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Puerto Montt, veinte de Agosto de dos mil diez

VISTOS OIDOS Y CONSIDERANDO


PRIMERO: Que ante este Juzgado de Letras del Trabajo se ha
iniciado causa RIT O-130-2010 en procedimiento de aplicación general
en el que comparece Ximena Alejandra Villarroel Carrizo, enfermera
universitaria, domiciliada para estos efectos en calle O Higgins 167
oficina 706 Puerto Montt, quien cobro de indemnizaciones,
prestaciones e indemnización por daño moral en contra del Instituto de
Seguridad del Trabajo persona jurídica del giro de su denominación
representada por su Gerente Zonal Moisés Fernández Valdebenito
ambos domiciliados en Av. Diego Portales 2200 Puerto Montt por los
siguientes argumentos de hecho y derecho: El 16 julio 2007 comenzó
a prestar servicios bajo subordinación y dependencia para dicho
Instituto desempeñándose como enfermera, hasta el 20 Abril 2010
fecha de terminación de su contrato por despido indirecto por las
razones que expondrá. Su última remuneración mensual fue de
$1.117.893. El 20 de Abril 2010 se vio obligada a poner término a su
relación laboral de acuerdo al artículo 171 del Código del Trabajo que
regula el autodespido, en relación con el artículo 2 y 160 Nº 1 letra b)
del Código del Trabajo, esto es, por haber incurrido su empleador en
conductas de acoso sexual graves y debidamente comprobadas según
acreditará, hechos que, sumados al incumplimiento del deber de
cuidado del empleador estipulado en el artículo 184 del mismo Código
constituyen el fundamento del despido indirecto, así como el
consecuente derecho al cobro de las indemnizaciones demandadas.
Hechos que justician el despido: A contar del mes de Julio 2008 y
hasta el mes de Abril 2009 se desempeñaba como enfermera
coordinadora el IST Puerto Montt fue víctima de conductas de acoso
sexual acometidas en su contra por parte de su jefe directo, el
entonces directos médico del IST Puerto Montt Dr. Alvaro Escobar
Borie, acciones consistentes en constantes presiones con el objeto
que accediera a mantener relaciones sexuales con él, acciones que se
materializaron en su lugar de trabajo como en los viajes que debían
realizar junto a otros funcionarios del Instituto a diferentes zonales. Es
así como el Dr. Escobar Borie durante el tiempo referido le hacía
comentarios o propuestas como “vamos a tomarnos un trago para
poder conversar con más tranquilidad estos temas y después
pasamos a otra parte. Ud. me tiene loco. Porqué me rechaza, que
tengo de malo, parece que es neutra o asexuada”. Pese a la denuncia
verbal por esta situación efectuada ante el entonces Gerente Zonal del
IST Fernando Hudson quien a su vez habló con el Dr Escobar a fin
que cesara el hostigamiento hacia ella, las acciones de acoso sexual
lejos de terminar fueron en aumento. Es así como en reuniones
sostenidas fuera de la Institución, después de haber consumido algún
trago, comenzaba a tirarse encima de ella, apretándola contra su
cuerpo, tocándole el cuerpo con sus manos y proponiéndole que
vayan a otro lugar o a su casa. Frente a su negativa reaccionaba con
descontrol y violencia gritándole “porqué me rechaza, que tengo de
malo, me tiene asco” para luego ignorarla en el trabajo y mostrarse
resentido con ella. Con el correr del tiempo su jefe, el Dr Alvaro
Escobar comenzó a ser mas directo aún en sus peticiones diciéndole
cosas tales como: “ si yo solo quiero acostarme con Ud. Para que se
me pasen las ganas y después voy a estar tranquilo por un tiempo y
cuando me den ganas otra vez le digo y así pasa la tensión y todos
andamos felices”. O bien le decía: “Vamos a un motel, nos tomamos
un trago y lo pasamos bien y somos personas maduras, podemos
hacer esto y después seguir la vida normal”. Frente a mis permanentes
negativas optaba por no hablarle lo que dificultaba su trabajo al no
pode resolver temas sobre los cuales necesitaba su autorización como
director médico. En algunas oportunidades al entrar a su oficina
cerraba la puerta con llave y se acercaba a ella con intención de
besarla o manosearla diciéndole: “me tiene excitado y en estos
momentos tengo una erección tan solo mirándola, para que se hace si
Ud siente lo mismo aunque no lo demuestre”. Frente a su negativa le
gritaba: “Como puede ser tan fría Ud. no es normal, reconozca de una
vez que siente algo por mí. Por lo anterior comenzó tomar distancia
con Escobar y a sentirse frustrada, inclusive con sentimientos de
culpabilidad debido a que el referido le decía como: “ Ud. Tiene la
culpa de existir y además me provoca. Me coquetea, me sonríe, se me
acerca y no podemos trabajar así. Inclusive en reuniones de jefatura
llegó a decir. Yo no puedo trabajar con ella. No logramos tener buena
comunicación, para luego a solas decirle: “Ud sabe lo que tiene que
hacer para tener buena comunicación conmigo” Todo ello comenzó a
afectar su relación con otros jefes porque comenzó a desautorizarla
delante de todo el equipo de trabajo. Sus compañeros de trabajo
comienzan a darse cuenta de lo que sucedía y le decían. Dale la
pasada para que se solucionen los problemas porque ya no
aguantamos su descontrol.. En el último viaje realizado a la zonal de
Castro en Abril 2009 y después de cenar con un grupo de personas
que viajaron cada uno se fue a su habitación del Hotel. Estando
dormida en horas de la madrugada sintió que golpeaban la puerta de
su habitación y oyó que Escobar le decía que había ocurrido un
accidente y que le abriera la puerta. Lo atendió en la puerta y empezó
a forcejear tratando de entrar diciéndole que todo lo que había pasado
y lo que me decía era porque ella no lo tomaba en cuenta como
hombre y por eso actuaba vengándose de ella.” Le dio la mano como
aceptando su disculpa para que la dejara tranquila pero lejos de
retirarse aprovechó par ingresar por la fuerza a la habitación y
perseguirla hasta tirarse sobre su cuerpo dificultando su respiración y
movimiento por lo que lo empujó. Dijo: “ quiero tener sexo con Ud,
acaso no entiende”. Luego se desnudó delante de ella enseñándole
sus genitales frente a lo cual ella abandona la habitación medio
shockeada ante lo cual finalmente se fue. Posteriormente y luego que
ella reiterara sus reclamos ante la gerencia comenzó a amenazarla
con expresiones como “me acusó. La tenía en un pedestal y ahora
está en el suelo. Yo no estoy de acuerdo en que Ud sea la enfermera
coordinadora. Todo depende de Ud. Mantener una buena
comunicación y sabe como.” Ante la inactividad del IST que no dispuso
ninguna medid de protección en su favor, con fecha 13 Mayo 2009
hizo la denuncia escrita por acoso sexual a la Gerencia de Puerto
Montt. Producto del conocimiento público de estos hechos se
determinó relevarlo de sus funciones directivas y médicas y Escobar
abandona la ciudad como una forma de evadir sus responsabilidades
e intentar liberar al IST de las acciones procedentes en su contra sin
perjuicio de lo cual su empleadora fue sancionada administrativamente
por la Inspección del Trabajo con dos multas de 60 UF cada una por
no adoptar oportunamente medidas de protección en su favor en razón
de los hechos referidos. Vulneración de derechos y perjuicios
derivados: La situación descrita constituye claramente una vulneración
de los derecho que le garantiza el artículo 2º del Código del Trabajo,
esto es, el respeto a la dignidad de su persona en el trato laboral
proscribiendo expresamente las conductas de acoso sexual.
Progresivamente comenzó a sufrir deterioro de su integridad física y
especialmente síquica, llegando a perder la visión del ojo izquierdo por
parálisis del músculo ciliar producto el estrés mantenido durante largos
meses según diagnóstico médico. Desde el punto de vista profesional
le ha afectado severamente desde el momento que el IST en
conocimiento de lo sucedido y pese a sus reclamos y estando obligado
por el artículo 184 y 211-B del Código del Trabajo no adoptó medida
alguna para brindarle protección ni realizó la investigación o remisión
de los antecedentes a la Inspección del Trabajo en el plazo
contemplado en el artículo 211 –C del mismo cuerpo legal, sin aclarar
tampoco el futuro de su situación contractual y desempeño laboral
hasta la fecha de su despido indirecto. Perjudicó con ello
oportunidades de empleo fuera de la Institución demandada sin contar
con el desprestigio personal y afectación sicológica de su persona y
entorno familiar. A raíz de lo anterior, actualmente se encuentra con
licencia médica en tratamiento siquiátrico y sicológico sufriendo
patologías de vértigo severo, síndrome ansioso depresivo, desbalance
emocional del tipo angustioso, trastorno mixto ansioso depresivo que
han impedido su desempeño laboral. Lo anterior adicionalmente ha
repercutido en su situación económica por los costos asociados y cuyo
reembolso igualmente se reclamará. Por su parte, el IST hasta la fecha
de su despido indirecto no aclaró nunca su situación laboral, ni
eventual alta médica, ni propuso modificación alguna de su contrato
como una forma de protección, lo cual justifica a su entender la
necesidad de recurrir al despido indirecto para poner término a esta
situación gravemente perjudicial para ella. Así, los perjuicios materiales
y morales cuya indemnización se persigue devienen necesariamente
de la vulneración en la forma descrita de sus derechos fundamentales
de parte de su empleadora, derechos reconocidos constitucionalmente
, a saber, el derecho a la integridad física y síquica, el respeto a la
protección de la vida privada y a la honra de la persona , la liberta de
trabajo y su protección y el derecho a la libertad e indemnidad sexual,
derivado del incumplimiento del deber de seguridad de su empleadora
a su respecto durante la vigencia de su contrato, que ha derivado en
las enfermedades profesionales ya descritas. Respeto del Derecho: El
artículo 2 inciso 2º del Código del Trabajo señala expresamente que
las relaciones laborales deberán siempre fundarse en un trato
compatible con la dignidad de la persona. Es contrario a ella entre
otros, el acoso sexual, entendiéndose por tal el que una persona
realice en forma indebida por cualquier medio, requerimientos de
carácter sexual, no consentidos por quien los recibe y que amenacen
o perjudiquen su situación laboral o sus oportunidades de empleo. El
artículo 160 Nº1 letra b) del Código del Trabajo señala expresamente
que el contrato de trabajo termina sin derecho a indemnización alguna
cuando el empleador le ponga término invocando una o más de las
siguientes causales: Alguna de las conductas indebidas de carácter
grave, debidamente comprobadas que a continuación se señalan: letra
b) Conductas de acoso sexual. El artículo 171 del mismo Código
establece que si quien incurriere en las causales del artículo 160 fuere
el empleador el trabajador podrá poner término al contrato y recurrir al
Juzgado respectivo par que este ordene el pago d las indemnizaciones
establecidas en el inciso 4º del artículo 162 y en las incisos 1º o 2º del
artículo 163 según corresponda, aumentada en un 80% tratándose de
la del Nº 1. del artículo 160. Tratándose de las letras a) y b) el
trabajador podrá reclamar simultáneamente las otras indemnizaciones
a que tenga derecho. Por tanto, previas citas legales solicita declarar
que el despido indirecto se ajusta a derecho y en consecuencia
ordenar el pago de las siguientes sumas de dinero.1.- La suma de
$1.117.893 por indemnización sustitutiva de aviso previo. 2.- La suma
de $3.353.679 por indemnización por años de servicio. 3.- La suma de
$2.682.943 por concepto de aumento de indemnización por años de
servicio 4.- La suma de $2.347.549 por vacaciones proporcionales 5.-
La suma de $317.714 por concepto de daño emergente derivado de
los costos económicos de los tratamientos médicos pagador en razón
de los actos e acoso sexual. 6.- La suma de $50.000.000 por daño
moral derivado de los mismos hechos.
SEGUNDO: Contestando la demandad expone que no controvierte l
relación laboral ni que su remuneración fue de $1.136.643. A
continuación hace una recopilación de los hechos señalados en el
libelo de la demanda. Refiriéndose a ellos expone que la demandada
nunca ha pretendido evadir las responsabilidades que le pudieren
corresponder – en el acaso que la Srta Villarroel acredite los graves
episodios que narra en su presentación – y espera no las eluda quien
o quienes han promovido esta demanda que SS no dudará en estimar
como infundada. El IST reitera que no ha cometido nunca, ni a través
de actuales o ex trabajadores, acoso sexual en contra de la Srta
Villarroel. Por lo dicho no puede atribuírsele responsabilidad alguna
pues no ha incurrido en las conductas que describe la letra b) del N° 1
del artículo 160 del Código del Trabajo ni en las que describe la actora
en su representación. Tampoco ha dejado de cumplir – aunque no
forme parte de la causal invocada para el autodespido – con lo
dispuesto en nuestro ordenamiento legal para proteger eficazmente la
salud de los trabajadores. La verdad es muy distinta de cómo la
presenta la actora. Así, como consta de la prolija investigación interna
que conforme a la ley y al propio Reglamento Interno, en tiempo y
forma realizó su representada, cuyas conclusiones fueron remitidas a
la Inspección Provincial del Trabajo. Agrega que con fecha 13 Mayo
2009 doña Ximena Villarroel dedujo ante Moisés Fernández
Valdebenito, gerente zonal de la empresa denuncia escrita por acoso
sexual. En su comunicación, la denunciante expresa que el motivo de
su carta es realizar la denuncia de acoso sexual que ha sufrido desde
que asumió como enfermera coordinadora en Julio 2008 de parte de
Alvaro Escobar Borie, médico director. Refiere que al comenzar a
ejercer como enfermera coordinadora comenzó a ser constantemente
presionada por esta persona para tener relaciones sexuales. Estas se
realizaban en tres instantes, según dice. Durante su jornada de
trabajo, en reuniones realizadas fuera d la Institución y durante viajes
realizados a las diferentes zonales. A continuación repite cada uno de
los actos de acoso relatadas por la demandante en su libelo.- Agrega
que una vez recibida la denuncia formal se inicia investigación interna
cuyo objeto es determinar la existencia de acoso sexual en los
términos del artículo 2 ° del Código del Trabajo esto es, si el Dr.
Escobar realizó en forma indebida, por cualquier medio,
requerimientos de carácter sexual no consentidos por quien dice
haberlos recibido, esto es la enfermera Villarroel y que amenazaren o
perjudicaren la situación laboral o las oportunidades de empleo de
esta última. Para tal propósito los días 4 y 5 Junio 2009 se constituyó
en dependencias de la zonal Puerto Montt don Luis Eduardo Azócar
Castillo, abogado, de la gerencia de personal de la empresa quien lo
instruyó para que procediera a investigar la denuncia de acoso sexual
formulada por la trabajadora Ximena Villarroel, conforme al
procedimiento previsto para estos casos contenido en el párrafo 1 del
Título XIII del reglamento Interno vigente en la empresa, párrafo del
acoso sexual. El abogado formó un grueso expediente 117 fojas donde
22 son solo conclusiones que se pondrán a disposición de SS en su
oportunidad. Cabe añadir que pese al agradecimiento de antemano
que doña Ximena expresa por la recepción de su denuncia por parte
del empleador y su disposición a aportar mas pruebas y declaraciones
para que se realice la investigación en forma correcta no fue posible
obtener de ella una declaración formal, excusándose ante el abogado
investigador, quien concurrió previa cita y autorización de la
denunciante a su domicilio particular atendido su reposo médico,
limitándose a declarar entre otros hechos que constan en su denuncia
que confiaba más en la Inspección del Trabajo y que acataría lo que
resolviera dicha instancia administrativa. Los hechos constitutivos del
supuesto acoso sexual que la demandante describe en su
comunicación de autodespido de fecha 20 de abril de 2010 son los
mismos que describe en su demanda de 6 de mayo 2010. Antes de la
comunicación del 13 Mayo de 2009 su representada no conoce de
ninguna denuncia verbal o escrita relativa a los hechos. Las
conclusiones de su investigación son reproducidas en esta
contestación para demostrar que la demandada no ha infringido norma
legal en relación con la ex trabajadora, como también para enervar de
este modo su millonaria pretensión. A continuación el demandado
transcribe las conclusiones de su investigación por denuncia de acoso
sexual que contiene 23 considerandos para concluir en el
considerando vigésimo cuarto que: “no existió de parte de la
denunciante mas medio probatorio que sus propias aseveraciones,
debiendo considerarse que los dichos de los entrevistados en esta
investigación resultan del todo insuficientes para tener por corroborada
su propia versión de los hechos, como lo exige la ley, hechos que
importen un acoso sexual en los términos definidos en el citado
precepto legal. Por ello, resuelve: Que la apreciación de los
antecedentes recopilados al cabo de la investigación interna realizada
por el IST conforme a las normas prescritas en su Reglamento Interno
y a lo dicho en la Ley 20.005 no resultan suficientes para adquirir la
convicción mas allá de toda duda razonable, que el denunciado Alvaro
Escobar Borie hubiere formulado requerimientos de carácter sexual no
consentidos y/o que hubieren amenazado o perjudicado la situación
laboral de la trabajadora Ximena Villarroel Carrizo”. También expone
que en cuanto a la sanción administrativa por la Inspección del trabajo
luego de su propia investigación por la denuncia de acoso sexual
interpuesta por la demandante ante ese organismo, la multa impuesta
fue reclamada judicialmente ante el 2° Juzgado de Puerto Montt y fue
cursada por supuesta infracción al artículo 211-B del Código del
Trabajo. El IST estima que no cometió dicha infracción ya que sí
realizó investigación. En cuanto a las medidas de resguardo eran
impracticables pues la denunciante se encontraba fuera del lugar de
trabajo, con licencia médica. Dicha reclamación no ha sido resuelta.
En cuanto a las sumas demandadas , su representada declara que por
no haber incurrido en conductas graves de acoso sexual el”
autodespido” de Ximena Villarroel Carrizo debe entenderse como una
renuncia a su contrato de trabajo de acuerdo a lo dispuesto en el
inciso final del artículo 171 del Código del Trabajo por lo que nada se
le adeuda. Por lo que respecta a la indemnización por daño moral que
la actora cuantifica nada menos que en $50.000 se permite reproducir,
esta vez como excepción de fondo y en obsequio de la economía
procesal lo dicho respecto a la excepción de incompetencia. Con todo,
se permite recordar lo que dice la doctrina al respecto, cuando señala
como “límite para la procedencia de la indemnización por daño moral
por despido el denominado “principio de extraordinariedad” esto es,
que la reparación del daño moral por ruptura abusiva del contrato de
trabajo sea una situación excepcional, aplicable en limitadas
ocasiones. Este principio se fundamenta en el carácter cerrado del
sistema de indemnizaciones tarifaras laborales, que no permiten
aplicación de otras normas incluso en el caso que haya perjuicios no
cubiertos en la tarifa legal, salvo que existan causas de verdadera
gravedad…Por otra parte la doctrina civil argentina ha precisado que..
“el daño moral contractual, que es el que parece pretender la actora,
no puede ser el efecto común en la siquis de una frustración , un
crédito insatisfecho, una deuda no saldada. Debe tener una particular
entidad, gravedad o jerarquía. De ahí que deba ser probado; y que el
juez tenga un gran margen en l apreciación sobre su responsabilidad.
De lo contrario, todo incumplimiento, sea de la prestación que fuere,
total o parcial, mero retardo o cumplimiento irregular desencadenaría
la responsabilidad por agravio moral. Y ello no es el fin querido pues
para compensar esos perjuicios está la indemnización por daño
material, inexistente también en este caso. En fin, su representada
niega todo daño moral atribuible a su actuación como empleador. Por
tanto solicita no dar lugar a la demanda por cuanto su parte no ha
incurrido en ninguna de las conductas que se le atribuyen, menos ha
infringido precepto legal alguno, por lo que no debe darse lugar a las
indemnizaciones. Solicita se declare en su lugar, que doña Ximena
Villarroel ha invocado falsa y/o maliciosamente la causal del artículo
160 N° 1 letra b del Código del Trabajo y que su demanda carece de
motivo plausible, con costas.
TERCERO: Que llamadas las partes a conciliación esta no se
produjo.
CUARTO: Que se recibió la causa a prueba fijándose los
siguientes puntos sobre los que deberá recaer: 1.- Si la demandante
en el período comprendido entre el mes de Julio 2008 y Abril 2009 fue
víctima de conductas de acoso sexual de parte de su jefe directo Dr.
Alvaro Escobar Borie, traducidos en constantes presiones y acciones
en que se materializaban 2.- Si la demandante puso en conocimiento
de la gerencia del IST, los hechos de acoso relatados en la demanda.
3.- Si la demandada adoptó las medidas necesarias de protección a
favor de la trabajadora en tanto las condiciones de trabajo lo
permitieran. 4.- Si producto de las conductas de acoso sexual
demandadas y desplegadas por el jefe directo de la trabajadora, sufrió
esta deterioro en su integridad física y síquica 5.- Si la trabajadora
puso término a su contrato de trabajo por haber incurrido su
empleador en conductas de acoso sexual grave. 6.- Si el empleador
pagó o concedió el feriado proporcional de la demandante 7.- Si la
trabajadora incurrió en costos por tratamiento médico a raíz de los
hechos denunciados. 8.- Si la demandante sufrió daño moral producto
de los hechos de acoso sexual denunciados. En su caso, monto al que
ascienden.
QUINTO: Que la parte demandante incorporó la siguiente
prueba:
Documental: 1.- Ejemplar del diario El Llanquihue de fecha 26 junio
2009 en donde en titular de primera página se señala lo siguiente”
Colegas rompen silencio. Denuncian a médico por acoso. Un doctor,
dos enfermeras y un paramédico lanzaron graves acusaciones contra
profesional puertomontino, entre las que se incluyen presiones
laborales e insinuaciones sexuales. Diputado entregó pruebas
contundentes” En la página 12 se desarrolla la noticia que consiste en
que “el diputado Fidel Espinoza junto al médico Eduardo Santibáñez ,
su esposa, la enfermera Marcela Vera, la enfermera Jimena Villarroel y
la paramédico Claudia Cornejo formularon denuncia contra Alvaro
Escobar. La situación más grave que involucraría a Escobar tiene que
ver con la enfermera Villarroel y fue relata por Espinoza “. A
continuación el diputado Espinoza refiere que la enfermera fue
acosada por escobar y que el hecho más grave ocurrió en abril
pasado(2009) mientras realizaban una visita laboral a Chiloé
tratándose de una situación directa de cuasi abuso sexual donde fue
prácticamente violentada por este personaje en manifiesto estado de
ebriedad”. 2.- Páginas pertinentes del Diario El Llanquihue de 29 de
junio de 2009 donde en la portada aparece fotografía de de la
demandante y en la pagina 12 una entrevista en que narra los acosos
que sufrió de parte de Escobar y que coinciden con algunos de los
señalados en la demanda. 3.- Copia de información aparecida en el
portal “crónica libre.cl” de fecha 6 de julio de 2009 en que aparece
como titular de noticia. “Inspección del Trabajo sancionó a médico por
acosar sexualmente a enfermera” y luego el desarrollo de la noticia
que es comentada por la enfermera Villarroel y el diputado Espinoza.
4.- Copia autorizada de audiencia del Tribunal de Garantía de Puerto
Montt de fecha 25 de noviembre de 2009, en que el querellante Alvaro
Escobar ratifica desistimiento por denuncia delito de injurias graves
contra Ximena Villarroel Carrizo, Marcela Alejandra Vera y Eduardo
Santibáñez Handschuh. 5.- Carta de autodespido de fecha 20 de abril
de 2010 dirigida a Moisés Fernández Valdebenito, firmada por Ximena
Villarroel, en que comunica que le pone término indirectamente a su
contrato de trabajo por la causal del artículo 160 Nº 1 letra b) del
Código del Trabajo, eso es: Por haber sido víctima de acoso
conductas de acoso sexual. Los hechos que fundan la causal dicen
relación con las diversas acciones de acoso sexual cometidas en su
contra por su ex jefe directo y ex Director Medico Dr. Alvaro Escobar
Borie ocurridas durante el período comprendido entre el mes de julio
de 2008 y abril de 2009 consistentes en múltiples expresiones y
acciones de presión en su contra a objeto que accediera a mantener
relaciones sexuales con él ,a lo que se negó sistemáticamente
reclamando oportunamente de tal situación ante la gerencia del IST
Puerto Montt. Producto de lo anterior y del hecho que el IST no adoptó
ninguna medida de protección en su favor es que se ha visto
gravemente perjudicada en su situación laboral y oportunidades en el
empleo así como en su integridad física y síquica lo cual le ha
impedido retomar sus actividades laborales hasta la fecha y ha
implicado la pérdida de oportunidades de desarrollo profesional. En
razón de lo anterior se reserva el derecho de demandar ante los
tribunales competentes el pago de las indemnizaciones de carácter
legal procedentes. También acompaña la copia dirigida a la Inspección
del Trabajo y los comprobantes de su despacho por correo. 6.-
Certificado emitido por el Dr. Manuel Mardones Torres, otorrino, que da
cuenta del diagnóstico de la demandad de “vértigo severo, síndrome
ansioso depresivo actualmente el tratamiento desde el 14 Mayo 2009
aun sin determinar fecha de término el tratamiento. 7.- Certificado
emitido por el psicólogo Antonio Arroyo Romero de fecha 27 de mayo
de 2009 donde certifica que la demandante está siendo tratada desde
30 de abril de 2009 por un desbalance emocional de tipo angustioso
en respuesta a una situación laboral problemática. 8.- Certificado del
médico siquiatra Alejandro Igor Oyarzún de fecha 22 de junio de 2009
quien certifica atender a la demandante quien cursa un trastorno mixto
ansioso depresivo.
TESTIMONIAL: De Fernando Hudson Soto: Declara que conoce a
Ximena Villarroel porque trabajó en IST Pto. Montt de marzo de 2007 a
octubre de 2008. Fue gerente zonal. Tuvo conocimiento el acoso
sexual desde agosto de 2008. Ximena le planteó las conductas de
Alvaro Escobar de tipo sexual y amoroso. El conversó sobre ello con el
Dr. Escobar quien le bajó el perfil señalando que ella lo
malinterpretaba. Le dijo que cuidara la forma de la relación entre jefe y
funcionario para que ello no vuelva a ocurrir. El no realizó una
investigación propiamente tal. El Dr. Escobar era médico director y
Ximena enfermera. Ximena llegó el segundo semestre del 2007 y a
principios del segundo semestre del 2008 asumió como enfermera
coordinadora. Escobar tuvo conflictos con personal, con clientes, con
trabajadores. Tenía un trato altanero. A Ximena no se la podía
trasladar pues no había cargo para ella. Le pidió a Katia Barrera, otra
funcionaria que vigilara la conducta del Dr. Contestando las preguntas
de contrainterrogación señala que en el recinto del Instituto donde
trabajaban, hay circulación de personas. No conoció el Reglamento
Interno que es el año 2008. El trajo al Dr. Escobar por competencia
técnica.
De Cristian Andrés Aburto Igor. Es enfermero. Entre septiembre de
2008 hasta agosto de 2009 eran colegas de trabajo. Ximena era
enfermera coordinadora y él enfermero clínico. Escobar era el superior
jerárquico. El se relacionaba con ambos. Tiene conocimiento que él en
trabajo y fuera de él Ximena era hostigada por Escobar. Tiene
referencias, comentarios de pasillo. Era un secreto a voces que la
hostigaba. Ximena le mostró un correo que le mandó Escobar donde
firmaba como su Dr. favorito, pórtese bien. También le envió una de
esas cadenas que circulan consistente en una partitura musical con
notas representadas por dibujos de connotación sexual. El comentario
de pasillo tenía dos puntos de vista: Que Ximena era acosada y la otra
que tal vez Ximena era la culpable. Actos directos no vio. En el trabajo
Escobar comenzó a ignorarla la pasaba por alto.
Patricia Andrea Moyano Vera, fiscalizadora de la Inspección del
Trabajo quien tuvo a su cargo la investigación de la denuncia de acoso
sexual interpuesta ante es organismo por la demandadnte. Explica el
método de trbajajo que utilizó consistendfe en tomar declaraciones
juradas a los trabajadores del IST, su gerente zinal, al la denunciante y
al denunciado.Estas dclaraciones eran luego transcritas por ella y
presentadas al decklarante para su firma. Ratifica en su testimonio
declaración de cajera del IST que en su investigación aparece como
declarante 4 quien declra que hace como un año fue mandada a
buscar un libro a la oficina del Dc. Escobar y presenció que detrás de
un biombo allí existente estaban el Dr Escobar y la Srta Ximena ,
frente a frente. El tenía los brazos sobre los hombros de Ximena y ella
decía: Por favor, por favor, en tono de queja.
SEXTO: Que la parte demandada incorporo la siguiente prueba:
DOCUMENTAL: 1.- carta de fecha diecisiete de julio de dos mil nueve
firmada por Jorge Gorigitia gerente de personal del IST en que
comunica al Inspector Provincial del Trabajo de Puerto Montt que el
IST ha decidido aplicar a doña Ximena Villarroel la sanción de
amonestación verbal contenida en el Reglamento Interno como
consecuencia que la investigación que ellos hicieron se concluyo que
no existió acoso sexual; además le hace presente que está a la espera
de las observaciones que le merezca a la Inspección dicha
investigación que les fuera remitida el 12 de junio: 2) acta de
notificación de fecha tres de julio dos mil nueve en que se comunica a
Moisés Fernández gerente del IST resolución reservada Nº 11 de la
Inspección del Trabajo que le aplica multa. 3) carta de fecha 10 de julio
dirigida al gerente de personal IST ; suscrita por el Dr. Alvaro Escobar
en que presenta su renuncia: 4) Memorandun interno de gerencia
zonal de Puerto Montt al abogado Luis Azocar Castillo en que se le
adjunta declaración jurada de Pablo Griffin en que indica que es
conserje del condominio donde vive Dr. Escobar y que la denunciante
ingreso al condominio en horas de la noche autorizada por el Dr.
Escobar 5.- Carta de 19 de junio de 2009 suscrita por Jorge Goigitia
Carneyro gerente de personal del IST dirigido a Jorge Moreira
González Inspector Provincial el Trabajo de Puerto Montt, donde le
adjunta las conclusiones recaídas en la investigación interna que
desarrolló el IST con ocasión de la denuncia por coso y que concluye
que no lo hubo. 6.- Copia de toda la investigación interna que
desarrolló en su oportunidad el IS con motivo de esta denuncia,
documento que consta de 95 fojas se incluye conclusión del
investigador, abogado Luis Eduardo Azócar Castillo quien concluye
que no se acreditó mas allá de toda duda razonable la existencia de
acoso sexual. 6.- Copia de carta de fecha 13 Mayo 2009 de la
demandante dirigida al gerente zonal Moisés Fernández en que
denuncia formalmente el acoso sexual de que es víctima y lo describe
en casi los mismos términos que utiliza en la demandada.
Confesional de Ximena Villarroel demandante de autos quien
absolviendo posiciones declara que Escobar la acosaba primero
cuando trabajaba como enfermera clínica, le decía a los pacientes que
le tocó la enfermera más linda; rozaba su cuerpo mientras ella atendía
a un paciente. Relata episodio de viaje a Chiloé en que Escobar llegó
en la noche, le tocó la puerta diciendo que hubo un accidente. Ella
abrió y el entró diciéndole que venía a hacer las pases. Luego la
tironeó, la tiró sobre la cama y con una mano le tapó la boca y con la
otra la manoseó. Ella le gritaba que la soltara. El también gritó que
porqué lo rechazaba. Se desnudó completamente. Le mostró sus
genitales y dijo como rechaza esto. Finalmente se fue. A la mañana
siguiente se lo contó a Angela. Le dio vergüenza decirle al jefe de la
zonal don Moisés.
Testimonial de Avaro Escobar Borie quien declara que llegó a Puerto
Montt, a fines del año 2007 como medico directos del área médica del
hospital de IST. Nunca tuvo conductas de acosador. Tuvo una relación
sentimental con Ximena. Desde Febrero 2008 hasta Marzo 2009. Fue
una relación extramarital ya que el es casado. Los jefes no tenían
conocimiento. La relación era al margen de lo laboral. Ahí no había
problemas. El gerente Sr Hudson no le hizo advertencia alguna.
Respecto a las escenas del Club de Yates descritas en la demanda las
niega. Nunca le impidió subir a su auto. Se molestó porque ella había
accedido a que se juntaran después de esa comida y se arrepintió.
Respecto a lo que sucedió en el viaje a Chiloé. Viajaron en varias
oportunidades. En esa ocasión en Castro, en la noche en el Hotel
tuvieron un encuentro amoroso pero no sexual, al otro día no hubo
ningún problema con ella. Cuando ella estuvo con licencia ya no
tenían relación amorosa. Ya había pasado lo de la carta de denuncia.
Se desistió de la querella por injurias por las imputaciones de acoso
porque el abogado le dijo que quería renunciar y él ya no estaba en
puerto Montt y entonces ¿Quién lo iba a defender? El 19 de febrero de
2009 Ximena le saludó por su santo.
Jorge Gorigoitia Carneyro: Es gerente de personal del IST. Tomó
conocimiento de la denuncia con la carta dirigida al gerente zonal por
doña Ximena el 13 de mayo de 2009. Entre julio de 2008 y abril de
2009 en que habría sido el acoso no tuvo conocimiento. Con motivo de
la carta se acordó hacer una investigación de acuerdo al reglamento
interno. El abogado Azócar se trasladó a Puerto Montt e hizo la
investigación. Resultado se dio a conocer a la Inspección del trabajo
de Puerto Montt. La trabajadora estaba con licencia desde antes de la
misma carta hasta el término de la relación laboral. Licencias eran por
problemas sicológicos. No se podía hacer nada más por ella, para
resguardarla, porque estaba con licencia. Abogado Azócar es
dependiente del IST. Solo se enviaron a la Inspección las conclusiones
de la investigación. Esas conclusiones no fueron notificadas a Ximena.
Enzo Osvaldo Herrera Iglesias: Trabaja en Puerto Montt IST. Es jefe
de prevención de riesgos. El gerente le contó de la denuncia. En
alguna salida ella le indicó que el Dr. la perseguía pero no lo tomó
como acoso. Ellos se llevaban bien en el trabajo. Tenían oficinas
contiguas. Por el sector de oficinas circula mucha gente. El no supo
nada de lo que pasó en Castro. Como enfermera coordinadora tenía
cosas por mejorar. Cree que esta situación es ingrata y le pudo
provocar inconvenientes (stress) Se comentaba que tenían una
relación. Respecto al viaje a Castro declaró ante la Inspectora del
Trabajo que Ximena lo llamó por teléfono el día antes como las 10 de
la noche y le dijo que no quería ir.
Luis Eduardo Azócar Castillo, abogado del IST que realizó la
investigación por acoso. Vino a Puerto Montt el 4 y 5 de mayo de
2009. Entrevistó a una decena de personas. Investigación consta de
más de 100 fs. Destaca las declaraciones de Walton Ojeda y Angela
Sepúlveda, ambas sindicadas como testigos de los hechos por la
denunciante, quienes niegan los hechos. No pudo arribar a la
conclusión más allá de toda duda razonable que existió acoso No
hubo más pruebas que los dichos de la denunciante.
SEPTIMO: Que corresponde dilucidar en primer lugar en este juicio si
la demandante fue víctima e conductas de acoso sexual de parte de
Dr. Escobar en el período comprendido entre Julio 2008 y Abril 2009.
OCTAVO: Que el artículo 2 del Código del Trabajo al definir el acoso
sexual señala que se entiende por tal el que una persona realice, en
forma indebida, por cualquier medio, requerimientos de carácter
sexual, no consentidos por quien los recibe y que amenacen o
perjudiquen su situación laboral o sus oportunidades d empleo. Como
señala la doctrina, el acoso sexual corresponde en lo fundamental a
una conducta ilícita que lesiona diversos bienes jurídicos del
trabajador afectado, tales como la integridad física y síquica, la
igualdad de oportunidades, la intimidad y la libertad sexual. Siendo
una conducta ilícita administrativa requiere de plena prueba y de
gravedad suficiente que exceda los límites del trato afectuoso,
bromas de doble sentido, piropos o excesiva confianza que suele
darse entre compañeros de trabajo. Además, requiere del rechazo
claro de la víctima para configurar, sin lugar a dudas en requisito de
“no consentido”.
NOVENO: En el caso de autos, la actora denuncia tres escenarios en
que se habría producido el acoso de parte del Dr Escobar: En la
oficina, mediante abrazos, roces , intento de besarla a la fuerza,
invitaciones a salir deslizando que tendrían por objeto tener relacione
sexuales, ante su negativa, ignorarla en el trabajo. La segunda, una
cena institucional en el Club de Yates, restaurant de Puerto Montt,
donde le propuso que se fueran juntos y ante su negativa no la dejaba
subir a su auto y la tercera, en un viaje a Castro junto a otras personal
de la zonal, entre ellos el gerente Moisés Fernández y la enfermera
Angela Sepúlveda. Lo anterior queda asentado con lo dicho en la
demanda y declaración prestada ante la Inspectora del Trabajo.

DECIMO: Que durante la investigación administrativa realizada por el


IST y la realizada por la Inspección del Trabajo, ambos
documentos acompañados en autos, no existe testimonio de
ninguno de los compañeros de trabajo /( excepto una) que avalen
los dichos de la actora ya que todos, declaran que haber
escuchado solo rumores de pasillo, que al parecer tenían o
habían tenido una relación, que no han visto acoso, solo bromas
entre ambos. Lo anterior se refuerza con el testimonio de Cristian
Aburto Igor, de la demandada quien solo vio un correo-cadena
que le envió Escobar con imágenes de connotación sexual y
correo en que se despedí como “su Dc favorito, pórtese bien. No
vio otros acotos de acoso. El testigo Enzo Herrera declara en el
mismo sentido, que no vio conductas de acoso. Ximena le contó
que el Dc la perseguía pero no lo tomó como acoso. Dificulta que
se haya producido en las oficinas pues circula mucha gente. El
supuesto acosador, Dr Escobar declara que mantuvo relación
sentimental con ella, oculta pues él es casado.
DECIMO PRIMERO: Que del incidente en el Club de Yates tampoco
existen mas antecedentes que los dichos de la actora ya que no se
presentó en juicio ningún testigo que avale lo declarado en cuánto a
los forcejeos en la puerta de su auto o la conducta que mantuvo
durante la comida hacia ella. Los mismos con la escena nocturna del
Hotel en Chiloé. Respecto de éste, la enfermera Angela Sepúlveda
desmiente que Ximena le haya contado que el Dc. Se introdujo en su
pieza esa noche. Tampoco le comunicó el hecho al gerente zonal que
viajaba con ellos.
DECIMO SEGUNDO: En cuanto a la oportunidad de las denuncia del
hecho a sus supriores lo hizo la primera vez al ex gerente Fernando
Hudson, en Agosto 2008 según se desprende de su testimonio Este no
inició investigación sino que advirtió al Dc que cambiara su conducta.
Luego, hizo una segunda denuncia verbal al actual gerente Moisés
Fernández en Febrero, Marzo o Abril 2009. En esa oportunidad
Fernández le dijo que volviera para conversar con el Dc. Pero no lo
hizo. Solo en Mayo se quejó nuevamente y el le planteó que hiciera la
denuncia, cosa que hizo formalmente con fecha 13 de Mayo 2009
iniciándose la investigación de acuerdo a lo señalado en los artículos
211 A-B-C-D del Código del Trabajo y a la normativa del reglamento
interno de la empresa procedimiento en el cual se negó a declarar.
DECIMO TERCERO: Tenemos entonces, que la trabajadora dejó
pasar 8 meses entre las primeras manifestaciones de acoso hasta
ejercer los derechos que la ley y el reglamento interno de la empresa
ponen a su disposición para esta conducta. Resulta poco verosímil,
que una profesional enfermera, con experiencia de varios años de
trabajo, con experiencia de vida atendida su edad, no despliegue
todas las herramientas que tiene a su alcance para superar una
situación traumática como la que describe. Sumado a lo anterior, no
aportó en juicio pruebas o testimonios contundentes como podría
haber sido el testimonio de Angela Sepúlveda, presente en el viaje a
Chiloé, alguno de sus compañeros que presenciaron en incidente en el
Club de Yates, el propio agente zonal a quien hizo con anterioridad un
reclamo verbal, pruebas que habrían comprobado la veracidad de sus
dichos y la gravedad de las conductas del Dr. Escobar.
DECIMO CUARTO: Que así , estimando esta sentenciadora que no se
acreditó en forma fehaciente la conducta de acoso sexual denunciada,
que como se dijo mas arriba requiere de plena prueba y no solo de
indicios por ser una figura de ilícito administrativo se rechazará la
demanda ya que la comprobación de las acciones de acoso son la
base de la injustificación del autodespido y las demás indemnizaciones
demandadas.
DECIMO QUINTO: Que los demás medios de prueba aportados como
las publicaciones en diarios El Llanquihue y diario virtual,, certificados
médicos y de sicólogo que dan cuenta de las enfermedades tratadas
expediente de Superintendencia de seguridad social no alteran lo
concluido ya que se refieren a los eventuales perjuicios sufridos y el
expediente de la Superintendencia a la calificación de las
enfermedades de la actora de profesional o común. En cuanto a la
documentación acompañada por la demandada, esto es, carta en que
se comunica al director del trabajo sanción aplicada a la denunciante,
notificación de la multa aplicada a la empresa por el mismo organismo,
renuncia del Doctor Álvaro Escobar, remisión de las conclusiones de la
investigación a la Inspección del Trabajo, confesional de la actora
tampoco alteran lo concluido pues se refieren a aspectos
administrativos y la confesional tampoco lo desvirtúa ya que constituye
una repetición de los hechos señalados en la demanda analizado en el
Considerando Decimo tercero.
DECIMO SEXTO: En cuanto a las vacaciones proporcionales
demandadas se dará lugar a ese concepto ya que la demandada nada
acreditó respecto a que estuvieren otorgadas ni tampoco argumentó al
respecto.
DECIMO SEPTIMO: Que no habiéndose acreditado la causal invocad
para el despido indirecto se declara que no existió despido injustificado
y que el término de la relación laboral se produjo por renuncia del
trabajador.
Y vistos lo dispuesto en los artículos 2, 160N° 1 letra b) 171, 453, 454,
y 459 del Código del Trabajo se declara:
I.- Que se rechaza la demanda interpuesta por Ximena Villarroel
carrizo en contra del Instituto de Seguridad del Trabajo en cuánto a
declarar injustificado el despido y las indemnizaciones solicitadas.
II.- Que se acoge respecto a vacaciones proporcionales que le
deberán ser pagadas por la suma de $2.347.549
III.- Que no se condena en costas por no haber sido totalmente
vencida y por haber tenido motivo plausible para litigar.
Regístrese, notifíquese.
Devuélvanse los documentos
RITO-130-2010
RUC 10-4-0025758-8

Dictada por doña Marcia Yurgens Raimann, Juez Titular del Juzgado
del Trabajo de Puerto Montt.

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