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la Pastoral
SÍNODO DE LOS OBISPOS
XII ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA
LA PALABRA DE DIOS
EN LA VIDA Y EN LA MISIÓN
DE LA IGLESIA
INSTRUMENTUM LABORIS
dic e PREFACIO
ín
El INTRODUCCIÓN
Incidencias pastorales
e CAPÍTULO CUARTO
ín dic
E l
Ministerio de la Palabra
La experiencia en la liturgia y en la oración
La motivación teológico-pastoral:
SEGUNDA PARTE Palabra, Espíritu, Liturgia, Iglesia
Palabra de Dios y Eucaristía
LA PALABRA DE
DIOS EN LA VIDA DE Palabra y economía sacramental
LA IGLESIA Incidencias pastorales
La Lectio Divina
La Palabra de Dios y el servicio de la caridad
La exégesis de la SE y la Teología
La Palabra de Dios en la vida del creyente
dic e
El
ín CAPÍTULO SEXTO
CONCLUSIÓN
La Palabra de Dios, don a la Iglesia
Proposiciones para el Papa del
Sínodo de la Palabra
Los Pastores deben educar al Pueblo de Dios a acoger los diversos significados de la
expresión “Palabra de Dios”.
Primera parte:
La Palabra de Dios en la fe de la Iglesia
Las SE, siendo don entregado por el Espíritu Santo a la Iglesia Esposa de Cristo,
tienen en ella su lugar hermenéutico propio.
El mismo Espíritu, que es autor de las SE, es también guía de su recta
interpretación ('fides Ecclesiae‘).
El Sínodo recomienda a los pastores recordar a todos los bautizados el papel del
Espíritu Santo en la inspiración (DV 11), en la interpretación y en la comprensión de las SE
(DV 12).
Primera parte:
La Palabra de Dios en la fe de la Iglesia
Se augura
•Que cada fiel posea personalmente la Biblia (cf. Dt 17, 18-20)
•Que se goce de los beneficios de la especial indulgencia ligada a la lectura de las
Escrituras (cf. Indulgentiarum Doctrina, 30).
Primera parte:
La Palabra de Dios en la fe de la Iglesia
A la luz de la enseñanza de la SE, es bueno subrayar que esta ley está escrita
en lo profundo del corazón de cada persona y cada uno puede acceder a ella (cfr.
Rm 2, 14-15). Su principio basilar es que se debe “hacer el bien y evitar el mal”.
Se recomienda a todos los pastores que tengan una solicitud especial en que
los ministros de la Palabra sean sensibles al redescubrimiento de la ley natural y a
su función en la formación de las conciencias.
SEGUNDA PARTE
(Proposiciones 14 a 37)
Segunda parte:
La Palabra de Dios en la vida de la Iglesia
Se reafirma que la liturgia es el lugar privilegiado en el que la Palabra de Dios se expresa
plenamente (tanto en la celebración de los sacramentos como sobre todo en la Eucaristía, en la
Liturgia de las Horas y en el Año Litúrgico).
Para ayudar al predicador … los padres sinodales desean que se elabore un “Directorio
sobre la homilía”, que debería exponer, junto a los principios de la homilética y del arte de la
comunicación, el contenido de los temas bíblicos que aparecen en los leccionarios que se usan
en la liturgia .
Segunda parte:
La Palabra de Dios en la vida de la Iglesia
16. Leccionario
Se dan 6 recomendaciones:
• relacionarla con el ejemplo de María y los Santos
• recurrir a los maestros en la materia
• asegurarse de que los pastores, sacerdotes y diáconos, y de modo
muy peculiar los futuros sacerdotes, tengan una formación
adecuada en esta dinámica espiritual
• iniciar a los fieles, según cada circunstancia, en el método más
apropiado de lectura orante
• vigilar su desembocadura en un compromiso de caridad
Segunda parte:
La Palabra de Dios en la vida de la Iglesia
Señalan 2 consecuencias:
• la Biblia se convierte en un mero libro del pasado
• desaparición de la hermenéutica de la fe señalada en la DV
Los obispos deben ser los primeros promotores de esta dinámica en sus diócesis …
El Sínodo recomienda incrementar la "pastoral bíblica" no en yuxtaposición a otras
formas de pastoral sino como animación bíblica de toda la pastoral.
Segunda parte:
La Palabra de Dios en la vida de la Iglesia
Los candidatos al sacerdocio deben aprender a amar la Palabra de Dios. Sea por
tanto la Escritura el alma de su formación teológica, subrayando la indispensable
circularidad entre exégesis, teología, espiritualidad y misión.
Hay que suscitar en cada área cultural una nueva época en la que el
arte pueda reencontrar la inspiración bíblica y ser un instrumento capaz
de proclamar, cantar, y hacer contemplar la manifestación de la Palabra
de Dios.
Tercera parte:
La Palabra de Dios en la misión de la Iglesia