Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
DUALIDAD DE SENTIMIENTOS
161
CUANDO ME ENCUENTRO CON EL CAPITÁN GARFIO... (NO) ME ENGANCHO
Percepción
Está claro que la percepción es una de las funciones psicológicas
primarias. En el caso del «darse cuenta» gestáltico esto lleva apareja-
do no sólo una percepción de la realidad por parte del aparato sen-
sorial, sino que este gran deseo de formar, se vuelve hacia el propio
individuo para organizar y dar forma al mundo emocional y de las
propias vivencias, que se estructura según las leyes de la forma.
Un gran número de investigadores ha mostrado que nunca
vemos la realidad tal cual es, sino que aquello que «vemos» es el
resultado de la combinación de una realidad más la información,
la expectativa, las necesidades, las esperanzas y los deseos del per-
ceptor.
Imágenes
El proceso más íntimamente relacionado con la percepción es,
por supuesto, la imagen. Se puede definir la imagen como una per-
cepción que sobreviene en ausencia de un estímulo externo real.
Aunque ese estímulo externo puede haberse presentado en el pasa-
do, no está presente cuando sobreviene la imagen.
162
DUALIDAD DE SENTIMIENTOS
Simbolización
Uno de los procesos psicológicos más importantes y relevantes
para el proceso creativo es la simbolización. Simbolizar es estar capa-
citado para vivenciar la existencia de nexos entre objetos que, por
otra parte, se reconocen como separados y distintos.
De esta forma el proceso creativo de «darse cuenta» funciona
según estos procesos psicológicos formalizando, viviendo imágenes,
simbolizando vivencias y sintiendo, finalmente la coherencia o inco-
herencia de las emociones y sentimientos.
163
CUANDO ME ENCUENTRO CON EL CAPITÁN GARFIO... (NO) ME ENGANCHO
164
DUALIDAD DE SENTIMIENTOS
165
CUANDO ME ENCUENTRO CON EL CAPITÁN GARFIO... (NO) ME ENGANCHO
166
DUALIDAD DE SENTIMIENTOS
167
CUANDO ME ENCUENTRO CON EL CAPITÁN GARFIO... (NO) ME ENGANCHO
3. Cartas
Carta primera
Mujer, de treinta y cinco años, ama de casa, casada con dos hijos
varones.
Mamá: Evita cualquier expresión afectiva
Estas cosas son tan desagradables (como querida o cualquier otra palabra
para mí, me gustaría discutirlas con- con contenido emocional).
tigo, pero como eres tan poco razo- Empieza con un párrafo de sumisión
nable, me conformaré con escribirlas («me gustaría...», «me conformaré...») y
en un papel. justificación («... como eres tan poco razo-
nable»).
168
DUALIDAD DE SENTIMIENTOS
169
CUANDO ME ENCUENTRO CON EL CAPITÁN GARFIO... (NO) ME ENGANCHO
170
DUALIDAD DE SENTIMIENTOS
pueda expresar mis sentimientos, sin Con esta carta removió los sentimientos
que me diga que estoy loca, que pue- contradictorios hacia la madre pero como
da llorar mis problemas y decirme: se puede ver no se despide (como es lo
«no te preocupes, hija, que aquí usual en una carta). Esto es debido a que
estoy yo», ésa es la madre que me una despedida agresiva no es despedida, y
hubiera gustado tener, pero en ti no ella tiene aún el suficiente resentimiento
la puedo tener porque me aborreces. como para aplazar la despedida, y una
despedida cariñosa y emotiva le supondría
dejar de esperar el cariño materno y darse
cuenta de que ella quiere a la madre, más
de lo que está dispuesta a aceptar; también
supondría acabar con el rencor y hacerse
responsable de sus sentimientos. Y final-
mente sería una expresión directa de sus
deseos, cosa que no «sabe» hacer.
Carta segunda
Mujer de veinticinco años, consulta por un problema de anorgas-
mia vaginal.
Papá: Evita la afectividad de un encabeza-
Muchas, muchas veces, demasiadas, miento emocional
he pensado enfrentarme contigo y ti-
rarte a la cara todo lo que me has
hecho y me haces sufrir, tirártelo con
violencia y con rabia, y ahora creo
que ha llegado el momento de deci-
dirme, pero con una diferencia: esta
vez será sin violencia y sin rabia,
pero será de verdad.
El simple hecho de que se me salten Doble mensaje en donde traslada su
las lágrimas al pensar todo lo que decisión y su responsabilidad, aunque
tengo que decirte demuestra lo muy como imposición y no personalizada (...
metido que estás en mi vida y el «el tener que echarte de ella» por «quie-
dolor que me produce el tener que ro echarte de mi vida») a «tienes que
echarte de ella. Tienes que salir de mí salir de mí para que yo pueda vivir». La
para que yo pueda vivir, para que decisión se la ha pasado al padre.
pueda pensar y decidir, para dejar de
ser una niña siempre debajo de tu ala
171
CUANDO ME ENCUENTRO CON EL CAPITÁN GARFIO... (NO) ME ENGANCHO
protectora. ¿De qué me has protegi- Después vienen los reproches («¿De
do tú? ¿Debo de estar agradeciéndo- qué me has protegido tú?»), y su necesi-
te siempre tu preferencia por mí y el dad camuflada de reproche (¿Debo de
oírte decir que yo era la más inteli- estar agradeciéndote...?). ¿Quién la obli-
gente de tus hijos? ga? Indudablemente es su propio deseo
(«Voy a agradecerte siempre...»). Tam-
bién esta frase puede ocultar su mecanis-
mo proyectivo. (Debes de agradecerme
¿Debo agradecerte quizá el haber siempre mi preferencia por ti), puesto
tenido siempre cosas que otros no que ella adora al padre pero le guarda
tenían, cuando jamás te has tirado en rencor por no encontrar correspondencia
la alfombra para jugar conmigo? (supuestamente).
¿Sabes acaso que te tengo miedo, Expresa la polaridad de sus sentimien-
que no encuentro nada en esta vida tos hacia el padre.
interesante que hacer y que me sien-
to insegura y estúpida en todo y cada
uno de mis actos, que no quiero verte
y quiero que me abraces fuerte, muy
fuerte?
Mi obsesión hacia ti se traduce, al Racionalización para no darse cuenta
parecer físicamente, en mi falta de («... al parecer...»).
orgasmos. ¿Sabes tú lo que es un
orgasmo? Yo he sentido uno en mi
vida y quiero seguir sintiéndolos y
me siento defraudada y engañada
por no poder tenerlos. Pero desgra-
ciadamente esto no es lo más doloro-
so. Hay mujeres que se mueren sin Reacción histriónica, desproporcionada
haber sentido jamás un orgasmo. Lo con la realidad. Demanda y exigencia.
más doloroso eres tú, tú, todo el día
metido en mi mente, todo el día pen-
sando: «¿qué diría, qué haría, qué
sentiría?»
Yo no quiero necesitarte y te necesi- Durante toda la carta se manifiesta un
to. Esto es lo más doloroso de todo el deseo de «si me hicieras el caso que yo
asunto. quiero... », «como no lo siento me las vas
a pagar».
172
DUALIDAD DE SENTIMIENTOS
173
CUANDO ME ENCUENTRO CON EL CAPITÁN GARFIO... (NO) ME ENGANCHO
Carta tercera
Mujer de veintiún años, soltera, consulta por problemas de
comunicación con los varones.
Padres: Durante la lectura de toda la carta
Os rechazo en primer lugar, y para mantiene una actitud de lógica y desape-
mí lo más importante de todo, porque go, evitando el comprometerse emocio-
no he sentido en muchas ocasiones nalmente.
vuestro amor, porque me habéis valo-
rado en función de un rendimiento
escolar y no en cuanto a mi propia per-
sona, sintiéndoos heridos y defrau- Evita sus sentimientos y su baja auto-
dados si no conseguía ser la mejor, la estima le impide arriesgarse a ser y a
número uno; fomentando así la compe- manifestarse ella misma.
titividad con las compañeras y creando
en mí sentimientos de envidia.
Basa su personalidad en «el rendimien-
Porque de alguna manera no me to escolar» destacándose su «intelectua-
habéis dejado evolucionar, crecer lismo». En sus relaciones con chicos sur-
con autonomía. No habéis respetado, ge su sentimiento hacia los padres de «os
en definitiva, mi yo. sentís heridos y defraudados», y eso la
hace refugiarse en su máscara de profe-
sional e intelectual.
Me exigíais que fuera de una deter-
minada manera (como vosotros que-
ríais) intentando quizá que yo fuera
lo que vosotros no fuisteis, como al-
gunas veces me habéis dicho.
Os rechazo, a ti papá por haber Con un lenguaje bonito, frío y sin
ejercido en la familia una autoridad sentimientos evita expresar abiertamente
basada en la incomunicación, en el todo el resentimiento y toda la rabia que
no razonamiento; y a ti, mamá, por se oculta tras sus frases.
haber secundado esa autoridad aun-
que no de forma tan manifiesta.
Os rechazo por haber creado en la Curiosamente es con el diálogo y la
familia (entre nosotros) un ambiente verbalización como establece las fronte-
de desconfianza, no existiendo el diá- ras de sus emociones, manteniendo un
logo, la comunicación. Porque ade- esquema corporal con demandas incons-
más habéis creado en mí desconfianza cientes pero poco flexible y espontáneo
y miedos hacia las cosas, hacia las per- para evitar los sentimientos.
174
DUALIDAD DE SENTIMIENTOS
Carta cuarta
Varón, treinta y tres años, separado; consulta por impotencia
sexual.
Tu cuerpo desnudo, fuerte, pequeño, Empieza con descripciones subjetivas
pero potente y elástico siempre me ha positivas para luego poderlas utilizar en
atraído sobremanera, casi de forma contra, como reproche de falta de «com-
maníaca, sobre todo tu parte superior: prensión».
el pecho. Tu pecho no exuberante pero
sí bien formado y moldeado me ha
atraído de una forma instintiva e ine-
vitable. Siempre te he querido y gusta-
do por tu físico y también por tu voz
grave y potente. Sin embargo ha sido
precisamente en lo que más me has
cortado, el sexo, y de paso toda expre-
sión de mis sentimientos. Pienso que
esto ha sido un choque totalmente
nefasto para mi personalidad.
Me he encontrado con la represión Engloba de pasada la reiteración de su
por todas partes, en la familia y en el situación ambiental (búsqueda del círcu-
matrimonio. lo sin cerrar). Establece una polaridad,
Tu desenvoltura a nivel de relación proyectando en la mujer todo lo bueno y
social, también me ha atraído la aten- positivo, dejándose él lo negativo.
ción, tienes una capacidad de engan-
char a la gente, inusitada. Tu fresca
conversación choca con mi garganta
siempre tensa, seca y alarmada ante
un posible fallo. Me gusta y me en-
contré a gusto con tu fuerte faceta de
tu personalidad.
Tu capacidad para encarar los pro- No sabe tomar decisiones y busca en la
blemas me hace sentirme seguro. Mi mujer la mamá/él mismo sustituto que le
norma es «dejarla hacer», aunque me dé seguridad y tome las decisiones por él.
175
CUANDO ME ENCUENTRO CON EL CAPITÁN GARFIO... (NO) ME ENGANCHO
Carta quinta
Mujer, veinticinco años, soltera; baja autoestima.
Mamá:
Te guardo rencor porque nunca me Evita expresiones de afecto pasando
has comprendido, puesto que nunca directamente al reproche.
te has interesado en saber qué me
pasaba, en saber por qué hacía una
serie de cosas. Te guardo rencor por-
que en los casi veinticuatro años que
tengo no he sido feliz en casa, ya
que, incluso había momentos que
tenía miedo de ti que deseaba que no
llegaras nunca de trabajar.
Nunca has hablado conmigo nada Hace peticiones larvadas, no directas.
serio, he tenido que autoeducarme,
puesto que tú no has sabido llevar
con acierto las responsabilidades que
implica el tener unos hijos. No has
sido condescendiente con los fallos
que conlleva una autoeducación.
A veces pienso que me has tenido de Niega las posibles caricias (materiales)
escaparate, que me comprabas ropa positivas, buscándoles un sentido nega-
para que te tuvieran envidia tus cu- tivo.
ñadas.
Te guardo rencor porque sólo existe Manifiesta sus celos por el hermano.
M. para ti, porque hablas de él con ese
énfasis, con ese orgullo de madre. Sí,
176
DUALIDAD DE SENTIMIENTOS
Carta sexta
Mujer, veinticinco años, soltera; consulta por baja autoestima.
Querido papá:
(No sé por qué pero me suena rarí- Evita la emoción de decir «papá» y
simo lo de mamá y papá.) «mamá».
Quería decirte que te hecho mucho «Si...» neurótico, no acepta la realidad
de menos, que muchas veces pienso de la muerte del padre.
si no hubieras muerto, todo en casa
sería distinto, que los problemas que
tengo o que tiene M. no existirían,
puesto que mamá, probablemente,
no hubiera hecho a M. a tu imagen y
semejanza, ni a mí espejo de sus frus-
taciones. Además, yo sé que me pre- Se siente querida por el padre pero por
ferías, M. era demasiado llorón, yo comparación y exclusión del hermano,
no, yo era más fuerte. no de una forma genuina.
Tú me defendías delante de ella, pero La cuesta actualmente manifestar sus
sobre todo, me escuchabas, sabías que sentimientos y busca en la pareja, un
yo soy tierna y cariñosa, no sin senti- padre que le demuestre que le quiere ya
mientos como ella cree. Ella dice que que es el «único que la puede querer».
nadie me puede querer, pero tú y yo
177
CUANDO ME ENCUENTRO CON EL CAPITÁN GARFIO... (NO) ME ENGANCHO
178
DUALIDAD DE SENTIMIENTOS
4. Trabajando en tí mismo
¿Existe alguna persona en tu vida con la que te sientas «engan-
chado»? Dicho de otra forma, ¿te resulta díficil prescindir en tu vida
de alguien a quien sientes que «necesitas demasiado»?
179
CUANDO ME ENCUENTRO CON EL CAPITÁN GARFIO... (NO) ME ENGANCHO
5. Resumen
• Cuando una persona se engancha o agarra a otra, existe una
polaridad de sentimientos no expresados.
• Esta ambivalencia o polaridad de sentimientos no es algo cons-
ciente por parte del sujeto.
• En la terapia gestáltica resulta primordial que el sujeto tome
conciencia de esta dualidad, de este conflicto; esta toma de
conciencia se denomina, gestálticamente, «darse cuenta»
(«awareness», en inglés).
• Existen diversos métodos, en psicoterapia gestáltica, para po-
tenciar o facilitar este «darse cuenta».
• En este capítulo, sugerimos al lector el método de las cartas
como otra forma de tomar contacto con la polaridad de senti-
mientos.
• Esta aportación se basa en el carácter eminentemente emocio-
nal que supone el escribir una carta.
180
DUALIDAD DE SENTIMIENTOS
6. Bibliografía complementaria
STEVENS, J.: El Darse Cuenta; (Ed. Cuatro Vientos, S. de Chile): Ejerci-
cios y fantasías dirigidas para el darse cuenta.
STEVENS, J. y otros: Esto es Gestalt; (Ed. Cuatro Vientos, S. de Chile),
especialmente los artículos «Resolución» (F. Perls) y «¡vacíos,
vacíos, vacíos!» (B. Stevens).
ZINKER, J.: El proceso creativo en Psicoterapia Gestáltica; (Ed. Paidós, B.
Aires): Libro fundamental para darse cuenta del valor de la crea-
tividad en el terapeuta gestáltico.
181