MICROCUENTOS

I S I D O R A VA R G A S
R A FA E L A P O B L E T E
 LA EXTRANJERA (NURIA AMAT)

Se han apoyado en la baranda del faro. Han llegado hasta aquí sin miedo.

Atraídos por el amor al vértigo. Guiados por una flecha insolente de la noche. Ella
mira hacia abajo. El mar la deslumbra. Olas hinchadas como venas patean su
rabia contra la muralla de rocas. Él le pide: Ámame.

Ella no responde. Es joven y cierra los ojos como si estuviera viviendo muchas
muertes. Ella teme saltar. Él le reclama: Bésame. La luz del faro indaga por las
cosas perdidas y los encuentra a ellos. Amantes de las sombras son el blanco del
silencio. Ella quiere saltar porque en su garganta tiene un nudo de reproches.
Como él no pregunta, tampoco ella le responde. Su pasado es un mapa deshecho.
Viene de un país hundido. No resulta fácil decir lo que se piensa. Y ella piensa
demasiado. Ahora abre los ojos para ver el naufragio de su alma. Él la abraza
como si quisiera desnudar su rabia. Ella le pide: Mátame.
 ANALISIS

• Elegimos este microcuento porque narra el encuentro de dos amantes que

mantienen una relación tormentosa y apasionada, que se relaciona con el tema
de identidad.
• Trata de identidad. Lo que más nos llamó la atención es el final inesperado,
donde la mujer, en respuesta al “ámame” de su amado, le responde con
“mátame”.
• Mundo Narrado -Narrador: este narrador también conoce los pensamientos
internos y sentimientos de los protagonistas, así como la condición en la que se
encuentra el país de la mujer, por lo que también es omnisciente.
• Personajes: dos amantes con una relación difícil
• Acontecimientos: ambos personajes se encuentran en una posición de riesgo, al
borde del mar, e intercambian palabras mientras consideran saltar al vacío.
• Tiempo/Espacio: ya que nombran la luz de un faro, se asume que es de noche,
ocurre en frente del mar, específicamente en una “cornisa” peligrosa
 CHILE CAMBIO

• Lo elegimos porque muestra una realidad que ocurre en muchos

colegios. Trata de ciudadanía. Nos llamo la atención porque hay una
contradicción entre el nombre del colegio y los acontecimientos
• Mundo narrado: El narrador es alguien que conoce lo que sucede en
la sala del 8vo a y en la calle Vicuña Mackenna, por lo tanto es
omnisciente
• Personaje: El 8vo a
• Acontecimientos: Todo el curso desayuna comidas de distintos
países
• Tiempo/espacio: Como están desayunando, se asume que es de
mañana , y transcurre en la sala del 8vo a
 EL CONSERJE ( INGRID CHRISTA
MAREMAA)

Llega entero sudado porque tiene que subir el cerro a pie y,

como es lejos de la otra pega, siempre se atrasa. El conserje de
la tarde lo espera superchoreado: «Lo único que quiero es irme
a mi casa y tú tan irresponsable», le dice. «Mala la locomoción,
socio». Lo bueno es que el turno de noche es relajado. La
vista desde el condominio lo calma, se ven todas las luces de
Santiago y el silencio le ayuda a pensar. Se pone contento,
ya falta poco. Pesito a pesito podrá tener luego una casa y
recuperar a sus hijos
 ANALISIS

• Elegimos el microcuento porque muestra lo difícil que es para un hombre de

clase baja la vida en general, ya que incluso llegar a su casa se le hace difícil.
Trata de trabajo. Nos llamó la atención que al final del relato se revela que el
hombre tiene hijos y que está haciendo lo posible por recuperarlos.
• Mundo Narrado:
• -Narrador: el narrador es una persona que conoce la precaria condición de
vida del protagonista, así como sus pensamientos internos, por lo que
podemos inferir que se trata de un narrador omnisciente
• -Personajes: el conserje, el hombre que viene llegando al turno de noche.
• -Acontecimientos: el hombre se encuentra subiendo el cerro para tomar su
turno correspondiente, entablando una corta charla con el conserje.
• -Tiempo/Espacio: ocurre de noche, y transcurre en un condominio que se
encuentra en la cima de un cerro.
 LA I INMIGRANTE

• Las calle estaban vacías, oscuras, muy distintas a lo alegres y

vivas que eran en su país. Doña Rosario caminaba lento, con
un paso constante, sus manos callosas cargaban con dos bolsas
cada una. –Hoy día les hare arepas- Pensó, recordando los
ojitos que la recibían en la puerta como todos los días, la real
recompensa de su jornada.