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Trabajo Social y VIH-SIDA:

análisis de prácticas de intervención


Oscar Labra, Ph.D. (C)*
Resumen
El presente artículo da cuenta de la participación del Trabajo Social con personas que viven con
VIH-SIDA (PVVIH-SIDA). En él se muestran la aparición y el desarrollo del Trabajo Social dentro del
campo de la salud y al mismo tiempo la intervención psicosocial frente a las personas viviendo con VIH-
SIDA. Los trabajadores sociales han desempeñado un papel importante en materia de intervención
en VIH y su intervención los ha enfrentado a sus propios prejuicios y valores. Hoy, la pandemia
confronta al Trabajo Social a un cambio demográco importante: una población que aumenta su
esperanza de vida resultado de las terapias «antirretrovirales» (TARV), y a un crecimiento potencial
de la proporción de esta población en condiciones de pobreza, lo que signicará una pesada carga de
trabajo para los trabajadores sociales. Las prácticas de intervención de los trabajadores sociales con
énfasis en la interdisciplinariedad los distinguen como una profesión de apertura y adecuación a los
nuevos problemas sociales.

Palabras clave: Trabajo Social, VIH-SIDA, Intervención psicosocial,


Desarrollo de prácticas, Política de salud.

Introducción La conrmación del VIH-SIDA en la


vida de un paciente, viene a poner de relieve

L
a pandemia de VIH-SIDA demanda
la triste realidad de una idea de muerte que
de forma muy particular a la profe-
puede ocurrir en un plazo desconocido,
sión de Trabajo Social y esto, en razón situación que produce en las PVVIH-SIDA
de la historia que la ha caracterizado desde un sentimiento de desesperanza y de sen-
sus orígenes. Es así que en sus primeros tirse sobrepasados con respecto al futuro.
ocho años de expansión en el mundo sólo Este sentimiento se gatilla desde que son
había una tipología, de enfermos aquéllos noticados de su estado serológico posi-
que se morían rápidamente, con los años tivo. Destaquemos además, que, en general,
esto cambia a una segunda tipología aque- cuando la muerte llega, ésta suele ocurrir
llos que con tratamiento es posible prolon- en un contexto de aislamiento y rechazo
gárseles la vida. Además esta pandemia era social de la víctima (Beauger y otros, 1989).
poco conocida y las personas que la con- Es este contexto, el acompañamiento de
los profesionales a personas en etapa ter-
traían eran víctimas de un estigma social.
minal de sida y en sus cercanos/familiares,
Situación esta última que se mantiene hasta
se constituye en un rol privilegiado, y acá el
la actualidad, en razón de las representa- Trabajo Social ha contribuido de forma sig-
ciones sociales construidas sobre ella. Por nicativa. Así, la intervención psicosocial
otro lado, la práctica médica en este campo se ha transformado en un apoyo frente a la
ha sido confrontada a la imposibilidad de desesperanza que vivencia la PVVIH-SIDA,
«curar» una infección no esperada en estos lo que le otorga un valor y reconocimiento a
tiempos. la intervención de los trabajadores sociales
1
Universidad Laval, Quebec, Canadá, olabra67@hotmail.com

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(Boland y otros, 1996; Villeneuve, 1989, p. cambio social” (RUFUTS1, 1980 en Lecomte,
47). 2003, p. 28). Es interesante observar en
El presente artículo se propone abordar esta denición que los «problemas socia-
les» constituyen el objetivo de acción para
la existencia del VIH-SIDA como uno de los
el Trabajo Social en vista de un «cambio
problemas sociales más importantes por
social», lo que implica una reexión analí-
hoy día. Sin el ánimo de querer presentar
tica y critica de la realidad.
una revisión exhaustiva de la literatura que
hay disponible sobre esta materia, tom- Mencionemos que nuestro interés no es
ando como experiencia las intervenciones solamente presentar las consecuencias soci-
desarrolladas en Canadá, se propone, en ales que produce el VIH-SIDA sino, además,
conocer la implicación de los trabajadores
un segundo momento, prestar atención a
sociales en esta materia. Para abordar la
ciertos tipos de prácticas de intervenciones
pertinencia del Trabajo Social es necesario,
desarrolladas desde el Trabajo Social con
en primer término, mostrar que la pande-
presencia importante en la literatura. Por
mia de VIH-SIDA es un problema social.
otro lado, un análisis contemporáneo de Por ello se propone en las siguientes líneas
tales prácticas del Trabajo Social sugiere un una denición de problema social a partir
tipo de intervención interdisciplinaria. de diferentes autores (Spector y Kitsuse,
1977; Ritzer, 1986; De Robertis y Pascal,
El VIH-SIDA como problema 1987; Mayer y Laforest, 1990; Kendall y
otros, 2004; Redjeb y otros, 2001).
social
Haciendo un poco de historia sobre
La existencia del VIH-SIDA no con-
los orígenes de la intervención en Trabajo
stituye únicamente un problema epide-
Social, los problemas sociales constituy-
miológico, político o económico sino tam-
eron su principal objetivo de intervención
bién social. Por ello su intervención debe (Mayer y Laforest, 1990, p. 13). En este
ser interdisciplinaria. Es más, se trata de sentido, es relevante destacar que un «pro-
un problema que produce repercusiones blema social» se centra en el proceso por
sociales no tan sólo en la vida de quienes el cual los miembros de una sociedad de-
contraen la infección sino también en su nen una condición dada como tal, es decir,
entorno familiar. Desde esta perspectiva, como «problema» (Spector y Kitsuse, 1977,
el VIH-SIDA es reconocido como un pro- p.76). Esto implica la existencia de grupos
blema macro social por la toda la comuni- que denen una situación como problemá-
dad internacional. tica. Esta denición responde a una «acción
Para ilustrar la participación de los tra- colectiva», es decir, la necesidad de un
bajadores sociales con PVVIH-SIDA será grupo en movimiento capaz de producir un
necesario, en primer lugar, demostrar que cambio, debido a los efectos «negativos»
que produce el problema social (Kendall y
esta pandemia constituye efectivamente un
otros, 2004, p. 15).
«problema social» y que ello ha constituido
un escenario de intervención real para los Para Ritzer (1986), un problema social
trabajadores sociales. En este sentido, men- puede ser denido como tal a partir de dos
cionemos que “el Trabajo Social es una requisitos fundamentales: el primero, que
disciplina práctica que tiene por objeto los el problema afecte a una gran parte de la
problemas sociales de individuos, grupos y población y segundo, que de soluciones
colectividades, en una perspectiva de inter- 1
Agrupación de unidades de formación universitaria
vención colectiva o individual basada en el en Trabajo Social de Quebec.

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TRABAJO SOCIAL Y VIH-SIDA: ANÁLISIS DE PRÁCTICAS DE INTERVENCIÓN por OSCAR LABRA

pueden implementarse para resolver la formas, como por ejemplo: una de ellas, y
situación que origina el problema. Es inte- tal vez las más repetida en la literatura, es
resante constatar que para que una situa- la estigmatización, la discriminación, la
ción sea considerada como problemática, exclusión y la opresión hacia las PVVIH-
ésta debe ser percibida como tal por un SIDA. (Herek, 2004, p. 14; Déchaux, 2002,
número importante de personas. A partir p. 24; Wood, 2008, p.108; Herek y Glunt,
de ese momento se puede considerar como 1988, p.887; Brown y otros, 2003, 51). Esta
un verdadero problema social. Por su parte, estigmatización cobra «vida» a través del
De Robertis y Pascal (1987), indican que abandono familiar y social que enfrentan
la comprensión colectiva de un problema las PVVIH-SIDA (Elford y otros, 2008, p.
social es insuciente como punto de partida 255), resultado de falsas creencias atribui-
de la acción. En este sentido, estos auto- das a la pandemia (Lekas y Siegel, 2006,
res señalan tres condiciones preexistentes: p. 1184), aparición de problemas psicoló-
la primera, es necesario que el problema gicos, tal como: sensaciones de frustración
sea percibido como vital e importante; la profunda, de depresión, intento de suicidio
segunda, el problema debe causar una frus- (Kipp y otros, 2006, p. 695).
tración y un descontento intenso; la tercera, Estas consecuencias, observadas en la
debe movilizar las personas o grupos afec- literatura, muestran que las PVVIH-SIDA
tados hacia la búsqueda de soluciones y de
deben enfrentar situaciones estresantes en
poder introducir cambios. La existencia de
torno a su medio ambiente, lo que produce
un problema social depende, entonces, de
una especie de «muerte social» que ellos
la percepción de grupos que consideren una
experimentan en su andar cotidiano (Labra
situación como problema y deseen interve-
y Neira, 2008). A lo anterior agreguemos
nir para cambiar esta situación (Redjeb y
un crecimiento de la epidemia en poblacio-
otros, 2001, p. 39).
nes pobres (ONUSIDA, 2004, p. 8; Rowe,
Los problemas sociales se distinguen 2007, p. 51), desfavorecidas y marginaliza-
de otros problemas según el criterio de das (Rowe y Ryan, 2001, p. 6). Para Farmer
estrecha relación con los contextos insti- (1996, p.369), la pobreza ubica a los jóve-
tucionales y normativos. Son sociales en nes adultos en situación de riesgo de con-
el sentido que se reeren a interacciones traer el VIH. En los países de ingresos altos
humanas. Finalmente los problemas soci- así como en aquéllos en vías de desarrollo,
ales producen consecuencias negativas a el VIH-SIDA ha afectado las clases socia-
nivel individual, psicosocial o social. les las más ricas y las más inuyentes. Lo
Una vez delimitada la noción de pro- que muestra así la naturaleza universal de
blema social, se hace útil y complementario la amenaza que produce la pandemia en la
dar algunos ejemplos de las consecuencias sociedad. No obstante lo anterior, el VIH-
del VIH-SIDA sobre la vida de quienes han SIDA se ha hecho sentir con mayor crudeza
contraído esta infección. Esto permitirá jus- en los países con menos recursos económi-
ticar la existencia de esta pandemia como cos y sociales (United Nations, 2005, p. 13).
problema social. Lo anterior constituye un escenario
El VIH-SIDA afecta a un número con- social complejo que permite caracterizar la
siderable de seres humanos en la sociedad pandemia de VIH-SIDA como uno de los
actual y sus consecuencias en las personas problemas sociales más importantes que
infectadas no son sólo de tipo psicosocial enfrenta la humanidad actualmente. Por
sino también físico (Hall, 2007, p. 55). En ello, que intervenciones en materia de VIH-
el ámbito de lo psicosocial, esta pandemia SIDA son necesarias, tanto para mitigar el
hace sentir sus consecuencias de distintas sufrimiento interno de quienes viven con

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la enfermedad, como para ofrecerles, en lo población en edad adulta viviendo con VIH-
cotidiano, una vida más humana. SIDA lo que exigirá el desarrollo de medi-
Tal como fuera indicado en los párrafos das de intervención para insertarlos social
precedentes los problemas sociales tienen y laboralmente.
consecuencias negativas a distintos niveles:
individual y social. Así, el VIH-SIDA puede
considerarse como un problema social que
Intervenciones en PVVIH-SIDA
produce consecuencias importantes a nivel Una revisión de la literatura permite
macroeconómico y macro-social que causa enmarcar la historia de las intervenciones
otros problemas microsociales. Este es el más recurrentes en PVVIH-SIDA en dos
caso de problemas de orden psicosocial, grandes categorías, que son presentadas
(mencionados precedentemente), donde en las páginas siguientes. Antes de ello es
las poblaciones vulnerables y marginales menester hacer hincapié en que los trabaja-
son aún más afectadas. Es también el caso dores sociales canadienses han sido inuen-
de los huérfanos, de las mujeres y madres ciados por la tradición americana y británica.
infectadas del África subsahariana, de algu- De esta forma, las prácticas pedagógicas,
nas regiones de Asia y de países en vías
la literatura, la intervención propiamente
de desarrollo donde la pandemia afecta
tal ha recibido el inujo de estas culturas.
con mayor fuerza (ONUSIDA, 2008, p. 5).
Para Hurtubise y Deslauriers, (2003, p. 8)
Dentro de este escenario catastróco que ha
producido el VIH emerge el problema de la los trabajadores sociales del Quebec no han
feminización de la pandemia (ONUSIDA, ignorado la inuencia de autores franceses,
2008, p. 56). Así, las mujeres «dueñas de de hecho una gran cantidad de profesores
casa», casadas o en convivencia, que pasan de universidades quebequenses han frecu-
en su hogar la mayor parte del tiempo, se entado universidades galas en su forma-
han constituido en el mayor blanco de infec- ción de postgrado, así como trabajadores
ción en los últimos diez años, situación den- sociales que han realizado pasantías en ese
tro de la cual se puede observar la desigual- país. A pesar de esto último la mayor inu-
dad de género y vulnerabilidad en la cual se encia para el Trabajo Social proviene de los
encuentra la mujer frente al VIH. Estado Unidos, tradición que se remonta al
A esto, se agregan las condiciones de siglo XIX.
pobreza en las cuales vivirán las PVVIH- Remarquemos que la inmigración
SIDA en edad avanzada resultado del masiva proveniente de Europa, la urbani-
aumento de la esperanza de vida (Vance y zación acelerada, la crisis económica de
otros, 2008, p. 260) o de la esperanza de los años 30 y la integración de la pobla-
vida «casi normal» (Peterson y otros, 2009,
ción negra a la sociedad americana que ha
p. 449) producto del desarrollo de la biome-
venido a marcar la década de los años 60,
dicina (Ashton y otros, 2005, p. 587; Quinn,
han sido fenómenos que han facilitado que
2008, p. 8). El rápido progreso de las tera-
pias antiretrovirales ha transformado el el Trabajo Social se desarrolle como profe-
sida de una enfermedad de tipo mortal sión en un primer tiempo y después como
a una enfermedad tipo crónica (Boyer y disciplina. Este ha sido el escenario que ha
Indyk, 2006; Santoro y otros, 2008). Es forjado la «utilización» de modelos, enfo-
importante mencionar que este desarrollo ques, teorías que el Trabajo Social ha utili-
de la medicina, por positivo que sea en la zado en sus tres ejes tradicionales de prác-
vida de las PVVIH-SIDA, se transformará tica: intervención individual, intervención
en el mediano plazo en un aumento de la de grupo e intervención colectiva.

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TRABAJO SOCIAL Y VIH-SIDA: ANÁLISIS DE PRÁCTICAS DE INTERVENCIÓN por OSCAR LABRA

La intervención individual comunicación en la persona infectada de su


La historia de intervención en PVVIH- estado de salud. La tercera fase de «Apoyo
SIDA tanto en Canadá como en América del y de referencia», tiene por objeto asistir a
Norte es más bien de tipo médico, basado en la PVVIH-SIDA en la movilización de sus
una primera evaluación del cliente (Ouellet recursos internos y externos con el n de
et Linsdsay, 1991, p.15). Las primeras expe- facilitar su integración (Ouellet et Lindsay,
riencias de intervención médico-sociales 1991, p.15). Una última fase, llamada de
nacen en los hospitales. Intervenciones intervención, es descrita por algunos auto-
que corresponden más bien al modelo res, donde se hace referencia a los «servi-
de Trabajo Social llamado de «caso» de cios en VIH-SIDA» (Miller, 1988, p. 144).
Richmond: modelo de intervención indivi- En ella se pone a la PVVIH-SIDA en con-
dual “caring” con una importante inuencia tacto con los servicios que ofrece su comu-
del psicoanálisis, “counselling” en PVVIH- nidad, de modo que ella pueda recibir algún
SIDA que presentan problemas de estigma- tipo de ayuda terapéutica. La persona es
tización, discriminación, ansiedades asocia- ayudada para su integración en la comuni-
dos al diagnóstico de seropositividad. Así, la dad. Éstos son generalmente servicios que
literatura sobre la intervención en materia ofrecen voluntarios de instituciones com-
de VIH-SIDA aborda una gran cantidad de prometidas en la problemática del VIH-
experiencias desarrolladas sobre una base SIDA. Añadamos que acá, se tiene por obje-
individual. No obstante lo anterior, si las tivo ofrecer información práctica sobre los
necesidades de las PVVIH-SIDA son rela- cambios de higiene de vida, de nutrición,
tivamente las mismas, el tipo de interven- etc. (Ouellet et Lindsay, 1991, p.15). En esta
ción individual es el reejo de la formación última etapa de la intervención, numerosos
profesional de cada uno de los trabajadores autores hacen hincapié en la importancia de
sociales, lo que permite abordar una misma la colaboración, la coordinación y el trabajo
problemática desde diversos enfoques o multidisciplinario como estrategias necesa-
modelos teóricos. rias para una intervención ecaz.
En este sentido, las etapas más impor- La importancia de la intervención del
tantes que han llamado la atención de los Trabajo Social en el espacio de lo clínico
autores en la intervención individual, son: es altamente valiosa si se tiene en cuenta
la ventilación, la información, el apoyo y la que las consecuencias psicosociales del
referencia. La fase de «ventilación» da a la VIH-SIDA, tanto en las personas infecta-
persona la ocasión de examinar sus ansie- das como en sus cercanos, la presentan
dades asociadas al diagnóstico, de expresar como una pandemia única en nuestros tie-
sus sentimientos y permite el ajuste espe- mpos. Así, su valor reside en la mejora de
cialmente en situaciones en las cuales las los mecanismos de ayuda psicológica a la
personas son socialmente aisladas o donde PVVIH-SIDA para permitir a ésta convivir
su diagnóstico es disimulado en su medio con la infección en las mejores condiciones
social o profesional. La segunda fase de que sean posibles. Algunos autores hablan
«información» está destinada a satisfacer del concepto de “case management”2 en
las necesidades de información sobre la intervenciones con PVVIH-SIDA (Chapa,
infección del VIH y sobre la evolución de la 2003, p. 305; Thompson, 1998, p. 75) que
enfermedad, sobre los tratamientos dispo-
2
nibles y los tipos de instituciones que pue- Este concepto se desarrolló particularmente en
Estados Unidos en el curso de los años 1970-1980 en
dan existir en la comunidad para ofrecer el campo de la salud mental para personas que pre-
ayuda a corto y largo plazo (Miller, 1988, sentan deciencias físicas o intelectuales o problemas
p. 139). Durante éste periodo se trabaja la psicológicos importantes.

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residen en sectores rurales (Olivier, 2001). los años 80’ para que la pandemia del VIH-
Remarquemos que el concepto “case mana- SIDA encuentre su signicado en el léxico
gement” hace referencia a la disposición de la práctica del Trabajo Social. De esta
de servicios para el cliente, según sean sus forma, los trabajadores sociales son impli-
necesidades. cados, en el medio hospitalario, no sólo con
«La intervención individual, es un pro- la PVVIH-SIDA sino también con todos los
ceso de varias fases que asegura la coordi- que la rodean.
nación y acceso conveniente a una gama La intervención de grupo es la que
de servicios médicos y sociales apropiados más encuentra unanimidad en la literatura
para el cliente, su familia y el sistema de en distintos ámbitos de intervención en
apoyo. El objetivo de la intervención indi- PVVIH-SIDA, como por ejemplo: en el caso
vidual es promover y apoyar el funciona- de prácticas de riesgo y expresión de emo-
miento independiente del cliente y de la ciones, en medio hospitalario, en el caso del
familia. La intervención individual, es un apoyo psicosocial y educativo.
método que asigna la responsabilidad de
Esta intervención, en tanto que método
planeamiento, de la adquisición, de sumi-
de intervención de largo alcance, ha servido
nistro y de la coordinación de los sistemas
como un medio de ayuda hacia la resolución
sobre una persona o un equipo. Es un ser-
de problemas en PVVIH-SIDA. De él sobre-
vicio centrado en el cliente al cual se liga y
salen los modelos de intervención de grupo
asegura el acceso coordinado y oportuno a
de «ayuda mutua» y el grupo a «objetivos
los niveles médicamente apropiados y a los
terapéuticos» o «educativos». En el modelo
servicios de asistencia.»
de grupo de «ayudada mutua» el trabajador
A nes de la década de los 80’, el Trabajo social es invitado a utilizar el poder poten-
Social de “case management” se establece cial que procede de las acciones realizadas
formalmente como una técnica para tratar por los miembros. El profesional, en este
las distintas y variadas necesidades de la modelo de intervención, ocupa una posi-
PVVIH-SIDA (Carlson, 2003, p. 214). Este ción periférica según los principios teóri-
tipo de intervención incluye aspectos en los cos del “self-help”, sin embargo, el traba-
cuales se abordaba la toma de medicamen- jador social a menudo es llamado a tomar
tos, la salud mental, la pobreza, las diná- una posición central en algunos momentos
micas de la familia, de la progresión de la estratégicos.
infección, de la estigmatización y de la may-
oría de los aspectos no médicos en el trata- Por su parte, el modelo a «objetivos
miento de cada paciente VIH. terapéuticos» y «educativos» combina a la
vez elementos de la intervención en situa-
ción de crisis y resolución de problemas.
La intervención de grupo Los objetivos de este modelo son: desarrol-
A nivel de la intervención de grupo la lar una red de apoyo con el n de romper el
práctica de social en PVVIH-SIDA, en el aislamiento de las personas; reducir el nivel
caso de Canadá, ha sido fuertemente inu- de ansiedad y tensión, expresión de emocio-
ida por la psicoterapia de grupo y el enfoque nes y sentimientos en un clima de acepta-
de grupo estructurado (Pappel y Rothman, ción; y ofrecer un modelo de adaptación e-
1983, p. 13). Los trabajadores sociales se caz. Para Ouellet y Lindsay (1991, p. 26) este
han implicado con ciertos grupos (por modelo de intervención grupal comporta
ejemplo la comunidad gay) en temas como en términos generales en cada sesión un
la salud y la sexualidad masculina, pero ha espacio para la entrega de informaciones,
sido necesario esperar hasta mediados de seguido o precedido por espacios que son

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TRABAJO SOCIAL Y VIH-SIDA: ANÁLISIS DE PRÁCTICAS DE INTERVENCIÓN por OSCAR LABRA

dedicados al intercambio de vivencias expe- enfatizan la intervención de grupo (Ouellet


rimentadas, a la expresión de sentimientos. y Lindsay, 1991, p.31).
Dentro de la intervención de grupo, Una última práctica que se observa en
destaca la intervención particular en «fami- la literatura revisada es «la provisión de
liares y/o personas cercanas a la PVVIH- servicios comunitarios y/o locales». Esta
SIDA». En lo que se reere a este tipo de práctica comparte en cierta forma los prin-
intervención, se ha demostrado que el cipios de la intervención de grupo y de la
apoyo social, principalmente familiar, es intervención colectiva. Ella se inscribe en
esencial para enfrentar positivamente toda una concepción dinámica de los problemas
enfermedad de carácter crónico. El apoyo a sociales, donde se ha considerado de alto
la PVVIH-SIDA es otorgado bajo distintas valor la ayuda familiar y/o de personas sig-
formas, por ejemplo: el respeto a las limi- nicativas de la PVVIH-SIDA así como los
taciones de la persona y la necesidad de conceptos de red y recurso. Intervención
apoyo activo como en el caso de reuniones que en sus principios fue de tipo volunta-
donde se tratan y se comparten experien- ria en PVVIH-SIDA, a nes de los años 80’
cias difíciles entre la familia y la persona cambia hacia un modelo más sólido y más
enferma (Bourgon, 2001, p. 248). Es por diversicado con el tiempo, a raíz de los
ello que la contribución del Trabajo Social aportes del enfoque de «acción multidis-
para una comprensión dinámica de los pro- ciplinaria». Este enfoque de intervención se
blemas sociales y familiares, viene de la basó en la teoría de la Promoción de la salud
terapia familiar llamada «estructural» de la y en la práctica de «desarrollo comunitario»
(Bowlby, 2001, p. 204). Este tipo de inter-
segunda mitad del siglo veinte. Enfoque que
vención ha permitido identicar los obstá-
considera al individuo en interacción con el
culos y las posibilidades que se presentan
contexto social. Acá la intervención, en pri-
a las PVVIH-SIDA y a aquellas que corren
mer lugar, está orientada hacia el individuo,
riesgo de infectarse en el medio comunita-
se trabaja posteriormente con la familia,
rio. Agreguemos que la utilización de redes
luego la familia ampliada. Los objetivos de
forma parte de este tipo de intervención.
la intervención son: combatir las ideas de
Esta estrategia metodológica ha permitido
negación, cólera, culpabilización, depresión
además organizar y difundir las informacio-
y aceptación de sí mismo que experimenta
nes y las actividades de distintos grupos en
la PVVIH-SIDA. el plano comunitario.
Los principios básicos de la interven-
ción terapéutica familiar en esta materia
son: a) la familia biológica y funcional es La investigación social
la unidad básica en los cuidados del trata- La investigación social, aparece como
miento de la psicoterapia de las personas, una práctica de intervención ampliamente
b) los cuidados son denidos con un equi- utilizada en Trabajo Social con PVVIH-
pamiento multidisciplinario y c) el acceso SIDA. Agreguemos que ésta práctica ha sido
universal al tratamiento es disponible para herramienta de intervención en diversos
todas las personas afectadas directa o indi- dominios del Trabajo Social, lo cual ha per-
rectamente (Tiblier y otros, 1989, p. 82). mitido una mayor comprensión del impacto
Para los autores que abordan la interven- y de la evolución del VIH-SIDA.
ción en familiares y/o personas cercanas a El contexto social del VIH-SIDA ha
la PVVIH-SIDA, privilegian de forma mayo- implicado en el tiempo una implicación
ritaria un tipo de intervención de apoyo y creciente del Trabajo Social como disciplina
orientación individual, mientras que otros en la investigación social de esta problemá-

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RUMBOS TS, año VI, Nº 6, 2011

tica. Práctica que podemos ver en los veinte riencias en este ámbito, a un debate sobre
últimos años en Canadá, en los Estados la sexualidad y sus prácticas de riesgo, a
Unidos y en algunos países de Europa. informarse sobre la infección y su contexto
Un elemento que se destaca en la tra- general de intervención y a estar atentos a
dición canadiense en materia de interven- la evolución de la pandemia así como a su
ción en PVVIH-SIDA ha sido el llevar esta impacto en la comunidad.
problemática a un discurso país como fue
el caso de una «defensa»3 en materia de Hacia una visión de interven-
atención, tratamiento y prevención de la ción interdisciplinaria
pandemia. Esta «defensa» se ha materiali-
zado en un documento titulado «Manifeste La diversidad y la complejidad de los
des travailleurs sociaux 2000»4. En él se problemas sociales demandan cada día más
reconocen los derechos fundamentales de la experticia de diferentes profesiones de la
la PVVIH-SIDA, desde el punto de vista de salud y de lo social (Lindsay y otros, 1999).
los principios de ética del Trabajo Social Denominada interdisciplinariedad, esta
en cuanto a los derechos humanos, a las práctica de trabajo aparece como un tipo
políticas sociales, en materia de salud, de de respuesta a la realidad que confronta la
enseñanza del Trabajo Social, de asocia- infección por VIH-SIDA, favoreciendo un
ción e investigación social. Esta iniciativa enfoque global en torno a distintas situacio-
ha sido pensada con el objetivo de colocar nes y necesidades complejas manifestadas
la problemática del VIH-SIDA como emer- por los individuos. Así, se puede observar
gente en nuestra sociedad actual y que que el VIH-SIDA no está ajeno a esta forma
afecta todos los estratos sociales, tanto en de hacer y ver las cosas y los equipos de tra-
los países desarrollados como en vías de bajo implican en la mayoría de los casos la
desarrollo y sub-desarrollados. La defensa presencia de personas de diversas discipli-
canadiense en cuestión incita a la acción en nas.
tanto que trabajadores sociales en el ámbito Los trabajadores sociales, en razón de
del VIH-SIDA al mismo tiempo que a una su formación, tienen una tendencia natural
revisión de las prácticas de intervención. de observar y analizar la realidad desde una
Ella invita además, a multiplicar las expe- óptica sistémica, donde el individuo es visto
en tanto que persona que forma parte de un
3
Documento transcrito a raíz de un simposio llevado entorno (familia, cercanos, etc.). Por ello, los
a cabo el 29 de julio de 2000 en la ciudad de Montreal,
Canadá. Organizado por la Asociación Canadiense trabajadores sociales ocupan un lugar espe-
de Trabajadores Sociales, en el marco de la confe- cial en la intervención en PVVIH-SIDA, ofre-
rencia conjunta de la Federación Internacional de ciendo una mirada multidisciplinaria a la
Trabajadores Sociales y de la Asociación Internacional
intervención. Según Lindsay y otros, (1999),
de Escuelas de Trabajo Social.
el Trabajo Social es la profesional que más
4
Addams, desde muy temprano en la historia Trabajo
está presente en la composición de equipos
Social destaca la necesidad de la intervención comu-
nitaria para enfrentar los problemas sociales. En este multidisciplinarios cuando se trata de inter-
sentido se ofrece una visión global de intervención venciones en problemáticas humanas.
de los problemas y de la implicación de la comuni-
dad con la persona enferma, por lo que podemos leer Se desea remarcar que el valor de la
subyacente a su losofía la imperiosa necesidad de interdisciplinariedad reside en el hecho que
utilizar los recursos existentes en la comunidad y dar aborda los problemas desde un enfoque
a esta un rol de decidor, de participante activo en la
colectivo y que permite tratar los problemas
solución de los problemas. Este enfoque además re-
posa sobre una concepción profunda de la población y en forma holística. Además, la interdiscipli-
un acercamiento directo a sus formas de vida. nariedad facilitaría la coherencia, la conti-

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nuidad y la ecacidad de los servicios ofre- mpo (ONUSIDA, 2008: 10) esta pandemia
cidos. (Lindsay y otros, 1999). se ha transformado en un verdadero pro-
La realidad de la interdisciplinariedad blema social en el más amplio sentido del
pareciera existir en todos los dominios de término. La profesión del Trabajo Social,
intervención en Trabajo Social. El aporte no ha estado ausente en esta problemática
del Trabajo Social en equipos de trabajo y desde sus intervenciones en los medios
multidisciplinarios ha progresado de forma hospitalarios pasando por la intervención
constante en el tiempo (Dumont, 1996). Las individual, de grupo a la intervención colec-
intervenciones de Trabajo Social en VIH- tiva y la investigación social, ha colocado
SIDA lo muestran bien, los trabajadores al Trabajo Social en una de las primeras
sociales están cada vez más presentes en el profesiones en interesarse en las personas
plano de la composición de equipos. El rol que han contraído la infección del VIH. En
del trabajador social se sitúa en diversas sus inicios el Trabajo Social se interesa en
esferas de la problemática social, tal como la intervención individual y en las personas
lo muestran los niveles de intervención en cercanas y/o familiares. Con el tiempo un
VIH-SIDA presentadas precedentemente. nuevo cuerpo de conocimientos basados en
Su rol puede ser de consultante, negocia- aspectos médicos, sicológicos y sociales de
dor, de persona de apoyo, de acompañador, las personas infectadas de VIH aparece.
de consejero o de terapeuta. El trabajador En los últimos dieciséis años, una gran
social en VIH-SIDA está en forma habitual cantidad de investigaciones orientadas
ubicado en una posición de acompañador- hacia los factores psicosociales del VIH-
terapeuta en el sentido de apoyar social y
SIDA han sido dirigidas por trabajadores
sicológicamente a la persona enferma y su
sociales. La investigación en PVVIH-SIDA
familia, y apoyar a los demás miembros
se sitúa en tres grandes ejes o temáticas
del equipo que intervienen para una mayor
de interés: estigmatización, conductas de
comprensión de la persona enferma y su
riesgo y efectos de las TARV; en menor pro-
familia.
porción se encuentran aquellas investiga-
ciones que abordan aspectos diversos de la
Conclusión y perspectivas de pandemia en la vida de la persona infectada
intervención y/o de su entorno.
En primer término, se desea aclarar que El Trabajo Social ha vivido de manera
no ha sido la intención de este trabajo el progresiva un cambio en cuanto a interven-
establecer una tipología de intervenciones ción en PVVIH-SIDA. Lo que en sus princi-
del Trabajo Social en PVVIH-SIDA, en el pios se limitaba al medio hospitalario con
sentido puro del término, sino, no obstante modelos de intervención de naturaleza pre-
los elementos que han surgido de este docu- dominantemente individual, con una con-
mento, alimentar la práctica social en el ter- cepción médica de la intervención, cambia
reno de las enfermedades crónicas como el durante las dos últimas décadas a medida
VIH-SIDA. que crece la pandemia. Esta transformación
Sólo un cuarto de siglo ha pasado desde ha implicado en el tiempo modelos interdis-
el diagnóstico del primer caso de sida en el ciplinarios de intervención, con una diver-
mundo y la obtención de un reconocimiento sicación de modelos y teorías que ponen
sobre la importancia y la complejidad de el acento sobre lo que es social, familiar y
aspectos psicosocial del VIH-SIDA. De una comunitario. De esta forma la práctica en
infección del estigma en sus inicios (Herek PVVIH-SIDA se orienta aún más hacia un
y Glunt, 1988) a una feminización en el tie- modelo de análisis próximo a la concepción

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de Trabajo Social de Addams5. Enfoque organizaciones vinculadas al VIH-SIDA; lo


desde el cual se concluye que el modelo que viene a reforzar el concepto de «misión
médico de ayuda “caring” muy aplicado en de justicia social» en la profesión. Principio
los principios de la crisis del VIH-SIDA no que es retomado en el «Maniesto de tra-
basta, por lo que la realidad debe ser vista bajadores sociales» anteriormente referido.
desde una perspectiva global para poder En resumen, los trabajadores socia-
comprenderla mejor. De esta forma se le les han aportado una contribución valiosa
otorga un rol más preponderante a lo comu- en el ámbito del VIH-SIDA. Su aporte se
nitario. extiende también a la intervención propia-
El reconocimiento para el Trabajo mente dicha: por la instauración de grupos
Social de la complejidad del la infección de ayuda mutua a los padres y cercanos de
del VIH, desde un punto de vista bio-sico- las personas infectadas, con el n de ofrecer
social, obliga a desarrollar mayores cono- un apoyo durante los momentos difíciles así
cimientos y habilidades que son necesarias como trabajar el duelo con la familia frente
para intervenir sobre ella, lo que ha exi- a un deceso. Lo anterior nos muestra la
gido un trabajo multidisciplinario. Es aquí diversidad de prácticas sociales que son dis-
donde lo social y la salud se juntan, ya sea tintivas de la profesión de Trabajo Social y
desde una perspectiva terapéutica o pre- que no han estado ajenas en la intervención
ventiva para abordar un problema que tiene tanto en PVVIH-SIDA como en su entorno.
consecuencias diversas sobre la vida de las Desde el «casework» a la intervención indi-
personas infectadas y de su entorno. En este vidual, pasando por la intervención familiar
sentido, las prácticas sociales ejercidas en y de grupo y la intervención colectiva y la
PVVIH-SIDA han movilizado las competen- investigación social. Así la evolución del
cias generales del trabajador social así como Trabajo Social se distingue por sus «múl-
aquéllas vinculadas a la especicidad de su tiples rostros» y su evolución hacia una
campo de intervención, como por ejemplo: intervención multidisciplinaria en materia
comprensión de la persona, su ambiente y la de VIH-SIDA.
infección; conocimiento de los equipamien- Lo que nos queda por plantear es lo que
tos, de los dispositivos legislativos o regla- concierne a las perspectivas de intervención
mentarios, de los grupos sociales de apoyo, en esta materia. Es así que un primer ele-
de las redes asociativas y comunitarias, etc. mento emerge en este sentido y dice rela-
La literatura muestra así, que los trabaja- ción con la colaboración internacional. Ello
dores sociales han constituido un aporte alimentaria enormemente las prácticas de
valioso en este sentido, reforzando el capi- intervención desarrolladas en sus distintos
tal social, individual y la suma de recursos niveles de intervención en PVVIH-SIDA, de
para el funcionamiento de los individuos y modo que diferentes países puedan apren-
der los uno de los otros y recuperar aquel-
5
Addams, desde muy temprano en la historia Trabajo
las prácticas exitosas así como aprender de
Social destaca la necesidad de la intervención comu- los errores de otros. Las prácticas pueden
nitaria para enfrentar los problemas sociales. En este conducir perfectamente a la elaboración de
sentido se ofrece una visión global de intervención políticas públicas globales en esta población
de los problemas y de la implicación de la comuni-
y a enfrentar el potencial envejecimiento de
dad con la persona enferma, por lo que podemos leer
subyacente a su losofía la imperiosa necesidad de la PVVIH-SIDA. En este sentido caben las
utilizar los recursos existentes en la comunidad y dar preguntas: ¿Qué están haciendo los gobi-
a esta un rol de decidor, de participante activo en la ernos para enfrentar la prolongación de la
solución de los problemas. Este enfoque además re- vida que ha permitido la biomedicina en
posa sobre una concepción profunda de la población y
un acercamiento directo a sus formas de vida. las PVIH-SIDA? ¿Sus políticas incluyen

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una real integración a la sociedad civil de Ello es posible desarrollando iniciativas o


la PVVIH-SIDA? ¿De qué subsistirán ellos? alianzas estratégicas de investigación con
¿De la ayuda social que les otorgue su país otros servicios, universidades nacionales
de origen? Ayuda que en países del tercer o extranjeras desde los propios centros de
mundo casi no existe y en otros si esta existe investigación social universitarios. Ello
no alcanza para vivir dignamente.
exige, sin lugar a dudas, un gran compro-
En Canadá, Chile y en todo el mundo miso en la investigación social del cuerpo
la mujer presenta un riesgo de infección académico en términos de la búsqueda de
importante, lo que se traduce en inequidad
recursos para el nanciamiento de proyec-
de los sexos, ello ya exige la necesidad de
tos. La educación de «excelencia» o dicho
planicar y poner en práctica políticas para
de otra manera en lenguaje de mercadotec-
enfrentar este problema «sexoespecico»
del VIH (ONUSIDA, 2008, p. 10), otorgando nia «competitiva» no se concibe sin ir a la
una especial atención a las políticas dirigi- par con la investigación, ello confronta a
das a la población adolescente masculina y nuevos desafíos y permite al mismo tiempo
a los hombres. A ello se suma el hecho que adquirir conocimientos y madurez para
existe un número cada vez más creciente de transmitir a las nuevas generaciones de tra-
PVVIH-SIDA que se acerca a los cincuenta bajadores sociales, quienes tendrán la tarea
años, así estrategias para facilitar y mejorar de continuar con los desafíos de la profe-
su envejecimiento son esenciales. Ya es tie- sión.
mpo de pensar a elaborar políticas sociales
en un nuevo contexto de la pandemia que Una otra instancia a tener presente en
producirá el envejecimiento paulatino de la vista al desarrollo de estrategias de interven-
PVVIH-SIDA. ción es aquella de las propias asociaciones
En este sentido los trabajadores socia- de profesionales tanto en el nivel nacional a
les pueden desarrollar iniciativas en favor partir de sus colegios regionales y naciona-
de un mayor desarrollo de la investiga- les así como en un espacio más amplio como
ción de punta en esta área, así como de las es el caso de la Federación Internacional de
prácticas de intervención en PVVIH-SIDA. Trabajadores Sociales (IFSW).

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