Está en la página 1de 20

MÓDULO 0711- LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 1

Introducción..................................................................................... 2
DESCRIPCIÓN, CLASIFICACIÓN Y EPIDEMIOLOGÍA DE LAS
UNIDAD I DISFUNCIONES SEXUALES......................................................... 2
Descripción de la respuesta sexual humana .............................. 2
Clasificación de las disfunciones sexuales ................................. 5
Epidemiología de las disfunciones sexuales .............................. 7
LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN EL PROCESO DE EVALUACIÓN DE LAS DISFUNCIONES
DIFERENTES ÁMBITOS SEXUALES ..................................................................................... 8
Objetivos de la evaluación .............................................................. 8
Áreas de evaluación........................................................................ 9
Técnicas e instrumentos de evaluación.................................... 10
La entrevista .......................................................................... 10
Los autoinformes ................................................................... 14
Examen físico o médico......................................................... 15
Lectura 1 Evaluación psicofisiológica.................................................... 16
Métodos de registro en hombres .............................................. 17
Labrador, F.; de la Puente, M. y Crespo, M. (1995). Métodos de registro en mujeres................................................ 17
Evaluación de las disfunciones sexuales. Procedimiento............................................................................ 18
En: A. Roa. Evaluación en psicología La observación .......................................................................... 18
clínica y de la salud. Madrid:CEPE. Cap. Los autorregistros...................................................................... 19
8. Formulación del problema......................................................... 20

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 2

INTRODUCCIÓN evaluación de las disfunciones sexuales no debe ni puede centrarse


Bajo el nombre de disfunciones sexuales se agrupan un conjunto de exclusivamente en la disfunción, sino que es necesario incluir otros
problemas de diversa índole que impiden o dificultan a la persona aspectos tales como: características fisiológicas, tipo de educación
disfrutar de una forma satisfactoria de la sexualidad (Labrador, sexual recibida, relaciones de pareja, relaciones sociales..., y, en
1987). Es necesario diferenciar el concepto de disfunción sexual del general, cualquier otro aspecto referente al sistema de vida de la
de desviación sexual o parafina. Existe una disfunción sexual cuando persona que pueda parecer relevante en un caso dado.
alguna de las respuestas psicofisiológicas implicadas en el ciclo de
la respuesta sexual, o la totalidad de ellas, no se producen o DESCRIPCIÓN, CLASIFICACIÓN Y EPIDEMIOLOGÍA DE
solamente se producen de manera parcial (Kaplan, 1975). Se habla LAS DISFUNCIONES SEXUALES
de parafinas o desviaciones sexuales cuando existe una buena
respuesta sexual pero ésta se genera ante objetos o situaciones Descripción de la respuesta sexual humana
infrecuentes respecto al patrón de actividad sexual convencional (ob-
jetos no humanos, niños, sufrimiento o humillación del compañero,
Masters y Johnson (1966) analizaron por primera vez lo que ocurre
etc.).
en el cuerpo humano durante la actividad sexual. Con la
participación de más de 600 hombres y mujeres, utilizaron una serie
Son muchas y muy diversas las variables implicadas en la aparición
de instrumentos para medir las respuestas fisiológicas, describiendo
y mantenimiento de las disfunciones sexuales, y en contra de lo que
cuatro etapas en el ciclo de respuesta sexual. Estas etapas venían
se pensaba, en la actualidad parece evidente que en la mayor parte
determinadas por dos procesos fisiológicos fundamentales: la vaso
de los casos son los factores psicosociales los que juegan el papel
dilatación o flujo de sangre a los vasos sanguíneos de una zona
fundamental en la etiología de dichos trastornos y no factores
determinada causado por la dilatación de éstos; y la miotonía o
orgánicos como se pensaba hasta épocas relativamente recientes.
contracción de los músculos en los genitales y en todo el cuerpo. Las
cuatro fases establecidas fueron:
La evaluación de las disfunciones sexuales es una tarea compleja.
En primer lugar porque a menudo resulta dificil que los clientes
1. Fase de excitación: es la fase inicial que se caracteriza, en la
proporcionen datos fiables sobre estas conductas, en parte debido al
mujer, por el inicio de la lubricación vaginal (controlada por la
embarazo personal que suele conllevar su comunicación y en parte
rama parasimpática del sistema nervioso autónomo), la
porque confesar muchas de estas conductas puede suponer un
dilatación de la parte superior de la vagina, y el aumento de
cierto estigma social. En segundo lugar, porque debido a la gran
tamaño del clítoris y los senos debido, en ambos casos, a la
cantidad de variables implicadas en estos trastornos, de cara a su
vasocongestión. En el hombre, comienza la erección (también
correcta evaluación es necesario el dominio de parcelas de
bajo control parasimpático), con aumento de la tensión en el
conocimiento muy diversas: aspectos fisiológicos, psicológicos, de
escroto y elevación de los testículos, y contracciones irregulares
aprendizaje, reglas culturales y sociales... En tercer lugar, y en
del recto. Asimismo, aparecen una serie de cambios comunes
relación también con la complejidad de la respuesta sexual, porque
para ambos sexos, como rubor, incremento en la tasa cardíaca
aunque la ocurrencia o no de una determinada categoría de
y aumento de la presión arterial.
conducta sexual (por ejemplo, coito) es relativamente fácil de
registrar y cuantificar, las respuestas fisiológicas que acompañan a
2. Fase de meseta o mantenimiento: cuando la estimulación sexual
dicha conducta (por ejemplo, erección del pene, lubricación vaginal,
se mantiene, esta etapa suele darse en los momentos previos al
etc.) resultan más difíciles de medir, y aún es mucho más complica-
orgasmo. En la mujer se produce la contracción de las paredes
rlo cuantificar aspectos tales como el deseo sexual, las actitudes
vaginales, formándose la plataforma orgásmica, el clítoris se
hacia el sexo, etc. (Bancroft, 1990).
retira hacia el interior, el útero aumenta su tamaño y los labios
Teniendo en cuenta lo dicho anteriormente, parece evidente que la

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 3

menores se oscurecen. Asimismo, comienzan a producirse


contracciones involuntarias del recto. En el hombre el pene El primer objetivo que nos trazamos en nuestro acercamiento inicial a
alcanza su nivel máximo de erección, los testículos aumentan de la pareja en conflicto es el de identificar la naturaleza del problema.
tamaño y alcanzan su máxima elevación, aparecen unas gotas Para ello nos servimos de la entrevista inicial y la utilización de
de fluido en la punta del pene, y continúan las contracciones del cuestionarios.
recto. Además, en ambos sexos continúa el rubor, y el aumento
en tasa cardíaca y presión arterial, al mismo tiempo que Cuando el conflicto de pareja es secundario a un problema personal
comienza a acelerarse la respiración. en uno o ambos componentes de la misma, está indicado realizar una
evaluación y tratamiento individual previo o paralelo al tratamiento de
pareja. Ejemplos de esto, serían aquellos casos en que alguno de
3. Fase orgásmica: consiste en una «descarga explosiva de tensión los componentes de la díada que quieran comprometerse de
neuromuscular», que se produce de forma involuntaria y antemano a ningún tipo de tratamiento.
repentina cuando la estimulación alcanza su máxima intensidad
(Kinsey, Pomeroy, Martin y Gebhard, 1953). En el caso de la Una vez aclarados todos estos puntos, y si el compromiso mínimo de
mujer, la plataforma orgásmica se contrae a intervalos de 0,8 uno para con el otro y para con el tratamiento parece adecuado, la
segundos ente 5-12 veces, produciéndose además contrac- evaluación puede continuar.
ciones involuntarias del esfínter anal y de otros grupos
musculares; en el hombre las contracciones de la uretra y de los Ya desde el comienzo, y a lo largo de todo el tratamiento, utilizamos
músculos pélvicos hacen que el pene experimente contracciones entrevistas con ambos miembros de la pareja y entrevistas con cada
que provocan la eyaculación del fluido seminal (bajo control de la uno de ellos por separado. Estas últimas son muy necesarias, sobre
rama simpática del Sistema Nervioso Autónomo). Al igual que en todo en la fase inicial, para recabar in-formación que la presencia del
la mujer, estas contracciones van acompañadas de otro miembro puede obligar a ocultar (existencia de relaciones
contracciones del recto. Paralelamente, en ambos sexos extramaritales...), o bien para evitar volver a hablar entre ellos de
continúan los incrementos iniciados en las fases anteriores en ternas dolorosos que, si bien pueden ser necesarios para la
los diversos parámetros (p.ej. tasa cardíaca, presión arterial y evaluación, quizá no sea útil ni positivo discutirlos.
tasa respiratoria).
A fin de garantizar que la entrevista inicial resulte lo más eficaz y
4. Fase de resolución: en esta fase final el cuerpo vuelve al estado de productiva, aconsejamos cierta estructuración. Con este propósito
reposo. La reversión de los procesos anteriores normalmente dura sugerimos un esquema-guía que viene a completar y enriquecer el
de 15 a 30 minutos. Los varones entran en un período refractario propuesto por Peterson (1977). Este esquema para estructurar la
durante el cual es muy difícil que puedan conseguir la erección y entrevista clínica de pareja es como sigue:
obtener otro orgasmo. La duración de este período es variable,
oscilando desde minutos a horas, aumentando su duración con la 1. Cómo empezó la relación.
edad. Las mujeres no muestran período refractario, por lo que son 2. Cambios importantes durante el curso de la relación.
capaces de experimentar orgasmos múltiples o repetidos en un 3. Entendimiento afectivo
período más corto. El medio más común para alcanzar el orgasmo, 4. Relación autoritarismo/dependencia.
exceptuando el coito, es la estimulación manual u oral de los 5. Los problemas principales en la vida de pareja.
genitales. Aparte de la región genital, las zonas erógenas incluyen 6. Áreas de incompatibilidad-compatibilidad con la pareja.
los pechos, los muslos, los labios y las nalgas, pudiéndose 7. Secuencias, frecuentes en la actualidad, de interacción
mencionar también otras áreas como orejas o axilas, dependiendo problemática:
de cada individuo concreto.

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 4

¾ Número, intensidad y duración. reimplantación de estas conductas reforzantes es uno de los


¾ Descripción detallada de las situaciones en que ocurre. objetivos terapéuticos a tener en cuenta en la intervención.
¾ Lugar y situación.
¾ Qué han dicho y hecho. Las parejas, como la mayor parte de las relaciones diádicas, se
¾ Sentimientos en relación con el otro. forman porque existe suficiente potencial para el refuerzo mutuo. La
¾ Cómo se influyen respectivamente. relación se mantiene el tiempo que ambos miembros continúan
¾ Cómo terminan. Resultado. suministrándose suficiente refuerzo entre sí. Si uno o ambos
miembros de la pareja cambian su conducta, hasta el punto de
8. Tiempo libre de conflicto. tornarse no reforzante e incluso punitiva para el otro, es probable
9. Pensamientos positivos y negativos sobre el otro. que la relación se deteriore o incluso cese. Por esta razón cualquier
10. Sentimientos de descontento y de satisfacción. cambio importante acaecido durante el curso de la relación debe ser
11. Actividades placenteras que comparten (ejemplos). objeto de evaluación.
12. Problemas con los hijos.
13. Relación sexual actual. Nivel de satisfacción. Problemas En algunos casos encontramos que la evolución en la concepción y
específicos. filosofía de la vida, así como el cambio de intereses en un miembro o
14. Experiencias sexuales fuera de la pareja. ambos de la pareja, da lugar a que las conductas de uno y/o del otro,
15. Compañero ideal en relación al: que en un comienzo podían resultar gratificantes o reforzantes, ahora
ya no lo son. Éste sería el caso, por ejemplo, de una pareja en la cual
¾ sexo, uno de los miembros evoluciona adoptando una filosofía de vida más
¾ trabajo, progresista, con mayores intereses intelectuales y culturales, y ya no
¾ comportamiento con los hijos. considera reforzantes conductas que antes lo eran, como las
relativas a ser una buena ama de casa. Ahora, por el contrario, le
16. Problemas individuales que influyen en la relación de pareja. gratificaría más que su pareja tuviera intereses culturales o trabajase
17. Objetivos del tratamiento y expectativas hacia el mismo. fuera de casa.

Conviene conocer cómo empezó la relación y qué aspectos positivos El entrevistador continúa indagando según la estructura de la
(conductas y atributos) intervinieron en un principio en la atracción entrevista señalada más arriba y ayudando a la pareja a expresar
mutua de la pareja. En el caso de que estas áreas positivas, que sus deseos y quejas con descripciones lo más específicas y precisas
existían en un comienzo, se hayan extinguido en la actualidad, posible. La razón de esto es que las parejas que acuden a tratamiento
habría que realizar un análisis funcional a fin de conocer qué suelen tener cierta inhabilidad para expresar las conductas concretas
estímulos hay que modificar para instaurar de nuevo esos aspectos que desearían ver aumentadas o disminuidas en su compañero.
gratificantes. Es frecuente encontrar que en algunas parejas, Utilizan a menudo un len-guaje vago e impreciso. Expresiones del
después de unos años de relación, se han extinguido una serie de tipo «que sea más considerado conmigo» hacen difícil precisar
conductas tales como expresión de afectos, refuerzos extraordinarios cuáles son los problemas concretos e impiden a la pareja coincidir con
con ocasión de fechas importantes (regalos con ocasión de precisión en las conductas que desean cambiar.
onomástica, cumpleaños o aniversarios de boda...), cuidado del
aspecto físico, etc. Este tipo de comportamiento pudo haber sido El fin principal de la evaluación es planificar objetivos para el
habitual al principio de la relación, por la funcionalidad de tratamiento. Estos objetivos se deben establecer en términos de
«conquistar» al otro. Pero una vez «realizada la conquista» se dejan conductas concretas y observables. En consecuencia, la mejoría
de poner en práctica estas conductas reforzantes, propiciando así alcanzada con el tratamiento no se definirá exclusivamente en base
una pérdida de interés en la relación. En ocasiones, la

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 5

a impresiones subjetivas del paciente, sino a metas y cambios


conductuales logrados. Trastornos del orgasmo.
Disfunción orgásmica femenina.
Un complemento importante de las entrevistas iniciales de Disfunción orgásmica masculina.
evaluación es el uso de cuestionarios, que el terapeuta puede pedir Eyaculación precoz.
que se completen al final de la entrevista o en casa.
Trastornos sexuales por dolor.
Clasificación de las disfunciones sexuales Dispareunia.
Vaginismo.
Aunque no existe una clasificación universalmente aceptada de las
disfunciones sexuales (véase Carrobles y Sanz, 1991), nos
remitiremos a la que goza de una más amplia difusión, que es la del
DSM-III-R (APA, 1987). Esta clasificación, que aparece en la Tabla Tabla 8-2
8-1, recoge la diferenciación de fases en la respuesta sexual Disfunciones sexuales en las mujeres (Hawton, 1989, pág. 373.
establecida por Masters y Johnson (1966), incluyendo algunas • Trastorno de la excitación sexual. Fallo de las respuestas
modificaciones. En concreto, la APA considera una fase preliminar fisiológicas normales (e.j.: lubricación y contracción vaginal) ante la
de deseo sexual, no recogida en la descripción de Masters y estimulación sexual y ausencia de sensaciones habitualmente
Johnson, al mismo tiempo que unifica las fases de excitación y asociadas con la excitación sexual. Es infrecuente en mujeres con
meseta en una sola (que denomina excitación). Finalmente, la APA deseo sexual inhibido, excepto tras la menopausia o el parto.
recoge una categoría en la que se incluyen aquellas disfunciones Puede ocurrir en mujeres con inhibiciones graves acerca de la
que suponen, más que alteración en una fase de la respuesta, la sexualidad.
aparición de dolor. Por consiguiente, el DSM-III-R considera cuatro
categorías principales de disfunciones, que parecen se van a • Deseo sexual inhibido o hipoactivo. La disfunción más
mantener iguales en el futuro DSM-IV (APA, 1993): trastornos del frecuente en mujeres. Los niveles de deseo «normal» varían
deseo sexual, de la excitación sexual, del orgasmo y trastornos enormemente de unas mujeres a otras. El deseo sexual se refleja
sexuales por dolor. Las principales disfunciones sexuales de cada en frecuencia de actos sexuales con pareja, de pensamientos
categoría aparecen brevemente descritas en las Tablas 8-2 (para las sexuales y de masturbación. La mejor gula para determinar
mujeres) y 8-3 (para los varones). disfunciones secundarias es la comparación con el nivel previo de
deseo. La distinción de disfunciones totalmente primarias respecto
Tabla 8-1 al límite inferior del rango normal de deseo puede ser difícil. A
menudo se asocia con dificultades generales de relación (Hawton y
Principales trastornos sexuales en el hombre y la Catalán, 1986) y con depresión (Weisman y Paykel, 1974).
mujer según la clasificación del DSM-III-R (APA, 1987).
• Disfunción orgásmica. Habitualmente incluye ausencia o baja
Trastornos del deseo sexual frecuencia de orgasmos. Es importante para los propósitos
Deseo sexual inhibido o hipoactivo. terapéuticos diferenciar mujeres que no pueden experimentar
Trastorno por aversión al sexo. orgasmo con la pareja pero sí pueden con la masturbación, de
Trastornos de la excitación sexual aquellas que no pueden o no se han masturbado nunca. La
Trastorno de la excitación sexual en la mujer. disfunción orgásmica secundaria se asocia a menudo con
Trastorno en la erección en el hombre. dificultades generales de relación (McGovern, Stewart y Lo-

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 6

Picollo, 1975).

• Vaginismo. El coito es imposible o extremadamente doloroso


debido a la aparición de espasmos de los músculos vaginales ante
los intentos de penetración (a menudo con historias de fracasos en
la aplicación de tampones). Habitualmente es un problema
secundario siguiendo a un trauma o infección vaginal. Las mujeres
con vaginismo a menudo tienen ideas distorsionadas acerca de la
capacidad y otras características de la vagina. La mayoría de las
mujeres con vaginismo son, por lo demás, totalmente responsivas • Deseo sexual inhibido o hipoactivo (ver Tabla 8-2). La
sexualmente (Duddle, 1977). causa subyacente es en algunos casos un trastorno de la
erección. El deseo sexual inhibido secundario se asocia a
• Dispareunia. Dolor durante el coito. Puede localizarse a la entrada menudo con dificultades generales en la relación con la
de la vagina, «superficial» (e.j.: vaginismo leve, falta de activación, pareja, o con depresión. En ambos casos, en trastorno
infecciones vaginales, quiste de Bartolino), o a nivel «profundo» en primario o secundario, deben excluirse causas orgánicas
la vagina (probablemente por causas físicas —e.j.: infección pélvica, (e.g.: hipogonadismo).
endometriosis aunque puede deberse a falta de activación). Está
indicada la evaluación ginecológica. • Eyaculación precoz. Es difícil de definir —probablemente lo
mejor es hacer evaluaciones de pareja/individuales de si el
control del hombre es satisfactorio (algunas personas
presentan expectativas irracionales). Habitualmente es un
Tabla 8-3 problema primario. La masturbación rápida puede ser un
factor de predisposición. La eyaculación rápida es común en
Disfunciones sexuales en los varones (Hawton, 1989, pág. 374) hombres jóvenes que tienen sus primeros encuentros
sexuales, en épocas de estrés, y cuando las experiencias
• Eyaculación retardada/ausente. Es una disfunción sexuales han sido temporalmente posibles —sólo la
relativamente in-frecuente que afecta tanto a la eyaculación eyaculación rápida involuntaria persistente debe conside-
como a la experiencia del orgasmo. Se debe diferenciar de la rarse como disfunción—.
eyaculación retrógrada en la que, debido a trastorno físico,
cirugía (e.j.: prostatectomía), o medicación, se experimenta • Eyaculación dolorosa y dispareunia. La eyaculación
el orgasmo pero la eyaculación pasa a la vejiga. La eyacula- dolorosa (o sensación ardiente en la uretra después de la
ción puede ocurrir en la masturbación pero no con pareja, o eyaculación) es habitualmente el resultado de una infección
sólo en el sueño, o nunca (lo que sugiere una causa física).
(e.g.: uretritis, prostatitis, cistitis). La extrema sensibilidad del
En la eyaculación retar-dada la estimulación sexual ha de glande del pene después de la eyaculación es normal. La
continuarse por un período excesiva-mente largo antes que dispareunia (dolor durante el coito) es también debida
la eyaculación ocurra.
habitualmente a causas físicas.
• Trastorno de la erección. El problema más común entre los
hombres que buscan asistencia —hombres a menudo
mayores que los que presentan otros trastornos. Variación
considerable (e.g.: hombres que alcanzan la erección cuando
están con la pareja, pero que la pierden durante el coito,

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 7

Otros dos parámetros importantes para la descripción de una aproximadamente el 30% presenta disfunción orgásmica. Por otra
disfunción sexual son el momento de su aparición y la extensión del parte, alrededor del 20% de la población total muestra deseo sexual
problema (cf. Hawton, 1989; Labrador, 1993). Los términos de hipoactivo.
disfunción primaria es secundaria se emplean, respectivamente, para
describir los problemas que se han presentado desde la aparición de
la actividad sexual, y aquellos otros que han surgido tras un período
Nathan Labrador DSM-III-R
de actividad sexual satisfactoria. Por otro lado, se habla de
disfunción total o general cuando se presenta en todas las (1986) (1987) (1987)
situaciones o actividades sexuales, frente a las disfunciones Trastornos sexuales femeninos
situacionales que sólo aparecen en determinadas situaciones (e. j.:
relaciones sexuales con la pareja habitual), pero no en otras (e.j.:
Deseo sexual inhibido 1-35 % 35 % 20 %
relaciones sexuales con una pareja diferente, masturbación...).
Disfunción orgásmica 5-30 % 46 % 30 %
Epidemiología de las disfunciones sexuales Vaginismo/Dispareunia 2 - 3 o/ o

No se conoce con exactitud la prevalencia de estos trastornos en la Trastornos sexuales masculinos


población general, y aunque, como puede observarse en la Tabla 8-4,
las cifras varían según los estudios, los datos existentes apuntan que Deseo sexual inhibido 1-15 % 16 % 20 " / o
un porcentaje elevado de hombres y mujeres padecen a lo largo de
su vida de alguna disfunción sexual. Disfunción orgásmica 5%
Tabla 8-4 Trastornos
Frecuencia de las disfunciones sexuales en la población general de la erección 10-20 % 7-10 % 8%
Eyaculación precoz 35 % 36-38 % 30 %

Masters y Johnson (1970) manejan cifras en torno al 50% de las En cuanto a la frecuencia de cada una de las disfunciones en
parejas heterosexuales. Frank, Anderson y Rubinstein (1978) relación a las personas que, sufriendo de algún tipo de trastornos
hallaron que en matrimonios relativamente felices y bien acoplados, sexuales, solicita ayuda de un profesional de la salud, los datos
el 40% de los hombres informaban de haber padecido de también oscilan según los autores (Tabla 8-5). Los trastornos por los
disfunciones eyaculatorias o de la erección en algún momento de su que más frecuentemente se consulta son, en la mujer, el deseo
vida, y el 63% de las mujeres indicaron la existencia de disfunciones sexual inhibido y la disfunción orgásmica que según una estimación
orgásmicas o del deseo sexual. Además, el 50% de los hombres y el realizada sobre diferentes estudios por Vázquez, Graña y Ochoa
77% de las mujeres informaron de la existencia de otras dificultades (1990) suponen el 40% y el 30% respectivamente de las mujeres que
sexuales, tales como falta de interés o incapacidad para relajarse. acuden a consulta por un problema sexual. En el hombre los de
mayor prevalencia son los problemas de erección y de eyaculación
Los datos de prevalencia aportados por el DSM-III-R (APA, 1987) precoz que suponen el 42.27% y el 30.93% respectivamente
sobre estudios realizados en Europa y Estados Unidos indican que en (Vázquez, Graña y Ochoa, 1990).
la población adulta joven aproximadamente el 8% de los hombres
presentan tras-tornos de la erección y el 30% padece eyaculación
precoz. Respecto a la población femenina se estima que

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 8

Existen muy pocos estudios epidemiológicos realizados sobre la Trastornos de la


erección 42 % 37 % 42.27 %
población española. En un trabajo reciente, Carrobles y Sanz (1991) 16 %
aportan da-tos sobre una muestra de 88 pacientes que acuden a Eyaculación precoz 23 % 22 % 30.93 % 9%
consulta por problemas sexuales y de pareja. A pesar de lo limitado Eyaculación 9% 18 % 7.22 % 2.27 %
de la muestra, la distribución de las diferentes disfunciones sexuales t d d
Otros 4% 7% 14.43 % 10-28 %
parece ser similar a la encontrada en estudios extranjeros, aunque el
Problemas de pareja 32 %
hecho de haber englobado en estos resulta-dos los problemas de
pareja, que suponen el 32°/o de los pacientes atendidos, hace que
los porcentajes de cada una de las disfunciones sexuales baje
respecto a otros estudios que consideran de forma exclusiva EL PROCESO DE EVALUACIÓN DE LAS DISFUNCIONES
trastornos sexuales (ver Tabla 8-5). SE X U A LES

Existe un dato interesante a destacar. Tan sólo un porcentaje muy OBJETIVOS DE LA EVALUACIÓN
pequeño de personas que padecen de alguna disfunción sexual
acuden a un profesional de la salud para consultar por ello, y aún
más, de éstas sólo un número reducido se somete a tratamiento. Como en cualquier otro campo clínico, en el ámbito de las
Osbein, Ilawton y Gath (1988) realizaron un estudio sobre una disfunciones sexuales el fin último de la evaluación es orientar y
muestra de 436 mujeres de clase media, de diferentes ciudades del planificar el tratamiento a seguir. Por ello, la simple clasificación o
Reino Unido, encontrando que aunque el 32.5°/o (142 mujeres) diagnóstico general de los problemas sexuales que presenta un
sufrían de alguna disfunción sexual, tan sólo el 29.5 (42 mujeres) sujeto, aunque de utilidad en cuanto que posibilita un primer
creían tener algún problema, y tan sólo el 2.3% (1 mujer) se sometió acercamiento y facilita la comunicación con otros profesionales, no
a tratamiento. parece ser suficiente. De acuerdo con el modelo general ele
evaluación conductual, el proceso de evaluación de las disfunciones
sexuales debe estar orientado a establecer relaciones funcionales
entre la aparición y mantenimiento del problema y las diversas
Tabla 8-5 variables ambientales y organísmicas que parecen estar
Frecuencia de cada una de las disfunciones sexuales sobre el total relacionadas con él.
de personas que solicitan ayuda por problemas sexuales
Siguiendo a Hawton (1989), los objetivos de la evaluación pueden
Bancroft resumirse en los siguientes:
Mears Vázquez y Carrobles y
(1977) (1978) cols. (1990)
Sanz (1991)
1. Definir la naturaleza del problema sexual y los cambios que
Trastornos sexuales femeninos el cliente desea conseguir.
Deseo sexual inhibido 62 % 51 % 40 % 2.27 %
Disfunción orgásmica 18 %
2. Obtener información que permita al terapeuta formular una
22 % 30 % 18.18 % explicación tentativa de las causas del problema en términos
Vaginismo/Dispareuni 12 % 18 % 14 % 1.16 % de factores de predisposición, precipitantes y de
Otros 8% 7% 16 % 19.27 % mantenimiento.
Trastornos sexuales masculinos
3. Evaluar qué tipo de intervención terapéutica es indicada de
Deseo sexual 10 % acuerdo con esa formulación.
20 %
inhibido

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 9

Por su parte, Sierra (1991) a la luz de los trabajos de diversos autores


4. Proporcionar al cliente una explicación del problema sexual (Kaplan, 1983; Masters y cols., Lara, 1985, y Sánchez, 1986) establece
en la que se especifiquen los factores causales y de cuatro áreas fundamentales en la evaluación de las disfunciones
mantenimiento así como las posibles soluciones. Dicha sexuales: nií'dica, psicológica, de la sexualidad y de la pareja.
formulación servirá para iniciar el proceso terapéutico.
a. Área médica: El objetivo en esta parte de la evaluación es
ÁREAS DE EVALUACIÓN descartar la existencia de posibles causas orgánicas. Para ello ha
de investigar-se la posible presencia de enfermedades,
Son diversos los esquemas de evaluación propuestos por los anomalías físicas, ingesta de fármacos, drogas, alcohol... Uno de
diferentes autores (Bancroft, 1990; Carrobles y Sanz, 1991; Kaplan, los criterios a tener en cuenta a la hora de descartar o no la
1983; Labrador, 1993, Masters y Johnson, 1966; Sierra, 1991) presencia de dichos trastornos médicos es el que la disfunción
aunque todos ellos son coincidentes en cuanto al enfoque general, sea general (se produce en todas las ocasiones) o situacional,
difiriendo tan sólo en los aspectos concretos que consideran cada dado que si la disfunción es situacional, parece difícil que pueda
uno de ellos. Además, todos coinciden al destacar la necesidad de estar subyaciendo una causa orgánica.
no limitarse durante el proceso de evaluación a los aspectos b. Área psicológica: El objetivo, lo mismo que en el caso anterior,
puramente sexuales y cíe evaluar otros ámbitos del funcionamiento es descartar que la disfunción sea un síntoma más de un
personal y de la pareja. trastorno de mayor gravedad como hipocondriasis, obsesiones,
depresiones, alucinaciones, fobias...
Así, por ejemplo, ['declinan, Weiler, Lopiccolo y IIogan (1982) indican c. Área de la sexualidad: El objetivo es aclarar y describir los
seis aspectos básicos a tener en cuenta en la evaluación de las aspectos relacionados con el funcionamiento sexual en general y
disfunciones sexuales: la disfunción en particular. Es importante tratar de establecer
relaciones funciona-les entre síntomas y posibles causas. La
1. Historia sexual de cada miembro de la pareja, de la evaluación debe dirigirse a aspectos como la información sexual
interacción y del impacto de la o de las disfunciones. de que se dispone, la educación y actitudes al respecto, las
2. Conductas sexuales habituales: interacciones sexuales, conductas que se han desarrollado o se desarrollan
comunicación, actividades para lograr el orgasmo... habitualmente (en especial las primeras respuestas sexuales,
entre ellas la masturbación), la historia del problema y la situación
3. Factores actitudinales y cognitivos: respecto a la sexualidad, actual.
a las relaciones sexuales, etc. , d. Área de la pareja: Se dirige a investigar las relaciones con la
pareja para tratar de determinar hasta qué punto esta relación
4. Defensas y prejuicios intrapsíquicos. puede incidir en la disfunción. Conviene analizar la estabilidad de
la pareja, las posibles relaciones entre interacción sexual y
5. Situaciones interpersonales: Incidencia de las disfunciones estabilidad de la pareja, y en general detectar si las relaciones de
en las relaciones emocionales. pareja puede estar hincionando como factor facilitador de la
disfunción. Asimismo se debe conocer si es posible contar con el
6. Estatus psicopatológico: posibles problemas o alteraciones otro miembro de la pareja de cara al programa de intervención.
psíquicas.
Como puede verse, ambas propuestas son coincidentes, y en ambas
7. Aspectos biológicos. se defiende un modelo de evaluación coherente con el modelo
general de evaluación conductual, que dé cuenta de la complejidad

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 10

de procesos implicados en el desarrollo y mantenimiento de las Influencias y hechos en los ciclos de vida:
disfunciones sexuales.
3. Infancia.
Técnicas e instrumentos de evaluación 4. Adolescencia.
5. 13-19 años.
6. Adultez prematrimonial.
Una vez establecidas las áreas que se han de evaluar, el clínico tiene a 7. En el matrimonio.
su disposición una serie de técnicas e instrumentos que le permiten 8. Percepción de sí mismo.
9. Sentidos especiales: tacto, visión, olfato, audición.
recoger la información pertinente. Durante mucho tiempo la entrevista 10. Ancianidad.
ha sido prácticamente la única técnica utilizada, junto con el examen 11. Miscelánea.
médico. En los últimos años se han ido introduciendo otros
instrumentos de evaluación que permiten completar la información Tabla 8-7
recogida mediante la entrevista.
Preguntas referidas a la Base Preliminar de la entrevista propuesta
La entrevista por Masters y Johnson (Masters y Jonhson, 1970, pág. 30 y.3l)

Sin duda alguna, la entrevista es el instrumento principal en la evalua- 1.- BASE PRELIMINAR
ción de los problemas sexuales, siendo el punto de partida obligado y
probablemente la parte más importante de la evaluación y del Una manera efectiva de iniciar el interrogatorio consiste en solicitar
proceso de intervención entero. Constituye el primer contacto formal un ejemplo personal o un simple esbozo de la naturaleza del
con el cliente y debe proporcionar información precisa sobre el problema actual. La encuesta subsiguiente puede seguir una fórmula
problema sexual y las variables implicadas. relativamente específica basada en si la alteración actual es propia de
uno sólo de los cónyuges, si la alteración de uno de ellos afecta a la
Malatesta y Adams (1986) indican que la entrevista inicial debe estar función sexual del otro, o si en ambos cónyuges existen disfunciones
dirigida a cubrir los siguientes objetivos: 1) Establecer una buena sexuales.
comunicación entre el cliente y el terapeuta, en particular en lo 1. (Si se orienta hacia el otro cónyuge) ¿Qué importancia tiene
referente a los temas sexuales; 2) Clarificar si se dan las condiciones el problema en relación con su propia función sexual?
necesarias para que la persona o la pareja reciba una terapia sexual, 2. (Si es propia) ¿Cómo afecta el problema a la función sexual
o si por el contrario ésta no es aconsejable debido por ejemplo a la de su cónyuge?
presencia de problemas psicopatológicos, problemas orgánicos,
problemas maritales, legales, etc.; 3) Obtener in-formación que 3. (Si la alteración está presente en ambos cónyuges)
permita generar hipótesis acerca del desarrollo y mantenimiento de ¿Recuerda usted qué problema surgió primero?
los trastornos sexuales; 4) Llegar a una primera formulación tentativa 4. ¿Cómo ha enfocado usted el problema o los problemas de la
del caso, y 5) Desarrollar un plan que permita completar y formalizar pareja hasta la fecha?
la evaluación. 5. ¿Cuál es su concepto de una función sexual efectiva?
a) para una mujer,
Tabla 8-6 b) para un hombre.
Esquema de la primera entrevista según Masters y Johnson (1970)
6. (Esposa) ¿En qué circunstancias ha tenido orgasmos, si
1. Base preliminar. alguna vez los tuvo? Describa los sentimientos (fisicos) que
2. Descripción estadística de la pareja. usted asocia a la experiencia.

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 11

7. (Esposo) ¿Ha tenido su esposa orgasmos alguna vez? ¿En Otros autores como Lobitz y Lobitz (1978) y, LoPiccolo y Heiman
qué circunstancias? (1978), proponen esquemas de entrevista alternativos. Las áreas que
8. (Esposo) ¿Ha tenido en algún momento dificultades de según
erección o de eyaculación? Si es así descríbalas. estos autores se deben explorar aparecen en las Tablas 8-8 y 8-9
respectivamente.
9. (Esposa) ¿Ha notado en alguna oportunidad dificultades en la
erección o eyaculación de su esposo? Si es así descríbalas.
10. ¿Por qué medios, excluyendo el coito, ha tratado usted, de Tabla 8-8
dar placer sexual a su cónyuge en el matrimonio? Describa Modelo de entrevista (áreas que deben investigarse en ella)
los resultados. de Lobitz y Lobitz (1978)
11. ¿Por qué medios trató su cónyuge de darle a usted placer se-
xual? Describa los resultados. 1. Información sobre aspectos comportamentales-sociales.
2. Descripción del problema sexual.
12. ¿Cuál es su concepto de los roles apropiados del hombre y 3. Descripción de la vida sexual habitual del paciente.
de la mujer en el matrimonio?: 4. Historia sexual de cada miembro de la pareja.
a) en el lecho conyugal,
5. Opinión sobre la calidad de la relación por parte de cada
b) en los aspectos sociales del convivir diario, miembro de la pareja.
c) en otros aspectos del matrimonio. 6. Motivación para el tratamiento.
13. ¿Cómo cree usted que su esposo (o esposa) contestará a 7. Historia médica.
estas preguntas?
14. ¿Qué métodos anticonceptivos ha utilizado, si utilizó alguno?
15. ¿Hay hijos en el matrimonio? Carrobles (1985), destaca como idea fundamental que la entrevista ini-
cial ha de servir en primer lugar para crear un clima de aceptación y
confianza entre cliente y terapeuta. En un trabajo posterior (Carrobles y
Se han desarrollado diferentes modelos de entrevista, la mayoría de Sanz, 1991) se habla de dos fases en esta primera entrevista. Una
los cuales son entrevistas estructuradas, bastante largas. Dependiendo primera fase que ellos denominan entrevista para la evaluación inicial
de los autores, se utilizan bien entrevistas individuales, bien entrevistas del problema y una segunda fase que denominan entrevista de
en pareja, y por un solo terapeuta o por dos coterapeutas evaluación o historia sexual propiamente dicha. El objetivo de la
conjuntamente. entrevista para la evaluación inicial del problema es identificar, por un
lado la adecuación del problema a una terapia sexual y por otro si se
Así, Masters y Johnson (1970), cuya cita es obligada, desarrollan un dan los requisitos para su realización. El esquema de dicha entrevista
proceso de evaluación que dura 7 horas y en el que se incluyen se recoge en la Tabla 8-10. Una vez recogida dicha información se
básicamente entrevistas y revisión médica. La primera entrevista la han pasa, si es pertinente, a la entrevista de evaluación o historia sexual
de llevar a cabo cada uno de los miembros de la pareja por separado propiamente dicha dirigida a la evaluación específica de la disfunción
con el terapeuta de su mismo sexo. El esquema de dicha entrevista se de cara al diseño de la intervención. El modelo propuesto por estos
incluye en la Tabla 8-6. Para ejemplificar el tipo de preguntas que estos autores aparece en la Tabla 8-11.
autores utilizan en el interroga-torio, en la Tabla 8-7 se exponen las
preguntas que ellos proponen para recoger información respecto al
primer punto denominado «base preliminar».

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 12

Tabla 8-11
Tabla 8-9
Esquema de entrevista en disfunciones sexuales Modelo de historia sexual en problemas de disfunciones
de Lopiccolo y Heiman (1978) (Carrobles y Sanz, 1991, pág. 68)

INFORMACIÓN HISTÓRICA
1. Ambiente familiar y primera infancia
1. HISTORIA DEL PROBLEMA:
2. Pubertad y adolescencia 1. Infancia y medio familiar:
INFORMACIÓN ACTUAL 1.1. Ambiente familiar.
1. Actitudes y creencias. 1.2. Formación religiosa.
2. Conductas: 1.3. Actitudes de los padres y adultos respecto al
— Tipos de actividad sexual no coital. sexo.
— Homosexualidad. 1.4. Experiencias sexuales tempranas.
— Relaciones fuera de la pareja.
2. Pubertad y adolescencia:
— Comunicación.
— Relación con la pareja. 2.1. Educación e información sexual.
— Estilo de vida. 2.2. Primeras experiencias sexuales: sueños, fantasías,
— Naturaleza del problema sexual. erección, menstruación,eyaculación, masturbación, orgasmo,
0. Pregunta resumen. experiencias sexuales con personas del mismo y distinto sexo,
1. Objetivos. coito, otras experiencias sexuales.
2.3. Relación socio—sexual con su actual pareja: primera
Tabla 8-10 experiencia, experiencias posteriores y evolución.
Entrevista para la evaluación inicial de los problemas sexuales
(Carrobles y San,, 1991, pág. 66)
II. CONDUCTA SEXUAL ACTUAL:

A. Naturaleza del problema y adecuación del mismo a una 1. Actitudes y creencias actuales respecto al sexo.
terapia sexual: 2. Conducta sexual:
1. Tipo y naturaleza del problema sexual presentado por el 2.1. Actividades sexuales distintas al coito.
sujeto o In pareja. 2.2. Posibles relaciones
2. Existencia o no de patologías o causas orgánicas. extramatrimoniales. 2.3. Comunicación
3. Posible existencia de patologías psicológicas relacionadas entre la pareja.
con el problema sexual. 2.4. Relación marital.
4. Posibles problemas maritales o de relación interpersonal. 2.5. Estilo de vida.
B. Condiciones y requisitos para llevar a cabo una terapia 3. Dificultades o problemas sexuales:
sexual: 3.1. Descripción del problema.
• Nivel de motivación de los sujetos hacia el cambio. 3.2. Aparición y curso del problema.
• Grado de cooperación y compromiso esperado durante la 3.3. Autoexplicación sobre el origen y mantenimiento del
posible terapia por parte del sujeto o de los sujetos. problema. 3.4. Intentos de solución del problema.
• Posibles estilos de vida inadecuados. 4. Expectativas y metas en relación con los resultados de la terapia.
• Adecuación y grado de relación establecido durante la 5. Motivación hacia el cambio o la terapia.
entrevista entre el terapeuta y los clientes.

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 13

Hawton (1985), aconseja que la primera entrevista se realice con cada 9. Uso de drogas y alcohol.
miembro de la pareja por separado, tanto en el caso de que haya dos 10. Apariencia externa y estado de ánimo.
coterapeutas, como en el caso de que haya un sólo terapeuta, dado 11. Examen físico (si procede).
que esto les permite a cada uno de ellos ser más directo y les da la
misma oportunidad para expresar su punto de vista sobre el problema. Como puede verse la variedad de modelos de entrevista inicial es gran-
Después de que las dos personas han sido entrevistadas de, si bien las coincidencias son asimismo importantes. No obstante,
separadamente, se debe efectuar una entre-vista conjunta que permite sea cual sea el tipo de entrevista desarrollado, el resultado final de las
al terapeuta evaluar cómo se relaciona la pareja, especialmente si se entrevistas ha de ser haber obtenido una información adecuada sobre
apoyan el uno en el otro, si comparten la responsabilidad, etc. Este los siguientes aspectos (Labrador, 1993):
autor subraya también la necesidad de determinar en primer lugar si la
persona o personas que acuden a consulta presentan en realidad una 1. Disfunción o disfunciones sexuales específicas.
disfunción sexual o si su problema es más bien consecuencia de falta
de información o de un trastorno de tipo psicológico más general. Las 2. Identificación de las causas que facilitaron esa disfunción, si es
áreas que según este autor deben abordarse en la entrevista aparecen posible.
indicadas en la tabla 8-12.
3. Identificación de los factores que en la actualidad mantienen la
Tabla 8-12
disfunción.
Áreas que deben de abordarse durante la entrevista de evaluación
(llawton, 1989, pág. 378) 4. Descartar la presencia de factores orgánicos que requieran
una intervención médica
1. El problema sexual: su naturaleza y desarrollo, y los cambios
5. (o en caso contrario señalar la necesidad de esta
desea-dos en la relación sexual
intervención específica).
2. El ambiente familiar y la infancia: incluye relaciones con los
padres, relaciones parentales, actitudes de los padres hacia 6. Descartar la necesidad de información adecuada o en caso
la sexualidad... contrario establecer la forma de llevarla a cabo.
3. Desarrollo sexual y experiencias: incluye actitudes hacia la
pubertad, el comienzo del interés sexual, primeras 7. Descartar la existencia de problemas de relaciones de
experiencias sexuales, otras experiencias sexuales, pareja que pueclan facilitar la aparición de la disfunción, o en
masturbación, experiencias sexuales traumáticas (abuso caso contrario señalar la necesidad de tratar este problema
sexual), homosexualidad. de relación.
4. Información sexual: alcance del conocimiento que la persona
tiene sobre la anatomía, las respuestas sexuales, etc. 8. Descartar la presencia de otros problemas psicológicos que
5. Relación con la pareja: incluye su desarrollo, ajuste sexual puedan estar subyaciendo y facilitando la aparición ele la
previo, relación general, niños, métodos anticonceptivos disfunción (obsesiones, miedos...).
utilizados, infidelidad, sentimientos de atracción hacia la
pareja. 9. Establecer la relevancia de la terapia sexual y si se ha de
6. Educación, ocupación, intereses, creencias religiosas. llevar a cabo de manera individual inicialmente o en pareja
7. Historia médica (se debe incluir cualquier medicación que desde el primer momento.
esté tomando actualmente).
8. Historia psiquiátrica.

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 14

Es importante tener en cuenta que muchos pacientes se sienten que permite precisar el grado en que se ha modificado el problema
violen-tos durante la entrevista inicial. El terapeuta debe estar alerta a lo largo de la intervención.
a ésto y debe explicar al cliente que comprende lo íntimo del tema,
al tiempo que enfatiza la necesidad de obtener una información clara El número de cuestionarios e inventarios desarrollados es
y precisa para comprender el problema. Una de las razones que con realmente importante, si bien muy pocos de ellos han sido
frecuencia generan el embarazo por parte de los pacientes es que traducidos y adaptados a nuestro país. Entre los diferentes
éstos consideran que carecen de un vocabulario apropiado para autoinformes existentes se debe distinguir entre aquellos que
discutir los problemas sexuales con un profesional. Por ello, es evalúan la respuesta sexual en sí misma (por ej.: tipo de actividad
preciso que el terapeuta trate de usar una terminología sencilla, no sexual, excitación, deseo, aparición de orgasmos...), y aquellos
excesivamente científica y cercana al cliente. otros que se centran en una serie de variables o factores que
inciden más o menos directamente sobre la aparición, desarrollo y
Los autoinformes mantenimiento de la disfunción sexual (por ejemplo, creencias y
expectativas respecto a las relaciones sexuales, ansiedad,
Cada vez va siendo más frecuente el uso de medidas de problemas de relación en la pareja, etc.). En la tabla 8-13 se
presenta un listado de los autoinformes más significativos
autoinforme (cuestionarios, inventarios y escalas) como
procedimientos de apoyo duran-te la evaluación de las disfunciones agrupados en función de las áreas que evalúan. A continuación, se
comen-tan a nodo de ejemplo algunos de los más frecuentemente
sexuales, si bien su utilización no va mucho más allá de este
simple apoyo a la evaluación. utilizados:

The Derogatis Sexual Functioning Invenlory (DSFI, Derogatis, 1978):


Los autoinformes proporcionan una información rápida y
estructurada que permite completar la recogida mediante la Este cuestionario consta de 258 ítems que exploran el
entrevista. Pueden servir para identificar bien déficits en el arousal, funcionamiento y la conducta sexual del sujeto. Las preguntas se
agrupan bajo 8 epígrafes: información sexual, experiencia sexual,
bien la presencia de determina-das conductas, actitudes o
informaciones, bien trastornos subyacentes que puedan afectar a la motivación, actitudes, rol sexual, fantasías, imagen corporal y
respuesta sexual, bien otras informaciones relacionadas con las satisfacción. Al final se obtiene un índice global de funcionamiento,
el Índice de Funcionamiento Sexual. Este cuestionario es largo, y
disfunciones. No obstante, sus limitaciones son importantes, dado
que no proveen de descripciones específicas de los síntomas, no lleva 30 a 40 minutos completarlo. Incluye también dos escalas de
suelen clarificar la etiología de los problemas, y además, dada la síntomas afectivos y psicológicos, que no están directamente
importancia de los factores de deseabilidad social en este ámbito, relacionados con la sexualidad y cubren áreas para las que
suelen darse problemas en la fiabilidad de los datos (o simplemente probablemente existen mejores medidas.
falsificación voluntaria de éstos).
The Sexual Interaction Invenlory (SII, LoPiccolo and Steger, 1974): La
Por otra lado, la mayor parte de ellos carecen del necesario apoyo característica más notable de este cuestionario es que ha sido
psicométrico, y tampoco suelen contar con una adecuada diseñado para parejas y evalúa tanto la frecuencia real como la
frecuencia ideal de conductas sexuales específicas. Cada miembro
validación empírica. Estas razones hacen que, aunque pueden ser
instrumentos útiles, sea necesario considerar con una cierta de la pareja contesta 6 preguntas relativas a 17 conductas sexuales.
cautela los datos obtenidos. Quizá por ello su utilización más Las preguntas se refieren a la frecuencia real e ideal de esa
frecuente se centre en conseguir información complementaria a la conducta, y al grado de placer que proporciona dicha conducta tanto
obtenida mediante la entrevista. En algunos casos, su posibilidad de en uno mismo como en la pareja. Su administración lleva
cuantificación les permite convertirse en una escala ele referencia aproximadamente de 30 a 40 minutos.

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 15

The Sexual Arousability Invento/y (SAI, Hoon, Hoon y Wincze 1976): Existe una versión para hombres y otras para mujeres. El tiempo de
Ha sido diseñado para medir la excitación de las mujeres ante administración es de 20 a 30 minutos
determinadas situaciones y actividades. Consta de un listado de 28
situaciones que tiene que ser evaluadas en una escala de 7 puntos Examen físico o médico
de acuerdo con el nivel de excitación que producen. Es relativamente
corto y fácil de administrar. Según sus autores, el cuestionario
Su utilización está indicada en aquellos casos en los que se sospecha
permite discriminar entre mujeres norma-les y mujeres que necesitan que alguna anomalía orgánica está en la base de la disfunción
terapia sexual (Hoon, Hoon y Wincze, 1976). Recientemente se ha presentada por el paciente, y tiene como objetivo determinar la
publicado una versión ampliada (SAI-E) en la que se explora además
contribución de los factores orgánicos a la aparición del trastorno. En
la ansiedad relacionada con la actividad sexual (Chambless y Lifshitz, general es aconsejable que estas pruebas sean efectuadas por un
1984; Hoon y Chambless, 1988). médico o especialista al que será remitido el paciente con objeto de
descartar posibles problemas orgánicos.
The Golombok-Rust lavento/y of Sexual Satisfaction (GR(SS;
Golombok and Rus", 1985): Este inventario consta de dos formas Aunque en todos los casos conviene estar atentos a la posible
separadas, una para hombres y otra para mujeres. Cada forma tiene
existencia de problemas físicos en las personas que acuden a consulta
28 preguntas dirigidas a evaluar la presencia o no de disfunciones por disfunciones sexuales, Carnath y Miller (1986) señalan que este
sexuales, las preguntas son del tipo «i,Tiene usted orgasmos tan a
tipo de evaluación está especialmente indicada en aquellos casos en
menudo como desearía?». Cada pregunta tiene cinco posibles los que aparece alguna ele las siguientes características: 1) Síntomas
contestaciones que van desde «siempre» a «nunca». Es una escala físicos persistentes distintos de los asociados a la disfunción (e.j.: mala
breve que se completa en 5-10 minutos.
salud reciente, enfermedades venéreas...). 2) Dolor o incomodidad
persistente durante la actividad sexual (e.j. dispareunia y vaginismo).
La prueba ha sido administrada a grupos de parejas con y sin 3) Disminución del interés sexual sin causa aparente (e.j.: trastornos
disfunciones sexuales, y un análisis factorial ha permitido identificar
del deseo sexual). 4) Ausencia de erección en cualquier circunstancia
subescalas para la anorgasmia, el vaginismo, la impotencia y la (e.j.: trastorno de la erección en el hombre). 5) Hombres de más de 50
eyaculación precoz, además de escalas ale evitación e insatisfacción. años. 6) Mujeres en la menopausia o próximas a ella. 7) Problemas
Los autores señalan que el inventario es adecuado tanto corno
menstruales persistentes. 8) Historia de problemas en la pubertad, y
medida previa al tratamiento, como medida para evaluar el cambio otros desórdenes endocrinos. 9) Ansiedad persistente ante la propia
terapéutico. imagen. 10) Convencimiento de que existe una base física para los
problemas.
The Sexual Experience Scales (SES) (Frenken y Vennix, 198/): Este
cuestionario consta de 4 subescalas:
Tabla 8-13
1) SES 1 (Moralidad sexual): evalúa actitudes, normas y valores
relacionados con la conducta sexual. 2) SES2 (Estimulación Cuestionarios para la evaluación de diferentes aspectos
psicosexual): alude al grado en que uno rechaza o acepta la relacionados con las disfunciones sexuales
estimulación sexual ya sea auditiva, visual o imaginaria. 3) SES3
(Motivación sexual): se refiere a la interacción sexual con una pareja Información sexual:
normal: grado de respuesta sexual, grado de placer y frecuencia. 4) — Inventario de Conocimientos Sexuales (McHugh, 1967).
SES4 (atracción hacia la pareja): se refiere a las razones por las que — Cuestionario de Información Sexual (Carrobles, 1985).
una persona mantiene o no relación con su pareja. — Cuestionario de Evaluación de Mitos Sexuales (McCary, 1977).

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 16

Actitudes respecto al sexo: d) Evaluación neurológica, especialmente ele los reflejos


— Inventario de Miedos Sexuales (Escalas para hombres y espinales pertenecientes al área pélvica y genital.
mujeres) (Annon, 1975a y 1975b).
— Inventario de Placer Sexual (Escalas para hombres y e) Evaluación ele la respuesta hormonal, mediante análisis de
mujeres) (Annon, 1975c y 1975d). sangre, en los que se determinan los niveles de testosterona,
— Inventario de Actitudes respecto al Sexo (Eysenck, 1970). hormona luteinizante (LII), hormona folículo estimulante
— Escala de Opiniones Sexuales (Fisher y cols, 1988). (FSI1), prolactina, hormona estimulante del tiroides (TSII) y
Conducta sexual: tiroxina.
— Perfil de Respuesta Sexual (Pion (1975).
— Inventario de Interacción Sexual (LoPiccolo y Steger, 1974). f) En hombres, especialmente en casos ele impotencia, debe
— Inventario de Ajuste Sexual (Stuart, Stuart, Maurice y Szasz, efectuarse un examen del sistema y respuesta vascular en la
1975). zona genital. Las técnicas utilizadas para efectuar este
— Inventario de Arousal Sexual (Hoon, Hoon y Wincze, 1976). examen han sido muy diversas e incluyen: análisis de la
— Inventario de Funcionamiento Sexual (Derogatis, 1978). presión sanguínea en el pene, técnicas radiogrílicas,
— Escala de Experiencia Sexual (Frenken y Vewiz, 1981). exámenes angiográficos del pene y las arterias pélvicas, ca-
— Inventario de Satisfacción Sexual (Golombok y Rust, 1985). vernosografia, pletismografia genital, y análisis de
temperatura en el pene.
Relaciones de pareja:
— Escala de Ajuste Marital (Locke y Wallace, 1959).
g) g) En mujeres, especialmente en casos de vaginismo,
— Cuestionario de Intercambio de Conductas en la Pareja (Serrat,
dispareunia y anorgasmia, ha de efectuarse un examen del
1980).
introito vaginal. Asimismo, pueden llevarse a cabo diversos
— Inventario de Satisfacción Matrimonial (Snyder, 1981).
análisis de la respuesta vascular genital, en concreto,
Escala de Ajuste Diádico (Spanier, 1976).
fotopletism ografia vaginal y análisis de temperatura en los
Las pruebas medicas o el examen físico efectuado implica diferentes labios menores y la vagina.
evaluaciones que incluyen:
Evaluación psicofisiológica
a) Búsqueda ele signos generales de enfermedad (e.j.:
trastornos cardiovasculares, problemas hormonales...), que A diferencia del examen físico que se centra de manera exclusiva
pudieran afectar a la respuesta sexual. en aspectos anatómicos y fisiológicos, la evaluación
psicofisiológica permite establecer relaciones entre variables
b) Examen físico ele los órganos genitales (e.j.: tamaño, psicológicas y respuestas fisiológicas.
simetría, textura y sensibilidad de los testículos; posibles
anomalías...). En algunos casos, las técnicas utilizadas son las mismas (e.j.:
evaluación de diversos parámetros del sistema nervioso
c) Evaluación del funcionamiento del Sistema Nervioso autónomo), pero aquí el objetivo es constatar la relación entre las
Autónomo (e.j.: cambios en la tasa cardíaca, niveles ele respuestas fisiológicas evaluadas y los componentes psicológicos
tensión muscular), ya que diversos componentes de la o comportamentales (e.j.: estímulos o situaciones que producen la
respuesta sexual (e.j.: erección, eyaculación, lubricación erección, pensamientos que interfieren en la excitación...).
vaginal...) se encuentran bajo control simpáti-
co/parasimpático. Entre los componentes fisiológicos susceptibles de ser registrados en
este área, se encuentran aquellos que reflejan la actividad general

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 17

del sistema nervioso central (e.j.: registros desplazado hacia el exterior, pudiéndose establecer mediante
electroencefalográficos), del sistema nervio-so autónomo (e.j.: tasa transductores el cambio de volumen del pene en función de la
cardíaca, presión y (lujo sanguíneos, respuestas clei- cantidad de aire desplazada; y 2) los circunferenciales, de anilla o
nxreléctricas...), o del sistema nervioso somático (e.j.: respuesta galgas que miden cambios en el diámetro del pene. Estas anillas
electromiográfica, respiración). No obstante, hay que tener en pueden construirse con arcos de metal unidos por galgas
cuenta que todos estos índices se encuentran notablemente extensiométricas, o con tubos de silicona rellenos de mercurio,
influidos por otros componentes (e.j.: estrés, condiciones grafito (Jovanovic, 1971) o indio/galio.
ambientales,...) no implicados directamente en la conducta sexual,
y que han de ser tenidos en cuenta en la interpretación de los Aunque las técnicas volumétricas son más sensibles, al permitir
registros. Quizá el principal valor de estos índices estribe, identificar tanto cambios en longitud como en diámetro, dado que
precisamente, en posibilitar la evaluación de una serie de utilizan apara-tos más voluminosos, obstructivos e incómodos, que
componentes que actúan como factor de predisposición y/o pueden producir estimulación del pene y que son más reactivos a
facilitación en la aparición de disfunciones sexuales (e.j.: estrés o movimientos y artefactos (Cáceres, 1990), se tiende, cada vez más,
ansiedad, miedos hacia algún aspecto de las relaciones a usar pletismógrafos circunferendales, de anilla o galga, (Labrador,
sexuales...). 1984). No obstante éstas presentan un pequeño problema en los
momentos iniciales de excitación sexual del hombre, pues aunque
Alternativamente, pueden evaluarse componentes endocrinos o aumenta el volumen del pene debido a un incremento en longitud,
bioquímicos (en sangre u orina) asociados a la reactividad sexual. se produce una reducción en el diámetro de éste. Hay que estar
atento para no interpretar esta reducción inicial como falta de
Sin embargo, las técnicas más utilizadas son aquellas que suponen excitación cuando se usa un pletismógrafo circunferencial (anilla o
una evaluación directa ele los cambios genitales, por lo que serán galga).
éstos los considerados de forma más detenida (para una revisión
más completa de estos aspectos el lector puede consultar la obra Métodos de registro en mujeres
de Cáceres, 1990).
Para la evaluación de la respuesta genital femenina existe una
Métodos de registro en hombres mayor diversidad de métodos, siendo los principales los siguientes:

Los métodos de registro utilizados en el estudio de las respuestas a) Medición del tono muscular vaginal o de los músculos
masculinas se centran, fundamentalmente, en la respuesta ele pubocoxígeos por medio de procedimientos para identificar la
erección, informando sobre los cambios producidos en el tamaño, presión, consistentes en una sonda o globo lleno de aire o
longitud y diámetro del pene del sujeto (e.j.: pletismografia del agua que ubicado en el tercio anterior de la vagina determina
pene) en función de las (Hiélenle ,. situaciones, físicas o la contracción de dicha zona (Kegel, 1952). No obstante, se
imaginarias, a las que se ve sometido. Hay dos tipos principales de discute a qué corresponden los cambios así medidos, en
pletismógrafos: 1) los volumétricos que miden cambios en longitud concreto si los incrementos en el tono muscular de los
y diámetro del pene (e.j.: en su volumen total). Estos métodos pubocoxígeos conlleva un mayor nivel de excitación y/o una
suponen la colocación alrededor del pene ele una especie de mayor frecuencia orgásmica (Cáceres, 1990).
«bolsa» efe un material elástico, que es inflada con aire cuando el
pene se encuentra en reposo. Esta «bolsa», a su vez, se encuentr a b) Medidas de vasocongestión vaginal o de afluencia de
rodeada de una cápsula o cilindro ele material rígido (e.j.: vidrio). Al sangre a la vagina, tomadas mediante fotopletismógrafos
aumentar el tamaño del pene, parte del aire ele la «bolsa» es vaginales que varían la cantidad de luz reflejada en función de

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 18

la cantidad de sangre acumulada en las paredes vaginales libres o estructuradas (Cáceres, 1990). El contenido concreto de los
(e.j.: Geer, 1975), o mediante termistores, ubicados bien en la estímulos presentados dependerá del problema a evaluar y de las
vagina o más frecuentemente en los labios menores, que preferencias personales de cada sujeto. En casos de problemas de
identifican los cambios en temperatura que se producen en erección masculina, se ha mostrado de especial utilidad la
función del mayor o menor riego sanguíneo (e.j. Shapiro, evaluación de la tumescencia nocturna del pene durante las fases
Cohen, Dibiancó y Rosen, 1968). Éste es el tipo de medida de sueño REM o sueño paradójico, como procedimiento para
fisiológica más utilizado en la actualidad, si bien hay diferenciar impotencias orgánicas y psicógenas (Carrobles y Sanz,
discrepancia respecto a si es mejor el uso de fotopletismógrafo 1991).
o de los termistores. Ambos parece válidos para la detección
de los cambios en la fase de excitación, en cuanto que la Antes de comenzar el registro de las respuestas ante los estímulos
correlación entre sus medidas y los autoinformes de excitación con-viene tomar medidas de línea base, durante períodos no
son elevadas, pero no en la fase de resolución. En igualdad de inferiores a los 10 minutos. Asimismo, ha de tenerse en
condiciones parece menos invasivo el uso de termistores en los consideración que antes de presentar un nuevo estímulo hay que
labios menores. esperar a que el sujeto deje de reaccionar al estímulo anterior y a
que su nivel de respuesta haya descendido hasta el nivel banal.
c) Cambios volumétricos del clítoris, evaluados a través de Para conseguir un retorno más rápido a los niveles banales,
células foto-eléctricas o de galgas extensiométricas (similares Cáceres (1990) recomienda utilizar tareas distractivas (e.g.: cálculos
a las utilizadas en la evaluación de los cambios aritméticos, pedir al sujeto que narre algún pasaje de su vida...).
circunferenciales del pene). No obstante, estas últimas
presentan notables problemas prácticos (Cáceres, 1990). El registro psicofisiológico puede complementarse con registros
subjetivos en los que el sujeto informa o valora el grado de
excitación, tensión... experimentado durante la presentación de los
d) Medidas de lubricación vaginal, mediante recolección y estímulos.
análisis de los fluidos vaginales, cuya composición varía en
función del momento concreto dentro del ciclo de la respuesta Entre las principales aplicaciones de la evaluación psicofisiológica en
sexual (Levin y Wagner, 1977). el campo de las disfunciones sexuales cabe mencionar la
determinación de la excitación sexual en la mujer y de problemas de
Por último, y copio procedimiento común para hombres y mujeres, erección en hombres (especialmente con objeto de diferenciar
cabe destacar el desarrollo de transductores fotopletismográficos y aquellos de origen orgánico y psicógeno).
de presión insertados en la cavidad anal. Este tipo de
procedimientos presenta ventajas al permitir el registro durante la La observación
actividad coital, y posibilitar el establecimiento de comparaciones
entre hombre y mujer (Cáceres, 1990). La aplicación de la observación directa en disfunciones sexuales es
muy limitada, ya que se produce una alta reactividad en las personas
Procedimiento observadas, con las consiguientes alteraciones de las respuestas, a
lo que se suma la no aceptación de tales procedimientos por la
Los registros de las respuestas psicofisiológicas sexuales pueden mayoría de los sujetos, los problemas éticos derivados de la
efectuarse ante una estimulación externa, presentada por parte del implicación del terapeuta en la actividad sexual del paciente, e
experimentador o terapeuta (visual — e.j.: diapositivas, fotografías, incluso, la posibilidad de explotación o abuso del terapeuta por el
películas o auditiva — e.j.: narraciones—), o mediante fantasías propio paciente (LoPiccolo y llogan, 1978).

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 19

Los antorregistros diarios son útiles no sólo para el establecimiento


Estos problemas pueden paliarse, al menos parcialmente, con la de la línea base de la conducta, sino que además son quizás uno ele
utilización de uno de los miembros de la pareja como observador, los mejores instrumentos para poder seguir paso a paso la evolución
pero esta posibilidad, no está exenta de dificultades, ya que el que de la terapia, tanto por parte del terapeuta como por parte del cliente,
una misma persona sea a la vez partícipe y observador de la al que pueden servir asimismo como importante factor motivacional,
interacción sexual suele conllevar alteraciones bien ele la al poder ir constatando de manera gráfica las mejoras conseguidas
observación, bien de la interacción. durante la intervención.

Alternativamente pueden utilizarse grabaciones (le video: la pareja es


filmada mientras realizan ciertas actividades sexuales, para que
posterior-mente el terapeuta observe y analice la grabación. Este Tabla 8-14
procedimiento presenta también problemas de reactividad, que Modelo de anlorregislro diario (le la actividad sexual
podrían subsanarse con la utilización de períodos suficientemente (Labrador, 19931
largos de adaptación, no aplicables en la clínica. No obstante, los
problemas éticos antes mencionados cobran especial relevancia en AUTORREGISIRO DIARIO
este procedimiento. NOMBRE:_________________________
FICHA:_______________________
PROBLEMA (S): ___________________
Algunos especialistas e.j.: Lobitz y Lobitz, 1978) utilizan el role-pla-
ying para observar la interacción física de la pareja al tiempo que
realizan alguna conducta sentisexual (e.j.: acariciarse mutuamente
manos y brazos). La utilización de estos ejercicios posee una doble Situación Conductas Sensaciones Dificultad Excitación Placer
finalidad en la terapia. Por un lado, permite identificar si los pacientes desarrolladas experimentadas del 1-10 del 1-10
han entendido las instrucciones de los procedimientos terapéuticos
aplicados. Por otro, permite la evaluación ele una serie de conductas
y/o problemas como inhibiciones, habilidades sociales, pautas de
interacción y comunicación, expresión de sentimientos... que podrían
estar implicados, de manera más o menos di-recta, en la génesis y
mantenimiento de la disfunción sexual presentada por el paciente.

Los autorregistros
Conviene recordar la necesidad de que el terapeuta defina y delimite
Los antorregistros constituyen un instrumento muy útil de cara a deli- de la forma más precisa posible las conductas a registrar, así corno el
mitar con precisión la frecuencia con que se clan determinadas modo y el momento de hacerlo. Es importante tener en cuenta que los
conductas sexuales así como los sucesos externos e internos que autorregistros exigen niveles altos de motivación y cooperación por
anteceden, acompañan y siguen a las mismas. Subsanan en cierto parte del sujeto, por lo que se recomienda no proponerle al cliente
modo los problemas éticos y de reactividad derivados de la registros excesivamente complicados, siendo necesario buscar un
utilización de la observación directa y sirven para dar cuenta de equilibrio entre cantidad de información y nivel de dificultad. En la
conductas privadas (por ejemplo: sensaciones, pensamientos...) a Tabla 8-14 se presenta un ejemplo ele autorregistro.
las que resulta difícil acceder de otro modo.

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS


MÓDULO 0711-LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS 20

Formulación del problema En primer lugar, se aconseja que la exposición de la formulación al


cliente sea breve y precisa, de forma que el cliente o la pareja
Tras la recogida de la información mediante los procedimientos entiendan con claridad los contenidos.
señalados, se hace necesario la organización de ésta cara a la
formulación del problema (establecimiento de hipótesis de trabajo) Respecto al contenido, éste debe centrarse en dos tópicos básicos:
y diseño del programa de intervención. En líneas generales se
seguirán las directrices para el desarrollo de una evaluación • Descripción del problema o problemas. Debe implicar una
conductual (Ballesteros y Carrobles, 1987; Flaynes y O'Brien, 1990) breve descripción del estado actual del problema y una
por lo que a continuación se señalarán algunas características de la consideración de cuál ha sido su evolución.
adaptación de ésta a las disfunciones sexuales.
• Identificación y análisis de los factores que han colaborado
Hawton (1985) señala 4 objetivos básicos en la formulación del al desarrollo y estado actual de la disfunción. Dado que no
problema: todos los facto-res tienen el mismo peso se puede mantener
la distinción entre factores precipitantes y factores
Facilitar a la pareja un mejor entendimiento de sus dificultades: mantenedores. Es importante establecer con precisión
explicación simple del problema y de los factores que cuáles de estos factores han sido claramente identificados y
contribuyen a su presencia y mantenimiento. Facilitar la en consecuencia pueden considerarse como factores
motivación. establecidos y cuáles deben ser considerados meramente
como factores hipotéticos por no haber sido aún
Inducir sensación de optimismo respecto a los resultados de la identificados con precisión.
terapia: explicar sobre todo qué se puede y cómo se puede
hacer. En tercer lugar, el terapeuta debe insistir en la importancia de la
contribución de ambos miembros de la pareja al desarrollo del
Proporcionar una base racional para el abordaje terapéutico (por problema y a la solución de éste. Una disfunción sexual en la mayor
ejemplo, el efecto de la ansiedad y la importancia de no parte de los casos es un problema compartido que requiere
realizar el coito en un cierto tiempo). Organizar la secuencia asimismo soluciones compartidas. Conviene lograr un compromiso
de intervención. de ambos miembros (si es tratamiento en pareja) para la
participación en el programa de intervención.
Permitir al terapeuta comprobar que la información obtenida en la
evaluación se ha interpretado correctamente. Animar a Es importante también, dedicar un tiempo a señalar los aspectos
participar más activamente a la pareja. negativos y positivos de la relación afectiva, insistiendo en la
importancia de éstos para la evolución de la disfunción.
Una vez que el terapeuta tiene una hipótesis explicativa de por qué
se produce el problema y de cómo intervenir deberá exponérselo al Finalmente, el terapeuta expondrá las ideas directrices y líneas
cliente o clientes (pareja) con el fin de obtener su cooperación a la genera-les del programa de intervención a fin de comentarlas y
hora de diseñar y realizar la intervención. Es necesario que el discutidas con el cliente o la pareja. Tras esta discusión y
terapeuta tenga en cuenta algunas consideraciones prácticas sobre aclaraciones pertinentes, se pasará a especificar de forma precisa
cómo formular el problema al cliente. los procedimientos de intervención y las conductas concretas que
han de llevarse a cabo.

UNIDAD I. LA EVALUACIÓN CONDUCTUAL EN DIFERENTES ÁMBITOS

También podría gustarte