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MÚSICA DE LAS ESFERAS.

Es una antigua teoría de origen pitagórico, donde afirmaban que el modelo para la creación
del universo estaba basado en el uso de las proporciones musicales. Según esta creencia, los cuerpos
celestes conocidos en ese entonces (Sol, Luna, Mercurio, Venus, Marte, Júpiter, Saturno) con sus
respectivos movimientos, producían sonidos, que al combinarse formaban una armonía bien hecha.
Para los seguidores de Pitágoras, los pitagóricos, las distancias entre los planetas -las esferas- tenían
las mismas proporciones que existían entre los sonidos de la escala musical que eran considerados
entonces como "armónicos" o consonantes, aunque también pueden ser disonantes. Se trataba de
un cosmos en el que se integraban las 7 notas musicales con los 7 cuerpos celestes conocidos

En otros términos, plantea que si cada cuerpo en el planeta Tierra, al moverse, generan
algún sonido, frecuencia o ruido, es imposible creer que los planetas, siendo cuerpos mucho más
grandes, no produzcan algún sonido, puesto que se dice que en el espacio se encuentra el vacío, y
el sonido no se transporta por ese medio. Es una teoría que ha sido un tanto difícil de definir, puesto
que se ha entendido de muchas maneras a lo largo del tiempo. La armonía de las esferas nace en
un momento donde la música y la astronomía se relacionaban mucho con las matemáticas, por
tanto se ocuparon en combinar esos 3 elementos para descubrir un hecho que aún hoy es debatible:
la armonía del cosmos.

REPRESENTACIÓN SONORA DE LOS PLANETAS.

En la obra de Kepler Harmonices Mundi, retoma la teoría de la música

El astrónomo Kepler quien estableció que un astro emite un sonido que es más agudo tanto en
cuanto su movimiento es más rápido, por lo que existen intervalos musicales bien definidos que
están asociados a los diferentes planetas. Kepler postuló, en su obra Harmonices Mundi, que las
velocidades angulares de cada planeta producían sonidos

PITÁGORAS Y OTROS REPRESENTANTES IMPORTANTES.

No todos los pensadores de la antigüedad creyeron en la música de las esferas. Aristóteles, en su


libro Del cielo, negó la existencia del universo sonoro propuesto por Platón: "La teoría de que el
movimiento de las estrellas produce una armonía, es decir, sonidos que revelan una concordancia,
a pesar de la gracia y la originalidad con que ha sido presentada, no por ello deja de ser falsa." Sin
embargo, las ideas que tuvieron la mayor influencia fueron los mitos de Platón. Así, pensadores
como Cicerón y Ptolomeo apoyaron la teoría de la música de las esferas.

En el libro V de Harmonices Mundi, descubre en las velocidades angulares de los planetas las mismas
proporciones de nuestro sistema musical
Un En abril de 1998 por la NASA, el Transition Region and Coronal Explorer (TRACE), ha
encontrado las primeras evidencias de música originada en un cuerpo celeste.

Un satélite de la Nasa ha confirmado la ancestral tradición de la música de las esferas, según la


cual los cuerpos celestes emiten sonidos armónicos. Aunque la música de las esferas ha derivado
primero en la noción de armonía universal y después en simetría, ahora se ha descubierto que la
atmósfera del Sol emite realmente sonidos ultrasónicos y que interpreta una partitura formada
por ondas que son aproximadamente 300 veces más graves que los tonos que pueda captar el
oído humano. Por Eduardo Martínez.

Según este descubrimiento, la tradicional música de las esferas consiste en realidad en un


“ultrasonido solar” que interpreta una partitura formada, según el satélite de la NASA, por ondas
300 veces más profundas que el sonido de la más profundas vibraciones audibles por el oído
humano, con una frecuencia de 100 mili Hertz en periodos de 10 segundos. Un hertz es la
frecuencia de un fenómeno periódico cuyo periodo es 1 segundo. El ser humano no puede
escuchar sonidos de frecuencia menor a 16 Hz (sonidos infrasónicos), ni mayor de 20 kHz (sonidos
ultrasónicos o supersónicos).

Las ondas ultrasónicas se producen o bien por el choque repentino de flujos


electromagnéticamente inducidos en la superficie solar, o bien por el choque de determinadas
ondas de baja frecuencia sonora, cuando éstas se levantan como las olas del mar desde la
superficie del sol.

El planeta que habitamos también tiene su música, de la cual somos parte. No hace mucho leí que
los científicos estaban notando cambios en el campo magnético de la tierra, según las
investigaciones la intensidad del campo magnético ha estado decayendo durante los últimos
2.000 años.

Nuestro planeta tiene una vibración que es como su música, sintamonos parte de ella
acercandonos a él, a sus mares, a sus campos, a sus montañas todo aquello que nos haga sentir
uno con él.

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