continuo; es decir, ahora definiremos las
variables del modelo para los períodos t = O, 1, 2, ..., en vez de para todos los
valores de t ≥O. Para simplificar aún más el análisis, suponemos que la vida de cada
individuo dura solamente dos períodos. Pero lo que resulta crucial para el modelo
no son las hipótesis de tiempo discreto y los dos períodos vitales, sino el supuesto
general del recambio poblacional.

En el período t nacen Lt individuos. Como antes, la población crece a una tasa i igual
a n; por tanto, Lt = (1 + n) Lt -1. Como los individuos viven durante dos períodos, en el
momento t hay Lt individuos que se encuentran en el primer período de sus vidas y
además Lt -1= Lt / (1 + n) que están en el segundo. Durante el período de la juventud,
cada individuo suministra una unidad de trabajo y divide la renta laboral resultante
entre el consumo y el ahorro; en el segundo período, el individuo solo consume sus
ahorros y cualquier interés que haya obtenido.
Sean C1t y C2t+1 el consumo de los individuos jóvenes y los viejos, respectivamente,
en el período t; con esta definición, la utilidad que obtiene un individuo nacido en t,
que llamaremos Ut depende de C1t y de C2t+1. Suponemos una vez más que la utilidad
es con aversión relativa al riesgo constante:

𝑐 1𝑡 1−𝜃 1 1−𝜃
𝑐 2𝑡+1 (1)
U= + 𝜃>0 𝑝 > −1
1−𝜃 1+𝑝 1−𝜃´

Si p > 0, los individuos le asignan más peso al consumo del primer período que al del
segundo período; si p < 0, la situación se invierte. El supuesto de que p > -1 garantiza
que el peso asignado al consumo del segundo período sea positivo.

Existe un elevado número de empresas cada una de las cuales obedece la función de
producción Yt = F (Kt, At Lt). Una vez más, F (°) exhibe rendimientos constantes a
escala y satisface las condiciones de Inada; la variable A crece a una tasa exógena g
(de modo que At = [1 + g]At-1). Los mercados son competitivos, de modo que el trabajo
y el capital reciben como remuneración sus respectivos productos marginales, y los
beneficios de las empresas son iguales a cero. Igual que en la primera parte de este
capítulo, no hay depreciación; luego, el tipo de interés real y el salario por unidad de
trabajo efectivo se expresan, como antes, mediante las siguientes ecuaciones r, = f'(kt)
y wt = f(kt)- kt f'(kt). Finalmente, existe un cierto stock inicial de capital, Ko, distribuido
equitativamente entre todos los individuos viejos.
En el período cero, el capital que poseen los viejos y el trabajo que suministran los
jóvenes se combinan para la producción de bienes. El capital y el trabajo reciben en
pago sus respectivos productos marginales. Los viejos consumen tanto los ingresos
derivados del capital como la riqueza de la que ya disponen; a continuación, mueren
y salen del sistema. Los jóvenes dividen los ingresos que obtienen de su trabajo, wt At
entre el consumo y el ahorro y trasladan este último al período siguiente, de modo que
el stock de capital en el período t + 1, es decir, K t+1 es igual al número de individuos
jóvenes en el período t, Lt multiplicado por el ahorro de cada uno de ellos, wt At - C1t.
Este capital se combina con el trabajo provisto por la siguiente generación de
individuos jóvenes, y el proceso vuelve a comenzar.

2. EL COMPORTAMIENTO DE LOS HOGARES

El consumo de un individuo nacido en t en el segundo período de su vida es

C2t+1 = (1 + rt+1) (wt At – C1t) (2)

Al dividir ambos lados de la ecuación entre 1 + rt+1 Y pasar C1t al lado izquierdo,
obtenemos la restricción presupuestaria individual:
1 (3)
C1t + C 2t+1 = At wt
1+ 𝑟 𝑡+1

Esta condición afirma que el valor presente del consumo a lo largo de la vida es igual
a la riqueza inicial (que es cero) más el valor presente de la renta laboral a lo largo de
toda la vida (que es At wt).

El individuo maximiza la utilidad, (1), respetando la restricción presupuestaria, (3).


Existen dos formas de resolver este problema de maximización. La primera consiste
en desarrollar una derivación intuitiva. En concreto, imaginemos que el individuo
recorta C1t en una cantidad pequeña (formalmente, infinitesimal) igual a ∆C y luego
emplea el ahorro adicional y el correspondiente rendimiento del capital para elevar el
consumo del segundo período, C2t+1 en una cantidad igual a (1 + rt+1) ∆C. Este cambio
no altera el valor presente del consumo del individuo a lo largo de toda su vida. De
modo que, si el comportamiento del individuo es optimizador, el coste de utilidad del
cambio debe coincidir con el beneficio obtenido. Si el coste fuera menor al beneficio,
el individuo podría aumentar su utilidad haciendo el cambio; si, por otra parte, el coste
fuera mayor al beneficio, el individuo podría realizar el cambio opuesto.

Las contribuciones marginales de C1t y C2t+1 a la utilidad a lo largo de toda su vida son
𝑐 −𝜃
1𝑡
−𝜃
y [1 / (1 + p)] 𝑐 2𝑡+1 , respectivamente. De modo que a medida que ∆C Se
aproxima a cero, el coste de utilidad del cambio se aproxima a 𝑐 −𝜃 1𝑡 ∆C y el beneficio
−𝜃
en términos de utilidad se aproxima a [1 / (1 + p)] 𝑐 2𝑡+1 (1 + rt+1) ∆C. Según hemos
descrito poco antes, si el comportamiento es óptimo, el coste de utilidad ha de coincidir
con el beneficio. Así pues, la optimización requiere que se cumpla la ecuación:
1
𝑐 −𝜃
1𝑡 ∆C= 𝑐 −𝜃 2𝑡+1 (1+ rt+1) ∆C (4)
1+𝑝
Dividiendo ambos lados de la ecuación y multiplicando por 𝑐 −𝜃 2𝑡+1 , obtenemos:

𝑐𝜃 2𝑡+1 𝑟 𝑡+1 (5)


=
𝑐𝜃 1+𝑡 1+𝑝

O lo que es lo mismo:

𝑐 2𝑡+1 1 + 𝑟 𝑡+1 1⁄ (6)


= ( ) 𝜃
𝑐 1𝑡 1+𝑝

Esta ecuación es llamada condición de Euler que junto a su restricción presupuestaria


describen el comportamiento de los individuos.

La expresión (6) implica que el consumo de los individuos aumentará o disminuirá con
el correr del tiempo dependiendo de si el rendimiento real es mayor o menor que la
tasa de descuento. Una vez más, el valor de “θ” determina la sensibilidad del consumo
individual en respuesta a diferencias entre r y p.

La segunda forma de resolver el problema de maximización de los individuos consiste


en formular el lagrangiano:

𝑐 1𝑡 1−𝜃 1 1−𝜃
𝑐 1𝑡+1 1
ʆ= + + λ [At wt – (c1t + 𝑐 2𝑡+1 )] (7)
1−𝜃 1+𝑝 1−𝜃 1+𝑟 𝑡+1

Las condiciones de primer orden para C1t y C2t+1 son:


𝑐 −𝜃
1𝑡 =λ (8)
1 1
𝑐 −𝜃 2𝑡+1 = λ (9)
1+𝑝 1 + 𝑟 𝑡+1

Si reemplazamos la primera ecuación dentro de la segunda, el resultado es


1 1
𝑐 −𝜃 2𝑡+1 = 𝑐 −𝜃
1𝑡
(10)
1+𝑝 1 + 𝑟 𝑡+1

Reorganizando esta ecuación se puede obtener (6). Esta condición y la restricción


presupuestaria caracterizan el comportamiento maximizador de la utilidad por parte
de los individuos.

Podemos usar la Condición de Euler y la restricción presupuestaria para expresar C1t


en función de la renta laboral y del tipo de interés real. En concreto, si multiplicamos
ambos lados de la ecuación (6) por C1t y reemplazamos la expresión resultante en la
restricción presupuestaria, obtendremos

(1 + 𝑟 𝑡+1 ) (1−𝜃)𝜃 (11)


C1t + C1t = At wt
(1+𝑝) 1/ 𝜃
Esta ecuación implica:

(1+𝑝) 1/ 𝜃 (12)
C1t = At wt
(1+𝑝) 1/𝜃 + (1+𝑟 𝑡+1 ) (1−𝜃)/𝜃

La ecuación (12) muestra que el tipo de interés determina qué proporción de los
ingresos se consume en el primer período. Si llamamos s(r) a la fracción de la renta
que se ahorra, de (12) se deriva

(1+𝑟) (1−𝜃)𝜃 (13)


S(r) =
(1+𝑝) 1/𝜃 + (1+𝑟) (1−𝜃)/𝜃

De modo que podemos reescribir (12) de la siguiente forma:


(14)
C1t = [1- s (𝑟 𝑡+1 )] At wt
La ecuación (13) implica que el ahorro de los individuos jóvenes es función creciente
de r si, y sólo si, (1 + 𝑟) (1−𝜃)/𝜃 es función creciente del tipo de interés. La derivada
de esta última expresión respecto de r es [(1- Ɵ) /Ɵ] (1 + 𝑟) (1−2𝜃)/𝜃 . De modo que s
es función creciente de r cuando Ɵ es menor que 1 y decreciente cuando Ɵ es mayor
que 1. Intuitivamente, un aumento de r tiene tanto un efecto renta como un efecto
sustitución. El hecho de que con el aumento la relación de intercambio existente entre
el consumo de ambos períodos favorezca al consumo del segundo período tiende a
aumentar el nivel de ahorro (efecto sustitución), pero el hecho de que una misma
cantidad de ahorro sea capaz de generar más consumo en el segundo período tiende
a reducir el nivel de ahorro (efecto renta). Cuando los individuos se muestran
dispuestos a modificar sus niveles de consumo para sacar partido de los incentivos
derivados del rendimiento del ahorro (es decir, cuando Ɵ es bajo) predomina el efecto
sustitución. Cuando los individuos tienen marcada preferencia por mantener niveles
similares de consumo en ambos períodos (es decir, cuando Ɵ es elevado) predomina
el efecto renta. Y en el supuesto especial de que Ɵ = 1 (utilidad logarítmica), ambos
efectos se compensan entre sí y la tasa de ahorro de los individuos jóvenes es
independiente de r.

3. EL FUNCIONAMIENTO DE LA ECONOMÍA

3.1 LA ECUACIÓN DE MOVIMIENTO DE k

Se puede agregar el comportamiento de los distintos individuos para tratar de


caracterizar el funcionamiento de la economía. Como ya se ha dicho, el stock
de capital en el período t + 1 es igual a la cantidad que ahorran los individuos
jóvenes en el periodo t. De modo que podemos escribir

kt+1 = s (𝑟 𝑡+1 )Lt At wt (15)

Obsérvese que, como el ahorro en el período t depende de la renta laboral en


ese período y del rendimiento que los ahorradores esperan obtener del capital
en el período siguiente, en la expresión del stock de capital para el período t +
1 aparece la variable w para el período t y la variable r para t + 1.

Si dividimos ambos lados de la ecuación (15) entre Lt+1 At+1 el resultado es una
expresión de Kt+1 / (At+1 Lt+1) es decir, la cantidad de capital por unidad de
trabajo efectivo:
1 (16)
k t+1 = s (𝑟 𝑡+1 ) wt
(1+𝑛)(1+𝑔)

A continuación, podemos reemplazar rt+1 y wt con lo que obtenemos


1 (17)
kt+1 = s (f´(kt+1)) [f(kt) – kt f´(kt)]
(1+𝑛)(1+𝑔)

3.2 LA EVOLUCIÓN DE k

La ecuación (17) define implícitamente kt+1 como función de k, (sólo


implícitamente, porque kt+1 aparece en ambos lados de la ecuación. De modo
que esta ecuación determina la evolución de k a lo largo del tiempo dado su
valor inicial. Un valor de k, tal que k t+1 = kt satisface la ecuación (17) constituye
un valor de equilibrio para k, una vez que k alcance ese valor, allí permanecerá.
De modo que nos interesa saber si existe un valor de equilibrio de k (o varios)
y si k convergerá a eso, en caso de no encontrarse inicialmente allí.

Para responder esta cuestión se necesita expresar la dependencia de kt+1


respecto de k; por desgracia, es poco lo que se puede decir sobre esta
dependencia en el caso general, así que se empezará viendo qué sucede
cuando la utilidad es logarítmica y la función de producción es del tipo Cobb-
Douglas, Con estos supuestos, la ecuación (17) se reduce a una forma
particularmente sencilla. A continuación, se examinará lo que ocurre cuando se
adoptan supuestos más amplios.

3.2.1 UTILIDAD LOGARÍTMICA Y FUNCIÓN DE PRODUCCIÓN COBB-DOUGLAS

Cuando Ɵ es igual a 1, la parte de la renta laboral que los individuos


ahorran es 1 / (2 + p). Además, cuando la producción es del tipo Cobb-
Douglas entonces f (k) = kα y w = (1 - α) kα. De modo que la ecuación
(17) se convierte en
(18)
1 1
kt+1 = (1-𝛼) 𝑘 𝛼𝑡
(1+𝑛)(1+𝑔) 2+𝑝

El Gráfico (1) muestra Kt+1 como función de Kt. En el punto en el que la


función Kt+1, se cruza con la línea a 45 grados, Kt+1, es igual a Kt. En el
caso que estamos analizando, Kt+1 es igual a Kt, cuando Kt= 0, la curva
Kt+1 está por encima de la línea de 45 grados para valores pequeños de
éste y finalmente al cruzar dicha línea, la curva permanece por debajo
de ella. De modo que dejando a un lado el caso en que k = O hay un
solo nivel de equilibrio para k, al que llamaremos k*.

El valor de k* es globalmente estable; cualquiera que sea el valor inicial


de k, excepto de cero, convergerá a k*. Por ejemplo, supóngase que el
valor inicial de k, al que llamaremos k0, es mayor que k*. Como kt+1 es
menor que kt cuando kt supera a k*, entonces k1 es menor que k0 y
además puesto que K0 es superior a k* y kt+1 es función creciente de kt,
entonces k1 es superior a k*, de modo que se encuentra entre k* y K0;
es decir, k ha recorrido parte del camino en dirección a K*. Este proceso
se repite en cada período, de modo que k converge paulatinamente
hacia k*, Se puede aplicar un análisis similar al caso en que k0 es inferior
a k*.

kt+1

k1
k2

45°
k * k2 k1 k0 kt
GRAFICO 1: EL COMPORTAMIENTO DE K

Este comportamiento aparece reflejado a través de las flechas del


gráfico 1. dado un determinado k0, la altura de la función kt+1muestra el
valor de k1 sobre el eje vertical. para hallar k2 primero debemos trasladar
k1 al eje horizontal, desplazándonos horizontalmente hasta la línea de
45 grados; la altura de la función kt+1 en este punto muestra entonces el
valor de k2. y así sucesivamente.

Una vez que la economía ha llegado a su senda de crecimiento


sostenido. Sus propiedades serán las mismas que las de las economías
de los modelos de Solow y Ramsey en sus sendas de crecimiento
sostenido: la tasa de ahorro es constante, la producción por trabajador
crece a una tasa igual a g, la ratio capital-producción es constante, etc.

Para analizar cómo reacciona la economía ante posibles perturbaciones,


veamos qué sucede en nuestro ejemplo habitual en el que nos
encontramos inicialmente en la senda de crecimiento sostenido y se
produce una caída de la tasa de descuento, p. Esta caída hace que los
jóvenes ahorren una parte mayor de sus ingresos, de modo que la
función kt+1 se desplaza hacia arriba, para ello véase el Gráfico 2. El
desplazamiento ascendente de la función kt+1 eleva k* (el valor de k en
la senda de crecimiento sostenido). Como se ve en el gráfico 2, k
aumenta gradualmente desde el valor anterior de k* hasta el nuevo valor.

De modo que, en el modelo de generaciones traslapadas, el efecto de


una caída de la tasa de descuento en el supuesto que estamos
analizando es similar al que se produce en el modelo de Ramsey-Cass-
Koopmans y a lo que ocurre en el modelo de Solow cuando aumenta la
tasa de ahorro. El cambio desplaza hacia arriba de forma permanente
las sendas a largo plazo de la producción y del capital por trabajador,
pero sólo provoca aumentos transitorios en las tasas de crecimiento de
esas variables.

kt+1

45°

k*viejo k*nuevo kt

GRAFICO 2: EL EFECTO DE UNA DISMINUCIÓN DE LA TASA DE DESCUENTO

3.3 LA VELOCIDAD DE CONVERGENCIA

Una vez más quizá resulte interesante conocer no solamente las implicaciones
cualitativas del modelo, sino también las cuantitativas. En el caso especial que
estamos examinando, podríamos hallar los valores de k, así como y en la
senda de crecimiento sostenido. La ecuación (18) expresa kt+1 en función de kt
La economía se halla en su senda de crecimiento sostenido cuando ambos
valores son iguales. Es decir, el valor k* lo define la condición
1 1
k* = (1-α) 𝑘 ∗𝑎 (19)
(1+𝑛)(1+𝑔) 2+𝑝

Al despejar k" en esta expresión, obtenemos

1−𝑎 1/(1−𝑎)
(20)
k*= [(1+𝑛)(1+𝑔)(2+𝑝)]
Puesto que, y es igual a k, de esta ecuación se deriva que

1−𝑎 𝑎/(1−𝑎) (21)


y*= [(1+𝑛)(1+𝑔)(2+𝑝)]

Esta expresión muestra cómo afectan los parámetros del modelo a la


producción por unidad de trabajo efectivo en la senda de crecimiento sostenido.
Podríamos elegir valores de los parámetros para estimar qué efectos
cuantitativos a largo plazo tendrán diversos acontecimientos.

También podemos hallar la velocidad a la que la economía converge a la senda


de crecimiento sostenido. Para ello, se convierte el modelo en una versión lineal
alrededor del equilibrio estacionario. Es decir, reemplazamos la ecuación de
movimiento de k (18), por una aproximación de primer orden alrededor de k =
k*. Como ya sabemos, cuando kt es igual a k*, también lo es kt+1 Así, pues,
𝑘𝑡+1
kt+1≈ k * + ( 𝑘𝑡
|𝑘𝑡=𝑘∗ )(kt – k *) (22)

Sea λ el valor de d kt+1 / d kt en kt = k* Con esta definición, podemos reescribir


la ecuación (22) corno kt+1 – k * ≈λ (kt – k *) Esto implica que
(23)
kt - k * ≈ λt (k0 - k *)

Donde ko es el valor inicial de k.

La forma que adopte la convergencia hacia la senda de crecimiento sostenido


viene determinada por el valor de λ. Si λ se encuentra entre 0 y 1, la
convergencia será gradual. Si λ. se encuentra entre -1 y 0, se producirán
oscilaciones progresivamente amortiguadas en dirección a k*, k será
alternativamente mayor y menor que k*, pero con cada período que pase se
acercará más al valor de equilibrio. Si λ es mayor que 1, el valor de k sufrirá un
crecimiento explosivo. Finalmente, si λ es menor que -1, se producirán
oscilaciones cada vez más amplias.

Para hallar el valor de λ tenemos que volver a la ecuación (18):

kt+1= (1 - α) 𝑘 𝑎𝑡 / [(1 + n) (1 + g) (2 + p)]


Así, pues:
𝑘𝑡+1 1−𝑎
(λ = |𝑘𝑡=𝑘∗ ) = α[ ] 𝑘 ∗ 𝛼−1
𝑘𝑡 (1+𝑛)(1+𝑔)(2+𝑝)

1−𝑎 1−𝑎 (α−1)/(1−α)


=α [ ] =α (24)
(1+𝑛)(1+𝑔)(2+𝑝) (1+𝑛)(1+𝑔)(2+𝑝)
Donde la segunda línea se basa en la ecuación (20) para reemplazar k*. Es
decir, λ no es más que α, la participación del capital. Puesto que α se encuentra
entre 0 y 1, el análisis demuestra que k se aproximará gradualmente a k*. Por
ejemplo, si α = 1/3 cada período transcurrido k se moverá dos tercios de la
distancia que le quede por recorrer para llegar a k*.

La velocidad de convergencia en el modelo de Generaciones Traslapadas


difiere de la del modelo de Solow. La razón es que, aunque el ahorro de los
jóvenes representa una parte constante de su renta y ésta es una fracción
constante de la renta total, el ahorro de los viejos no representa una fracción
constante de la totalidad de la renta, sino que viene dado por la expresión K t /
F (Kt, At Lt) o kt /f(kt.) Puesto que los rendimientos del capital son decrecientes,
esta ratio es función creciente de k, y dado que este término aparece en la
expresión del ahorro con signo negativo, el ahorro total, como fracción de la
producción, es función decreciente de k. Posteriormente, cuando k < k*, la
fracción de la producción total que se destina al ahorro se encuentra por encima
del valor que le corresponde en la senda de crecimiento sostenido; por el
contrario, cuando k > k* se encuentra por debajo. Y de ahí que la convergencia
hacia la senda de crecimiento sostenido se produzca más rápidamente que en
el modelo de Solow.

3.4 EL CASO GENERAL

Para comprender intuitivamente las diversas posibilidades, nos servirá de


ayuda reescribir la ecuación de movimiento (2.59) como

1 f(𝑘𝑡 )−𝑘𝑡 f′ (𝑘𝑡 ) (25)


kt+1 = s(f´(kt+1)) f(𝑘𝑡 )
(1+𝑛)(1+𝑔) f(𝑘𝑡 )

La ecuación (25) expresa el capital por unidad de trabajo efectivo en el período


t + 1 como producto de cuatro términos. De derecha a izquierda, esos términos
son los siguientes: la producción por unidad de trabajo efectivo en t, la parte de
esa producción que se destina como pago al trabajo, la parte de esa renta
laboral que se ahorra y la ratio entre la cantidad de trabajo efectivo en el período
t y la del período t + 1. El Gráfico (3) presenta algunas formas posibles que
puede adoptar la relación entre kt+1 y kt distintas del caso simplificado que
hemos supuesto en el Gráfico (1). El panel (a) muestra una función con la que
k* puede adoptar múltiples valores. En la situación presentada en el gráfico, los
niveles k 1∗ y k 3∗ son estables: si k parte de un lugar ligeramente separado
de alguno de esos puntos, convergerá al nivel estable más cercano. El valor
k 2∗ es inestable (lo mismo que k = 0). Si k parte de un punto ubicado
ligeramente por debajo de k 2∗ entonces kt+1 será menor que kt, en todos los
períodos, de modo que k convergerá a k 1∗ si, por otra parte, k comienza
ligeramente por encima de k 2∗ convergerá a k 3∗ . Para comprender la
posibilidad de que existan varios valores de k ∗ , obsérvese que, dado que la
producción por unidad de capital es menor cuando k es mayor (ya que el
producto marginal del capital es decreciente), para que haya dos valores de
equilibrio k* el ahorro de los jóvenes, como porcentaje de la producción total,
debe ser superior para el valor de k* más elevado. Cuando la parte de la
producción que se destina a pagar a los trabajadores y la parte de la renta
laboral que se ahorra son constantes, el ahorro de los jóvenes representa una
fracción constante de la producción total, de modo que no puede haber más de
un valor de k*, Esto es lo que sucede cuando la producción es de tipo Cobb-
Douglas y la utilidad es logarítmica. Pero si la participación del factor trabajo es
mayor en niveles superiores de k (lo cual se da cuando la función F (°) tiene
una curvatura más pronunciada que la función Cobb- Douglas) o si los
trabajadores ahorran una fracción mayor de sus ingresos cuando el rendimiento
del ahorro es menor (lo que sucede cuando Ɵ > 1), o si suceden ambas cosas,
puede existir más de un nivel de k en el cual el ahorro reproduce el stock de
capital existente.

(a) (b)

kt+1 kt+1

k* 1 k*2 k*3 kt kt

(c) (d)

kt+1 kt+1

k* 1 k*2 kt ka kb kt
El panel (b) muestra una función en que kt+1 es siempre inferior a kt de modo
que k siempre converge a cero (independientemente de Su valor inicial). Para
que esto ocurra es necesario que la participación del factor trabajo o la parte
de la renta laboral que se ahorra (o ambas cosas) se aproximen a cero cuando
lo hace k.

El panel (c) muestra un caso en el que k converge a cero si su valor inicial es


suficientemente bajo, pero converge a un valor estrictamente positivo si el valor
inicial es suficientemente alto. En concreto, si k0 < k*1, el valor de k se
aproximará gradualmente a cero; por el contrario, si k0 > k*1, convergerá a k*2

Finalmente, el panel d presenta una situación en la que el valor de Kt+1 no está


univocamente definido para todos los valores de Kt cuando Kt se encuentra entre Ka y
Kb hay tres valores posibles para Kt+1 Esto puede suceder si el ahorro es función
decreciente del tipo de interés, r. En este caso, la tasa de ahorro es elevada cuando
los individuos esperan que Kt+1 también lo sea (es decir, cuando esperan que r sea
bajo) y baja cuando esperan que Kt+1 sea bajo, Si el ahorro es suficientemente sensible
a variaciones de r, y si r lo es también respecto de variaciones de k, puede existir más
de un valor de Kt+1 que sea compatible con un determinado Kt De modo que la senda
de la economía no está completamente determinada: la ecuación (2.59) (o la [2.67])
no determina por completo la evolución temporal de k a partir de su valor inicial. Esto
abre la posibilidad de que el comportamiento de la economía se vea afectado por
profecías autorrealizadoras y manchas solares y de que se produzcan fluctuaciones
incluso en ausencia de perturbaciones exógenas. Dependiendo de los supuestos
precisos que se adopten, son posibles diversos comportamientos de la economía.

De modo que en el supuesto de que en la economía haya una estructura de


generaciones solapadas en vez de hogares con horizontes temporales infinitos, puede
generar importantes consecuencias respecto del funcionamiento de la economía:
puede ocurrir, por ejemplo, que sea imposible un crecimiento sostenido o que su
obtención dependa de las condiciones iniciales. Asimismo, este modelo no nos brinda
mejores respuestas que los de Solow y Ramsey sobre los interrogantes básicos del
crecimiento. Las condiciones de Inada exigen que Kt+1 sea menor que Kt para algún
valor de k, suficientemente grande. En concreto, puesto que los jóvenes no pueden
ahorrar más que el producto total de la economía, Kt+1 debe ser menor o igual a f(Kt)/[(1
+ n)(1 + g)]. y dado que el producto marginal del capital tiende a cero a medida que
crece k, tarde o temprano la expresión indicada será menor que Kt.El hecho de que
Kt+1 deba alcanzar un punto a partir del cual es menor que k, implica que no es posible
un crecimiento ilimitado de k. Una vez más, entonces, la única fuente posible de la
que puede surgir un crecimiento sostenido de la producción por trabajador se
encuentra en el crecimiento de la eficiencia del factor trabajo. De hecho, puesto que
el modelo admite la posibilidad de que haya más de un nivel de equilibrio k*, una de
sus consecuencias es que economías que en todos los demás aspectos son idénticas
pueden converger a sendas de crecimiento sostenido distintas simplemente porque
sus condiciones iniciales no fueron las mismas. Pero (como en los modelos de Solow
y de Ramsey) para explicar por esta vía diferencias cuantitativamente grandes en la
producción por trabajador es imprescindible postular inmensas diferencias en la
cantidad de capital por trabajador, así como en el rendimiento del capital.

la posibilidad de Ineficiencia dinámica

La principal diferencia entre la senda de crecimiento sostenido de la economia en el


modelo de Diamond y en el modelo de Ramsey-Cass-Koopmans tiene que ver con el
bienestar. Hemos visto que el equilibrio del modelo de Ramsey-Cass-Koopmans
maximiza el bienestar del hogar representativo. En el modelo de Diamond. los
individuos nacidos en momentos diferentes no obtienen los mismos niveles de utilidad
de modo que no está claro cuál es el modo apropiado de evaluar el bienestar Social:
Si calculamos el bienestar como una suma ponderada de las utilidades de las
diferentes generaciones, no hay razón para esperar que el equilibrio descentralizado
maximice el bienestar, ya que los pesos que le asignaríamos a las diferentes
generaciones serían arbitrarios.

Sin embargo, existe al menos un criterio mínimo de eficiencia, y es que el equilibrio


sea eficiente en el sentido de Pareto. Pero en el modelo de Diarnond, el equilibrio no
garantiza ni siquiera la satisfacción de ese criterio; en concreto, en la senda de
crecimíento sostenido, el stock de capital puede exceder el nivel de la regla de oro, de
modo que un aumento permanente del consumo sería factible.

Para examinar esta posibilidad del modo más sencillo posible, veamos lo que ocurre
cuando la utilidad es logarítmica, la función de producción es del tipo Cobb- Douglas
y el valor de g es cero. Con g = 0, la ecuación (2.62) que expresa el valor de k en la
senda de crecimiento sostenido se reduce a

1 1 1/(1−𝑎)
K* = [1+𝑛 2+𝑝 (1 − a) ] (2.68)

De modo que el producto marginal del capital en la senda de crecimíento sostenido,

Ak*a-1 es
𝑎 (2.69)
F´(k*)=1−𝑎(1+n)(2+p)

El stock de capital de la regla de oro se define mediante la ecuación f´kro = n. El valor


de f'(k*) puede ser mayor o menor que f´(kro ) En particular, para valores de a
suficientemente pequeños, f'(k*) es menor que f´(kro ) es decir, el stock de capital en
la senda de crecimíento sostenido excede el que dicta la regla de oro. Para
comprender por qué es ineficiente que k* supere a kro imaginemos que introducimos
un planificador social en una economia de tipo Diamond que se encuentra en la senda
de crecimiento sostenido, con k* > kRO Si el planificador no hace nada por modificar el
valor de k, la cantidad de producción por trabajador que puede consumirse en cada
período es igual a la producción total, f(k*), menos la inversión necesaria para
mantener k en el nivel k*, es decir nk*. Las cruces del Gráfico 2.14 representan esta
situación.
Pero ahora supongamos que en algún período, al que llamaremos t0, el planificador
asigna más recursos al consumo y menos al ahorro de lo ue es habitual con el fin de
que capital por trabajador en el período siguiente sea igual a kRO Y que a partir de
entonces mantiene el valor de k en el nivel de la regla de oro. Con este plan, la
cantidad de recursos por trabajador disponibles para el consumo en el período to sería
f(k*) + (k* - kRO) - n kRO Y en cada período subsiguiente, f(kRO) - n kRO Dado que kro
maximiza la expresión f(k) - nk,f(f(kRO) - n kRO ) - f(kRO) - n kRO es mayor que f(k*) -
nk*. Y puesto que k* es superior a kRO, f(k*) + (k* - kRO) -nkRQ es incluso mayor que
f(kRO) - nkRO La evolución del consumo total con esta política está representada por
los círculos en el Gráfico 2.14. Como vemos, esta política pone, en todos los períodos,
más recursos a disposición del consumo que la política consistente en mantener k
igual a k*, Es decir el planificador tiene una forma de distribuir el consumo entre los
Jovenes y los viejos en cada período que mejora la situación de todas las
generaciones.

De modo que es posible que el equilibrio del modelo de Diamond sea ineficiente el
sentido paretiano. Esto puede parecer desconcertante: con mercados competitivos y
sin externalidades, ¿cómo puede ser que el equilibrio no sea eficiente en el sentido
de Pareto? La razón estriba en que este resultado clásico presupone no sólo la
competencia y la ausencia de externalidades, sino también que el número de agentes
sea finito. En concreto, la posibilidad de ineficiencia en el modelo de Diamond trae
causa del hecho de que, al existir un número infinito de generaciones, el planificador
social tiene un medio de obtener los recursos necesarios para el consumo de los viejos
que no está disponible en el mercado. Si en una economía de mercado los individuos
Consumo total por trabajador

desean consumir en su vejez, su única opción es conservar capital (aun cuando su


rendimiento sea bajo). Pero el planificador no está obligado a fijar el consumo de los
viejos en función del stock de capital y su rendimiento, sino que puede dividir los
recursos disponibles y asignarlos al consumo de los jóvenes o de los viejos como le
X
parezca. Puede, por ejemplo, X X
tomarX unaX unidad
X X deXla renta
X laboral de cada persona
joven y transferirla a los viejos; como hay 1 + n individuos jóvenes por cada viejo, esta
medida aumentaría el consumo de cada individuo del segundo período en 1 + n
unidades. Para evitart que alguien pueda verse perjudicado t por esta transferencia, el
0
planificador puede exigir que la siguiente generación de jóvenes haga lo mismo en su
X si k se mantiene en k*>kgr
momento y continuar así el proceso en todos los períodos. Si el producto marginal del
0 si k disminuye hasta kgr en el periodo t0
capital es menor que n (es decir, si el stock de capital excede el nivel establecido por
la regla de oro),
GRAFICO este
2.14 modo de de
consecuencias transferir
reducir Krecursos
al nivel de de los de
la regla jóvenes a los
oro sobre viejos es más
la evolución
eficiente que el ahorro, de modo delque el planificador
consumo puede obtener mejores resultados
por trabajador
que la asignación descentralizada de recursos.
Como este tipo de inefíciencia difiere de las tradicionales, y dado que surge de una
fuente distinta (la estructura intertemporal de la economía), se la conoce con el
nombre de ineficiencia dinamica.

Aplicación empírica: ¿son las economías modernas dinámicamente eficientes?

El modelo de Diamond muestra que una economía descentralizada puede acumular


capital más allá de lo que establece la regla de oro y, por tanto, producir una
asignación de recursos ineficiente en el sentido de Pareto. Dado que en las economías
modernas la acumulación de capital no depende de la decisión de planificadores
socia- les, esto plantea la cuestión de si pueden ser dinámicamente ineficientes. Si lo
fueran, esto tendría importantes consecuencias para las políticas públicas: la
preocupación por las bajas tasas de ahorro no tendría ningún sentido y sería fácil
aumentar tanto el consumo presente corno él futuro.

Abel, Mankiw, Summers y Zeckhauser (1989) han estudiado esta cuestión. Los
autores empiezan por observar que, a primera vista; la ineficiencia dinámica parece
ser al menos una posibilidad en el caso de Estados Unidos y otras economías
importantes. Una senda de crecimiento sostenído es dinámicamente ineficiente si la
tasa real de rendimiento, f'(k*) - ɗ, es inferior a la tasa de crecimiento de la economía.
Un indícador muy sencillo del rendimiento real es el tipo de interés real a corto plazo
de los títulos de la deuda pública. Abel el al. indican que, en el período 1926-1986, el
tipo de interés vigente en Estados Unidos no ha sido nunca superior, por término
medio, a unas pocas décimas de punto porcentual, una magnitud muy inferior a la tasa
media de crecimiento de la economía. Algo similar ha sucedido en otros países
industrializados importantes. Por tanto, el tipo de interés real es menor que el nivel
que establece la regla de oro, lo que sugiere que estas economías han acumulado
capital en exceso.

Pero este razonamiento, como señalan los propios autores, se enfrenta con un
problema. En un mundo sin incertidumbre, todos los tipos de interés deberían ser
iguales; por tanto, no existirían dudas acerca de qué es «el» tipo de interés. Pero si
existe incertidumbre, a activos diferentes pueden corresponderles rendimientos
esperados diferentes. Por ejemplo, supongamos que evaluamos la eficiencia dinámica
de la economía a través del producto marginal del capital (una vez descontada la
depreciación) y no mediante el rendimiento de un activo que se pueda considerar
razonablemente exento de riesgos. Si la remuneración del capital es igual a su
producto marginal, el producto marginal neto se puede estimar como una razón cuyo
numerador es la renta total del capital menos la depreciación y su denominador el
valor del stock de capital. En el caso de Estados Unidos, esta razón asciende a
alrededor de un 10 por 100, lo cual excede en mucho la tasa de crecimiento de la
economía. Así, pues, este enfoque nos llevaría a concluir que la economía
estadounidense es dinámicamente eficiente. Nuestro sencillo modelo teórico, en el
que el producto marginal del capital y el tipo de interés libre de riesgo son lo mismo,
no nos da ninguna pauta para decidir cuál de estas conclusiones contradictorias es la
correcta.

Esto lleva a Abel et al. a estudiar cómo puede determinarse la existencia de eficiencia
dinámica en condiciones de incertidumbre. Su principal conclusión teórica es que en
presencia de incertidumbre la condición suficiente para poder afirmar la existencia de
ineficiencia dinámica es que los ingresos netos del capital superen a la inversión. En
el caso de una economía con certidumbre en su senda de crecimiento sostenido, esta
condición se reduce a la habitual comparación entre el tipo de interés real es mayor a
la tasa de crecimiento de la economía, porque la renta neta del capital equivale al tipo
de interés real multiplicado por el stock de capital y la inversión es Igual a la tasa de
crecimiento de la economía por el stock de capital. De modo que la renta del capital
supera a la inversión si, y sólo si, el tipo de interés real es mayor que la tasa de
crecimiento de la economía. Pero Abel et al. demuestran que, en presencia de
incertidumbre, estas dos condiciones no son equivalentes y que la forma correcta de
saber si existe eficiencia dinámica es comparar la renta del capital con la inversión.

Dicho de forma intuitiva, un sector de capital que sea un suministrador neto de


recursos (porque produce más de lo que utiliza para hacer nuevas inversiones) está
contribuyendo al consumo y lo contrario sucede con un sector que utiliza más recursos
de los que produce.

El principal resultado empírico al que llegan Abel et al. es que los datos parecen
corroborar la condición de la eficiencia dinámica. Los autores miden la renta del capital
como la renta nacional menos la remuneración de los asalariados y la parte de la renta
de los trabajadores autónomos que parece corresponder a renta laboral : la inversión
la toman directamente de la contabilidad nacional. Los autores estiman así que la renta
del capital supera a la inversión en Estados Unidos y en los otros seis grandes países
industrializados que estudian. Incluso en Japón, donde la inversión es notoriamente
elevada, la tasa de beneficios es tan elevada que el rendimiento del capital supera
holgadamente a la inversión. De modo que, aunque en principio las economías
descentralizadas pueden producir resultados dinámicamente ineficientes, no parece
que esto suceda en la práctica.

EI Estado en el modelo de Diamond

Como en el modelo de horizonte temporal infinito, es lógico que nos preguntemos


qué sucede si introducimos en el modelo de Diamond un Estado recaudador de
impuestos que 'compra bienes y servicios. Para simplificar, nos centraremos en el
caso en que la utilidad es logaritmica y la producción es de tipo Cobb-Douglas. Sea
Gt el gasto público por unidad de trabajo efectivo en el período t. Suponemos una vez
más que este gasto se financia mediante impuestos de cuota fija que pagan los
jóvenes.

Cuando el sector público financia la totalidad de sus gastos mediante impuestos, la


renta neta de impuestos de los trabajadores en el período t es igual a (1 - a)kta – Gt en
vez de (1 - a) kta La ecuación de movimiento de k, (2.60), se convierte, por tanto, en
1 1
Kt+1 = ((1-a) 𝑘 𝑡𝑎 - Gt ) (2.70)
(1+𝑛)(1+𝑔) 2+𝑝

De modo que un valor más elevado de Gt reduce, el valor de Kt+1 para un Kt dado. Para
ver cuáles son los efectos del gasto público en este modelo, supongamos que la
economía se halla en su senda de crecimiento sostenido con G constante y que se
produce un aumento permanente de esta última variable. De la ecuación (2.70)
podemos concluir que este cambio desplazará hacia abajo la función Kt+1 (véase el
Gráfico 2.15). Este desplazamiento de Kt+1 reduce el valor de k*, De modo que (a
diferencia de lo que ocurre en el modelo con horizonte temporal infinito) un aumento
del gasto público provoca una reducción del stock de capital y un incremento del tipo
de interés real. La explicación intuitiva es que, corno los individuos viven durante dos
períodos, reducirán el consumo del primer período en una proporción inferior al
aumento experimentado por G. Pero corno los impuestos sólo se recaudan durante el
primer período de la vida, esto significa que su ahorro disminuye. Como de costumbre,
la economía se trasladará gradualmente desde la senda de crecimiento sostenido
inicial a la nueva.

Kt+1

K *nuevo K *viejo Kt
Como segundo ejemplo, veamos
GRAFICO 2.15 qué
efectos de un sucede
aumento cuando
permanente del gastola economía se halla
publico
inicialmente en su senda de crecimiento sostenido y se produce un aumento temporal
del gasto público de GL a GH. La evolución de k queda descrita por la ecuación (2.70)
can G = GH durante el período en que el gasto es elevado y con G = GL en los períodos
previos y posteriores. Es decir, el hecho de que los individuos sepan que el gasto
público regresará a GL no afecta el comportamiento de la economía durante el periodo
en que el gasto es elevado. El ahorro de los jóvenes (y, por tanto, el stock de capital
del período siguiente) Viene determinado por su renta laboral después de impuestos
que a su vez depende del stock de capital y del gasto público del período. Así que
durante el período en que el gasto público es elevado, k disminuye y r sube, en ambos
casos gradualmente. En cuanto G regresa al valor GL, k asciende gradualmente a su
nivel original.

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