Oncologicos Docente: Francisco Javier Delgado Ramos
Ciudad Obregón, Sonora a Febrero 2023
Epidemiología. Actualmente el cáncer es uno de los mayores retos en salud pública. Los tumores malignos se han posicionado como primeras causas de mortalidad desde hace varias décadas. Esta exposicion tiene como objetivo describir la magnitud de la situación del cáncer en México.
Se analizan las tendencias y cambios durante las
últimas dos décadas y se hacen proyecciones de la mortalidad por cáncer para el año 2020. Los estados del norte, así como la Ciudad de México son los que más se han visto aquejados por las neoplasias con tasas de mortalidad superiores a 75 por 100,000 habitantes. Las proyecciones de mortalidad muestran que, de las diez principales causas de muerte por cáncer, cáncer de mama, próstata e hígado aumentan constantemente cada año llegando a tasas de más de cinco muertes por cada 100 mil personas; específicamente cáncer de mama superará 11 casos por 100 mil. Las proyecciones ponen de manifiesto el creciente problema relacionado a la mortalidad por cáncer, lo que implica un gran desafío para los sectores sociales, económicos y de salud, los cuales deben implementar medidas para enfrentar este reto. Estadisticas En México, entre enero y agosto de 2020 se registraron 683 823 defunciones, de las cuales 9% se deben a tumores malignos (60 421). Un año antes, en 2019, se registraron 747 784 defunciones, de las cuales 12% se deben a tumores malignos (88 683). La distribución porcentual por sexo indica que hay más fallecimientos en mujeres (51%) que en los hombres (49%) por esta causa. Las tasas de defunciones por tumores malignos indican que, en los primeros grupos de edad (antes de los 30 años), no se superan las 12 defunciones por cada cien mil habitantes en cada grupo de edad y en los hombres las tasas son más altas que en las mujeres, aspecto que se revierte a partir de los 30 años y hasta los 59 años. La tasa de defunción por sexo aumenta conforme avanza la edad y es de 1140.10 defunciones por cada cien mil hombres de 80 años y más; en este grupo la brecha respecto a las mujeres casi se duplica (674.43 defunciones por cada 100 mil mujeres). Tasa de defunción de tumores malignos por grupo decenal de edad y sexo 2022 Defunciones por cada 100 mil habitantes para cada grupo de edad y sexo Morbilidad Por Tumores Malignos El cáncer es la transformación de células normales en tumorales; dicho cambio se debe a acumulaciones progresivas de mutaciones en las diferentes fases de la división celular. No hay una causa única que provoque esta transformación, sino que se trata de una interacción de varios factores, entre ellos, la predisposición genética y tres categorías de agentes externos clasificados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como carcinógenos físicos (radiaciones ionizantes y ultravioletas), carcinógenos químicos (amianto, humo del tabaco, aflatoxinas, arsénico, etc.) y carcinógenos biológicos - algunos virus como el del papiloma humano, bacterias y parásitos- (OMS, 2018). Morbilidad en la poblacion de 0 a 9 años de edad En México durante 2017, de cada 100 egresos hospitalarios por cáncer (tumores malignos), en la población de 0 a 19 años de edad, 73 son en tejidos linfoides, hematopoyéticos o tejidos relacionados. Como parte de esta clasificación, se encuentra la leucemia linfoide que por sí sola, representa 61% (24 851) del total de egresos por cáncer (40 679) en este grupo de la población. Cuando se analiza la tasa de morbilidad es posible identificar cómo el cáncer afecta a este grupo de la población; los tumores en tejidos linfoides, hematopoyéticos o tejidos relacionados son los que presentan las tasas de morbilidad hospitalaria más altas tanto en hombres como en mujeres para ambos grupos de edad; es en los hombres de 0 a 9 años de edad, con 88.92 casos por cada 100 mil niños de ese grupo de edad donde se ubica la tasa de morbilidad hospitalaria más alta para este tipo de cáncer. Morbilidad en la poblacion de 20 años y mas El cáncer de mama constituye la principal causa de morbilidad hospitalaria por tumores malignos entre la población de 20 años y más, con 24 de cada 100 egresos hospitalarios para este grupo de edad; en las mujeres, estos tumores malignos representan 37 de cada 100 egresos y en los hombres, 1 de cada 100 egresos. El cáncer de órganos genitales es la segunda causa de morbilidad hospitalaria (21%) en la población de 20 años y más. Por otra parte, el cáncer de órganos digestivos es la principal causa de morbilidad hospitalaria por tumores malignos entre los varones (23%), mientras en las mujeres ocupa el tercer lugar (12 por ciento). Como se puede observar, la población de 20 años y más, reporta tumores malignos diferentes a los que se registran para la población de 0 a 19 años. Asimismo, se observan diferencias entre hombres y mujeres en los tipos de cáncer; se identifica un incremento en las tasas de morbilidad conforme las personas envejecen, para la población de 80 años y más disminuye. Con datos de 2017, se observa que las tasas de morbilidad para los principales tipos de cáncer, de manera general, tienen su valor más alto a partir de los 60 años de edad. La tasa de morbilidad más alta en los hombres se observa en el grupo de 75 a 79 años para los que padecen cáncer de órganos genitales (230.24 egresos hospitalarios por cada 100 mil hombres en ese grupo de edad); para las mujeres, la tasa más alta se ubica en el grupo de 60 a 64 años y es por cáncer de mama (290.34 egresos hospitalarios por cada 100 mil mujeres de dicho grupo de edad). Fisiopatologia del cancer El cáncer es una enfermedad por la que algunas celulas del cuerpo se multiplican sin control y se diseminan a otras partes del cuerpo.
Es posible que el cáncer comience en cualquier parte del
cuerpo humano, formado por billones de células. En condiciones normales, las células humanas se forman y se multiplican (mediante un proceso que se llama división celular) para formar células nuevas a medida que el cuerpo las necesita. Cuando las células envejecen o se dañan, mueren y las células nuevas las reemplazan. A veces el proceso no sigue este orden y las células anormales o células dañadas se forman y se multiplican cuando no deberían. Estas células tal vez formen tumores, que son bultos de tejido. Los tumores son cancerosos (malignos) o no cancerosos (benignos). Los tumores cancerosos se diseminan (o invaden) los tejidos cercanos. También podrían viajar más lejos a otras partes del cuerpo y formar tumores, un proceso que se llama metástasis. Los tumores cancerosos también se llaman tumores malignos. Hay muchos tipos de cáncer que forman tumores sólidos. Pero los cánceres de la sangre, como la leucemia, en general no forman tumores sólidos. Diferencias entre las celulas cancerosas y celulas normales Las células cancerosas son muy distintas de las células normales. Por ejemplo: Las células cancerosas se originan sin recibir señales de que se deben formar. Las células normales solo se forman cuando reciben estas señales. Las células cancerosas no hacen caso a las señales que indican a las células que dejen de multiplicarse o que deben destruirse. Este proceso se llama muerte celular programada o apoptosis. Las células cancerosas invaden áreas cercanas y se diseminan a otras áreas del cuerpo. Las células normales dejan de multiplicarse cuando se encuentran con otras células, y la mayoría de las células normales no se mueven a otras partes del cuerpo. Las células cancerosas hacen que los vasos sanguíneos crezcan en dirección a los tumores. Estos vasos sanguíneos llevan oxígeno y nutrientes a los tumores y quitan los productos de desecho de los tumores. Las células cancerosas se esconden del sistema inmunitario. El sistema inmunitario suele destruir las células dañadas o anormales. Las células cancerosas engañan al sistema inmunitario para seguir vivas y multiplicarse. Algunas células cancerosas incluso logran que las células inmunitarias protejan el tumor en vez de atacarlo. Las células cancerosas incorporan numerosos cambios en los cromosomas, como partes del cromosoma que se repiten o faltan. Algunas células cancerosos tienen el doble de cromosomas normales. Las células cancerosas dependen de nutrientes que son distintos a los que necesitan las células normales. Además, algunas células cancerosas crean energía de los nutrientes de formas diferentes a las que usan la mayoría de las células normales. Esto permite que se multipliquen mucho más rápido. Como se forma el cancer El cáncer es una enfermedad genética. Los cambios en los genes que controlan el funcionamiento de las células, en especial, cómo se forman y multiplican, causan el cáncer. Los cambios genéticos que causan cáncer se producen por estos motivos: Errores que ocurren cuando las células se multiplican. Daños en el ácido desoxirribonucleico (ADN) por sustancias perjudiciales en el medio ambiente, como las sustancias químicas en el humo del tabaco y los rayos ultravioleta del sol. Se pasan por herencia de padres a hijos. En general, el cuerpo elimina células con daños en el ADN antes de que se vuelvan cancerosas. Pero la capacidad del cuerpo disminuye a medida que las personas envejecen. Por eso el riesgo de cáncer aumenta con la edad. El cáncer de cada persona es una combinación única de cambios genéticos. A medida que el cáncer sigue creciendo, ocurren otros cambios. Incluso dentro del mismo tumor, es posible que las diversas células tengan cambios genéticos distintos. Tipos de genes que causan el cancer Los cambios genéticos que contribuyen al cáncer suelen afectar a tres tipos principales de genes: protooncogén, gen supresor de tumoral y gen de reparación de ADN. Estos cambios a veces se llaman “oncoiniciadores”.
• Los protooncogenes participan en la formación y
multiplicación normal de las células. Pero cuando hay ciertos cambios en estos genes o hay más actividad de la normal, podrían convertirse en genes que causan cáncer, llamados oncogenes. Esto hace que las células se multipliquen y sobrevivan en casos en los que no deberían. Los genes supresores tumorales también controlan la formación y multiplicación de las células. Las células con ciertos cambios en los genes supresores tumorales podrían multiplicarse sin control.
Los genes de reparación de ADN arreglan el ADN
dañado. Las células con mutaciones en estos genes tienden a presentar más mutaciones en otros genes y cambios en los cromosomas (como trozos de cromosoma repetidos o faltantes). Cuando se juntan ambos tipos de mutaciones, es posible que las células se vuelvan cancerosas. Como se disemina el cancer El cáncer que se diseminó del sitio donde se inició a otra parte del cuerpo se llama cáncer metastásico. El proceso por el que las células cancerosas se diseminan a otras partes del cuerpo se llama metástasis. El cáncer metastásico tiene el mismo nombre y el mismo tipo de células cancerosas que el cáncer primario. Por ejemplo, el cáncer de seno (mama) que forma un tumor metastásico en el pulmón es cáncer de seno metastásico, no es cáncer de pulmón.
Cuando se observan al microscopio, las células cancerosas
metastásicas en general se ven igual que las células del cáncer primario. Es más, las células cancerosas metastásicas y las células del cáncer primario suelen tener características moleculares en común, como cambios específicos en los cromosomas. Cambios no cancerosos en los tejidos No todos los cambios en los tejidos del cuerpo son cancerosos. Pero, sin tratamiento, algunos cambios en los tejidos se podrían volver cancerosos. A continuación se incluyen ejemplos de cambios no cancerosos en los tejidos, que se vigilan porque podrían convertirse en cáncer. Hiperplasia: aumento más rápido que lo normal del número de células en un tejido del cuerpo que hace que se acumulen demasiadas células. Sin embargo, las células y el tejido se ven normales cuando se observan al microscopio. Hay varias causas de hiperplasia, como la irritación crónica. Displasia: afección más avanzada que la hiperplasia. En la displasia, también se acumulan demasiadas células. Pero las células se ven anormales y cambia la estructura del tejido. En general, mientras más anormal se vean las células y el tejido, más probable es que se convierta en cáncer. Algunos tipos de displasia se deben vigilar o tratar y otros no. Un ejemplo de displasia es el nevo displásico, un tipo de lunar anormal que aparece en la piel. Aunque en la mayoría de los casos no ocurre, a veces el nevo displásico se convierte en melanoma, un tipo de cáncer de piel. Carcinoma in situ: enfermedad avanzada localizada. Aunque a veces se llama cáncer en estadio 0 (cero), no es cáncer porque las células anormales no se diseminan al tejido cercano, como ocurre con las células cancerosas. Pero por lo general se trata porque es posible que algunos carcinomas in situ se conviertan en cáncer. Tipos de canceres Hay más de 100 tipos de cáncer. En general, los tipos de cáncer llevan el nombre de los órganos o tejidos donde se forma el cáncer. Por ejemplo, el cáncer de pulmón se inicia en el pulmón, y el cáncer de encéfalo se inicia en el encéfalo. A veces el cáncer se describe por el tipo de células que lo formaron, como las células epiteliales o las células escamosas. Carcinoma Los carcinomas son el tipo más común de cáncer. Consisten de células epiteliales, que son las células que recubren las partes internas y externas del cuerpo. Hay muchos tipos de células epiteliales. Cuando se observan al microscopio, parecen pequeñas columnas.
Los carcinomas tienen nombres distintos según el tipo de célula
epitelial donde se inician:
• Adenocarcinoma: cáncer que se forma en las células
epiteliales que producen líquido o moco. El tejido con este tipo de células epiteliales a veces se llama tejido glandular. La mayoría de los cánceres de seno (mama), colon y próstata son adenocarcinomas. Carcinoma de células basales: cáncer que se forma en la capa inferior o de base de la epidermis, que es la capa de piel externa de una persona. Carcinoma de células escamosas: un cáncer que se forma en las células escamosas, que son células epiteliales que están justo debajo de la superficie externa de la piel. Las células escamosas también recubren muchos otros órganos, como el estómago, los intestinos, el pulmón, la vejiga y los riñones. Cuando se observan en el microscopio, las células escamosas se ven planas, como si fueran escamas de un pez. Los carcinomas de carcinoma de células escamosas a veces se llaman carcinomas epidermoides. • Carcinoma de células transicionales: cáncer que se inicia en un tejido que se llama epitelio transicional o urotelio. Este tejido tiene muchas capas de células epiteliales que se agrandan y achican. Se encuentra en el revestimiento de la vejiga, los uréteres y la pelvis renal (una parte del riñón), y en otros órganos. Algunos cánceres de vejiga, uréter y riñón son carcinomas de células transicionales. Sarcoma • Es una enfermedad por la que se forman células malignas (cancerosas) en los tejidos blandos del cuerpo. Los tejidos blandos del cuerpo conectan, sostienen y rodean los órganos y otras partes del cuerpo. Los tejidos blandos del cuerpo son los siguientes: Mezcla de hueso y cartílago.
• El osteosarcoma es el cáncer de hueso más común.
• Los tipos más comunes de sarcoma de tejido blando
son: leiomiosarcoma, sarcoma de Kaposi, histiocitoma fibroso maligno, liposarcoma y dermatofibrosarcoma protuberante. Leucemia Los cánceres que comienzan en el tejido de la médula ósea roja que se transforma en células sanguíneas se llaman leucemias. Estos cánceres no crean un tumor sólido. En cambio, se acumulan grandes cantidades de glóbulos blancos anormales (células leucémicas y blastocitos leucémicos) en la sangre y la médula ósea, que desplazan a las células sanguíneas normales. La concentración baja de células sanguíneas normales hace que sea más difícil para el cuerpo llevar oxígeno a los tejidos, controlar el sangrado o combatir infecciones. Hay cuatro tipos comunes de leucemia: aguda o crónica (según cuán rápido empeora), y linfoblástica o mieloide (según el tipo de célula sanguínea donde se inicia). Las leucemias agudas son de crecimiento rápido y las leucemias crónicas son de crecimiento lento. Linfomas El linfoma es un cáncer que se inicia en los linfocitos (células T o células B). Estos glóbulos blancos que luchan contra las enfermedades son parte del sistema inmunitario. En el linfoma, los linfocitos anormales se acumulan en los ganglios y vasos linfáticos, y en otros órganos del cuerpo.
Hay dos tipos principales de linfoma:
Linfoma de Hodgkin: enfermedad en la que las personas tienen linfocitos anormales que se llaman células de Reed-Sternberg. Estas células en general se originan en las células B. Linfoma no Hodgkin: un grupo de muchos cánceres que se inician en los linfocitos. Es posible que sean cánceres de crecimiento rápido o lento y que se formen a partir de células B o células T. Factores de riesgo En general, no es posible saber con exactitud por qué una persona padece cáncer y otra no. Pero la investigación ha indicado que ciertos factores de riesgo pueden aumentar la posibilidad de una persona de padecer cáncer. (Hay también ciertos factores que están relacionados con un riesgo menor de cáncer. Estos factores se llaman a veces factores protectores o factores de protección). Los factores de riesgo de cáncer incluyen la exposición a productos químicos o a otras sustancias, así como algunos comportamientos. También incluyen cosas que la gente no puede controlar, como la edad y los antecedentes familiares. Los antecedentes familiares de algunos cánceres pueden ser un signo de un posible síndrome de cáncer heredado. La lista de factores de riesgo de cáncer conocidos o sospechados que más se han estudiado. Aunque algunos de estos factores de riesgo pueden evitarse; otros, como el envejecimiento, no pueden evitarse. Al limitar la exposición a los factores de riesgo que pueden evitarse, se puede disminuir el riesgo de presentar ciertos cánceres. • Alcohol • Dieta • Edad • Gérmenes infecciosos • Hormonas • Inflamación crónica • Inmunosupresión • Luz solar • Obesidad • Radiación • Sustancias en el ambiente que causan cáncer • Tabaco Cuadro Clinico Los signos y síntomas causados por el cáncer varían según la parte del cuerpo afectada. Algunos signos y síntomas generales asociados con el cáncer, pero no específicos de esta enfermedad, son los siguientes: • Fatiga • Bulto o zona de engrosamiento que puede palparse debajo de la piel • Cambios de peso, como aumentos o pérdidas de peso no intencionales • Cambios en la piel, como pigmentación amarillenta, oscurecimiento o enrojecimiento de la piel, llagas que no se curan o cambios en los lunares existentes • Cambios en los hábitos de evacuación de la vejiga o los intestinos • Tos persistente o dificultad para respirar • Dificultad para tragar • Ronquera • Indigestión persistente o malestar después de comer • Dolor muscular o articular persistente, sin causa aparente • Fiebre o sudoraciones nocturnas persistentes, sin causa aparente • Sangrado o hematomas sin causa aparente Manejo oncologico El tratamiento oncológico es el uso de cirugías, radiación, medicamentos y otras terapias para curar el cáncer, encoger un cáncer o detener la progresión de un cáncer. Existen muchos tratamientos oncológicos. Según tu situación en particular, puedes recibir un tratamiento o una combinación de tratamientos. Porque se realiza el tratamiento El objetivo del tratamiento oncológico es lograr una cura para el cáncer, de modo que puedas tener una expectativa de vida normal. Esto podría suceder o no, según tu situación específica. Si no es posible lograr una cura, tus tratamientos podrían usarse para reducir el cáncer o retrasar su crecimiento, para permitirte vivir sin síntomas el mayor tiempo posible. Los tratamientos oncológicos pueden usarse de la siguiente manera: Como tratamiento primario El objetivo de un tratamiento primario es extirpar completamente el cáncer del cuerpo o destruir todas las células cancerosas. Cualquier tratamiento oncológico puede usarse como un tratamiento primario, pero el tratamiento oncológico primario más frecuente para los tipos más comunes de cáncer es la cirugía. Si tu tipo de cáncer es particularmente sensible a la radioterapia o la quimioterapia, es posible que recibas una de esas terapias como tratamiento primario. Como tratamiento adyuvante El objetivo de la terapia adyuvante es destruir cualquier célula cancerosa que pueda quedar después del tratamiento primario para reducir la probabilidad de que el cáncer reaparezca. Cualquier tratamiento oncológico puede usarse como terapia adyuvante. Las terapias adyuvantes frecuentes incluyen quimioterapia, radioterapia y terapia hormonal. La terapia neoadyuvante es similar, pero los tratamientos se utilizan antes del tratamiento primario para facilitar el tratamiento primario o hacer que sea más eficaz. Como tratamiento paliativo Los tratamientos paliativos pueden ayudar a aliviar los efectos secundarios del tratamiento o los signos y síntomas provocados por el mismo cáncer. La cirugía, la radioterapia, la quimioterapia y la terapia hormonal pueden usarse para aliviar los síntomas. Otros medicamentos pueden aliviar síntomas como el dolor o la falta de aire. El tratamiento paliativo puede usarse al mismo tiempo que otros tratamientos destinados a curar el cáncer. Que debemos esperar del tratamiento Se encuentran disponibles muchos tratamientos oncológicos. Las opciones de tratamiento dependerán de diversos factores, como el tipo y el estadio del cáncer, tu salud general y tus preferencias. Junto con el médico, pueden sopesar los beneficios y los riesgos de cada tratamiento oncológico para determinar cuál es el mejor para ti. Las opciones de tratamiento oncológico incluyen las siguientes: • Cirugía El objetivo de la cirugía es extirpar el cáncer por completo o en la mayor medida posible. • Quimioterapia La quimioterapia utiliza medicamentos para destruir las células cancerosas. • Radioterapia La radioterapia utiliza haces de energía de alta potencia, como los rayos X o los protones, para destruir las células cancerosas. La radioterapia puede provenir de una máquina que se encuentra afuera de tu cuerpo (radioterapia con haz externo) o se puede colocar dentro del cuerpo (braquiterapia). • Trasplante de médula ósea La médula ósea es el material dentro de los huesos que fabrica células sanguíneas a partir de las células madre de la sangre. En un trasplante de médula ósea, también conocido como un trasplante de células madre, se pueden usar tus células madre o las de un donante. Un trasplante de médula ósea le permite al médico utilizar dosis más altas de quimioterapia para tratar el cáncer. También se puede utilizar para reemplazar la médula ósea afectada por la enfermedad. • Inmunoterapia La inmunoterapia, también conocida como terapia biológica, usa el sistema inmunitario del organismo para combatir el cáncer. El cáncer puede sobrevivir sin ser detectado en el cuerpo debido a que el sistema inmunitario no lo reconoce como un intruso. La inmunoterapia puede ayudar al sistema inmunitario a "detectar" el cáncer y atacarlo. • Terapia hormonal Algunos tipos de cáncer se ven potenciados por las hormonas del cuerpo. Por ejemplo, el cáncer mamario y el cáncer de próstata. Eliminar esas hormonas del cuerpo o bloquear sus efectos puede detener el crecimiento de las células cancerosas. • Tratamiento farmacológico dirigido Los tratamientos farmacológicos dirigidos se enfocan en las anomalías específicas presentes en las células cancerosas que les permiten sobrevivir. • Crioablación Este tratamiento destruye las células cancerosas con frío. En la crioablación, se inserta una aguja delgada con forma de varilla (criosonda) a través de la piel y directamente en el tumor canceroso. Se bombea un gas en la criosonda a fin de congelar el tejido. Luego, se deja descongelar el tejido. El proceso de congelación y descongelamiento se repite varias veces durante la misma sesión de tratamiento para destruir las células cancerosas. • Ablación por radiofrecuencia. Este tratamiento utiliza energía eléctrica para transmitir calor a las células cancerosas y destruirlas. En la ablación por radiofrecuencia, un médico guía una aguja delgada a través de la piel o una incisión y hacia el tejido canceroso. Se pasa una corriente eléctrica de alta frecuencia a través de la aguja, lo que calienta los tejidos, y se destruyen las células cercanas. • Ensayos clínicos Los ensayos clínicos son estudios para investigar nuevas formas de tratar el cáncer. Hay miles de ensayos clínicos para el cáncer en marcha. “Cuando tienes una enfermedad como el cáncer, mirar la vida un poco diferente. Algunas cosas que eran importantes no parecen tan importantes como fueron.“