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Resumen de la novela “Fiebre” de Miguel Otero Silva

Hablar de política en Venezuela es sinónimo de controversia, es un tema que los


venezolanos tratan con mucha sensibilidad por las consecuencias tanto negativas como
positivas que han traído a la nación. Han marcado períodos en la historia de Venezuela,
por sus gobernantes y dictadores que han ocasionado consecuencias directas sobre el
pueblo, un pueblo que ha sido objeto de maltratos, injusticias, torturas y por ende han
originado el despertar de sus habitantes, la rebelión y sublevación ante estos dirigentes, la
lucha por los derechos y por un mejor país. Si de dictadura se refiere, vale la pena resaltar
la dictadura del General Juan Vicente Gómez, quien gobernó Venezuela por 27 años de
manera autoritaria. Un periodo en el que el país y sus habitantes fueron víctimas de una vil
tiranía y eran violentados los derechos de los venezolanos. Tal como lo refleja el escritor
Miguel Otero Silva en su novela “Fiebre”, obra basada en la Generación del 28, un grupo
de estudiantes universitarios que en 1928 iniciaron un movimiento en contra de la dictadura
Gómez, con el firme objetivo de transformar sustancialmente las ideas que fundamentaban
la sociedad de la época y la cultura del país.

Partiendo de la idea de política concebida por los universitarios en esa época, producto
de la tiranía del General Gómez, estos planifican una rebelión que incentive al pueblo a la
lucha. Miguel Otero en su novela destaca:

“La política es para nosotros una obsesiva pesadilla, sin contornos precisos. Arriba está una
gavilla de bandoleros que roba, atropella, tortura y asesina. Abajo hay tres millones de
hombres que son robados, atropellados, torturados y asesinados.”

Es el pensamiento de los universitarios con suficientes razones para iniciar una rebelión. En
Venezuela existieron dos partidos antaños: Los liberales y los conservadores. Entre estos
estudiantes se encuentra el bachiller Vidal Rojas, quién destaca en la novela por su fiel
compromiso a la lucha y lo argumenta mediante el siguiente fragmento:

“Vivimos entre una torpe manada de esclavos satisfechos de sus cadenas, de su bazofia y
de sus cicatrices.”

Vidal Rojas acompañados por los estudiantes Armando y Robledillo destacados en la


novela, realizan su primera manifestación con un viaje a Valencia: protesta, se sintieron
apoyados por los ciudadanos. 213 estudiantes exactamente. Sin embargo, estos han sido
encarcelados en el Castillo, lo que causa que el pueblo se ponga de pie. Durante la
protesta, Armando le dice a una señora:

“Iniciamos la lucha. Ahora somos hojas que van navegando en la corriente de un rio que
no puede devolverse”.

Cuando los estudiantes son encarcelados, el pueblo les manifiesta su apoyo mediante
protestas y huelga general, de gran beneficio para la liberación de los jóvenes. Pero esto
no iba a acabar con las ganas de lucha de los estudiantes, por ello, planean un complot
entre un grupo de militares y cinco estudiantes. La fiebre de conspiración se ha apoderado
de su sangre. Llaman a los dirigentes de la huelga general que se produjo tras el
encarcelamiento de los universitarios. El objetivo no era solo tumbar a Gómez sino acabar
el Gomecismo como sistema. Sin embargo, en su segundo intento de rebelión pero esta
vez en alianza con generales y militares, los resultados no fueron los esperados. Se produce
el Cuartelazo, en el que encarcelaron y mataron a estudiantes, obreros y militares. Los
jóvenes Vidal Rojas, Armando y Robledillo junto con un grupo de militares y civiles
emprenden la huida para evitar ser capturados. Recorrieron kilómetros para esconderse,
pero después de todo, terminaron siendo atrapados. Encarcelados en un lugar al que
llaman Palenque y que Vidal Rojas lo ve como una condena virtualmente a una muerte
espantosa. Lugar donde presidiarios de toda clase, viejos, jóvenes, militares rebeldes,
ladrones, violadores entre otros, son sometidos a torturas, explotación, mala alimentación,
insalubridad que les han causado padecer la enfermedad del paludismo, fiebres
constantes a altas temperaturas. Se describe la tortura del joven Rito Luna, quien intentó
escaparse del Palenque, fue tan grave la tortura que terminó muerto.

Es así como Miguel Otero Silva describe la situación universitaria en el contexto de la


dictadura, los hechos armados sufridos por los estudiantes que se rebelaron contra el
gobierno de Gómez y los castigos impuestos por la dictadura, los trabajos forzados que
poco a poco mataban a los prisioneros políticos, reflejando al mismo tiempo a manera de
metáfora el paludismo, enfermedad relacionada a la miseria en la que se encontraba
Venezuela, que dejaba en sus víctimas fiebre, una fiebre corporal y una fiebre -metafórica-
por hacer de la nación un país libre, habitable y sin miserias. Es por ello el título de la novela.
Y esta es una realidad que no se escapa de la actual situación socio-política de Venezuela,
para nadie es un secreto que el gobierno socialista que ha permanecido por más de veinte
años le ha quitado a los venezolanos expresarse libremente de manera pública, un país
donde existe la censura, el chantaje, la violación de los derechos humanos de presos
políticos sometidos a crueles tratos y torturas que incluso han ocasionado la muerte de
algunos. Vivimos en un país secuestrado por la dictadura chavista y que más que nunca
necesita una generación como la de 1928, fieles al compromiso de lucha y libertad.

Alaín Mavarez 17-10362

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