El síndrome de la adolescencia

normal (Aberastury)
MATERIA: Psicología evolutiva 2 INTEGRANTES:
•Altamirano Lourdes
PROFESORA: Dra. María Juana Amás
•Cejas María Emilia
•Coliqueo Florencia
•López Paula
•Lujan Fabiana Carolina
•Ponce Micaelas
Adolescencia

• Es la etapa fundamental de transición entre la

niñez y la adultez.
• Al integrarse al mundo del adulto tendrá que
aceptar su nueva configuración de ser humano, su
morfología adulta y la capacidad del ejercicio de
su genitalidad para la procreación.
• Proceso evolutivo.
¿Adolescencia normal o patológica?

• Sus características especiales nos permiten

ubicarlos entre las llamadas personalidades
marginales.
• Es muy difícil marcar el limite entre lo
normal y lo patológico.
• LA conmoción dada en esta etapa se
considera normal, seria anormal la
presencia de un equilibrio.
 Características

• Luchas y rebeldías externas.

• Actuaciones defensivas, fóbicas, contra fóbicas.
• Aparece la crisis.
• Desequilibrio e inestabilidades extremas.
• Ensimismamiento.
• Timidez.
• Incoordinación.
• Desinterés, apatía.
 Características

• Conflictos afectivos, crisis religiosa.

• Conductas sexuales hacia el auto erotismo y heterosexualidad
ocasionalmente.
• Busqueda de si mismo.
• Tendencia grupal.
• Necesidad de inlectualizar, fantasear.
• Desubicación temporal (el pensamiento adquiere
características del pensamiento primario)
 Duelos

El adolescente atraviesa tres duelos fundamentales:

• Duelo por el cuerpo infantil.

• Duelo por el rol e identidad infantil.

• Duelo por los padres de la infancia.

 El adolescente y la libertad

Fluctuaciones entre pares de situaciones:

DEPENDENCIA / INDEPENDENCIA EXTREMA

REFUGIO – FANTASIA / AFAN DE CRECIMIENTO

AFIRMACION DE SUS LOGROS ADULTOS / REFUGIO EN LOS LOGROS INFANTILES

Conclusión

El adolescente no puede mantener una línea de conducta rigida,

permanente y absoluta.
Es una personalidad permeable, en la cuál los procesos de
introyección y proyección son frecuentes, intensos y variables.
Por eso hablamos de “normal anormalidad”.
La labilidad de su organización defensiva es en el adolescente un
signo de normalidad.