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LA AGRESIÓN SEXUAL COMPULSIVO-

ADICTIVA:
EL PAPEL DE LA VERGÜENZA EN EL
DESARROLLO DEL COMPONENTE
AGRESIVO-SEXUAL

MARÍA ELENA PUERTA MARÍN, PSICÓLOGA DE INSTITUCIONES PENITENCIARIAS,


CLÍNICO Y CONSULTOR EMDR
GUIA EXPOSITIVA

1- Delimitación del caso: El comportamiento sexual adictivo:


2- Idoneidad del abordaje con EMDR desde el Modelo PAI
3- El trabajo con la vergüenza: consideraciones previas
4- Dinámica del establecimiento del ciclo adictivo
5- Especificidades del caso: ¿cómo surge el comportamiento agresivo?: La disociación de la
vergüenza.
6- La terapia orientada al trabajo con la vergüenza
7- Resultados y conclusiones.
1- DELIMITACIÓN DEL CASO

• Se trata de un caso de reincidencia elevada de abuso sexual a menores que cursa con
componentes compulsivos y adictivos, así como un componente agresivo y de
humillación. Se enmarca por tanto en un tipo de parafilia: la paidofilia.
• La mayoría de los estudios sobre la hipersexualidad vienen referidos a conductas no
parafílicas (masturbación, sexo telefónico, cibersexo, pornografía…) y que no han
contravenido la ley penal. Los estudios de agresores dentro del sistema penal se basan
prioritariamente en datos estadísticos, como es el caso en España, del estudio de Redondo
Illescas et al., (2007).
• Los programas para agresores sexuales dentro del sistema penal no distinguen entre adictos y
no adictos.
1- DELIMITACIÓN DEL CASO

Por otro lado, dentro de la conducta de adicción sexual, algunos autores(Carnes, 1983, 1991ª; Romero,
2005) distinguen 3 niveles:
• Nivel 1- son los mejor tolerados socialmente: masturbación compulsiva, relaciones sexuales anónimas
de forma compulsiva o no, pornografía, prostitución.
• Nivel 2- asumen riesgo respecto del sistema legal: exhibicionismo, voyeurismo, vandalismo sexual
(tocamientos rápidos e inapropiados).
• Nivel 3- abuso sexual infantil e incesto, violación y violencia sexual. En este nivel se enmarcaría nuestro
trabajo.
Algunos estudios señalan el significativo porcentaje de delincuentes sexuales con sintomatología
propia de adictos sexuales: el 44´3% de los delincuentes sexuales en tratamiento (Earle & Earle,
1995).
1- DELIMITACIÓN DEL CASO:
CONCEPTUALIZANDO LA ADICCIÓN SEXUAL
El DSM-5 no incluye el trastorno hipersexual. La adicción al sexo se clasifica en “Trastornos
sexual No especificado de otra manera”, prestando más atención a los trastornos sexuales
inhibitorios. El CIE-10 sí describe la adicción al sexo (antiguamente ninfomanía o satiriasis).
La literatura distingue dos grandes posturas respecto de la hipersexualidad
• Entendida como una categoría –una patología que se padece o no.
• Entendida de manera dimensional. Es en esta perspectiva quienes la conciben como una
adicción sexual (Carnes, 1998; Goodman, 1992)
La postura dimensional posibilita su interpretación desde el Modelo PAI y su abordaje con
EMDR. En este caso, se trataría de un trastorno por hipersexualidad de tipo parafílico con
componentes adictivos y compulsivos.
En tanto adicción sexual, la mayoría de los estudios abordan prioritariamente las conductas
sexuales no parafílicas que causan malestar (Kudman y Black, 2008, citado en trabajo dirigido por
Clara Valls).
1- DELIMITACIÓN DEL CASO: COMPORTAMIENTO
SEXUAL ADICTIVO
Estudiado por diversos autores, si bien con escaso detenimiento en la paidofilia. Se destacan las siguientes
características:
• Hábito de conducta que deviene automático, con pérdida de control de la actividad placentera y
que afecta negativamente al funcionamiento de la vida cotidiana(Carrasco, 2005)
• Con descuido y abandono de los intereses y relaciones previos (Cia, 2014)
• Kafka (2010), citado por Samenow; Echeburúa (2012) no se detienen en la paidofilia, pero señala que el
objetivo de la conducta es reducir la ansiedad y otros afectos disfóricos como la vergüenza y
la depresión.
• Goodman (1998) destaca la incapacidad de controlar la conducta pese a las consecuencias
dañinas significativas.
1- DELIMITACIÓN DEL CASO: AGRESIÓN SEXUAL
ADICTIVA VS NO ADICTIVA
Algunas características diferenciales (Romero, M.B. 2009)
Adicto No adicto
Más frecuencia de actos menores ofensivos Comportamiento sexual más ofensivo
Comportamientos con rituales Menos rituales
Recuerdos sexuales desde la más temprana Los comportamientos y fantasías empiezan al
edad, con clara progresión de las fantasías final de la adolescencia, inicio de la adultez
sexuales
Comportamientos adictivos comórbidos Baja frecuencia de comportamientos adictivos
Vergüenza relacionada con el No vergüenza, alto narcisismo respecto de la
comportamiento agresivo ofensa realizada
Uso ritualizado de la pronografía Uso mínimo de la pronografía
Frustración, rechazo, vergüenza, falta de Angustia, frustración, odio.
poder
1- DELIMITACIÓN DEL CASO: INSTRUMENTOS
UTILIZADOS
Instrumentos desarrollados específicamente para la adicción sexual (Romero, 2009):
• Test de Detección de Adicción Sexual (SAST, Carnes, 1989, obtenido directamente de
la web). El más específico, proporciona un perfil de respuesta que permite discriminar
fácilmente los comportamientos adictivos y no adictivos (Romero, 2009). Consta de 25 ítems
y es fácil de administrar y evaluar.
• Inventario de dependencia sexual revisado (SID-R)
• Inventario Multifacético Sexual (MSI-I y II)
Cuestionario de síntomas autoaplicado SCL-90-R (Derogatis, Rickels y Rock (1976), validado
en población española por Robles,Andreu y Peña, 2002)
2- IDONEIDAD DEL ABORDAJE CON EMDR
DESDE EL MODELO PAI
• Estudios sobre factores implicados en la adicción sexual destacan que un alto porcentaje
ha sufrido abusos físicos o emocionales en la infancia, desarrollando algún grado de
TEPT (Carnes, 1991ª, citado por Carrasco 2005). Diversos autores señalan una historia de
abusos en la infancia (72% abuso físico, 81% abuso sexual, 97% abuso emocional. Carnes y
Adams, 2002). Esta historia de abusos con frecuencia se enmarcarían en lo que conocemos
como trauma del desarrollo.
• Entre las características diferenciales entre agresores sexuales adictos y no adictos
destaca la vergüenza, omnipresente en los primeros y ausente en los no adictos en relación
con la conducta agresiva sexual (Romero, 2009)
• Reid (2010) encuentra que la vergüenza es el predictor más fuerte de la conducta
sexual agresiva adictiva, sugiriendo que el trabajo con la vergüenza es fundamental para el
éxito terapétutico.
2- IDONEIDAD DEL ABORDAJE CON EMDR DESDE EL
MODELO PAI
• Estas conductas pretenden reducir la ansiedad y otros afectos disfóricos como la
vergüenza y depresión (Echeburúa, 2012)
Carnes (2001) destaca como nuclear en las conductas sexuales adictivas las creencias básicas
de los adictos al sexo:
• “Básicamente soy una persona mala e indigna”
• “nadie me amaría como soy”
• “Mis necesidades nunca serán satisfechas si tengo que depender de otros”
• “El sexo es mi necesidad más importante”
Vemos la importancia de las cogniciones disfuncionales que mediatizan la conducta. Sabemos
que estas cogniciones –soy una persona mala e indigna- son nucleares y tienen una estrecha
conexión con el apego primario.
2- IDONEIDAD DEL ABORDAJE CON EMDR DESDE
EL MODELO PAI
Bancroft y Vukanovic, 2004 compararon muestras poblacionales de adictos/no adictos al sexo y hallaron que
los adictos sexuales se caracterizaban por:
• - Tendencia a mostrar especial interés en el sexo en momentos de ansiedad y depresión
• - Alta tendencia a la disociación
• - Existencia de mecanismos obsesivo-compulsivos.
• Distintos estudios correlacionan los esquemas de vergüenza con TEPT y disociación (Talbot,
Talbot y Tu, 2004; Dutra, Calahan,… Herman2008)
• Cuando un adicto al sexo ha experimentado un trauma infantil, se ha sugerido que la adicción no es
necesariamente una estrategia de búsqueda de placer, sino una estrategia de supervivencia (Fisher,
2007)
3- TERAPIA ORIENTADA AL TRABAJO CON LA
VERGÜENZA: ALGUNAS CONSIDERACIONES SOBRE LA VERGÜENZA
RELEVANTES PARA LA TERAPIA
• Es de carácter preverbal, previa a la culpa, y afecta al self en su totalidad
• A través de la vergüenza se aprende a negociar la sintonía emocional y la mutualidad de la relación. La
vergüenza es relacional, interpersonal.
• Los primeros estados de vergüenza surgen en la relación de apego primaria (a partir de los 14 meses
de vida). Son reparados por el cuidador y son fundamentales en el proceso de socialización.
(Schore, 1994, Citado por Hill, 2015).
• Según la teoría de la regulación emocional de Schore (2012) vergüenza y orgullo forman un eje.
Ambos se equilibran mutuamente de modo que la vergüenza posibilita un orgullo sin grandiosidad, y
el orgullo permite reparar la culpa, esencial para el bienestar. Su regulación es básica para el
funcionamiento socioemocional adaptativo y el bienestar.
• La vergüenza sirve para regular la distancia social (Goffman, 1967) y los límites del
comportamiento socialmente aceptable. En este sentido, activa el sistema de dominancia/sumisión
(relación terapeutica inherentemente vergonzosas)
3- TERAPIA ORIENTADA AL TRABAJO CON LA VERGÜENZA:
ALGUNAS CONSIDERACIONES SOBRE LA VERGÜENZA
RELEVANTES PARA LA TERAPIA
• Anomalías en el manejo de la vergüenza primaria pueden derivar en variaciones patológicas en el
sistema de apego. Cuando la figura de apego primaria es fuente de miedo o de vergüenza
incesante, vemos un apego desorganizado (Herman, 2007). El niño se divide entre: la necesidad de
sintonía emocional y el miedo al rechazo o al ridículo.
• La vergüenza moderada es fundamental para el desarrollo de la tolerancia al afecto negativo, pero
cuando hay exceso de vergüenza, se disocia (Lewis, 1987ª, citado por Hill, 2015), pudiendo
adoptar la forma de falta de sentimiento o de ira defensiva (vergüenza-rabia)
• Según Fossum y Mason (1986) (citado por Gilliand R., South M., 2011) “la adicción y la vergüenza
son inseparables” de modo que tratar la vergüenza es fundamental para un tratamiento efectivo
de las adicciones. Otros autores también señalan que la reducción y resolución de la vergüenza es
esencial en estos casos (Adams y Ronbinson 2001)
3- TERAPIA ORIENTADA AL TRABAJO CON LA
VERGÜENZA: ALGUNAS CONSIDERACIONES SOBRE
LA VERGÜENZA RELEVANTES PARA LA TERAPIA

La vergüenza tiene una relación positiva con culpar a otros o a las circunstancias del
propio comportamiento hipersexual (Reid, Carpenter, Spackman, Willes, 2008), lo que mantiene
la conducta.
Esta dinámica de negación y culpabilización a otros puede interpretarse como aparente
frialdad emocional -ocultación de la vergüenza-, falta de empatía, superficialidad y
comportamiento explotador, por lo que con bastante frecuencia, como señala Giugliano (2009)
se confunden con personalidades narcisistas y antisociales cuando en realidad se trata
de vergüenza extrema y disociación
Comprender el papel de la vergüenza en el proceso de socialización durante los dos
primeros años de vida, se considera fundamental para esta intervención, y ha formado parte
esencial de la psicoeducación en el trabajo con la vergüenza que favoreciera el proceso de
mentalización en la regulación del afecto y posibilitara el proceso terapéutico .
4- DINÁMICA DEL ESTABLECIMIENTO DEL CICLO
ADICTIVO (CONCRETANDO)
El ciclo adictivo se establece sobre la concurrencia de una serie de factores, entre los que destacan:
• Padre: estilo relacional hostil, exigente, no emocional. Madre temerosa/ansioso-depresiva, no establece
límites, no diferenciación.
• Historia de apego primaria caracterizada por anomalías en
• Sistema de regulación de la vergüenza: no reparación
• Distorsiones intrafamiliares de la sexualidad y la intimidad.
• Falta de límites. No diferenciación

• Experiencias de abuso sexual en la infancia


• Distorsiones de las relaciones infantiles: confusión juego/apego/intimidad
4- DINÁMICA DEL ESTABLECIMIENTO DEL CICLO
ADICTIVO
Padre: estilo relacional hostil,
exigente, no emocional. Madre
temerosa/ansiosa. no límites, no
diferenciación

Anomalías en:
* sistema de regulación de la verguenza: no reparación
distorsiones fintrafamiliares de la sexualidad e intimidad.
falta dee límites. no diferenciación

Experiencias de abuso sexual en la infancia

Distorsiones de las relaciones


infantiles:confusion
juego/apego/intimidad.

necesidad de sintonía emocional/miedo al rechazo y al ridículo


*indiferenciación sistema de apego/sistema sexual: solo soy visto cuando me
acarician.
*Necesidades básicas inherentemente vergonzosas
Apego desorganizado.
4- DINÁMICA DEL ESTABLECIMIENTO DEL CICLO
ADICTIVO
Todo ello deriva en anomalías en el sistema de regulación primaria de la vergüenza, que sienta las bases
para:
• Desarrollar el sentimiento de que las necesidades básicas son inherentemente vergonzosas
• Moverse entre la necesidad de sintonización emocional y el miedo al rechazo o al ridículo
Indiferenciación sistema de apego/sistema sexual (solo soy visto cuando me acarician)
• Desarrollar un sentimiento profundo de inadecuación
• Desorden emocional que produce un gran malestar -rabia disociada-. Búsqueda constante de
regulación emocional
• A partir de estas experiencias, tenemos un sistema de apego que desarrolla modelos internos
relacionales de apego en los que se han incorporado conductas propias del sistema sexual (solo
soy visto cuando me acarician). Estas experiencias sexuales -de apego- contribuyen al incremento de la
vergüenza y este malestar genera la conducta sexual para disminuir el afecto negativo de la
vergüenza, cada vez más insoportable. Se empieza a entrar un círculo vicioso común a una dinámica adictiva -
si bien, aún no agresiva. La conducta sexual trata de evitar emociones negativas (vergüenza, soledad).
4- DINÁMICA DEL ESTABLECIMIENTO DEL CICLO
ADICTIVO
5- ESPECIFICIDADES DEL CASO
• Infancia presidida por la constante búsqueda de apego y miedo abrumador al ridículo y la vergüenza. Inadecuada
regulación de la vergüenza.
• Experiencias de abuso temprano seguidas de abandono abrupto alimentan la vergüenza y la sensación de
inadecuación.
• En los primeros años utiliza dos vías para lograr el apego:
• Juegos de tocamientos con amigos con los que se vincula estrechamente y que siempre van seguidos de pérdida posterior
• Invitar a los amigos -ser “visto”, ser “alguien”, para lo que inicia primeros robos en casa. Es descubierto. Alimentación de la
vergüenza., y desaparición de esta vía de regulación

• Adolescencia presidida por :


• intentos frecuentes de aproximación sexual, que le ponen en situaciones de abuso, todas ellas seguidas de abandono
abrupto.
• consumo de cocaína para ser valorado por los amigos. En este periodo no se producen aproximaciones sexuales.

• Ambos periodos están presididos por un sentimiento abrumador de vergüenza e inadecuación. Estos sentimientos
tratan de paliarse a través de las conductas sexuales. El sistema de defensa está desactivado, relegado. La agresividad está
disociada. Las experiencias de orgullo –asociadas también a la conducta sexual, : ser visto- se ven anuladas por la
vergüenza.
5- ESPECIFICIDADES DEL CASO: CÓMO LA CONDUCTA
SEXUAL DEVIENE AGRESIVA
Sobre la estructura y dinámica previas una experiencia intensamente traumática de ataques,
humillaciones y violaciones mantenidas en un breve periodo de tiempo, produce, en este
sistema desorganizado:
• Identificación con los agresores: se perciben como poderosos. La sensación de poder ha
estado ausente en todo su desarrollo.
• Activación de la rabia, que se une a la rabia que se hallaba disociada, anulada, y respecto de la
que no posee recursos para manejar.
• La rabia disociada queda aquí unida a la conducta sexual y a la sensación de poder.
• Para que ocurra lo anterior, la vergüenza se disocia –episodio de fobia a comer delante de otras
personas- lo que permite que surja toda la rabia acumulada, que queda asociada a la conducta
sexual
5- ESPECIFICIDADES DEL CASO: CÓMO LA CONDUCTA
SEXUAL DEVIENE AGRESIVA
6- EL PROCESO TERAPÉUTICO:
CONSIDERACIONES PREVIAS
1. Estos pacientes presentan importantes déficits de regulación afectiva y de mentalización, así como una
desorganización estructural con funcionamiento mental muy rígido –dicotómico- y defensivo, numerosas
fobias. Destacan especialmente los estados de vergüenza omnipresentes.

2. Especificidades de la estancia en prisión: personas muy desorganizadas, con dificultades de manejo


emocional, que comparten pequeños espacios con personas que no han elegido en una situación en que
todos los aspectos de su vida personal e íntima están regulados externamente. ¿cómo se están
adaptando? ¿cuál es el estado del yo más funcional en esta situación?¿qué significa el psicólogo para ellos?.
Entender esto y respetar su ritmo.

3. Mirarse de manera realista va a suponer una retraumatización previa a la integración. No podemos ir a los
traumas infantiles sin correr el riesgo de activar sus propias acciones agresivas si no están preparados para
manejarlo e integrarlo. Por ello previamente hay que desarrollar herramientas sólidas de manejo emocional

• Importancia de atender al significado de cualquier queja hacia el terapeuta que presente. Muy atentos a la
capacidad de reparar cualquier desencuentro (oportunidad de restauración de la vergüenza)

.
6- EL PROCESO TERAPÉUTICO: TRABAJANDO CON
LA VERGÜENZA
El primer objetivo fue intentar REGULACIÓN EMOCIONAL: REDUCIR LA VERGÜENZA , que permitiera un avance en la
curiosidad terapéutica. (contínuo a lo largo de la terapia, especialmente intenso al principio y al final) Se abordó mediante:
1- Relación terapéutica-Importancia de la relación terapéutica- su establecimiento será muy lento debido a la situación institucional –
desconfianza, desequilibrio de poder-, el elevado autojuicio y la omnipresente vergüenza- que se proyecta constantemente en la relación
terapéutica, a lo largo de todo el proceso, activándose cada vez que se traspasa una capa de su estructura yoica.
Es difícil abordar directamente la vergüenza debido a la forma en que afecta la transferencia. La relación terapéutica es inherentemente
vergonzosa en tanto es una relación de desequilibrio.
• si en todos los casos es fundamental, en estos requiere mucho tiempo de preparación previa y alerta constante a todas las señales
verbales y no verbales de vergüenza .
• Una actitud de aceptación y curiosidad compartida son básicas
• Exquisito cuidado en la no confrontación. La vergüenza les lleva a muchas mentiras y engaños que muchas veces hay que obviar. Frases
como “no te preocupes, cuando estés preparado”. Por otro lado, estas personas están activando continuamente los autojuicios, por ello
es innecesaria la confrontación. Confiamos en el proceso terapéutico.
6- TRABAJANDO CON LA VERGÜENZA:

Relación terapéutica
• Exquisito respeto a los tiempos del paciente:
• 1- Sensibilidad a lo que trae en cada sesión (estado de ánimo, reproche, miedo o
vergüenza, qué neurored está activa, ¿tiene que ver con la diana trabajada en la última
sesión?): lo que trae es aquello para lo que está preparado.
• 2- Psicoeducación sobre los bloqueos, quedarse en blanco, imposibilidad de ver su yo
a determinada edad, etc., normalmente son fuente de vergüenza. Hay que focalizar la
intervención en esa vergüenza antes de abordar el bloqueo propiamente. Psicoeducación
sobre la función protectora del bloqueo.
6- TRABAJANDO CON LA VERGÜENZA

2- Identificar las diferencias que presenta entre la vergüenza y la culpa:


• Culpa- promueve a la búsqueda de reparación. Aumentará su activación a lo largo del proceso
terapéutico. Importancia de controlar el ritmo de aparición de modo que pueda ser tolerada por el
sistema.
• Vergüenza- promueve la evitación del trabajo terapéutico (mentiras, bloqueos, distracciones,
estallidos de rabia contra el terapeuta “no me comprendes”, dudas sobre el proceso…). Por ello hay que
3- Prestar especial atención a las defensas de la vergüenza: conductas de evitación, proyecciones
agresivas hacia el terapeuta, sentimientos de desmotivación o tristeza, negaciones. Cuando surgen:
con exquisita delicadeza, trabajar la transferencia -¿una parte de ti no quiere..?- respetarlas y explicar su
función desde el Modelo PAI, Teoría de la regulación emocional de Schore. Técnicas de Knipe. En
ocasiones, el simple hecho de respetar la evitación-no lo trabajaremos hasta que sientas que estás
preparado- deshace la defensa.
6- TRABAJANDO CON LA VERGÜENZA: ESTRATEGIAS DE
REDUCCIÓN
• Psicoeducación sobre la vergüenza, su dinámica y función, las defensas y la culpa. Incorporar la Teoría de la regulación
emocional con el Modelo PAI. El objetivo es un sólido desarrollo de la mentalización del paciente sobre la vergüenza.
• Atención permanente al lenguaje verbal: los juicios dicotómicos. Explorar dónde se originaron. Modular, psicoeducar e ir
corrigiendo dicho lenguaje.
• Importancia de instalar el orgullo –extremo del eje- a ser posible con recuerdos lo más temprano posibles, focalizados en
los dos años de vida (así evitamos un orgullo disociado y disfuncional). Bien a través de un recuerdo en el que se ha sentido
“visto”, y siempre a través de los ojos del terapeuta.
• Trabajo con estados del yo asociados a edades significativas de su desarrollo (confluencia de situaciones traumáticas)
empezando por las edades más tempranas: empezar por el bebé, al año y medio o dos años –comienzo de la sensación de
vergüenza. El trabajo con el bebé será largo. Generalmente va a ser difícil de visualizar. Típicamente cuando se visualiza habrá
rechazo.
• Tras el trabajo con estados del yo, continuar por dianas originales de vergüenza manejable asociada a esos estados.
• Con cada Estado del yo instalar sensaciones agradables realizando actividades de interacción social no asociadas al sexo
(juego a los 5 años, camaradería a los 13) (eje orgullo-vergüenza)
6- TRABAJANDO CON LA VERGÜENZA: EL TRABAJO
CON FOBIAS
Específicamente, estas personas presentan:
• 1- Fobia al apego y a la pérdida de apego- aparece continuamente activada –y activando- por la
vergüenza. En terapia, la necesidad de apego típicamente se asociará con la mentira, y el miedo a la
pérdida de apego con la rabia y la desmotivación.
• Cada vez que se va a abordar una nueva capa se reactiva esta fobia, el pánico al rechazo del terapeuta.
Es más intensa al principio del trabajo terapéutico, y al final en las capas más profundas.
• 2- Fobia al cambio- conductas evitativas –mentiras y autoengaños- y dudas sobre evolución. Mucha
psicoeducación sobre la sexualidad, respeto a los ritmos, curiosidad compartida, no juicio. Visualización
de futuro en distintos momentos del proceso.
• 3- Fobia a las acciones mentales derivadas del trauma- entrenar en la curiosidad y soslayar el
juicio. Aceptación incondicional
• 4- Fobia a las partes disociativas. Típicamente a la parte “ridícula”, débil, y a la parte “depredadora”,
agresiva. Trabajo con partes
6- TRABAJANDO CON LA VERGÜENZA: EL TRABAJO
CON FOBIAS
5- Fobia a los recuerdos traumáticos experimentados o “sufridos”. Empezar por los recuerdos menos
traumáticos de contenido no sexual, a fin de ir consolidando la confianza en el proceso terapéutico y la
terapia, sin juicios, y, muy importante, intentar no activar los recuerdos de las propias acciones perpetradas.
6- Fobia a los recuerdos de las agresiones perpetradas. Hay que llegar a un acuerdo previo de que
esas acciones no se trabajarán hasta que no esté preparado. Hay que poner especial atención cuando el
trabajo con una diana le lleva a un recuerdo de este tipo: si aún no está preparado no se continúa el
procesamiento. Explicación sobre lo que ha pasado, y mucho trabajo de mentalización. No juicio.
Esta fobia irá apareciendo cada vez que se avance en el procesamiento por capas. Con ella se trabaja
inicialmente de manera indirecta, cada vez que trabajamos con la rabia. Esta fobia solo podrá abordarse
directamente en las fases finales de la terapia, tras haber procesado numerosos recuerdos traumáticos.
Surgirá de manera espontánea por primera vez. La más interna, la parte nuclear agresiva/depredadora en
este caso estaba defendida por una defensa de idealización.
6- TRABAJANDO CON LA VERGÜENZA: PROCESAMIENTO
DE LOS RECUERDOS TRAUMÁTICOS
Trabajar los traumas- Todo lo trabajado dirigido a consolidar la confianza terapéutica, la confianza en su
funcionamiento mental, y a disminuir, manejar y tolerar la vergüenza, facilita el acceso al trauma. Los
traumas se organizan en una compleja estructura de múltiples capas.
• Primero los traumas más antiguos y menos cargados emocionalmente (en cuanto a vergüenza
y contenido traumático), . Ello nos sirve para consolidar la confianza en el proceso a la par que se van
desarrollando herramientas de manejo emocional –de la vergüenza en particular.
• Sensibilidad a lo que puede abordar en cada momento y a lo que trae en cada sesión (estado
de ánimo, si hay miedo o vergüenza, qué neurored está activa, ¿tiene que ver con la diana trabajada en la
última sesión?): lo que trae es aquello para lo que está preparado. ¿Qué situación conflictiva
entresesiones trae a la sesión? ¿cómo se ha afrontado? ¿desde qué estado del yo? Un floatback sobre
lo ocurrido nos llevará a la diana previa –finalizado o no el reprocesamiento - si se había cerrado, nos
indicará que se ha abierto una nueva capa-, o bien otra diana cuyo acceso se ha visto facilitado por el
procesamiento anterior. Si es así, trabajamos esta nueva diana y luego volvemos a la anterior
6- TRABAJANDO CON LA VERGÜENZA: PROCESAMIENTO
DE LOS RECUERDOS TRAUMÁTICOS
• Evolución en capas: vemos en la figura que la estructura mental se organiza en capas que
contienen visiones de sí mismo y del mundo diferentes, y generalmente se organizan
alrededor de las cogniciones negativas. Cada capa constituye una defensa –y a su vez, la
llave- para la siguiente. La evolución a la siguiente capa no es lineal.
• Evolución en zig-zag- el procesamiento de un recuerdo en una capa puede llevarnos a
otro recuerdo de la misma capa pero más antiguo, que abrirá la puerta a una nueva capa. La
exquisita atención a lo que nos trae el paciente en cada sesión, su significado –defensa-
evitación, o continuidad del procesamiento- es la clave.
• Especial atención a la activación de la vergüenza. Con frecuencia, si tras trabajar una
diana viene a terapia con negación, evitación o rabia –no me comprendes-, es probable que
se haya abierto una nueva capa. Hay que comenzar trabajando esa vergüenza. La
vergüenza es la clave de acceso a la siguiente capa.
6- CAPAS DEL PRIMER RECUERDO DE ABUSO SEXUAL A
LOS 5 AÑOS. LA CAPA MÁS EXTERNA: 1. SOY PATÉTICO,
ESTÚPIDO, NO VALGO.
6. Soy asqueroso,
depredador
5. No soy capaz de
conseguir/
2 4. No controlo
5 años 3. Estoy en peligro
D-2
2. Soy malo, culpable, no
merezco vivir
6- PRINCIPALES FASES EN EL TRABAJO CON DIANAS
• Primero: dianas más antiguas sin contenido sexual
• Dianas más antiguas con contenido sexual (contactos sexuales, abandonos posteriores)
• Primera aparición de la agresión en la conducta sexual. El SUD disminuye, pero se mantiene
en 4 o más.
• Fobia a la comida- su trabajo nos lleva a una sesión en que se procesan espontáneamente
todas las agresiones previas. Desde esta integración, repasamos nuevamente las principales
dianas, algunas de las cuales se reactivan.
• Retomamos la primera aparición de la agresión en la conducta sexual: se procesa, y se llega a
SUD-0. (en este momento se pasa el postest)
• Trabajo con la defensa de idealización: surge el núcleo “depredador”.Varias sesiones con
abreacción.
SCL-90-R
7- RESULTADOS PRETEST POSTEST
7- SCL-90-R: RESULTADOS
Contempla 9 dimensiones de síntomas, que fueron definidas sobre criterios clínicos, racionales y
empíricos
De los resultados obtenidos cabe destacar:
• Existe diferencia significativa (Prueba de Wilcoxon de los rasgos con signo) en todas las
dimensiones excepto en Somatizaciones y Ansiedad Fóbica.
• Las puntuaciones pretest más elevadas se producen en Sensitividad Interpersonal, Hostilidad e
Ideación paranoide, todas ellas dimensiones estrechamente relacionadas con la vergüenza.
• La baja puntuación en somatizaciones, por debajo de la media, puede estar relacionada con la
fase de la terapia en el momento en que se pasó el postest: antes de trabajar la defensa de
idealización que protegía la parte “depredadora”
7- LIMITACIONES
• La limitación principal es que se trata de un diseño de caso único, por tanto, no
generalizable a la población general de agresores sexuales adictos.
• Por el mismo motivo, las fases y los procedimientos requieren de más estudios que
permitan, en su caso, su generalización. Por el momento, constituyen una vía, con
importante base en el conocimiento científico, para continuar la investigación que aporte
datos que permitan dar validez a estos resultados.
7- CONCLUSIONES
Los estudios sobre adicción sexual coinciden en señalar una historia de traumatización en la
infancia, y más recientemente, de trauma del desarrollo, pero como señala Samenow (2010),
esta relación es más observacional y descriptiva que explicativa. El presente estudio trata de
aportar aspectos de la dinámica del desarrollo de la conducta sexual adicitivo-agresiva
que posibilite en un futuro un modelo explicativo comprehensivo de dicha relación
En los casos de agresores sexuales, adictos sexuales, la terapia EMDR basada en el
Modelo PAI con base en la Teoría de la Regulación del Afecto, ha producido cambios
significativos a nivel estructural y emocional en este caso, lo que ha tenido un importante
correlato en la conducta sexual: ausencia de disociación funcional/ integración.
El enfoque del proceso terapéutico desde el trabajo con la vergüenza, parece haber sido uno de
los elementos más eficaces en este caso.
• Se plantea la necesidad de profundizar en la intervención con agresores sexuales
adictos y no adictos. La intervención requiere un abordaje diferencial de cara a su
prevención y tratamiento.
7- CONCLUSIONES: NUEVAS VÍAS DE
INVESTIGACIÓN
• Desde la perspectiva del trabajo con la vergüenza desde el Modelo PAI, este trabajo se aleja
de los abordajes tradicionales con las adicciones en tanto que no se ha exigido la
sobriedad como prerrequisito: el trabajo con disparadores empieza a abordarse en esta
fase del proceso (tras adecuado manejo de la vergüenza, instalación de orgullo, integración de
la agresividad, conducta sexual integrada)
• Desde la perspectiva neurobiológica, Schore (2003) propone que la vergüenza es mediada por
el SNP, y sirve como freno a los estados de excitación. Se plantea, en la dirección opuesta, si
estados abrumadores de vergüenza necesitan conductas de hiperexcitación para salir de
esos estados, y dado que el orgullo está ausente ¿es esta la función de la conducta
adictiva sexual?
• Dada la carencia de experiencias de orgullo ¿es la conducta sexual adictiva el resultado de una
tendencia natural a buscar experiencias de orgullo?
CONCLUSIONES
• Siguiendo a Liotti y Ana Rita Verardo, se plantea como posibles vias de futuras
investigaciones, qué ocurre con los sistemas de acción ¿cómo se incorpora el sistema
sexual al sistema de apego? ¿cómo posteriormente se incorpora el sistema de defensa al
sistema de acción sexual?¿cómo influye la vergüenza en esta indiferenciación de los
sistemas de acción? Si la vergüenza enraiza en el sistema de rango (dominancia/sumisión)
¿cómo se organizan estos sistemas en relación a la conducta sexual adictiva?
• Cuando surge la conducta agresiva –identificación con los agresores-, ¿se produce una
identificación agresión-orgullo?
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(citado por Giulliano, 2009)
UNAS PALABRAS
He logrado aceptarme, aunque tengo que seguir puliendo.
Quiero decirles a todos: que no den nada por sentado, que sigan escalando.
Al final está la VIDA, la satisfacción de SER.
¡¡Hay tantos que lo necesitan!!
¡¡MUCHAS
GRACIAS
¡¡MUCHAS GRACIAS!!

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