Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
A fin de aplicar esa ley digamos que la oración tiene tres puntas que forman
un triángulo; la primera punta la constituye el deseo manifestado en la
intención de orar y por la intención de la plegaria. En otras palabras,
podríamos decir que el término "orar" describe un proceso místico puesto en
funcionamiento por un deseo legítimo del alma, deseo que constituye el
motivo original sin el cual el proceso de orar no puede funcionar completa y
perfectamente. Además, la conciencia tiene que enfocar ese deseo esencial
en una impresión más tangible para que este al alcance de la comprensión
humana. Este enfoque es expresado en la intención, cuyo análisis justifica o
no el que se ponga en funcionamiento el proceso de orar.
La naturaleza de la intención debe de ser tan pura como sea posible, a fin de
que confiera a la oración un énfasis verdaderamente intenso y solemne:
necesita vibrar en armonía con las cualidades que requiere una intención
cuya sinceridad y simplicidad sean sus sólidos pilares. De esta manera, el
legitimo deseo de orar se centrará en una intención pura, cuya naturaleza
constituye el impulso interno necesario para poner en funcionamiento una
oración deseada y deliberada. Además, la afirmación de que "el deseo de orar
es ya una oración", tal vez revela un mensaje de esperanza en este lento
proceso seguido en el reino de las bendiciones divinas.
Ejemplos de oraciones
Esforcémonos por lograr Paz; paz entre las naciones y dentro de las
naciones; paz entre la gente y dentro de la gente; porque nunca debemos
olvidar que la paz que necesitamos obtener primero es la del corazón, o sea,
la Paz Profunda.