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PLANEACIÓN

En toda intervención hospitalaria es esencial pensar en algunos aspectos que


orientarán la acción educativa del pedagogo hospitalario a partir de la planeación de sus
actividades, permitiendo de esta manera cumplir los objetivos propuestos, logrando una
afectación favorable en el niño.
El docente debe tener en cuenta a la hora de planear su intervención que esta “Va
dirigida a niños y niñas que atraviesan una situación de enfermedad y que la atención
educativa es personalizada en consideración a sus características personales, intereses,
situación afectiva y de salud”(González, 2013)
En esta línea es oportuno que el pedagogo hospitalario base su planeación siguiendo
los componentes didácticos como son los objetivos, los contenidos, actividades, recursos y
evaluación, tomando como referencia los siguientes aspectos: ¿Quién debe aprender?, ¿Qué
debe aprender?, ¿cómo debe aprender?, ¿Qué adaptaciones curriculares requiere?, ¿Qué
actividades puede desarrollar?, ¿Qué recursos podría usar?, ¿Cómo evaluar su aprendizaje?
Estas preguntas son fundamentales en la labor del pedagogo, puesto que orientan y
organizan su acción pedagógica.
Es claro que los objetivos planteados por el docente deben variar según el tiempo de
permanencia del niño en el hospital, puesto que pueden ser breves, prolongadas y largas,
dependiendo de esto las actividades variarán, por ejemplo en las hospitalizaciones breves
según González (2013) los objetivos se orientan a afianzar los saberes previos, mientras que
en las prolongadas se busca construir nuevos aprendizajes y en las mayor estancia se
persigue un contacto con la escuela de origen del niño y se busca ayudarlo en diferentes
contenidos curriculares a fin de tener una continuidad en su proceso formativo,
dependiendo de la situación en que se encuentre el niño.
Por lo tanto en el momento de planear y diseñar la intervención es importante tener
en cuenta variables como la duración de la hospitalización, el diagnóstico de la enfermedad
y las características individuales de los niños, niñas y jóvenes hospitalizados, haciendo de
esta una atención personalizada.
Otro ítem a valorar por el docente es el entorno en el que se desarrolla su actividad
pedagógica, ya que este es un espacio no convencional, con características particulares,
pues “no es lo mismo educar en un hospital que en el seno de un hogar o una escuela”
(González, 20013).
Sumándole a esta experiencia el hecho de que el niño se encuentre en una situación
de hospitalización genera una interrupción de su vida cotidiana, es un ambiente nuevo para
el niño en el que se ve obligado a adaptarse a nuevos horarios, establecer nueva relaciones
con personas inusuales como lo son los médicos, enfermeras, especialistas, profesores y
otros niños en su misma condición. Esto realmente se convierte en un desafío para el niño y
su familia, por lo tanto “El aula hospitalaria debe contribuir a esa normalización de la vida
del niño enfermo, proponiendo actividades que tengan en cuenta y respondan a sus
necesidades educativas específicas” (González, 2013)
Por lo tanto la acción pedagógica en un contexto hospitalario debe ser estrictamente
planificada y llevada a cabo con una metodología que responda a las necesidades del niño
de forma efectiva1.

1 Este tema se puede ampliar en el documento: Pedagogía Hospitalaria, Necesidades, ámbitos y


metodologías de intervención de Verónica Violant, Cruz Molina y Crescencia Pastor, donde se habla de
la importancia de la acción docente en el contexto hospitalario.
EVALUACIÓN

La evaluación es un componente esencial en la intervención pedagógica en


escenarios no convencionales, como en este caso el hospital y la educación domiciliaria.
Esta se define como “un proceso de reflexión sobre la práctica, como tal proceso tiene un
desarrollo en el tiempo con distintos momentos evaluativos: uno inicial, otro continuado o
procesual y otro final” (González, 2013). Con lo anterior podemos decir que la evaluación
es un proceso continuo, que no se hace al final de la acción educativa, sino que se realiza
desde el primer momento en que se tiene contacto con el niño y la familia, hasta el
momento que culmina dicho proceso.
La evaluación es una de las herramientas más efectivas para promover un
aprendizaje efectivo y significativo, un instrumento que permite a la vez mejorar y
potencializar la acción docente. En este proceso de evaluación se tienen en cuenta las
concepciones o percepciones de los niños, padres de familia o cuidadores, personal de
salud y el docente hospitalario. Pues a partir de diferentes perspectivas se puede tener una
visión más amplia del impacto de la intervención educativa y de esta manera poder
visualizar alcances, logros y dificultades.
Como lo mencionamos anteriormente la evaluación no se limita a medir
aprendizajes, sino valorar todo el proceso desarrollado con el niño hospitalizado desde su
inicio hasta el final, es por tal motivo que debemos contemplar los siguientes criterios que
permitan hacer una evaluación global del trabajo pedagógico y a la vez determinar la
pertinencia de las actividades llevadas a cabo, entre estos podemos mencionar2.
- La participación de los niños: En este aspecto se evalúa la actitud del niño
frente a las actividades, su forma de intervenir y aquellos aspectos emotivos o
conductuales que se presentaron durante el desarrollo de la intervención
docente.
- La participación de padres o cuidadores: Aquí se plantea valorar el grado de
aceptación y colaboración por parte de la familia y como fueron afectados por el

2Esta información fue revisada del artículo “UN MODELO DE PRÁCTICA PEDAGÓGICA PARA LAS AULAS HOSPITALARIAS EL CASO
DEL HOSPITAL UNIVERSITARIO DE LOS ANDES”de la Revista de Pedagogía, Vol. 28, Nº 83 De la Universidad Central de Venezuela.
Año 2007
proceso realizado, de igual manera se tienen en cuenta las sugerencias que
permitan modificar y mejorar dicho trabajo.

- Las interacciones que se generan entre el niño y el docente: Se valora el


grado de aceptación de la actividad y los materiales empleados, el lenguaje
verbal y no verbal manifestado por el niño y el docente, las formas de
interacción entre los dos sujetos y los vínculos afectivos que se generan.

- El trabajo interdisciplinar: Se mide el trabajo en equipo que se alcanza con el


cuerpo médico, para lograr un desarrollo integral del niño. En este punto es
importante tener en cuenta los comentarios positivos y negativos del proceso y
de esta manera hacer una retroalimentación desde una mirada multidisciplinar y
lograr cambios favorables.

- La pertinencia de los materiales: Se valora la coherencia de los recursos


propuestos con el nivel de adaptación del niño, es decir si estos se adecuan a su
edad, intereses, sus necesidades, su situación de salud, al espacio con el que se
encuentra, los tiempos de intervención, la accesibilidad a estos y los objetivos
planteados por el docente.

Es importante resaltar que el pedagogo hospitalario no podrá establecer:

“Objetivos a priori sino que derivarán de su lectura diagnóstica inicial de la


realidad, es decir, el proceso educativo inscripto en la amplitud de la subjetividad
del alumno y variará de acuerdo a la forma natural con que el alumno aprenda, en la
conjugación “misteriosa”de sus necesidades y la creatividad docente” (Ministerio
de educación, Buenos Aires, 2010)

Es decir, el docente debe hacer una evaluación de la situación en la que se llevará a


cabo su intervención, esto con el fin de lograr una coherencia entre su acción y las
necesidades del niño.
Evaluación adaptada a la situación del niño
RECURSOS Y ESTRATEGIAS

LAS ESTRATEGIAS

En el momento de pensar en una intervención con niños, niñas y jóvenes


hospitalizados es importante pensar en las estrategias educativas que se emplearán para
contribuir a su recuperación y su formación integral, teniendo en cuenta aquellos aspectos
que pueden potencializar o afectar la intervención, por ejemplo las situación medica del
niño, su situación familiar , su experiencia escolar entre otros.

“Las estrategias didácticas son formas de proceder vinculadas a las teorías o


modelos y a un modelo práctico de intervención” (Lorenzo y Pia 200), con esto podemos
decir que las estrategias son el puente entre los propósitos planteados y los logros
alcanzados, son operaciones mentales que ayudan a la adquisición o desarrollo de nuevos
aprendizajes.

Básicamente las estrategias buscan dar respuesta al ¿cómo?, ¿Cómo enseñar? y


¿Cómo aprender? en un contexto como el hospitalario. Las estrategias específicamente
deben responder a la situación del niño, por lo tanto el docente deberá ¨¨utilizar estrategias
que faciliten su acercamiento a él, conocer sus gustos, sus expectativas, sus miedos más
íntimos, sus necesidades.¨ (Ministerio de educación, Buenos Aires, 2010). Para que una
estrategia sea efectiva encaminarse a alcanzar lo objetivos propuestos, debe tener muy en
claro las características individuales del sujeto como lo son su edad, su necesidades, su
cultura, su situación médica, su estado emocional, su familia, etc., también es de resaltar
que una estrategia debe adaptarse al contexto en el cual se va desarrollar, ya sea el hospital,
el domicilio del niño, la misma escuela y demás escenarios educativos.

Es importante resaltar que la atención educativa en un contexto hospitalario debe


ser personalizada, “Las estrategias pedagógicas se diseñarán para el “caso por caso” según
las variables de análisis: permanencia y diagnóstico” (Ministerio de educación, Buenos
Aires, 2010). Es importante que el docente hospitalario en el momento de pensar en las
estrategias pedagógicas deba contemplar estos dos factores como ejes organizadores de su
planeación, pues dependerá del tiempo de hospitalización del niño la duración y
prolongación de su intervención, como también el diagnóstico, pues dependiendo de este
podrá utilizar determinados materiales o hacer las adaptaciones correspondientes de estos.

Como se ha venido mencionando la participación de la familia será de gran


importancia durante el proceso de hospitalización como en la recuperación del niño, por lo
tanto :

¨Toda estrategia pedagógica que se defina, será en articulación y colaboración


mutua con la familia, en la definición de normas que favorezcan el desempeño
general del niño, estimulando el desarrollo de sus capacidades y sosteniendo los
límites necesarios para su crecimiento, debiendo los padres intervenir desde su
función específica (amar y cuidar) en el proceso de normativización de su vida”
(Ministerio de educación de Buenos Aires, 2010 pp. 17).

Es importante involucrar a la familia en la búsqueda y elección de la estrategia


adecuada para el proceso que se va a desarrollar con el sujeto, pues es la familia la que
conoce más al niño, sus gustos, sus intereses, sus necesidades y esto hará que se realice un
trabajo cooperativo entre familia – docente hospitalario con el fin de hacer una
acompañamiento útil y efectivo para el niño.

Las estrategias didáctica se pueden agrupar en tres grandes dependiendo de la


finalidad a especifica a la que apunten las cuales son :

 Estrategias de apoyo: las cuales buscan contribuir al aspecto emocional y afectivo del niño
para que de esta manera pueda tener una mejor aptitud respecto al afrontamiento de su
enfermedad y una mejor disposición frente el aprendizaje .

 Estrategias de aprendizaje :esta relacionada con el estilo de aprendizaje del estudiante ,


para que este manera asimile e interiorice los conocimientos lo grando un aprendizaje
significativo para el niño.
 Estrategias de enseñanza : busca ayudar

RECURSOS
siempre que llevamos a cabo una acciónpedagógica , debemos pensar en los recursos
didácticos que vamos a utilizar ,

se entiende por recursos didácticos a los objetos , materiales , equipos , aparatos


tecnológicos , lugares de interés cultural ,,,que a través de la realidad o de representaciones
simbólicas favorecen la reconstrucción del conocimiento y los significados culturales

los recurso se pueden clasificar en tres tipos como los son los recursos humanos, recursos
materiales y recursos económicos.
se pueden encontrar diversos tipos de recursos dentro de los cuales están
el juego,

los recursos lúdicos le permiten a niño y a la familia tener una mejor asimilación del
proceso

BIBLIOGRAFÍA
 Violant, V; Molina, C; Pastor, C (2009). Pedagogía Hospitalaria. Necesidades,
ámbitos y metodología de la intervención. Chile: Ministerio de Educación

 González, J (2013). Uso de las TIC para la atención educativa hospitalaria y


domiciliaria (uTICe).

 Romero, K & Alonso, L (2007). Un modelo de práctica pedagógica para las aulas
hospitalarias: el caso del Hospital Universitario de Los Andes. Revista pedagógica,
Vol. 28, N° 83. Escuela de Educación Universidad Central de Venezuela.
 Ministerio de Educación (2010). lineamientos de la modalidad educación
hospitalaria y domiciliaria. Buenos Aires, Argentina.

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