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UNIVERSIDAD DE LOS ANDES

FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS Y SOCIALES


POSTGRADO EN ADMINISTRACIÓN
CENTRO DE INVESTIGACIONES Y DESARROLLO EMPRESARIAL

EL AUTOCONCEPTO Y LA AUTOESTIMA:
FACTORES QUE DEFINEN LA PERSONALIDAD

Autor: Marilexci Carrillo Valero.

Mérida, Noviembre de 2017


La personalidad del ser humano consciente, es un cumulo de sensaciones y emociones
que definen la forma como éste se desenvuelve en una sociedad. En la mayoría de los casos esta
personalidad es definida por una serie de creencias, reglas y normas que se interiorizan en el ser
desde su nacimiento, y que van haciendo del mismo un estereotipo de lo que la sociedad desea
que sea. En este ensayo se abordará la relación que tiene el autoconcepto y la autoestima en la
personalidad del ser humano.

Las personas siempre vamos en la búsqueda del éxito, de sentirnos bien consigo mismo y
de agradar a los que nos rodean. A veces sin darnos cuenta, nos apartamos de reacciones propias
y nos adaptamos a las reacciones que harán felices a los demás, esto puede definirse como una
baja autoestima y un autoconcepto débil de nosotros mismos. De igual forma, en ocasiones nos
planteamos que tenemos una autoestima alta, ya que tenemos una percepción positiva de nuestras
cualidades, y nos sentimos triunfadores de nuestras acciones y por esta razón declaramos con
toda seguridad que tenemos un autoconcepto positivo y fuerte de nuestra identidad. En ambos
casos se evidencia que estos dos términos guardan una estrecha relación entre si, y que se
complementa el uno con el otro.

“Un autoconcepto positivo conduce a una autoestima positiva y viceversa. El


autoconcepto y la autoestima son el resultado de un largo proceso, marcado por un gran número
de experiencias personales y sociales. Los éxitos y los fracasos, las valoraciones y los
comentarios de las personas que forman parte del entorno del niño y del adolescente, el ambiente
humano en que crece, el estilo educativo de padres y profesores y los valores y modelos que la
sociedad ofrecen van poco a poco construyendo el autoconcepto y la autoestima de forma casi
imperceptible” (Garcia, 2. 013, pág 244).

Desde mi punto de vista, podría definir el autoconcepto como el conjunto de opiniones,


ideas, sentimientos y percepciones que tiene un individuo de si mismo ( lo que piensa) y la
autoestima como la valoración que el ser humano tiene de si mismo ( lo que siente) ambos
términos se relacionan pero no deben de confundirse. El autoconcepto y la autoestima no son
innatas, se van formando desde la niñez y se van reforzando con las vivencias, experiencias,
acciones y sentimientos que vamos experimentando en el transcurso de nuestros días. Como
podemos observar la definición de estos conceptos está influenciada directamente por el entorno
social que nos rodea, pero es única en cada individuo, no podemos afirmar que el autoconcepto y
la autoestima se forman en los centros educativos, en la comunidad en la que vivimos o en
nuestra familia, son términos auténticos y propios que cada individuo va construyendo según sus
necesidades. Un ejemplo muy claro, lo podemos observar en los miembros de una familia, el
comportamiento de cada uno es totalmente diferente al otro, por ejemplo el hijo mayor puede ser
una persona tímida, que no le gusta relacionarse con los demás, a diferencia del hijo menor que
es una persona extrovertida, que toma iniciativa que afronta sus problemas por si solo sin esperar
la aprobación de los demás. Si los padres formaran la autoestima y el autoconcepto ambos hijos
actuarían de las misma manera, lo que si es cierto,es que las vivencias y situaciones que
experimentó cada hijo en cada una de sus etapas o ciclos de vida influyó directamente en su
autoestima y autoconcepto, en conclusión en su personalidad.

Según Mejía, Pastrana y Mejía (2011) “ Cada una de estas etapas aporta impresiones y
razonamientos sobre el YO. El resultado será un sentimiento personal generalizado de valía o de
incapacidad. En general las experiencias positivas y relaciones plenas ayudan a aumentar la
autoestima, en tanto las experiencias negativas y las relaciones problemáticas hacen que
disminuya la autoestima ”. (pág.7).

En este sentido, se podría plantear la interrogante: ¿ Si una persona vive experiencias


negativas durante su ciclo de vida, su personalidad estará marcada por una autoestima baja y un
autoconcepto negativo de si mismo?. Se podría afirmar de manera inmediata que es muy posible
que este individuo este caracterizado por una autoestima baja, pero todo depende de como éste
maneje sus situaciones y enfrente sus zonas erróneas que es lo que realmente marcará su
autoestima y permitirá que se forje un autoconcepto fuerte de su personalidad. La actitud
responsable que asuma ante estas situaciones y el grado de aceptación que tenga de sus
cualidades y habilidades, permitirá que su autoestima vaya mejorando y se transforme en una
persona con un auto reconocimiento positivo, que es el primer paso hacia cualquier tipo de
crecimiento psicológico que se reflejará en su rendimiento personal, en el aumento de sus
expectativas, su motivación y el éxito de sus acciones. El amarse a uno mismo, aceptarse y
quererse tal como es, son las primeras acciones que demuestran que el individuo tiene un
autoconcepto positivo de si mismo, no importa las afirmaciones y aprobaciones de los demás
para sentirse bien consigo mismo, lo importante es sentirse pleno en el ahora logrando así vivir
feliz y tranquilo.

Como lo señala Branden () “la autoestima es la disposición a considerarse competente


frente a los desafíos básicos de la vida y sentirse merecedor de la felicidad. Tener una alta
autoestima es sentirse confiadamente apto para la vida, es decir, competente y merecedor; tener
una baja autoestima es sentirse inapropiado para la vida”. Finalmente la autoestima es un aspecto
importante en todos los aspectos de nuestra vida, la decisión de vivir feliz en un estado de paz y
tranquilidad, depende de lo que realmente queremos para nosotros mismos, de la autoestima que
nos hemos forjado; la vida es una oportunidad que nos regala Dios, la cual se debe experimentar
intensamente sin planificar el futuro y reprochar el pasado, hay que vivir el ahora, el presente al
máximo.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Branden, Nathaniel.( 1.995).Los seis pilares de la autoestima. Recuperado de

Dyer, Wayne. Tus zonas erróneas. Recuperado de http://www.formarse.com.ar/libros/Libros-


recomendados-pdf/Tus%20zonas%20err%C3%B3neas-Wayne%20Dyer.pdf

Garcia, Ana. (2.013). La educación emocional, el autoconcepto, la autoestima y su importancia


en la infancia. Edetania 44. estudios y propuestas socio-educativas, IS. Recuperado de
https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/4596298.pdf.

Mejía, Adriana. Pastrana, José. Mejía, Julia. (2.011). La autoestima, factor fundamental para el
desarrollo de la autonomía personal y profesional. XII Congreso Internacional de teoría de la
Educación. Universidad Michoacana. Recuperado de
http://www.cite2011.com/Comunicaciones/A+R/103.pdf.
Riso, Walter. (2.013). Enamórate de tí. Editorial Océano. Recuperado de
https://libroayudate.files.wordpress.com/2015/07/walter-riso-enamorate-de-ti.pdf

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