ESTUDIO DE CASO

La señora Sandra es un ama de casa de 70 años con dos hijos mayores.

La señora Sandra siempre ha sido una persona organizada, así que cuando comenzó a
perder incluso las cosas más corrientemente utilizadas, su marido se empezó a preocupar.
La llevó al médico de cabecera, quien la remitió al psiquiatra para hacerle un chequeo.
Según su marido, los problemas de memoria de su esposa, habían empezado hace dos
años, cuando se quejaba de no recordar nombres. Su marido notó que algunas veces no
podía recordar cosas que habían pasado el día anterior. Se volvió cada vez más olvidadiza,
tenía problemas para hacer las cuentas con el dinero cada vez que iba a comprar y a
menudo volvía a casa sin las cosas que necesitaba. La señora Sandra estaba orgullosa de
como cocinaba, pero ahora, estaba echando a perder la comida. Cuando preparaba la
comida, le ponía demasiada sal o nada en absoluto. Olvidaba apagar el horno o dejaba el
grifo abierto. En los 12 meses anteriores a la visita, era incapaz de llevar las cosas de la
casa sola sin la ayuda de su marido.

Antecedentes: La señora Sandra vivía con su marido, maestro jubilado a los 72 años. Ella
también era profesora, pero dejó de ejercer su profesión cuando nació su primer hijo. Su
marido la describe como una persona jovial y sociable. En su matrimonio o con sus hijos no
tenía problemas de consideración. Sin embargo, en los últimos 6 meses se había tornado
apática, recelosa e irritable.

Hallazgos en la exploración: En la exploración la señora Sandra se mostró poco centrada.

Estaba alerta, pero ansiosa y recelosa. Sufría desorientación temporal y espacial. Podía
recordar el nombre de sus hijos pero no sus edades y fechas de nacimiento. Tampoco
recordaba su propia edad. No recordaba el nombre del presidente de Colombia. Articulaba
bien las palabras, pero su forma de hablar era lenta, errática y llena de circunloquios. Tenía
dificultad a la hora de encontrar las palabras adecuadas para expresarse. No era capaz de
recordar tres objetos después de un intervalo de 5 minutos. Su capacidad para realizar
cálculos sencillos era escasa y no podía contar hacia atrás. Entendía las frases de manera
literal y no podía detectar errores lógicos en una historia contada.
Los exámenes somáticos y neurológicos no mostraron ninguna anormalidad. La tensión
sanguínea era la normal para su edad. Todos los análisis clínicos eran normales, pero el
estudio por tomografía computarizada mostró una marcada atrofia cortical.

Dx: ___________________________________________________