La auditoría de PDV comprueba el funcionamiento de las tiendas. Durante el proceso,
el auditor identifica todo lo que pueda entorpecer el desempeño de la unidad o brechas de incumplimiento de las directrices de la empresa. Los elementos observados por el auditor son, entre otros: • Condiciones de limpieza e imagen del PDV; • Correcto etiquetado de los productos; • Exposición o exhibición de los productos; • Validación de inventario y anaqueles surtidos; • Demostración de productos; • Precios y promociones visibles; • Materiales promocionales; • Presencia de promotores de marcas; • Comportamiento del personal de venta / servicio; • Cumplimiento de Regulaciones (como de venta de alcohol / tabaco); • Uso del uniforme por parte de los empleados; • Ambiente en tienda – sonorización, iluminación y temperatura; • Estandarización de los procesos.
¿CUÁLES SON LOS PRINCIPALES BENEFICIOS?
La mayor ventaja es poder controlar la calidad de las tiendas y certificar que los procedimientos están estandarizados. Además, esta técnica permite que el cliente se identifique con la marca con más facilidad. Grandes franquicias o marcas mundiales de productos de consumo, por ejemplo, hacen promociones a nivel nacional e invierten mucho en esa estrategia. Estas acciones serían un desastre si en los puntos de venta o los minoristas no respetaran los procedimientos y/o los acuerdos de un contrato; además, impactaría negativamente en costos y ventas.