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CONTENIDO

POSITIVISMO HISTÓRICO TEOLOGÍA FUNDAMENTAL ........................................................................ 1


COMTE, AUGUSTO .......................................................................................................................... 3
LA LEY DE LOS TRES ESTADOS. .................................................................................................... 4
FUSTEL DE COULANGES........................................................................................................... 6
ERNEST RENAN .................................................................................................................... 7
KARL GOTTHARD LAMPRECHT ........................................................................................ 8
MATERIALISMO HISTÓRICO ........................................................................................ 9
KARL MARX ............................................................................................................ 11
HISTORICISMO ................................................................................................... 13
JOHANN GUSTAV DROYSEN .............................................................................. 14

POSITIVISMO HISTÓRICO
TEOLOGÍA FUNDAMENTAL

El positivismo histórico, representado por Ludwig von Ranke (17951886) y por


Theodor Mommsen (1817-1903), interesa a la teología fundamental por haber
transmitido la concepción de la historia que dominó en el siglo XIX y que durante
mucho tiempo inspiró los juicios pronunciados sobre el valor histórico de los
evangelios.

El positivismo considera el objeto del conocimiento histórico como un dato ya


construido y el conocimiento histórico como el registro o la fotografía de ese
objeto. La objetividad del conocimiento histórico consiste en percibir el dato tal
como es, en registrar los hechos en estado bruto, en su verdad original, fuera de
toda interpretación. El ideal del positivismo histórico es llegar a la exactitud fría,
neutra, impersonal de las ciencias naturales, como la botánica, la biología, la
química. Se mantiene rigurosamente en el nivel de los hechos, en su pura
materialidad.

En la investigación histórica, como en todas las ciencias humanas, intervienen


siempre ciertos elementos de subjetividad, individuales o colectivos, que no es
posible eliminar. Un primer paso hacia la objetividad consiste, para el historiador,
en declarar abiertamente la perspectiva que adopta y en declarar sus
presupuestos. Puede entonces abrir a otra perspectiva, diferente de la suya, e
incluso, si hay lugar y ante unos hechos sólidamente atestiguados, renunciar
simplemente a ellos. La objetividad es entonces "búsqueda" de la objetividad.

La investigación histórica no se encuentra ante un puro hecho material,


desprovisto de toda significación, sino ante una intención encarnada, ante un
proyecto realizado. La investigación histórica es la interpretación re-creadora de la
intención creadora de la historia vivida.

Las observaciones hechas hasta ahora sobre la historia y el conocimiento histórico


nos permiten ya constatar que los evangelios se acercan a las nociones de historia
y de fidelidad histórica mucho más de lo que pensaban los partidarios del
positivismo.

La investigación histórica, concebida como la interpretación recreadora del


proyecto de la historia vivida, muestra que los evangelistas, al introducir al lector
en el sentido último de la vida de Jesús, o sea, su oblación al Padre por la
salvación de los hombres, se sitúan en el corazón de la historia y de sus
preocupaciones.

El positivismo es una mutilación de la inteligencia humana, que hace posible, no


sólo, la metafísica, sino la ciencia misma. Esta, sin los principios ideales, queda
reducida a una nomenclatura de hechos, y la ciencia es una colección de
experiencias, sino la idea general, la ley que interpreta la experiencia y la
traspasa. Considerado como sistema religioso, el positivismo es el culto de la
humanidad como ser total y simple o singular.
Comte eligió la palabra positivismo sobre la base de que señalaba la realidad y
tendencia constructiva que él reclamó para el aspecto teórico de la doctrina. En
general, se interesó por la reorganización de la vida social para el bien de la
humanidad a través del conocimiento científico, y por esta vía, del control de las
fuerzas naturales.

Los dos componentes principales del positivismo, la filosofía y el Gobierno (o


programa de conducta individual y social), fueron más tarde unificados por Comte
en un todo bajo la concepción de una religión, en la cual la humanidad era el
objeto de culto.

Numerosos discípulos de Comte rechazaron, no obstante, aceptar este desarrollo


religioso de su pensamiento, porque parecía contradecir la filosofía positivista
original. Muchas de las doctrinas de Comte fueron más tarde adaptadas y
desarrolladas por los filósofos sociales británicos John Stuart Mill y Herbert
Spencer así como por el filósofo y físico austriaco Ernst Mach.

El positivismo es una corriente o escuela filosófica que afirma que el único


conocimiento auténtico es el conocimiento científico, y que tal conocimiento
solamente puede surgir de la afirmación de las teorías a través del método
científico. El positivismo se deriva de la epistemología que surge en Francia a
inicios del siglo XIX de la mano del pensador francés Saint-Simon primero, de
Auguste Comte segundo, y del británico John Stuart Mill y se extiende y desarrolla
por el resto de Europa en la segunda mitad de dicho siglo. Según esta escuela,
todas las actividades filosóficas y científicas deben efectuarse únicamente en el
marco del análisis de los hechos reales verificados por la experiencia.

Entre las corrientes positivistas se puede mencionar al positivismo ideológico, al


empiriocriticismo, al positivismo metodológico o conceptual al positivismo analítico,
al positivismo sociológico, al positivismo realista y al neopositivismo.

COMTE, AUGUSTO (1798-1857).

Filósofo positivista francés, y uno de los pioneros de la sociología. Nació en


Montpellier el 19 de enero de 1798. Desde muy temprana edad rechazó el
catolicismo tradicional y también las doctrinas monárquicas. Logró ingresar en la
Escuela Politécnica de París desde 1814 hasta 1816, pero fue expulsado por
haber participado en una revuelta estudiantil.

Para dar una respuesta a la revolución científica, política e industrial de su tiempo,


Comte ofrecía una reorganización intelectual, moral y política del orden social.
Adoptar una actitud científica era la clave, así lo pensaba, de cualquier
reconstrucción.

Afirmaba que del estudio empírico del proceso histórico, en especial de la


progresión de diversas ciencias interrelacionadas, se desprendía una ley que
denominó de los tres estadios y que rige el desarrollo de la humanidad. Analizó
estos estadios en su voluminosa obra Curso de filosofía positiva.

Dada la naturaleza de la mente humana, decía, cada una de las ciencias o ramas
del saber debe pasar por "tres estadios teoréticos diferentes: el teológico o estadio
ficticio; el metafísico o estadio abstracto; y por último, el científico o positivo".

En el estadio teológico los acontecimientos se explican de un modo muy elemental


apelando a la voluntad de los dioses o de un dios. En el estadio metafísico los
fenómenos se explican invocando categorías filosóficas abstractas. El último
estadio de esta evolución, el científico o positivo, se empeña en explicar todos los
hechos mediante la aclaración material de las causas.

La obra de Comte es considerada como la expresión clásica de la actitud


positivista, es decir, la actitud de quien afirma que tan sólo las ciencias empíricas
son la adecuada fuente de conocimiento. Cada uno de estos estadios, afirmaba
Comte, tiene su correlato en determinadas actitudes políticas.

LA LEY DE LOS TRES ESTADOS.

Según Comte, los conocimientos pasan por tres estados teóricos distintos, tanto
en el individuo como en la especie humana. La ley de los tres estados,
fundamento de la filosofía positiva, es, a la vez, una teoría del conocimiento y una
filosofía de la historia. Estos tres estados se llaman:
 Teológico.
 Metafísico.
 Positivo.

Estado Teológico:

Es ficticio, provisional y preparatorio. En él, la mente busca las causas y los


principios de las cosas, lo más profundo, lejano e inasequible. Hay en él tres fases
distintas:

 Fetichismo: en que se personifican las cosas y se les atribuye un poder


mágico o divino.
 Politeísmo: en que la animación es retirada de las cosas materiales para
trasladarla a una serie de divinidades, cada una de las cuales presenta un
grupo de poderes: las aguas, los ríos, los bosques, etc.
 Monoteísmo: la fase superior, en que todos esos poderes divinos quedan
reunidos y concentrados en uno llamado Dios.

En este estado, predomina la imaginación, y corresponde a la infancia de la


humanidad. Es también, la disposición primaria de la mente, en la que se vuelve a
caer en todas las épocas, y solo una lenta evolución puede hacer que el espíritu
humano de aparte de esta concepción para pasar a otra. El papel histórico del
estado teológico es irremplazable.

Estado Metafísico:

O estado abstracto, es esencialmente crítico, y de transición, Es una etapa


intermedia entre el estado teológico y el positivo. En él se siguen buscando los
conocimientos absolutos. La metafísica intenta explicar la naturaleza de los seres,
su esencia, sus causas. Pero para ello no recurren a agentes sobrenaturales, sino
a entidades abstractas que le confieren su nombre de ontología.

Las ideas de principio, causa, sustancia, esencia, designan algo distinto de las
cosas, si bien inherente a ellas, más próximo a ellas; la mente que se lanzaba tras
lo lejano, se va acercando paso a paso a las cosas, y así como en el estado
anterior que los poderes se resumían en el concepto de Dios, aquí es la
naturaleza, la gran entidad general que lo sustituye; pero esta unidad es más
débil, tanto mental como socialmente, y el carácter del estado metafísico, es sobre
todo crítico y negativo, de preparación del paso al estado positivo; una especie de
crisis de pubertad en el espíritu humano, antes de llegar a la adultez.
Estado Positivo:

Es real, es definitivo. En él la imaginación queda subordinada a la observación. La


mente humana se atiene a las cosas. El positivismo busca sólo hechos y sus
leyes. No causas ni principios de las esencias o sustancias. Todo esto es
inaccesible. El positivismo se atiene a lo positivo, a lo que está puesto o dado: es
la filosofía del dato. La mente, en un largo retroceso, se detiene a al fin ante las
cosas. Renuncia a lo que es vano intentar conocer, y busca sólo las leyes de los
fenómenos.

Algunas ideas centrales de su pensamiento son: la concepción historicista del


desarrollo de la ciencia y de la razón, las cuales él desarrolla en tres estados
fundamentales, es decir, la historia del pensamiento transitó por tres senderos y
en el último radica la verdad clara y demostrada.

Obras. "Curso de filosofía positiva", "Sistema de política positiva o tratado de la


sociología que instituye la religión de la humanidad", "Discurso sobre el espíritu
positivo", entre otras.

FUSTEL DE COULANGES

Es interesante esta visión de Fustel de Coulanges. En consonancia con la visión


alemana decimonónica en que se buscaba el Volksgeist, el verdadero objeto de la
historia, dice el autor, es el alma humana, de manera que al hacerlo se llega a lo
que el alma ha pensado y sentido en las diferentes etapas de la vida de la
humanidad.

Marc Bloch decía que el historiador debía ir como un perro de presa tras el ser
humano, y era él mismo que recordaba a Fustel de Coulanges como un genio en
su estilo de describir y exponer, esa cuota de estilo que, decía, podía ser un don
de hadas, difícil de adquirir si no se hubiese recibido desde la cuna. Y Jacques Le
Goff ha mantenido este criterio de que al historiador le es necesario una cuota,
más grande de lo que se piensa, de arte para exponer lo que el método empleado
ha reconstruido.

La claridad de Fustel de Coulanges al analizar la formación y el modo de


evolucionar de las leyes, precisa que tales tuvieron un origen más que humano,
sagrado. Por eso las leyes, cualesquiera fuese su origen, en último término eran la
expresión de una voluntad no humana. Por lo tanto, las leyes tendieron a ser
inmutables, luego no eran derogadas, aunque se apreciara alguna contradicción
con otros preceptos.

No habiendo institución que sea eterna, la evolución de las ideas, es decir, el


cambio de las ideas, llevaba consigo, inevitablemente, el cambio de ellas, como
consecuencia, dice Fustel de Coulanges, del desarrollo del espíritu humano.

ERNEST RENAN

Joseph Ernest Renan (Tréguier, 27 de febrero de 1823 - París, 2 de octubre de


1892) fue un escritor, filólogo, filósofo e historiador francés.

Desde el racionalismo, siguió la corriente de la Escuela Liberal y contribuyó a la


Búsqueda del Jesús histórico con su obra La vie de Jesús (París, 1863). Esta
publicación le valió ser expulsado del Collège de France y el epíteto de "blasfemo
europeo" por parte del papa Pío IX. Renan se atrevió a tildar a Jesús de Nazaret
de "anarquista". Renan fue miembro de la Academia Francesa y administrador del
Collège de France.

Renan ha sido criticado por sus comentarios que alegaban las limitaciones de la
mentalidad semítica. Él afirmaba que la mente semita era limitada por el
dogmatismo y que carecía de una concepción cosmopolita de civilización. Para
Renan, los Semitas eran "una raza incompleta".
No obstante Renan basa más el concepto de raza en factores culturales,
concretamente lingüísticos, "razas lingüísticas", o religiosos, y sus referencias a
los semitas incluyen en la misma categoría cultural a árabes y judíos, "las
religiones del desierto".

Renan escribe El Futuro de la Ciencia, donde exponía que la religión podía


perfectamente ser reemplazada por la ciencia en los países desarrollados.
Consideraba Renan que solo la ciencia podía resolver los problemas humanos, en
tanto mantenga su escepticismo y la dialéctica comparativa. Si bien El Futuro de
Ciencia solo fue publicado hasta 1890, dos años antes de la muerte de Renan, sus
otras obras estuvieron permeadas por estos ideales.

KARL GOTTHARD LAMPRECHT

Karl Gotthard Lamprecht ( 25 de febrero de 1856 – 10 de mayo de 1915) fue un


historiador alemán.

Lamprecht nació en Jessen (elster) en la provincia de Sajonia. Cuando era


estudiante, se especializó en historia, ciencias políticas, economía y arte en las
universidades de Göttingen, universidad de Leipzig, y la universidad de Ludwig
Maximilian en Munich. Lamprecht también enseñó en la universidad Phillips-
Universität en Marburg, y más tarde en la Universidad de Leipzig, donde fundó un
centro dedicado al mundo comparativo e historia cultural (Institut für Kultur- und
Universalgeschichte).

Lamprecht estudió historia económica y social alemana y europea,


especializándose particularmente en la edad media. También atrajo una
considerable controversia con sus métodos interdisciplinarios y enfoques en una
amplia gama en preguntas sociales, ambientales, y psicológicas de la historia.

Lamprecht estipuló asimismo fuerzas psicológicas como las fuerzas básicas de la


historia. También derivó de la psique colectiva de cada nación y no de las fuerzas
idiosincráticas de las psiques individuales. Historiografía Lamprecht fundó una
recepción positiva para sus ideas y métodos en Francia y Estados Unidos.

MATERIALISMO HISTÓRICO

La concepción materialista de la historia (también conocida como materialismo


histórico), es un término acuñado por el marxista ruso Georgi Plejánov, que alude
al marco conceptual identificado por Karl Marx y usado originalmente por él y
Friedrich Engels para comprender la historia humana.

Aunque el materialismo histórico se halla estrechamente ligado al comunismo


marxista, historiadores, sociólogos e intelectuales no ligados al comunismo
marxista han tomado elementos de aquel para elaborar sistemas y enfoques
materialistas para el estudio de la historia.

La teoría materialista de Marx reconoce múltiples influencias intelectuales y


sociales:
 Del filósofo alemán G. W. F. Hegel, su método dialéctico.
 De los filósofos materialistas de la Ilustración, la idea de la influencia de las
circunstancias y de la educación sobre las personas.
 De los historiadores franceses del periodo de la Restauración, los
conceptos de clase social y lucha de clases.
 Del economista inglés David Ricardo la fundamentación económica de las
contraposiciones de clase y la teoría del valor-trabajo.
 Del socialista francés Pierre-Joseph Proudhon el énfasis en el proletariado
como la clase revolucionaria de la época.
 Del socialismo reaccionario, la crítica amarga de los ideales del liberalismo.
 Del socialismo de Sismondi, la crítica de las consecuencias antisociales del
régimen burgués.
 De la izquierda hegeliana y del filósofo Feuerbach, la crítica de la filosofía
especulativa y la idea de la religión como resultado de la auto enajenación
de la esencia humana.
 De la revolución francesa y de Blanqui, la doctrina de la dictadura
revolucionaria.
 De los cartistas ingleses, la importancia de la lucha política para la clase
obrera.
 Del socialismo utópico, sus objetivos últimos: abolición de las clases
sociales.

El materialismo histórico investiga la sociedad humana, tratando de hacerlo sin


presupuestos ideológicos, partiendo de los individuos empíricos y las relaciones
que establecen entre ellos.

El materialismo histórico tal como lo formuló Marx se encuentra indisolublemente


vinculado a la lucha de la clase proletaria por el comunismo. Esto no significa que
sus conclusiones (sobre todo en el campo económico) no sean científicas, sino
que no están dirigidas a constituir una ciencia positiva "neutral", sino un
conocimiento científico útil para la emancipación proletaria.

Tras la muerte de Marx, Engels prosiguió con su actividad política y con su


actividad intelectual en la aplicación y la divulgación de la concepción de la historia
desarrollada por Marx y él. En su obra Del socialismo utópico al socialismo
científico de 1880, dice:

La concepción materialista de la historia parte de la tesis de que la producción, y


tras ella el cambio de sus productos, es la base de todo orden social; de que en
todas las sociedades que desfilan por la historia, la distribución de los productos, y
junto a ella la división social de los hombres en clases o estamentos, es
determinada por lo que la sociedad produce y cómo lo produce y por el modo de
cambiar sus productos.
Fuera del campo del materialismo histórico de Marx, existen otros métodos de
investigación histórica para los cuales los rasgos definitorios de las sociedades
humanas y la evolución histórica de las mismas han estado determinada o
fuertemente condicionada ante todo por factores materiales (tecnología disponible,
sistema de producción, características geográficas y climáticas).

Debido al intento de establecer las ideas del materialismo histórico de modo


independiente a la versión marxista del mismo, se han acuñado términos nuevos
como: materialismo cultural, funcionalismo ecológico, determinismo geográfico,
determinismo económico, y otros, que pueden ser considerados como
concepciones materialistas de la Historia.

KARL MARX

Karl Marx , conocido también en castellano como Carlos Marx (Tréveris, Reino
de Prusia, 5 de mayo de 1818-Londres, Reino Unido, 14 de marzo de 1883), fue
un filósofo, intelectual y militante comunista alemán de origen judío.

En su vasta e influyente obra, incursionó en los campos de la filosofía, la historia,


la ciencia política, la sociología y la economía; aunque no limitó su trabajo
solamente al área intelectual, pues además incursionó en el campo del periodismo
y la política, proponiendo en su pensamiento la unión de la teoría y la práctica.

Junto a Friedrich Engels, es el padre del socialismo científico, del comunismo


moderno, del marxismo y del materialismo histórico. Sus escritos más conocidos
son el Manifiesto del Partido Comunista (en coautoría con Engels) y El Capital.

Las teorías de Marx sobre la sociedad, la economía y la política, que se conocen


colectivamente como el marxismo, sostienen que todas las sociedades avanzan a
través de la dialéctica de la lucha de clases. Fue muy crítico de la forma
socioeconómica vigente de la sociedad, el capitalismo, al que llamó la "dictadura
de la burguesía", afirmando que se llevaba a cabo por las acaudaladas clases
dueñas de los medios de producción, para su propio beneficio.

Y teorizó que, como los anteriores sistemas socioeconómicos, inevitablemente se


producirían tensiones internas, producidas por las leyes dialécticas, que lo
llevarían a su reemplazo por un nuevo sistema a cargo de una nueva clase social,
el proletariado. Sostuvo que la sociedad bajo el socialismo, sería regida por la
clase obrera en lo que llamó la "dictadura del proletariado", el "Estado obrero" o
"democracia obrera".

Creía que el socialismo sería, a su vez, eventualmente reemplazado por una


sociedad sin Estado y sin clases llamada comunismo puro. Junto con la creencia
en la inevitabilidad del socialismo y del comunismo, Marx luchó activamente para
la implementación del primero (el socialismo), argumentando que los teóricos
sociales y las personas desfavorecidas debían realizar una acción revolucionaria
organizada para derrocar el capitalismo y lograr un cambio socioeconómico.

Durante su juventud, y mientras se formaba en filosofía, Marx recibió la influencia


del filósofo alemán predominante en Alemania en aquel tiempo, Hegel. De este
autor tomó el método del pensamiento dialéctico, al que, según sus propias
palabras, pondría sobre sus pies; significando el paso del idealismo dialéctico del
espíritu como totalidad a una "dialéctica del devenir constante" donde la síntesis, a
diferencia de Hegel, no había sido realizada.

Además, sigue utilizando el método dialéctico para analizar las contradicciones en


la historia de la humanidad y, específicamente, aquella entre el capital y el trabajo.
HISTORICISMO

El historicismo es una tendencia filosófica, inspirada en las ideas de Benedetto


Croce y Leopold von Ranke, que considera toda la realidad como el producto de
un devenir histórico. Concibe al ser esencialmente como un devenir, un proceso
temporal, que no puede ser captado por la razón.

Concibe el devenir como historia y utiliza más la ciencia del espíritu. Según el
historicismo, la filosofía es un complemento de la historia. Su tarea consiste en
llevar a cabo una teoría de la historia. Esta se propone efectuar una exploración
sistemática de los hechos históricos.

Su tarea consiste en llevar a cabo una teoría de la historia. Esta se propone


efectuar una exploración sistemática de los hechos históricos. Los hechos
científicos, artísticos, técnicos, políticos o religiosos pueden ser considerados
hechos históricos porque tienen importancia para la vida del hombre.

El historicismo sostiene que no debe existir una teoría histórica con esquemas
previos que imponga sobre el pasado. Ranke postula que debe ser el pasado el
que hable; el historiador no tiene boca. Pone de manifiesto un método, el
filológico, que consiste en el recurso a los documentos escritos oficiales.

El término historicismo fue acuñado por el historiador alemán Karl Werner (1821-
1888) para señalar una corriente de opinión que acentúa la importancia de la
historia en el destino del hombre y de la sociedad.

El historicismo es, en consecuencia, la tendencia a hacer de la historia la ciencia


fundamental para la interpretación de la realidad social. Todo se resuelve en la
historia. El punto de partida de todas las demás ciencias es la historia.

La historia es, así, un punto de vista para comprender e interpretar correctamente


los acontecimientos humanos. Es lo que los filósofos y antropólogos alemanes del
siglo XIX llamaban verstehen: un peculiar modo de entender los sucesos humanos
dentro del contexto histórico y a partir del conocimiento de la historia.

El historicismo juzga los hechos no por su valor intrínseco sino en función del
medio histórico en el que se suscitan. Es su historicidad la que les da sentido.
Pero no sólo los hechos: también la lengua, la literatura, el arte, el Derecho, las
costumbres, la religión, las creencias, los sentimientos morales y otros elementos
de la vida social, que son el producto de una elaboración colectiva, inconsciente e
involuntaria, deben interpretarse en el contexto de la historia.

Todos ellos están condicionados por circunstancias de espacio y de tiempo. Son


valores históricos. No son, por tanto, absolutos ni eternos. Están sujetos a
incesante transformación.

JOHANN GUSTAV DROYSEN

Johann Gustav Droysen (Treptow del Rega, 6 de junio de 1808 - Berlín, 19 de


junio de 1884) fue un destacado historiador alemán. Fue profesor en el instituto
Gymnasium zum Grauen Kloster de Berlín en 1829, desde 1840 fue profesor de la
Universidad de Kiel, y también lo fue en la de Jena (a partir de 1851) y en la de
Berlín (desde 1859).

Como teórico de la historia, Droysen sentó las bases de la metodología de la


historiología moderna. El método crítico con las fuentes, que tuvo gran influencia
en la historiografía, se remonta a Droysen y Barthold Georg Niebuhr. Entre los
discípulos más importantes de Droysen se encuentra Friedrich Meinecke. Su hijo
Gustav Droysen fue igualmente profesor de Historia y llevó a cabo significativas
investigaciones sobre la historia de la Guerra de los Treinta Años.

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