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INTRODUCCIÓN A LA PSICOLOGÍA

CLASE 2 – UNIDAD I
EDAD ANTIGUA – EDAD MEDIA

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE CHILE


ESCUELA DE PSICOLOGÍA
INTRODUCCIÓN DE LA PSICOLOGÍA
MARZO DE 2023
DOCENTE: Ps. MANUEL PÉREZ AYALA
INTRODUCCIÓN
INTRODUCCIÓN

A lo largo de la historia, filósofos, rabinos,


teólogos, sacerdotes, pastores religiosos,
curanderos, chamanes, entre otros, han
intentado hacer frente a varias formas de
enfermedad mental, tratando de explicarlas y
luego superarlas, o curarlas.

Las creencias y criterios se han modificado como


mantenido. Dependiendo de cada época y
cultura, a las personas con alteraciones
mentales se les ha torturado, protegido,
marginado, confinado, ocultado, estigmatizado,
respetado, invisibilizado o dado muerte.
Conceptos como rehabilitación, reinserción e
inclusión, aparecen son sólo hace un par de
décadas, y no en todos los países.
EDAD
ANTIGUA
CREENCIAS V/S RELIGIÓN
CONCEPCIÓN
PRIMITIVA

Cualquier alteración mental,


manifestada en el comportamiento,
es atribuida a fuerzas externas de
origen sobrenatural.

La comprensión del mundo se inserta


en aspectos mágicos y la enfermedad
se debe a fuerzas de tipo climáticas
así como desconocidas. Con el
trascurso del tiempo, se asoció a
divinidades sobre y supra humanas.

Manifestaciones más comunes:


posesiones (más adelante posesiones
demoníacas), rapto del alma y robo
de la razón, entre otras.
EXPLICACIÓN Y
CURA

Los primeros diagnósticos,


tratamientos y pronósticos se
realizaron a través de prácticas como
quiromancia u otras diversas formas
de adivinación, astrología,
interpretación de los sueños, entre
varios otros.

La aún utilizada práctica de la


utilización de talismanes, amuletos y
otros similares para evitar “males”, y
“proteger”, provienen ya de esta
época.

Estas creencias primitivas dieron lugar


a numerosas prácticas -como
confinamiento y torturas- que se
reiteraron durante el transcurso de la
historia. Una práctica de antigua data
es la trepanación craneal.
TREPANACIÓN: ETIMOLOGÍA
El concepto viene de la palabra trýpanon, de origen griego, que
significa instrumento para taladrar. El verbo es trypáo, taladrar.

Hipócrates utilizó este concepto asociado a lo que actualmente se


conoce como trépano, instrumento quirúrgico para practicar la
trepanación. Se llamaba también así a la estaca o piedra que se
introducía en cualquier cilindro hueco, y particularmente el que
servía para encender fuego frotándolo dentro de una madera
perforada, y por extensión recibía el nombre de trépano todo
instrumento utilizado para encender fuego.

Su objetivo era “liberar y dejar salir a los demonios que provocaban


las alteraciones”. Se ha encontrado evidencia en diversas culturas
de utilización de esta técnica, aproximadamente desde hace cinco
mil años.
EDAD
MEDIA
MÁS MISTICISMO Y MENOS
RACIONALIDAD

Por una parte, hay un retorno a las concepciones místicas y


esotéricas, no guiadas por la razón. Por otra empiezan a
vislumbrarse ideas humanistas en que la razón es cada vez más
fundamental; lo que nos distingue de cualquier otra especie de la
Tierra. De manera incipiente, también se comienza a reconsiderar
la omnipresencia y poder de Dios.

A nivel popular florece la magia y la brujería, que es la cura más a


mano de los pobres y desposeídos. La educación formal sólo era
para una muy reducida parte de la población, los nobles o más
adinerados.

Aún existe una especie de tolerancia hacia la locura y sus


expresiones Se excluye sólo a los individuos muy perturbados que
alteran la convivencia en comunidad y ocasionan disturbios.
Comienzan ya a ser trasladados a sitios de reclusión junto a
mendigos y presos.
EL BUFÓN

El bufón es la inversión del rey, del ser que está a la cabeza de


algo, es el ser terrestre dual. Dice en tono duro las cosas
agradables y el tono jocoso las terribles.

Personifica un doble transfigurado, es la alegoría burlesca y


ridícula de aquellos que están a su lado. Imita grotescamente
las características y vicios que componen al ser humano, y en
este afán satiriza los comportamientos con su sola presencia.

Se le permitió que satirizara la moral y las costumbres de la


sociedad. También representa de forma alegórica la locura y el
desenfreno. El bufón es un elemento de crítica y hasta de
didáctica hacia el comportamiento moral y vicioso que
ostentan los demás.
EL ROL DEL
BUFÓN
El bufón es un cuerdo que se hace el loco
para ironizar, tal vez por eso es una figura
apartada de los demás, es el loco fingido,
el emblema de la locura sin serlo.

Señala, como una forma más amplia de la


locura, los vicios morales de la sociedad,
vicios desde una perspectiva pesimista
moral-cristiana. Lo que genera los vicios,
que a su vez se convierten
paulatinamente en pecado, son las
pasiones humanas. Lo que la cultura
occidental entiende como el Mal es la
exacerbación de pasiones innatas y su
insistencia en socavarlas delata la
represión religiosa como base de
civilización.

La pasión pone en peligro el estatuto de


los valores sociales de convivencia, por lo
tanto, las autoridades eclesiásticas la
demonizan colgándole la etiqueta de
pecado mortal, misma que se convirtió
posteriormente en el emblema de lo que
se entiende por demencia.
DEL BUFÓN AL LOCO

La sinrazón provoca pasión; la pasión vicio; el vicio


introduce el pecado; el pecado induce el mal;
entonces, el mal es madre de la locura. Así lo
entiende la Europa occidental renacentista.

Todo aquel que era poseído por una pasión y no se


comportara de acuerdo a los estatutos de conducta
social adecuados, civilizados, prudentes, correctos,
conformes y apropiados, era considerado diferente,
extravagante, disímil y, por lo tanto, incompatible con
la comunidad.

Este personaje distinto era el loco, al que se debía


criticar mediante el arte y la pintura; señalar
conforme a juicios morales y religiosos; exorcizar del
demonio de la pasión que lo poseía; destruir
mediante el anonimato; destituir de su humanidad
imputándole títulos malditos y luego denigrantes.
LA
ENFERMEDAD
MENTAL La Iglesia Católica, representada por la Vaticano, en Roma, comienza a expandir y
COMO aumentar su poder, se reafirman nuevamente los criterios demonológicos de la
comprensión de la locura. De ahí, una sencilla fórmula:

INMORALIDAD Locos = poseídos por el demonio

La enfermedad mental adquiere ahora una connotación de inmoralidad. Por


supuesto, eso aparejaba un peligro de propagación hacia el resto de personas
creyentes de cada población.

Tratamientos: Exorcismo y la tortura, para extraer al demonio en cualquiera de sus


formas del cuerpo del poseído/a.
CAZA DE
BRUJAS

Paralelamente a la persecución,
captura y juicio, que rara vez no
terminaba en la “quema de brujas”,
existe el desarrollo de conceptos
clínicos para comprender la locura. Sin
embargo, estos conceptos siguen aún
sobrecargados de conceptos morales y
religiosos como medida invariable de
lo que ahora se concibe como criterios
de normalidad y anormalidad.

La actual brecha hacia de igualdad de


género, en ese entonces era concebida
de una manera más bien reduccionista:

Brujas= mujeres Dios= hombre

Tratamientos: Sangría y purgas


INICIO DE LA SEGREGACIÓN

Aparecen los Lazaretos (hospitales básicos


donde se tratan enfermedades infecciosas),
que marcan el inicio de la exclusión de ciertos
grupos de seres humanos, con un espíritu de
segregacionista y estigmatizador.

Luego, se abren asilos y hospicios por parte


de congregaciones religiosas, basados en una
actitud caritativa y de beneficencia en que los
locos aun no son diferenciados del resto de
los asilados.
FIN DE LA EDAD MEDIA

Hacia el final de la Edad Media, se erradican en parte


las grandes pestes que se propagaron como
epidemias, como la peste negra, peste amarilla;
entre otras.

La lepra, una de las epidemias más estigmatizadoras


de la historia comienza lentamente a desaparecer en
Europa occidental. La lepra no era altamente mortal
en sí, sino que impresionaba por el efecto físico en
quienes le padecían, con efecto de rechazo y
aislamiento.

Si bien la lepra como patología decrece, la exclusión


ahora permanece asociada a las enfermedades
mentales. Por otra parte, el auge de la perspectiva
humanista promulga una nueva idea del ser humano
como un ser individual y único.
NARRENSHIFF

Los locos parten en un exilio ritual. La consigna es


sacarlos de la vista, se los condena a los extramuros.

Emerge una nueva figura de la locura, desterrando a


quiénes la manifiestan fuera de las ciudades. Literal y
simbólicamente se les embarca en naves, se les exilia,
en viajes sin retorno hacia lugares desconocidos. Lo
desconocido, sobretodo lo temido, se excluye.

La desviación mental comienza a ser considerada


nuevamente como una enfermedad orgánica;
somática. Se entiende como producto de un uso
deficiente u errado de la razón. Así, esta concepción
calza de buena manera con las creencias populares
que desde hace siglos consignan a la locura como
efecto de estímulos mágicos, místicos y
sobrenaturales.
STULTITIA NAVIS

Stultitia Navis o Nave de los Locos está inspirado en la


leyenda de Jasón y los Argonautas.

Era una medida de expulsión de aquellos insensatos


que incomodaban a la sociedad normal la cual ya no
podía pagar su mantenimiento y vagaban sin rumbo
específico.

La expulsión significa un exilio ritual, pero la exclusión


sobre un barco es una peregrinación en busca de
cordura en el mar de aguas purificadoras.

Considera ir de un punto a otro, o sea, librar al loco de


su suerte errante y ofrecerle un objetivo, un viaje que si
bien tiene un destino incierto al menos provee un
sendero a ciegas, un tránsito que no le permite ser
parte de un lugar (etimología de locura).
NAVE DE LOS
LOCOS
Al demente se le borra del mapa -
igual que al leproso- por representar
varias cosas: amenaza, ridiculez,
sinrazón, extravagancia, rareza,
insensatez y ambigüedad en su
comportamiento.

Al leproso se lo expulsa por el peligro


al contagio. Al loco por su
incompatibilidad. Se le excluye
mediante un exilio real o figurado. Se
le envía a la deriva sobre la Stultitia
Navis.

El loco es el diferente, el otro.


Personifica vicios y defectos, una
conducta no acorde con la estipulada,
presagio de algún mal y encarnación
del pecado. De esta manera, la
concepción de locura en cae en los
vicios morales y el pecado.
Focault, M. (1993). Historia de la locura en la época
clásica. Fondo de Cultura Económica: México

Hothersall, D. (2004). Historia de la Psicología.


Cuarta edición. Mc Graw Hill

REFERENCIAS
Rodríguez, A. (2003). Historia y Psicoanálisis.
Universidades, N° 25; enero – junio: pp. 3 - 12

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