Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
ENVIADO POR RAMIRO VILLEGAS SOBRE JUN 5TH, 2017 EN SIN CATEGORÍA | 0 COMENTARIOS
Si bien el ahorro es un elemento clave del bienestar individual, desde un punto de vista macroeconómico
representa un bien común, esencial para el crecimiento económico de cualquier país, pues cuando éste se
moviliza y se canaliza a la inversión, a través del sistema de intermediación financiera, posibilita el
financiamiento de iniciativas que promueven una mayor actividad económica. La intermediación financiera, es
por tanto, un proceso por el cual las entidades financieras median entre el ahorro y la inversión. Es un proceso
de confianza y administración de riesgos que es necesario preservar. En este sentido, velar por la confianza del
público y la estabilidad del sistema de intermediación financiera, constituye una tarea fundamental que ningún
Estado puede soslayar.
Las funciones y el rol que desempeña el Organismo Regulador y Supervisor del sistema de intermediación
financiera, constituye un elemento esencial de la política pública en todos los países, por constituir este sector
un componente básico de la economía. La necesidad de la regulación y supervisión financiera por parte del
Estado responde a la naturaleza de la facultad soberana del Estado de velar por la cosa pública y el bienestar
de la comunidad. En la mayoría de los países, la regulación y supervisión financiera ejercida por el Estado,
obedece a dos propósitos interrelacionados entre sí: proteger los depósitos del público y mantener la solidez y
estabilidad de sistema financiero, constituyéndose ambos en componentes vitales de la red de seguridad
financiera. La acción reguladora del Estado en la actividad del sector financiero debe establecer un conjunto de
principios y de normas relativas a la constitución de empresas que operan en este sector, ordenando el acceso
al mercado y fijando los requisitos que deben cumplir para desarrollar sus operaciones. La actividad de
intermediación financiera sólo puede ser ejercida por entidades debidamente autorizadas por el Estado. Por
tanto, las personas o empresas que realicen la captación de depósitos, bajo cualquier modalidad, sin la debida
autorización del Estado, infringen disposiciones legales y exponen a la población a la pérdida de sus ahorros.
RESEÑA HISTORICA
La historia de la supervisión y fiscalización de la actividad financiera en Bolivia está indisolublemente asociada
a la evolución económica del país. Desde el origen de la República, y aún en períodos anteriores, el sistema
financiero ha estado íntimamente ligado a la actividad económica y a los modelos o paradigmas de política
económica. El sistema financiero formalizado tuvo su origen en los primeros bancos fundados a iniciativa
privada, con atribuciones de entidades emisoras. El Estado autorizaba su funcionamiento y podía tomar las
acciones para ejercer un derecho directo y mantener su control, además de utilizar los servicios de la banca
para efectuar depósitos de las recaudaciones impositivas establecidas por Ley. Entre 1867 y 1871 el gobierno
autorizó la creación de las tres primeras entidades financieras en el país: Banco Boliviano, Banco de Crédito
Hipotecario de Bolivia y Banco Nacional de Bolivia.
Hasta 1871 los bancos en Bolivia desarrollaron sus actividades en virtud a disposiciones legales emitidas tanto
por el H. Congreso Nacional como por el Poder Ejecutivo, autorizando el funcionamiento de cada banco
mediante disposición legal expresa, debido a que no existía una norma especial para regular el sector en cuanto
a su organización, funcionamiento y control. Posteriormente, mediante Ley de 17 de agosto de 1871 se
estableció el primer fundamento de la legislación bancaria, disponiendo que el Estado era el único que podía
autorizar la organización de los establecimientos de crédito con sujeción a los principios que rigen la materia,
con atribuciones de emisión de moneda y, aunque en forma muy rudimentaria, se le facultaba para ejercer
control sobre dicha emisión.
En septiembre de 1890, con la promulgación de la Ley de Bancos de Emisión y Comercio, se amplía las
disposiciones de 1871 y se empezó a regular la creación y el funcionamiento de este tipo de instituciones. Esta
Ley sistematizó una serie de medidas que venían aplicándose y estableció nuevas disposiciones que incidieron
en el mercado financiero de la época. La Ley determinó capitales mínimos de constitución, depósitos de
seriedad institucional, límites para la emisión de billetes con respecto al capital de la institución financiera,
determinando que sería el Poder Ejecutivo quien conozca las solicitudes de establecimiento de Bancos de
Emisión Asimismo, se nombró por primera vez el Inspector General, dependiente del Ministerio de Hacienda,
con funciones permanentes de fiscalizar las entidades bancarias, incluyendo la fijación de su presupuesto, a
partir de contribuciones de los bancos autorizados.
El 1° de noviembre de 1891 se promulgó una Ley que estableció los procedimientos para efectuar las
inspecciones delimitando de esta manera las atribuciones del Inspector General. Otra disposición legal
importante fue la Ley de 20 de noviembre de 1895, referida al procedimiento de liquidación administrativa
cuando el activo no resultase suficiente para cumplir con sus obligaciones. Todas las disposiciones legales
emitidas con carácter posterior, fueron complementando las ya existentes, entre ellas la Ley de 31 de marzo de
1900, emitida con el propósito de proteger la confianza del público que dejaba en manos de los bancos sus
dineros en depósito, para lo cual determinó la constitución de reservas para casos de crisis, deficiencias de
encaje, colocaciones e inversiones.
La dinámica del sistema financiero hizo necesario considerar la introducción de reformas al ordenamiento legal
financiero. En 1928, el gobierno de Hernando Siles determinó la contratación de un grupo de expertos
extranjeros que integraban la Misión Kemmerer, con el objeto de aportar en la creación de diversas leyes en el
país tanto en materia financiera y tributaria, como de aduanas. En cuanto al sistema financiero, la Misión
propuso tres leyes que incidieron en su funcionamiento: la Ley Monetaria, la Ley de Reorganización del Banco
de la Nación Boliviana, que lo transformó en el Banco Central de la Nación Boliviana, y la Ley General de Bancos
N° 608 de 11 de julio de 1928.
La Ley General de Bancos de 1928, mostraba características comunes con la actual legislación, enfocándose
principalmente en la protección al ahorrista. Se consideraba que los individuos, al depositar dinero en las
instituciones bancarias, tenían interés en el desenvolvimiento de éstas. Así, el desempeño financiero de los
bancos era de interés público y debía ser regulado, motivo por el cual se creó la Superintendencia de Bancos,
organismo que de acuerdo a esta Ley tendría los siguientes deberes:
i) hacer cumplir las leyes y decretos reglamentarios relativos a bancos;
ii) vigilar e intervenir en la emisión e incineración de billetes y letras hipotecarias.
Se determinó además la atribución de la Superintendencia de realizar inspecciones en los bancos y las reglas
a seguir en casos de liquidación voluntaria o forzosa. Durante la década de los cuarenta fue ampliándose el
rango de acción de la Superintendencia de Bancos, habilitándole la regulación del sistema provisional. De esta
manera, la Superintendencia regulaba el desempeño de las instituciones financieras de crédito, las compañías
de seguro y las cajas jubilatorias.
En 1970 se aprobó la Ley del Sistema Financiero Nacional, con el propósito de unificar el sistema financiero
nacional y contar con un instrumento que garantizase la ejecución coordinada de la política financiera y
monetaria. Con la Ley del Sistema Financiero Nacional, la Superintendencia de Bancos, con todas las funciones
y atribuciones, se incorporó al Banco Central de Bolivia, bajo la denominada División de Fiscalización.
Posteriormente, mediante Decreto Supremo N°21660, se dispuso que la Superintendencia de Bancos reasuma
las funciones otorgadas en la Ley General de Bancos de 1928, como institución independiente del Banco Central
de Bolivia. La disposición de restituir la Superintendencia de Bancos, separándola de la estructura orgánica del
Banco Central de Bolivia, tuvo el objetivo de estructurar una supervisión más fortalecida. Hasta entonces, se
había observado un rezago en el ámbito normativo prudencial y debilidades supervisoras que se reflejaron en
diferentes crisis de instituciones bancarias. El marco legal vigente hasta 1993, aplicable a la actividad del
sistema de intermediación financiera en Bolivia, estuvo contenido en la Ley General de Bancos de 1928 y una
serie de disposiciones dispersas. El cambio de orientación de las disposiciones legales vigentes en el país hasta
ese año, se efectivizó con la aprobación de la Ley N° 1488 de 14 de abril de 1993, reflejando una nueva
perspectiva de modelo financiero, que contrasta con la antigua Ley General de Bancos de 1928.
LA AUTORIDAD DE SUPERVISIÓN DEL SISTEMA FINANCIERO – ASFI
La Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI), es una institución de derecho público y de duración
indefinida, con personalidad jurídica, patrimonio propio y autonomía de gestión administrativa, financiera, legal
y técnica, con jurisdicción, competencia y estructura de alcance nacional, bajo tuición del Ministerio de Economía
y Finanzas Públicas, y sujeta a control social.
El artículo 16° del Capítulo IV de la Ley N° 393 de Servicios Financieros (LSF) dispone que ASFI tiene por objeto
regular, controlar y supervisar los servicios financieros en el marco de la Constitución Política del Estado, la Ley
de Servicios Financieros y los Decretos Supremos reglamentarios, así como la actividad del mercado de valores,
los intermediarios y entidades auxiliares del mismo. Las actividades financieras y la presentación de servicios
financieros, serán realizadas únicamente por entidades autorizadas por la Autoridad de Supervisión del Sistema
Financiero (ASFI), según los tipos de entidad financiera que la LSF define.
El artículo 137° del Decreto Supremo N° 29894 de 7 de febrero de 2009, que define la Estructura Orgánica del
Órgano Ejecutivo del Estado Plurinacional, dispone: “… la Superintendencia de Bancos y Entidades Financieras
se denominará Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero de Bolivia y asumirá además las funciones y
atribuciones de control y supervisión de las actividades económicas de valores y seguros…”. Por su parte, el
artículo 34° del Decreto Supremo N° 0071 de 9 de abril de 2009, que establece el proceso de extinción de las
superintendencias generales y sectoriales, en su inciso b) manifiesta: “Las atribuciones, competencias,
derechos y obligaciones en materia de valores y seguros de la Superintendencia de Pensiones, Valores y
Seguros, establecidos en la norma vigente, serán asumidos por la Autoridad del Sistema Financiero, en todo lo
que no contravenga a la CPE”
El 20 de julio de 1928 constituye la fecha fundacional de lo que hoy es el Banco Central de Bolivia. En ese
entonces, la Ley 632 del gobierno del Presidente Hernando Siles determinó la creación del Banco Central de la
Nación Boliviana.
“Se declara Ley de la República el proyecto enviado por el Poder Ejecutivo, en fecha 4 del mes en curso, sobre
el establecimiento del Banco Central de la Nación Boliviana, en sus noventa artículos, quedando así
reorganizado el Banco de la Nación Boliviana” decía el texto del Artículo Único de la Resolución del Congreso
Nacional, promulgada por el Poder Ejecutivo.
Pero desde el 20 de julio de 1928 pasarían aún varios meses hasta que el Banco Central inaugure sus
actividades y adopte el nombre definitivo de Banco Central de Bolivia. A través de una modificación a la Ley de
Bancos, el 20 de abril de 1929, el gobierno del Presidente Hernando Siles promulgo una Ley en la que se
resolvía que, desde esa fecha en adelante, el nuevo Banco se denominaría Banco Central de Bolivia.
El Banco Central es una institución del Estado que ejecuta sus funciones de manera autárquica, con la potestad
de tomar decisiones propias, dirigidas a mantener el poder adquisitivo de la moneda nacional.
Es la única autoridad que define la política monetaria y cambiaria del país. Estos dos instrumentos se
complementan y son las herramientas principales del Banco.
La política monetaria se entiende como el instrumento que regula la circulación del dinero que requiere la política
económica del gobierno. La política cambiaria, en tanto, es un instrumento que ayuda a mantener la estabilidad
del poder adquisitivo de la moneda nacional y apoya al normal funcionamiento de los pagos internacionales de
Bolivia.
1. El BCB es la única autoridad monetaria
2. Administrar el Sistema de Pagos
3. Administrar las Reservas Internacionales
4. Definir el Régimen Cambiario
5. Funciones con relación al Sector Público
6. Agente Financiero del Gobierno
7. Funciones con relación al Sistema Financiero
Introducción
La importancia de un sistema financiero dinámico para el desarrollo de las economías aparece
hoy en día como una evidencia [11]. La inclusión formal del dinamismo y la fluidez
del sistema financiero, así como el protagonismo que se le otorga en los modelos de
crecimiento neoclásicos como los modelos de Schumpeter (1911), Solow-Swan (1956), Ramsey
(1928) y Uzawa-Lucas (1988), por citar solamente unos cuantos, han hecho que el
fortalecimiento de la capacidad del sistema financiero para financiar proyectos de inversión sea
una prioridad en las agendas de todos los países del mundo – ver, por ejemplo, y
el Informe Spence sobre crecimiento económico. En países en vías de desarrollo, el sistema
de financiamiento cobra un rol predominante con respecto a los mercados de financiamiento
directo, cuyos preceptos pueden ser cumplidos por un número demasiado limitado de
demandantes de fondos prestables. En estos países, el peso y la responsabilidad recaen casi
enteramente sobre el sistema de financiamiento indirecto, debiendo asumir la
importante función de brindar recursos monetarios para el financiamiento de
emprendimientos rentables, independientemente de su envergadura económica. En un país
como Bolivia, el desarrollo continuo y sostenible del sistema financiero – indirecto – es posible
sólo a través de la inclusión de personas de escasos recursos en la dinámica financiera. De
acuerdo al actual Viceministro de Pensiones y Servicios Financieros, Mario Guillén, menos del
1% de las poblaciones del país cuenta con acceso a servicios financieros1. Se debe admitir que
en Bolivia, donde el 60% de la población vive en condiciones de pobreza, se torna difícil el
desarrollo de un sistema financiero socialmente inclusivo. En estas condiciones de pobreza, un
sistema financiero puede incluso llegar a ser relativamente discriminador si es guiado
exclusivamente por preceptos tradicionales de optimización financiera. En efecto, una
correcta gestión de riesgos desde un punto de vista tradicional, tiende a excluir naturalmente a
las personas que carecen de colaterales reales válidos. Esto indica que la inclusión de personas
de escasos recursos y/o residentes en zonas geográficamente.
Alejadas dentro de la dinámica financiera, ha requerido la implantación de entidades con una
visión guiada por preceptos sociales antes que financieros. Es así que surgieron las primeras
entidades financieras con esta visión alternativa en los años 80, dando inicio a la actividad
micro financiera en Bolivia, con el empleo de tecnologías propias y revolucionarias. No es difícil
admitir que es la realidad socioeconómica boliviana la que ha hecho que el sistema micro
financiero boliviano se fortalezca de manera natural, hasta convertirse en un referente a nivel
mundial; en realidad, se podría decir que éste ha sido el resultado de una necesidad impuesta
por la falta de desarrollo económico y humano. Hoy en día, la fortaleza operativo-
administrativa del sistema micro financiero boliviano no es cuestionada; la idea de la falta
de rentabilidad o de autosostenibilidad financiera en la empresa de prestar dinero a gente de
escasos recursos está – casi – completamente olvidada, como lo demuestran
muchas instituciones tradicionales que se ven en la necesidad de incluir tecnologías
microfinancieras dentro de sus actividades para seguir el ritmo de competencia impuesto por
el éxito de las entidades microfinancieras. El presente estudio pretende ser una contribución
empírica del éxito social y el éxito financiero del sistema de microfinanzas en Bolivia y del
hecho que el éxito en ambos ámbitos ha sido continuo y simultáneo. Se pretende indagar sobre
la expansión geográfica y social del sistema financiero boliviano. ¿Quiénes son los actores
principales? ¿Cuál es el rol del fortalecimiento del sistema microfinanciero? ¿De qué depende
la sostenibilidad de esta expansión social y geográfica en el largo plazo? Brindar posibles
respuestas a estas preguntas resulta importante en un contexto en el cual el rol de
los sistemas financieros libres, como motores del desarrollo de los países, ha llegado a ponerse
en duda debido a la reciente crisisfinanciera. Por esta razón, la presente investigación adopta y
enfatiza un enfoque eminentemente objetivo para el análisis propuesto; se
emplean métodos cuantitativos de manera intensiva para respaldar todas las afirmaciones del
documento. Para ello, se construye un panel de datos para el periodo 2001-2009, en base
a información oficial de la Autoridad de Supervisión Financiera (ASFI) y la Asociación de
Instituciones Financieras para el Desarrollo Rural (FINRURAL). En el panel se incluyen 54
entidades financieras: 8 Bancos Comerciales (B), 20 Cooperativas Abiertas
de Ahorro y Crédito (CAC), 8 Mutuales de Ahorro y Préstamo para la Vivienda (MAP), 8
Instituciones Especializadas en Microfinanzas reguladas por la ASFI (MF) – entre las que se
incluyen a los bancos Banco Sol y Los Andes – y 10 Instituciones Especializadas en
Microfinanzas no reguladas por la ASFI (IFD). En la sección 2 se describe la evolución de la
expansión geográfica y social del sistema financiero boliviano. En la sección 3 se analizan las
condiciones financieras y la contribución de cada tipo de entidad financiera a esta expansión, a
partir de la elaboración de dos indicadores i) un Indicador de Desempeño Financiero (IDF) y,
ii) un Indicador de Desempeño Social (IDS), ambos, en base a un Análisis Factorial
Exploratorio y a una discusión teórica sobre la medición de estos desempeños. En la sección 4
se analizan los determinantes de la expansión geográfica y social del sistema financiero
boliviano a través de la construcción de un modelo de datos de panel con efectos aleatorios; la
identificación de las causas de la misma brinda luces sobre las condiciones necesarias para que
sea sostenible en el tiempo. La sección 5 resalta las conclusiones de la investigación y brinda
algunas recomendaciones tanto en términos de políticas públicas como metodológicas.
Sistema financiero
2.1. CONCEPTO:
En un sentido general, el sistema financiero (sistema de finanzas) de un país está formado por
el conjunto de instituciones, medios y mercados, cuyo fin primordial es canalizar el ahorro que
generan los prestamistas o unidades de gasto con superávit hacia los prestatarios o unidades de
gasto con déficit, así como facilitar y otorgar seguridad al movimiento de dinero y al sistema de
pagos.
La labor de intermediación es llevada a cabo por las instituciones que componen el sistema
financiero, y se considera básica para realizar la transformación de los activos financieros,
denominados primarios, emitidos por las unidades inversoras (con el fin de obtener fondos
para aumentar sus activos reales), en activos financieros indirectos, más acordes con las
preferencias de los ahorradores.
El sistema financiero comprende, tanto los instrumentos o activos financieros, como las
instituciones o intermediarios y los mercados financieros: los intermediarios compran y
venden los activos en los mercados financieros.
2.2. ACTIVOS FINANCIEROS
Artículo principal: Activo financiero
Los activos financieros son aquellos títulos o anotaciones contables emitidos por las unidades
económicas de gasto, que constituyen un medio de mantener riqueza para quienes los poseen y
un pasivo para quienes lo generan. Los activos financieros, a diferencia de los activos reales, no
contribuyen a incrementar la riqueza general de un país, ya que no se contabilizan en
el Producto interior bruto de un país, pero sí contribuyen y facilitan la movilización de los
recursos reales de la economía, contribuyendo al crecimiento real de la riqueza. Las
características de los activos financieros son tres:
• Liquidez
• Riesgo
• Rentabilidad
2.3. MERCADOS FINANCIEROS:
Los mercados financieros son el mecanismo o lugar a través del cual se produce un intercambio
de activos financieros y se determinan sus precios. El sistema no exige, en principio, la
existencia de un espacio físico concreto en el que se realizan los intercambios. El contacto entre
los agentes que operan en estos mercados puede establecerse de diversas formas telemáticas,
telefónicamente, mediante mecanismos de subasta o por internet. Tampoco es relevante si
el precio se determina como consecuencia de una oferta o demanda conocida y puntual para
cada tipo de activos. Funciones son:
• Ponen en contacto a los agentes. Económicos que intervienen o participan en el mercado,
como por ejemplo los ahorradores o inversores, con los intermediarios financieros, logrando
que ambos se beneficien.
• Fijación de los precios.
• Proporcionan liquidez a los activos.
• Reducen los plazos y costes de intermediación.
Intermediarios financieros
Los intermediarios financieros son el conjunto de instituciones especializadas en la mediación
entre los prestamistas y los prestatarios últimos de la economía, transformando una parte de
los activos primarios en activos indirectos o secundarios más idóneos a la demanda de los
ahorradores últimos de la economía. Los activos financieros son emitidos por las unidades
económicas de gasto con el propósito de cubrir su déficit, estos activos pueden ser adquiridos
directamente por los ahorradores últimos de una economía. Sin embargo, en la medida que se
desarrollan los sistemas financieros, aparecen los intermediarios financieros, una serie de
instituciones o empresas que median entre los agentes con superávit y los que poseen déficit,
con la finalidad de abaratar los costes en la obtención de financiación y facilitar la
transformación de unos activos en otros.
Los intermediarios ponen en contacto a las familias que tienen recursos, con aquellas empresas
que los necesitan. Hay que equilibrar la voluntad de invertir con la necesidad que tienen las
empresas. Los intermediarios financieros (entidades de crédito —como bancos, cajas de ahorro
y cooperativas de crédito—, entidades de leasing, entidades de crédito oficial, etc.) reciben el
dinero de las unidades de gasto con superávit, mientras que dichos intermediarios ofrecen a las
empresas recursos a más largo plazo y de una cuantía superior a la recibida por una sola unidad
de gasto con superávit, de modo que realiza una transformación de los recursos recibidos por
las familias.
Los intermediarios financieros pueden ser clasificados en no bancarios y en bancarios, estos
últimos se caracterizan porque alguno de sus pasivos son pasivos monetarios es decir billetes y
depósitos a la vista, aceptados de forma genérica por el público como medio de pago. Estas
instituciones pueden generar recursos financieros, no limitándose a realizar una simple función
de mediación.
4.1. OBJETIVO Y ESTRUCTURA:
Para poder entender y tener claro que es la contabilidad bancaria y cual la diferencia con las
distintas clasificaciones de la contabilidad, es necesario que tengan conocimiento previo
del concepto, objetivo y estructura del sistema financiero.
Antes de comenzar a desarrollar el tema en concreto, primeramente veremos la definición de
banco, que es fundamental para llevar a cabo la contabilidad bancaria. Entonces, si deseas
conocer los detalles solo debes seguir este curso.
Banco. Es una institución financiera cuya actividad principal es la intermediación pública de
recursos financieros. También se puede decir que Banco es una institución pública o privada
debidamente autorizado por la Ley General de Bancos, que capta dinero del público y de otras
entidades, en forma de depósitos y que conjuntamente con sus recursos pueda conceder
colocaciones mediante préstamos.
El sistema financiero es un conjunto de entidades financieras y otras instituciones que hacen el
papel de intermediarios financieros, es decir que efectúan la intermediación entre la oferta y
demanda de recursos financieros, ya sean estos públicos o privados, captando recursos
monetarios y colocando estos mediante operaciones de crédito.
En Bolivia en Sistema Financiero está compuesto por Financiadores externos como: BM, BID,
CAF y otros, que otorgan la financiación al Banco Central de Bolivia BCB, y este a todos los
Bancos Privados y otros de Bolivia. Es decir que estas entidades dan créditos y se canalizan por
medio del BCB y los bancos trabajan y generan utilidades con servicios financieros.
Los objetivos principales del sistema financiero son:
* Estimular el ahorro interno y la financiación externa a través de préstamos y créditos.
* Orientar adecuadamente a la colocación de los recursos financieros.
* Asegurar la utilización racional y sistemática de los recursos financieros.
* Promover el crecimiento de entidades públicas y privadas.
* Contribuir al proceso de estabilización y desarrollo económico del país, a través del flujo de
captaciones crecientes y transparentes.
La estructura del sistema financiero, está conformado por las siguientes entidades:
El Banco Central de Bolivia. Es la institución que representa al gobierno y se constituye en el
eje del sistema financiero, su objetivo es crear y promover y mantener las condiciones
monetarias, cambiarias y crediticias adecuadas para el desarrollo de la economía del país.
Bancos del sistema. Están conformado por todos los bancos ya sean estos comerciales, estatales
o especializados.
Otras instituciones financieras. Está conformado por las mutuales de ahorro, casas de cambio,
cooperativas, almacenes generales de depósito, fondos financieros privados, etc.
Fue fundado el 20 de julio de 1928 con el nombre de Banco Central de la Nación Boliviana, bajo
el gobierno de Hernando Siles Reyes, reemplazando al Banco de la Nación Boliviana que estuvo
vigente desde 1911. El 20 de abril de 1929, el banco adoptó su nombre actual y el 1 de julio de
1929 inició oficialmente sus operaciones.
Sus funciones principales son:
Procurar la estabilidad del poder adquisitivo interno de la moneda Nacional
Formular políticas en materia monetaria, cambiaría, crediticia y bancaria, como agente del
Gobierno.
8.1. FUNCIONES ESPECÍFICAS DEL BCB.-
A) cómo autoridad monetaria
B) en relación a las reservas internacionales
C) en materia cambiaría
D) en relación con el sector público
E) Como agente financiero del Gobierno
F) en relación con el sistema financiero
Bancos
Son entidades financieras privadas o públicas que realizan intermediación financiera y
operaciones de servicios. Se constituyen como sociedades anónimas.
10. COOPERATIVAS DE AHORRO Y CREDITO
Son asociaciones autorizadas para la intermediación de recursos financieros mediante la
captación de recursos del público en forma de depósitos y para otorgar créditos a sus socios. Se
constituyen como sociedades de responsabilidad Limitada.
11. MUTUALES DE AHORRO Y PRÉSTAMOS
Efectúan en operaciones de ahorro y crédito destinadas para la vivienda como ser: compras de
terrenos, construcción, ampliación, redacción, remodelación, Y proyectos de vivienda.
12. FONDOS FINANCIEROS
Son entidades financieras cuya función es intermediar Recursos financieros a pequeños y micro
empresarios o prestarnos.
13. CASAS DE CAMBIO
Son entidades que realizan operaciones de servicio como: cambio y arbitraje
(Compra y venta de moneda extranjera), giros y transferencias de dinero a nivel Nacional e
internacional.
14. COMPAÑÍAS DE SEGURO
Son entidades especializadas en la protección contra riesgos para personas naturales o
jurídicas, mediante el pago de una prima establecida en una póliza de seguros.
15. BOLSAS DE VALORES.-
Es una entidad privada que forma parte del sistema financiero, constituida como sociedad
anónima, que tiene por objeto facilitar las transacciones de compra y venta de títulos valores
como ser: acciones y bonos.
16. ONGS (ORGANIZACIONES NO GUBERNAMENTALES)
Son asociaciones civiles, sin fines de lucro que otorgan créditos y microcréditos al sector rural
con recursos propios o donados, para asistencia técnica y de salud.
17. ESTRUCTURA DEL SISTEMA FINANCIERO NACIONAL
El sistema financiero Nacional está Formado por:
Ministerio de Hacienda
Superintendencia de bancos y entidades financieras
Banco central de Bolivia
Bancos nacionales y extranjeros
Cooperativas de ahorro y crédito
Mutuales de ahorro y préstamo
Fondos financieros
Casas de cambio
Compañías De seguro
Bolsas de valores
Organizaciones no gubernamentales
18. CONSEJO DE ESTABILIDAD FINANCIERA
Se crea para que el órgano ejecutivo del estado, a la cabeza del Ministerio de economía y
finanzas públicas, sea el rector del sistema financiero y para ello se cambia la tradicional
estructura del sistema financiero.
Este consejo está integrado por:
El ministro de economía y finanzas, en calidad de presidente
El ministro de planificación y desarrollo
El director ejecutivo de la ASFI
El presidente del BCB
El director ejecutivo de la autoridad de fiscalización de valores, pensiones y seguros.
Entre sus funciones principales está la regulación y fijación de las tasas de interés pasivas y
activas en el sistema financiero.
Además en el marco de la nueva ley de servicios financieros se crea y tendrán prioridad las
entidades financieras con participación mayoritaria del estado, como ser:
Banco público
Banco de desarrollo productivo
Entidades financieras públicas de desarrollo
Institutos financieros públicos.
19. MINISTERIO DE ECONOMIA Y FINANZAS PÚBLICAS.-
Es la cabeza del sistema financiero Nacional Y establece la relación del Banco central de Bolivia
con el Gobierno. Entre sus principales funciones están:
Formular y ejecutar políticas sobre el sistema de regulación financiera en el país.
Coordinar con el BCB la emisión de normas legales para el sistema financiero.
El Ministerio de Economía y Finanzas Públicas del Estado Plurinacional de Bolivia es el
organismo que se encarga de contribuir a la construcción del Nuevo Modelo Económico Social
Comunitario Productivo, basado en la concepción del Vivir Bien, formulando e implementando
políticas macroeconómicas que preserven la estabilidad como patrimonio de la población
boliviana, y promuevan la equidad económica y social.