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• constituye un programa que toma los principios de la conducta descubiertos y se emplea para
ayudar a los padres a desarrollar hijos más felices y psicológicamente más sanos, además, este
método proporciona, de manera positiva, una directriz esencial y una disciplina.
• Muchos padres creen que para formar niños felices debe emplearse una considerable dosis de
castigo. Otros piensan que ser buenos padres significa permitir que los hijos hagan lo que
deseen. La investigación ha demostrado que ambos enfoques pueden causar serios daños a los
hijos.
¿POR QUÉ EMPLEAR LA PATERNIDAD
POSITIVA?
SE DISFRUTA. El hogar en el cual la gente se alienta
entre sí más, de lo que se recrimina, es un hogar feliz.
• Cuando se ayuda a los hijos a modificar su conducta. Tal especificación se refiere a una
descripción clara de lo que los chicos hacen, no a una descripción de sus personalidades.
• Las descripciones de la personalidad son demasiado vagas y generales para ser empleadas al
ayudar a los niños a cambiar. Algunos ejemplos de descripciones de personalidad son:
“perezoso”, “diligente”, “hostil”, “buen estudiante”, “insolente” y “agresivo”.
• Un problema más serio se presenta cuando los padres emplean la clasificación frente al niño,
ello puede provocar que él mismo se vea como “hostil”, lo cual fomentará una conducta acorde
con tal clasificación. Por lo tanto, las etiquetas de la personalidad pueden contribuir a generar
conductas que después resulten objetables. Además, las etiquetas nos proporcionan muy poca
información concreta.
• Ningún niño es completamente “malo”, es decir, no hay uno solo que todo el tiempo manifieste
conductas específicas inaceptables. Ciertamente, es de gran importancia que se especifiquen las
conductas problema, más que la asignación de clasificaciones negativas tales como “insolente”,
lo cual implica el chico es “malo” siempre.
• Además, el señalar conductas con toda precisión contribuye al desarrollo de programas
específicos y eficaces para ayudar a los chicos. Lo que una persona siente, es tan importante
como lo que hace.
ESPECIFICACIÓN DE LA CONDUCTA
Definir la conducta • Redacción: Utilizar verbos activos que
objetivo para una describen conductas que una persona
persona concreta se presenta.
debe identificar • Objetividad: Debe estar libre de términos
exactamente aquello ambiguos.
que la persona dice o • Observable: No debe referirse a “estados
hace. Para especificar internos”.
las conductas deberán • No etiquetar: No usar etiquetas lingüísticas
seguirse los siguientes porque no específica la Conducta.
puntos sencillos:
• Supóngase que la madre se queja de la “hostilidad” de su hijo. Ella describe a Jaime y se refiere
a “sus malas actitudes respecto de la escuela”, a “su pobre concepto de sí mismo” y a “su falta
de respeto hacia los demás”. A pesar de que estos aspectos realmente son motivo de
preocupación, las conductas particulares no han sido especificadas.
• La frase “malas actitudes respecto de la escuela” requiere una interpretación, y no se explica
claramente su significado. Imagínese la cantidad de maneras en que un chico puede exhibir
“malas actitudes”. ¿Lo que quiere decir esta madre es que Jaime no va a clase, que se queja de
sus maestros o que les pega a otros chicos? Si partimos de tal descripción, lo único que nos
queda es adivinar.
Además, tal frase no describe una conducta medible. La madre
de Jaime debería haber especificado conductas tales como:
1. Frecuencia: Indica la
cantidad de veces que se 2. Duración: Señala la cantidad de
realiza la conducta en un tiempo desde el inicio y fin de la
determinado tiempo. Por conducta, por ejemplo, la señora
ejemplo, la señora Juana se Juana se demoró cuarenta
lavó las manos ocho veces en segundos cuando se lavó las
una hora. manos.
• Debido a la forma en que nos educaron, cuando queremos especificar una regla o corregir un
problema, muchas veces lo hacemos en términos de prohibición. Ejemplos de estas reglas
prohibitivas o negativas son:
• No te metas al agua.
• No estés haciendo ruido.
• Te he dicho que no borres con el dedo.
• No te pares.
• No te salgas del tema.
• No tires basura, etc.
• Un problema central de estas reglas prohibitivas es que en realidad no estamos definiendo al
niño(a) qué es lo que sí puede o debe hacer.
Por las razones anteriores debemos aprender a dar instrucciones y a corregir en términos positivos, esto
es, diciendo lo que sí puede o debe hacer. Para cada uno de los ejemplos negativos anteriores,
formularemos uno alterno de manera positiva:
• Quédate afuera del agua.
• Mantente en silencio.
• Acuérdate de usar el borrador.
• Quédate sentado en tu lugar.
• Haz una pregunta respecto al tema que estamos revisando.
• Tira la basura en su lugar.
No obstante, decir lo que sí se puede o debe hacerse, no necesariamente indica a los niños(a) lo que no
pueden o deben hacer. Por esta razón, es recomendable seguir los siguientes pasos:
• Primero. Decir la regla en términos positivos.
• Segundo. En caso de que persista el problema, argumentado el alumno que no se le había dicho que
algo no podía hacerse, entonces se debe repetir la regla positiva en primer lugar y después, agregar la
negación o prohibición específica
Debemos agregar que las bondades formativas de este tipo de reglas
son importantes en al menos tres sentidos.
• La primera es que el padre de familia al estar pendiente de los actos que son
correctos, le permite delinear metas formativas, no solamente correctivas.
• En segundo lugar, esta estrategia da pie a que el padre de familia en lugar de estar
pendiente y molestarse ante el comportamiento inadecuado de sus hijos, esté
entusiasmado para "la caza de los aciertos que cometan sus hijos". Este segundo
aspecto es muy relevante ya que la frecuencia de padres estresados, a causa de sus
actividades cotidianas, desafortunadamente se ha incrementado de manera
alarmante en esta coyuntura.
• Por último, la actitud del padre de familia para definir el comportamiento positivo
puede contribuir en gran medida a la formación de rasgos que son necesarios en la
formación de los individuos y con ello, crear un clima de compañerismo y
colaboración entre la familia, contribuyendo a un clima positivo en el hogar, lo cual
constituye una de las metas más importantes de la paternidad positiva.
¿POR QUÉ MEDIR LA CONDUCTA DE LOS HIJOS?
Una buena medición da como resultado una retroalimentación precisa, y hace que la evaluación
del progreso resulte mucho más objetiva.
Así mismo, es muy gratificante para los padres de familia poder constatar el adelanto de sus
hijos en algún documento.
Finalmente, la medición crea un clima en el cual la gente está más acorde con su propia
conducta, así como con la de los demás. Esto nos ayuda a eliminar algunos de nuestros malos
hábitos y establece el medio para los cambios positivos.
• En la paternidad positiva la medición es importante antes, durante y después de cualquier
intento de modificar la conducta del niño. Las mediciones que se efectúan antes de algún
intento de modificar tal conducta se denominan LÍNEAS BASE. Aquellas que se realizan
mientras se aplica la técnica se denominan EVALUACIÓN DEL PROGRAMA. Las
mediciones que se efectúan después de que el método ha sido interrumpido se denominan
SUBSIGUIENTES. En todos los casos, las mediciones de línea base sirven de referencia para
las evaluaciones del programa y las mediciones subsiguientes. A continuación, identificaremos
como funciona tal procedimiento.
La medición de línea base de la etapa
inicial era de seis veces por semana, los
padres empezaron entonces a aplicar un
programa para disminuir las ocasiones
que Anita humedecía la cama. La
alabaron cada vez que por la mañana la
cama amanecía seca, y no emitían
comentario alguno cuando esta estaba
mojada.
El simple hecho de que un niño(a) no responda tal como se espera ante el ofrecimiento de
una nueva pelota de fútbol o voleibol, no significa que el niño sea malo. Tal vez se haya
elegido un estímulo que no resulto efectivo. La solución al problema del estímulo ineficaz
consiste en elegir otro. No hay que aferrarse a un estímulo o a un tipo de estímulo, debemos
estar preparados para probar diversos estímulos antes de encontrar uno bueno.
TÉCNICAS PARA IDENTIFICAR ESTÍMULOS
• La primera técnica para descubrir los estímulos que funcionan con los niños, surge del principio de que la
conducta que ocurre con mayor frecuencia pueda emplearse para estimular aquella que se presenta con menos
frecuencia. El principio de Premack puede usarse para identificar estímulos. Por ejemplo, cuando la mamá
indica a su hijo, que al ordenar su cuarto, recién saldrá a jugar.
• Además, podrían utilizarse diferentes tipos de estímulos para incrementar conductas con menos frecuencia
pero que sean distintas a la conducta problemática. Este procedimiento se llama Reforzamiento Diferencial.
• Otros puntos importantes para identificar estímulos, son los siguientes:
• TODO CUANTO HAGA EL NIÑO EN SUS RATOS LIBRES PUEDE EMPLEARSE COMO
ESTÍMULO.
• Observe a los niños cuando se divierten. ¿Qué es lo que hacen? ¿Pasean en tus bicicletas? ¿Ven televisión?
• Cualquiera de las actividades que realizan en sus ratos libres pueden emplearse como estímulos.
• TODO AQUELLO QUE EL NIÑO DIGA QUE LO MOTIVARÁ PUEDE EMPLEARSE COMO
ESTÍMULO.
• Pregúntenle a los niños que quieren hacer, que desean o que necesitan.
CÓMO AYUDAR A LOS HIJOS A MODIFICAR
SUS CONDUCTAR: PRINCIPIOS BÁSICOS
• Ahora expondremos los Principios Básicos del Aprendizaje. Los siguientes Principios se
aplican a la mayoría de las conductas, estos ayudarán a los padres a incrementar sus
oportunidades desarrollar hijos competentes y los capacitará para eliminar conductas que
pueden obstaculizar el plena desarrollo del potencial de estos.
• Las personas están en constante interacción con el medio y esto implica que debemos conocer
cuáles son los otros elementos que participan de dicha interacción. El esquema básico está
compuesto por tres elementos:
¿Qué es lo que ocurre antes del ¿Qué es lo que ocurre después del
¿Cuál es el comportamiento
comportamiento? (Estímulo comportamiento de la persona?
específico? (Conducta).
antecedente). (Estímulo consecuente).
REFORZAMIENTO POSITIVO
• Este principio nos señala que las conductas se incrementan cuando son seguidas por la presencia
de estímulos deseables o reforzadores, por ejemplo:
• Un niño ha estado manifestando frecuentes rabietas (se arroja al suelo, grita y llora),
aproximadamente diez veces al día. Lo que ocurre inmediatamente después de la conducta del
niño, es que el padre se sienta con el niño y lo sermonea explicándole “porque no debemos
hacemos rabietas”. Es muy probable que el niño haga con mayor frecuencia las rabietas. El hijo se
siente altamente motivado por atraer la atención de sus padres, aun cuando dicha atención cobra
la forma de regaño o sermón. Desde el punto de vista del niño, las conductas llamadas rabietas le
aseguran la atención de los padres. Ello explica porque los regaños, en realidad, aumentan aún
más la frecuencia de las conductas indeseables.
• Al igual que conductas indeseables como rabietas, las conductas deseables se incrementan por
este principio, por ejemplo, una niña que siempre tiene el cabello limpio y cuidado
constantemente es halagado por su madre.
REFORZAMIENTO NEGATIVO
• Este principio nos señala que la conducta se incrementa cuando se evita o posterga la
presentación de estímulos indeseado (Reforzamiento negativo por evitación) o finaliza la
presentación de un estímulo indeseado (Reforzamiento negativo por escape).
• Con respecto al Reforzamiento Negativo por Evitación, encontramos la siguiente situación, un
niño ingresa a su cuarto (estímulo antecedente), por eso, se aplica repelente (Conducta) para
evitar las picaduras del zancudo (estímulo consecuente).
• Con respecto al Reforzamiento Negativo por Escape, encontramos la siguiente situación, una
niña descalza en un día soleado juega en la vereda, debido a ello siente las altas temperaturas
en las plantillas de sus pies (estímulo antecedente), por eso, se pone sus zapatos (conducta) y
finaliza la incomodidad que sentía (estímulo consecuente).
CASTIGO POSITIVO
• Este principio afirma que, una conducta disminuirá si se presenta un estímulo indeseado. Por
ejemplo, cuando un niño ve la televisión y se presentan los reclamos de su mamá. Los
estímulos indeseados no necesariamente son los golpes, hacer justicio o represalias. Un
estímulo indeseado se identifica porque su presencia, a futuro disminuye la conducta.
Lamentablemente muchos padres de familia aplican utilizando la violencia física, la cual no
está justificada por ningún motivo, además suele traer graves daños, provocan que las persona
que aplica castigo físico sea temida por el niño(a), lo cual puede causar distanciamiento, no ser
escuchado, ser ignorado, entre otras conductas que afectan a la relación entre los padres e hijos.
CASTIGO NEGATIVO
• Este principio afirma que, una conducta disminuirá si se retira estímulo deseado que la persona
está disfrutando. Por ejemplo, cuando una niña cruza la avenida mientras juega, la madre puede
impedirle seguir jugando por unos minutos para que disminuya la conducta de cruzar la
avenida.
• Siempre que las circunstancias lo permitan es preferible utilizar la extinción y el reforzamiento
de una conducta incompatible en lugar del castigo. Muchas veces la intervención terapéutica
consiste precisamente en enseñar a las personas que mantienen relaciones estables -parejas,
padres e hijos, etc.-, a usar el reforzamiento en lugar del castigo para promover cambios en los
otros.
AYUDA A LOS HIJOS PARA QUE DESEEN HACER COSAS
BUENAS