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Preparación Metalográfica.

Introducción.
LA metalografía es la ciencia que estudia las características de las microestructuras o
constitutivas de un material o aleación relacionadas con las propiedades físicas químicas y
mecánicas, mucha es la información que puede proporcionar un examen metalográfico,
para ello se obtienen muestras que sean representativas y que no presente alteraciones
debidas a la extracción o preparación metalográfica. Entre las características estructurales
se encuentra el tamaño de grano, forma y distribución de las fases que comprende la
aleación y de las inclusiones no metálicas, así como la presencia de las irregularidades y
comportamiento del acero o metal.

Consideraciones teóricas.
La elección de la muestra o la realización de la parte que va a ser estudiada debe de hacerse
de tal modo que represente todo el metal o puede ser el sitio de la falla de una pieza o el
límite entre una soldadura y el metal base.

El corte de la probeta puede realizarse con acero y segueta si el material es de baja dureza,
cuando el material presenta resistencia al corte se usa el disco abrasivo, teniendo la
precaución de evitar el calentamiento que puede ocasionar alteraciones microestructurales
utilizando líquidos refrigerantes al corte.
El desbaste es la operación siguiente al corte y el montaje de la probeta y se efectúa con un
trozo de papel abrasivo (lija) apoyado sobre una superficie plana para evitar un desbaste
defectuoso, Al pasar de un abrasivo al otro, debe girarse la probeta 90° y lijar hasta que se
borre por completo las huellas del abrasivo anterior, teniendo siempre el cuidado de lavar
la probeta con agua abundante.

El pulido tiene por objeto, eliminar las rayas finas producidas en la última operación del
desbaste y conseguir una superficie sin rayas y con alto pulimiento a espejo. El éxito del
pulido y tiempo empleado de la operación depende en gran parte del cuidado con el que se
realizó el desbaste.

Desarrollo experimental.
Se obtuvo una barra de acero SAE 1018, de esta barra se obtuvieron pequeñas muestras
llamadas probetas, estas probetas se consiguieron cortando el acero con una segueta para
evitar el calentamiento del acero.
Cada probeta que se tenía fue sometida a una máquina de esmeril angular, la esmerilización
de la probeta se hizo con el propósito de eliminar el material sobrante de las piezas, ya que
la probeta necesita estar sin imperfecciones y planas sus superficies.

Se hizo el desbaste de cada probeta, efectuándose con un trozo de papel abrasivo (lija)
apoyándonos sobre una superficie plana para evitar un desbaste defectuoso. Cada vez que
pasamos al otro abrasivo se giraba la probeta 90°, las lijas que utilizamos para el desbaste
fueron las de: 240, 320, 360, 600, 1000 y 1200.

Las probetas fueron pulidas, esto se hizo apoyando la cara que se desbasto de la probeta
sobre un paño embutido con una suspensión de abrasivo (alúmina al 3%) sobre un disco
fijado que gira accionado por un motor, para de esta manera conseguir una superficie sin
rayas y con alto pulimiento a espejo.
Al final de todo el proceso a la muestra se le hizo una prueba de dureza Rockwell. La dureza que se
obtuvo fue de 51.5 “Rockwell A”.

Resultados.
La probeta pulida a espejo presenta puntos negros, esto se obtiene debido a las inclusiones
no metálicas presentes en el material.
Discusión de resultados.
La preparación metalográfica nos sirvió para quitar las imperfecciones y rayas al acero,
haciendo posible visualizar su microestructura al observarla en el microscopio.

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