CTB 2019 Este articulo habla sobre las interacciones entre medicamentos y alimentos que pueden producir efectos inesperados, aunque no siempre adversos o negativos, derivados de la toma conjunta de alimentos y fármacos que pueden afectar en la seguridad y eficacia del tratamiento farmacológico y en el estado nutricional de nosotros como pacientes.
Es ahí donde nosotros como profesionales jugamos un papel importante ya que
nosotros podemos prevenir estas interacciones conociendo más acerca de las interacciones entre medicamentos y alimentos, los efectos que pueden ocurrir en nuestro organismo debido a estas interacciones y sobre todo dando un acompañamiento al paciente. En el artículo encontramos que hay dos interacciones entre alimentos y medicamentos: Alimento – medicamento (IAM): Efectos inespecíficos provocados por la presencia de alimentos en el tracto gastrointestinal. Medicamento – alimento (IMA): Interacción directa entre un nutriente y el fármaco Tenemos tener en cuenta que al prescribir y dispensar un determinado fármaco sería deseable tener en cuenta por lo menos al comienzo, la dieta del paciente, pues ya son numerosas las interacciones conocidas entre medicamentos y alimentos así ayudaríamos a disminuir los efectos secundarios. Algunos fármacos pueden alterar la normal utilización de los nutrientes, comprometiendo con ello el estado nutricional del paciente. Los efectos que pueden ejercer los fármacos sobre los nutrientes o el estado nutricional son: Efecto anti nutriente. Maldigestión y/o malabsorción. Cambios en la utilización metabólica. Hipersecreción urinaria de vitaminas y/o oligoelementos. Hipercatabolismo de nutrientes. Estrés catabólico con pérdida de peso corporal. Disminución de la ingesta por pérdida de apetito. A continuación podemos evidenciar algunos ejemplos de interacciones. Vitamina K y anticoagulantes cumarínicos como acenocumarol y Warfarina. La Warfarina, el acenocumarol, la fenitoina, los hipoglucemiantes orales, la digoxina, sales de litio y algunos medicamentos de acción sobré el SNC son fármacos que tienen un margen terapéutico estrecho a esto se puede decir que estos medicamentos su dosis terapéutica esta próxima a la dosis toxica. Existe más el riesgo de que puedan aparecer problemas de sobredosificación o efectos toxicológicos, si la biodisponibilidad del fármaco aumenta por el hecho de tomarlo con o sin alimentos. Los antibióticos (tetraciclina) son fármacos que deben mantener una concentración plasmática sostenida ya que su eficacia puede comprometerse sino se mantiene durante el tratamiento unos niveles plasmáticos por encima de la concentración mínima inhibitoria. Muchos antibióticos son peor absorbidos en presencia de elementos minerales como el calcio, el hierro esta baja absorción compromete a la eficacia del fármaco, alargando el tratamiento o puede aparecer tolerancia al desarrollo de la resistencia microbiana frente al antibiótico Bebidas alcohólicas, interaccionan con: Aumentan el efecto depresivo de medicamentos con antihistamínicos, antidepresivos. El alcohol, o etanol puede considerarse un nutriente porque aporta un valor calórico de 7 kcal/g, pero también un toxico, por sus efectos adictivos, el alcohol puede inferir en la eficacia y los efectos terapéuticos de los fármacos por múltiples mecanismos tanto farmacocinéticas como farmacodinamicos. Potasio y diuréticos natriuréticos (ahorradores de potasio), pueden provocar hiperpotasemia y riesgo de sufrir arritmias cardiacas. La vitamina E en dosis elevadas (mayores de 400 UI) y los ácidos grasos omega 3 contenidos en los aceites de pescado pueden potenciar los efectos de los anticoagulantes aumentado el riesgo de sangrado.